—¿Estás bien?

—Si...no recuerdo nada de anoche.

—Me lo imaginé, ven toma un poco de sopa

—¿Y Kang?

—Salio por café, se terminó desde ayer pero lo olvidamos.

—Genial...

—Oye Taek...quería preguntarte algo.

—Dime...

—¿Por qué no te mudas?

—¿Porque lo haría?

—Ya sabes...viven cerca. Te lo digo por qué hay un departamento en la siguiente planta, es del mismo tamaño que este así que podrás meter todo lo de tu trabajo en una habitación.

—No lo se...

—Piensalo, lo último que quiero es que se crucen de nuevo.

—Lo haré...pero no decías que el vecino de arriba ¿te cae mal?

—Ya no lo he visto mucho, y tampoco ha hecho sus fiestas cada semana así que posiblemente esté muy ocupado, no tendrás problema con eso.

—¿Y si lo tengo?

—...yo me encargaré.

—Bueno...creo que aceptaré, me vendría bien tener cerca a mi mejor amiga para sentirme de nuevo como en nuestra niñez.

—Solo que está vez no haremos el toca y corre.

—Ojala pudiéramos...

Crecer significaba perder todo lo que alguna vez amabas simplemente por qué dejabas de ser niño, no podías ni debías comportarte diferente o la gente te juzgaria por ser quien eres.

—Eso sería todo, podrás mudarte una vez que arreglen la venta y la electricidad por completo, se te mandará un correo y se te llamará, si quieres cambiar la pintura dime ahora mismo y me encargaré de que todo quede como quieres.

—Asi está bien ,todo solo una cosa, en el cuarto principal hay un hoyo.

—Tranquila, lo arreglaremos.

—Perfecto.

Empezar de ceros para muchos era algo difícil y que muchas veces causaba miedo en tí, pero también era darte una nueva oportunidad, ser quien eres y empezar a darte un respiro de lo que era tu vida.

Era así con Taek quería iniciar, olvidar el dolor, el miedo y recuperar se a si misma, a esa Taek que con sueños y esperanzas quería ser feliz sin importar el clima, las personas o su mal humor.

No dejaría que una decepción amorosa decidiera sobre si misma, dolió claro que lo hizo pero en su mente estaba ,si el podía ser feliz con otra persona, mostrarse días después de ser descubierto con una sonrisa y tomando la mano de quien gritaba amar entonces por qué ella no podía hacer lo mismo, aún que respetaría su tiempo para volver a intentarlo, ya no dejaría que su ánimo se viera afectado por un hombre así.