16. Sentimientos verdaderos
—Te traje hasta acá para darte una buena noticia, pero siento que no estás en tu mejor momento —musitó Bogum, mirando a Taehyung con una sonrisa de lado—. Sabes que puedes apoyarte en mi cuando te sientas mal.
Bogum lo había citado en la azotea del instituto a la hora del receso, y sin dudarlo ni un poco fue hasta el encuentro.
Por fin había ido a clases, luego de haber faltado por dos semanas. Para su suerte, al ser uno de los mejores del salón, los profesores tuvieron consideración con él y pudo cumplir con todas sus actividades pendientes, además de que así podía mantener su mente ocupada.
Pero ahora, sin más nada pendiente, los miles de pensamientos y dudas volvían a su cabeza, abrumándolo sin saber que hacer.
—Lo siento, Bogum —se disculpó con timidez, quitando la mirada del amplio patio para posarla en su amigo—. He estado pasando por cosas complicadas.
—Bueno, una vez interpreté a un psicólogo, así que puedes hablar conmigo para desahogarte, ¿No lo crees? —comentó el mayor, mirando a Taehyung con complicidad.
—No sé si quieras oír mis problemas, Gum...
—Taehyung, quiero que seas consiente de algo. El hecho de que me gustes no significa que no te puedo ayudar. Por ti dejaría mis sentimientos de lado solo para tu bienestar. Eres mi amigo, Tae.
El rubio miró a Bogum con cariño, preguntándose porqué no se enamoró de él y no de Jungkook, pero nadie manda en el corazón y fue el castaño similar a un lindo conejo quien despertó esa clase de sentimientos en su ser.
Suspiró y se sentó en el suelo, apoyado en la baranda. Bogum copió sus movimientos, sentándose a su lado y mirándolo con atención.
—Es sobre Jungkook —comenzó a hablar—. Hace más de un mes le dije que me gustaba, y él me dijo que no sentía lo mismo por mi. Me dolió un poco, pero lo acepté porque no puedo obligarlo a tener sentimientos por mi, pero las cosas fueron empeorando poco a poco... —siguió su relato, contando cada una de las cosas que vivió durante ese tiempo. Las acciones de Jungkook, sus sentimientos y lo último que había escuchado por parte de él. Habló de todo, desahogándose con calma y soltando todo aquello que había ocurrido—. Tengo miedo, Bogum, tengo derecho a tenerlo.
»He sufrido tanto gracias a Jungkook, que no puedo simplemente creer que le gusto, o que al menos existe una mínima posibilidad de ello. Tengo miedo de aceptarlo y que a los días solo venga a decirme que es un error y que nunca sintió algo por mi. No quiero soportar otro dolor como lo que he sentido, no quiero llorar más, pensando que nada mejorará, y que venga Jungkook a llenarme de ilusiones nuevamente. No quiero.
Taehyung bajó la cabeza cuando terminó de hablar, totalmente desanimado luego de expresar todo lo que sentía. Cuando Jungkook dijo que creía que le gustaba, no lo va a negar, su corazón latió emocionado por escucharlo, pero ya no confiaba por completo en el menor.
Su corazón lastimado y sus sentimientos burlados necesitaban un descanso.
—Tienes razón en tener miedo. Luego de todo lo que ha hecho Jungkook, es normal que quieras resguardarte, pero los sentimientos de Kook no son dudosos, a él realmente le gustas —dijo Bogum luego de un rato en silencio—. Tú siempre le has gustado, solo que nunca se dió cuenta hasta ahora.
—¿Cómo puedes asegurar eso? —cuestionó el menor con duda.
—Porque se nota, Taehyung —respondió con simpleza—. Todo aquel que los conoce, sabe que ustedes se gustan, incluso es un poco extraño enterarse de que solo son amigos. Incluso yo mismo pensé que eran pareja, si tú no me lo hubieses aclarado, seguiría pensando lo mismo. La cosa es que, esos sentimientos siempre estuvieron ahí, siendo confundidos con amistad.
»Entiendo que tengas miedo, Taehyung, es normal en tu caso, pero a Jungkook sí le gustas, y debes ser consiente de ello.
Taehyung parpadeó un par de veces, y miró a Bogum con dudas, pero este solo sonrió, demostrándole que lo que decía era totalmente cierto.
—Dios, ahora me siento mal por haberte hecho ayudarme en esto —dijo Taehyung y abrazó a Bogum con arrepentimiento.
El mayor sonrió y correspondió el abrazo, —No te preocupes. Me gustaría que fueses feliz, incluso si te ayudo a serlo con alguien más.
—Eres el mejor, Bogum. Ojalá me hubiese enamorado de ti...
—Ya, no digas esas cosas. En vez de desear estar enamorado de alguien más, mentalízate que pronto estarás en los brazos de Jungkook, o al revés, no lo sé. Se ven del tipo versátil.
Las mejillas de Taehyung se ruborizaron y negó, sin querer alejarse del abrazo para que Bogum no notase su sonrojo.
—¿Qué querías decirme antes? —preguntó, cambiando el tema, pero interesado en lo que iba a contarle Bogum.
—Me contrató una compañía de entretenimiento. Más pronto de lo que pensé estaré actuando en algún drama.
Taehyung abrió los ojos y se separó de Bogum para mirarlo a los ojos, —¿¡Lo dices en serio!?
—Sí —dijo sonriendo—. Parece que un cazatalentos me vio en alguna de mis presentaciones y me dió su tarjeta de presentación. Fui a su empresa y me dieron un contrato, por los momentos firmó mi madre, ya que soy menor de edad, pero es sumamente beneficioso para mí.
—¡Eso es increíble, Gum! ¡Estoy muy feliz por ti! —exclamó alegre el menor, y se lanzó nuevamente a los brazos de Bogum, envolviéndolo en un abrazo lleno de felicidad.
El mayor tomó a Taehyung en brazos, y sonrió por la efusividad del chico, —Gracias, Tae. Eres al primero que le digo esto.
Se separaron y se miraron cara a cara, Taehyung con una enorme sonrisa en el rostro.
Bogum lo detalló por un poco más, queriendo grabar en su mente las bonitas facciones de su dongsaeng, pasando por sus ojos, su linda nariz, sus mejillas y sus labios.
—¿Bog-
Sin poder evitarlo, Bogum unió sus labios con los de Taehyung en un simple choque. No había movimientos por parte de ninguno, incluso sus manos se mantenían en su sitio. Era solo un encuentro simple entre ambas bocas.
Se separó lentamente y miró a Taehyung con algo de pena, —Lo siento, Tae. Fue inevitable para mí.
El nombrado asintió y se separó de Bogum, sentándose correctamente a su lado.
—No te preocupes, Gum. No estoy molesto contigo —dijo Taehyung y sonrió—. Creo que... ¿Es como una despedida?
Bogum asintió, —Me parece bien.
♡
Jungkook miraba la televisión sin verla realmente. Aún seguía pensando en su situación con Taehyung, dándole vuelta a sus sentimientos.
—Cariño, ¿Qué sucede?
La dulce voz de su madre llamó su atención, y la miró sentarse a su lado, con la mirada fija en él.
—No es nada, mamá.
—No me mientas, no a mí que puedo saber cuándo lo haces —dijo su madre, tomando su nariz y pellizcándola—. Venga, cuéntame lo que ha sucedido. ¿Quién es ese chico que tiene tu cabeza tan ida?
Jungkook la miró con sorpresa, —¿Cómo sabes que es un chico?
La sorprendida ahora fue la mujer.
—¿En serio es un chico? Solo lo dije por decir y ahora veo que es cierto —comentó la mujer y se encongió de hombros—. No tengo problemas con eso. Ahora sí, cuéntame todo.
Jungkook se encongió en su lugar, y abrazó sus piernas, —Creo que me gusta un chico...
—¿Crees?
—Sí, creo.
—¿Y qué es lo que te hace dudar tanto?
—¿Y si no es totalmente cierto? No quiero volver a lastimarlo —murmuró con arrepentimiento.
—Lastimarás más a Taehyung si no eres claro con tus sentimientos.
Jungkook se levantó del sofá y miró a su madre con los ojos abiertos, —¿¡Cómo sabes que hablo de Taehyung!?
Y su madre se levantó luego de él, —¿¡Estás hablando de Taehyung!? ¡Volví a decirlo por decir y resulta que acerté! Mierda, debo ir a comprar un boleto de lotería ya mismo.
—¡Mamá! —se quejó el chico lanzándose nuevamente al sofá.
La señora Jeon miró a su hijo, y sonrió de lado. Volvió a tomar asiento a un lado del menor y señaló sus piernas para que Jungkook posase su cabeza sobre ellas. El joven hizo caso al pedido, y comenzó a recibir pequeñas caricias en su pelo.
—¿Por qué no estás seguro de tus sentimientos con respecto a Taehyung? Cuando tenías cuatro años los tenías muy claro.
—¿Cuatro años?
—Sí, a esa edad sabías muy bien que Taehyung te gustaba. Recuerdo esa vez, ambos estaban viendo una película y había salido una niña en ella. Taehyung había dicho que cuando fuese grande, ella sería su novia. Obviamente a ti te molesto eso, desde niño siendo un celoso con Taehyung —se burló y tiró un poco de sus cabellos—. Recuerdo que le reclamaste y le dijiste que no podía hacer eso, porque cuando fuesen grandes, él iba a ser tu novio.
—¿Por qué me dejaste decir eso? —preguntó Jungkook sumamente avergonzado—. Debiste regañarme para que dejase de hacer el ridículo.
—¿Y perderme la oportunidad de burlarme de ti en el futuro? Nunca. Solo los escuchaba y me reía. Aún no termino mi historia, maleducado —volvió a tirar del pelo de su hijo—. Luego de que dijeses eso, Taehyung dijo que eso nunca pasaría, porque eras un niño feo y que de grande lo serías aún más.
»Entonces comenzaste a llorar. Quise meterme, pero Taehyung se me adelantó. Él te abrazó y comenzó a dejarte besitos en la cabeza, luego te pidió disculpas por haber sido cruel, y dijo que sí serían novios cuando fuesen grandes. Ahí fue cuando dejaste de llorar y pediste que cambiaran la película para que no viese más a la niña y Taehyung como siempre cumplió tus caprichos.
»Sabes que la madre de Taehyung y yo somos amigas de toda la vida, y quisimos eso mismo en ustedes, pero nunca fue así, ustedes siempre tuvieron una conexión diferente. A lo que quiero llegar es, que tus sentimientos siempre han sido estos, Kookie, a ti siempre te ha gustado Taehyung, y no deberías de dudar en este momento. Porque el niño de cuatro años es el mismo de ahora, y ambos quieren a Taehyung como una pareja, no solo como un amigo.
—Que idiota he sido todo este tiempo...
—Posiblemente, pero ahora es turno de remendar tus errores. ¿He aclarado tus dudas?
Jungkook se levantó de las piernas de su madre y sonrió, —Sí, mamá.
Porque siempre estuvo ahí, siempre lo sintió, pero era un idiota que nunca vio que le gustaba Taehyung.
No la sensación de gustar, sino saber que sus sentimientos eran correspondidos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro