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UN DÍA ANTES.

Mina no supo no cuándo ni cómo pero Momo había llegado su habitación. De inmediato dejó el celular, había confiado en que Nayeon la ayudaría con sus nervios, pero se le fue toda esa confianza cuando Momo la besó, y Nayeon no pudo contestarle.

De los nervios, sus manos fueron directamente al cuerpo de Momo, más específicamente a la cintura.

Momo, ni siquiera cuando separaron sus labios habló, sino que sus labios fueron hacia el cuello de Mina donde besó a como sentía que debía.

— M-Momo... — Mina se obligó a reaccionar cuando hasta sus piernas temblaban y amenazaban con dejarla caer, las guió a ambas hacia la cama.

Momo quiso estar encima, pero Mina también reaccionó a aquello y las recostó a ambas como ella quería en ese momento.

Momo pareció soltar un gruñido inconforme pero fue remplazado por un gemido cuando Mina simuló una embestida por sobre sus ropas. Momo ni siquiera se había dado cuenta que se había acomodado entre sus piernas.

— Quitemos esto — Momo dijo, separándose y apuntando a la ropa que Mina vestía. Rápidamente Momo se encargó de alzar la blusa y apartarla por encima, aventandola a un lado de la cama — Y también esto — cuando fue hacia el pantalón de Mina, ésta negó y se lo quitó ella misma.

Momo no tuvo que mover ni un solo dedo más, porque Mina se encargó de quitarle la ropa con una rapidez impresionante, o más bien, con una desesperación impresionante.

Mina no perdió para nada el tiempo, se entretuvo mirando el torso una vez ya no estaba el sostén. Esa proporción que tantas veces miró y tocó por encima de las ropas, ahora estaban a su vista y disposición.

Sintió las piernas de Momo enredarse en su cadera y supuso que no tenía mucho tiempo para jugar, pero aún así su boca fue directamente a un seno y su mano fue hacia el otro, escuchando a Momo soltar ruidos dulces.

— Mina~ — alargó un gemido cuando Mina empezó a mover sus caderas contra las suyas.

La única completamente desnuda era Momo, porque Mina todavía tenía la ropa interior como un estorbo para la situación, así que Momo llevó las manos para la espalda de su casi novia, tentando el broche del sostén para luego quitar este y dejarlo por ahí.

— ¿No te parece que tienes mucha ropa? — casi se burló, aún cuando Mina solo tenía el bóxer escondiendo su erección. Mina soltó un ruido avergonzado pero no fue excusa, se quitó el bóxer dejando ver su anatomía desnuda.

Momo sonrió de lado, sus labios yendo hacia las mejillas rosadas de Mina, y besando con una dulzura lejos de la lujuria que ambas sentían.

— ¿Si recuerdas que es mi primera vez también, no? — Momo preguntó, su sonrisa tornándose divertida cuando Mina gimió al sentir una mano acariciando su erección.

— Por... Por supuesto — Mina asintió, meciéndose para rozar su excitación en la mano de Momo, esta no se alejó, solo dejó que Mina siguiera sus movimientos desesperados.

— ¿También recuerdas que no tenemos protección? — lamió sus labios mientras veía a Mina desesperarse.

— N-No necesito, pero pue-puedo ir y venir a la tienda. ¡Ah, Momo! — la interrumpió una ronda de gemidos, escondiéndose en el cuello de Momo.

— ¿No necesitas? — Momo preguntó curiosa por eso. Solo se había enterado que Mina tenía un miembro, pero no sabía si era funcional para la reproducción.

— La-Las personas intersexuales casi n-nunca son fértiles... p-pero aún así de más menor me llevaron al doctor para-... Oh, Momo — Mina no podía imaginar cómo se sentiría estar dentro de Momo, si con su mano ya estaba hecha un desastre.

— Sigue contando — Momo se estaba divirtiendo y excitando con la escena.

— Para-... ¡Ah!... Para ver si podría tener hijos, pero confirmaron que soy estéril — Mina terminó y solo ahí Momo la separó de su cuello para verla con una sonrisa coqueta.

— Ven acá — llevó sus manos a su nuca para atraerla a un beso, donde Mina gruñó al ya no tener estimulación, pero fue donde Momo rodeó sus caderas de nuevo, invitandola a lo que tanto deseaba.

Mina en medio de su desesperación y desastre, se acomodó para entrar casi sin delicadeza, pero no tan fuerte como para que doliera mucho.

Momo se separó para soltar un gemido, que le siguieron muchos más cuando Mina empezó su ritmo cegador sin mucho cuidado.

En ese momento Momo no pensó en las consecuencias que traería, en el dolor después de que su excitación bajara, porque ahora estaba disfrutándolo. Mina tampoco pareció que ese pensamiento estuvo en su mente, pues estaba entretenida dejando mordiscos por los senos de Momo y moviendo sus caderas en vaivén desenfrenado.

Se escuchaba levemente el cómo sus pieles chocaban, el cómo la cama hacía pequeños -casi imperceptibles- chillidos por el movimiento, y los ruidos eróticos que ambas no podían evitar soltar con cada embestida.

A Mina casi se le cortaba el aire cuando Momo alzó sus caderas y hizo a su pene adentrarse de manera casi dolorosa pero curiosamente placentera.

Estando ambas sin mucha experiencia, no creían llegar a mucho tiempo para cuando llegaran al orgasmo, y fue Mina quien lo confirmó al soltar un gemido y el orgasmo azotó en su cuerpo. Segundos después, Momo le siguió, rasguñando un poco su espalda y las sabanas.

Mina no se detuvo hasta que sintió que Momo estaba demasiado sensible como para más.

— ¿Estuvo bien? — Mina se recostó, preguntando para asegurarse de no haber hecho algo mal. Momo suspiró, abriendo los ojos para notar cómo Mina estaba cómodamente recostada sobre ella.

— Quitando que recién ahora siento que un camión me atropelló el vientre, estuvo realmente muy bien — rió, llevando su mano hasta su vientre para acariciar. Mina sintió sus mejillas sonrojarse pero aún así también llevó sus manos para acariciar como un consuelo por haberse dejado llevar.

ACTUALIDAD.

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Momo bufó viendo su celular, atrayendo la atención de la pelinegro al lado de ella. Mina y ella estaban de regreso de su cita.

Generalmente Mina era quien manejaba, pero esta vez Momo le había pedido que vayan y vuelvan en taxi, para así poder recargarse en ella en el camino y poder tomar su mano sin tener que preocuparse por el camino.

— ¿Y si le prohíbes a Sana salir con Dahyun, así para torturarla un poco? — Momo bromeó un poco, por cohibida en japonés porque no quería que el conductor las entendiera, por más que hablen de cosas comunes.

— Dahyun me mataría, está en su etapa rebelde — Mina sonrió divertida, pasando un brazo por los hombros de Momo, así atrayendola a un pequeño abrazo.

— Sana la llevó a eso, yo sé, Mina — Momo quiso persuadir, pero Mina no caería en eso, así que solo rió y disfrutó del abrazo.

— Creo que Dahyun está creciendo mucho más ahora con Sana — Mina entró al tema de repente, pero aún así Momo no se preguntó el por qué de eso.

— ¿A qué te refieres? — cuestionó, pensando en cómo su casi hermana solía ser con Dahyun como novia.

— Su psicóloga dijo que algo la está alentando a esforzarse más desde hace ya un tiempo, y ese tiempo es desde que Sana fue su mejor amiga, ahora novia — Mina confesó, sonriendo y entonces Momo bufó divertida.

— ... Algo que hace bien — rodó los ojos divertida, pero estaba feliz por el hecho de Sana ayudando inconscientemente en un tema serio de Dahyun.

— No sé si es un halago o insulto — Mina comentó riendo, dejando un pequeño besó en los labios pintados de rojo que ahora Momo llevaba.

Sí, Nayeon la había maquillado y lo único que le había gustado a Momo era el labial rojo, lo demás solo quería quitárselo.

— Seguramente para ella es halago — aseguró.

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— ¿Iremos a casa? — preguntó, llevando su vista a Mina hablando con el conductor, notaba que no era el camino hacia la mansión donde ahora vivía.

— Le daremos la razón a Sana, e iremos al motel.

— Oh.

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;)

Y ahí está la escena de sexo que tanto querían y tanto me esforcé.

Tenía este capitulo desde hace mucho, pero mis problemas con el internet parecen ser eternos y en crecimiento.