Las cosas entre Stiles y Derek no iban muy bien, el menor intentaba convencer a Derek de que no debía estar tan conmocionado por las decisiones de Liam, ya que era la vida del chico después de todo y aunque a ellos no les gustara iba a hacer lo que quisiera. Pero el lobo no se convencía con aquello, seguía diciendo que lo que Liam había hecho era una idiotez.

— ¡Abandonó a sus padres, Stiles! –Le decía al menor como si quisiera hacerle reaccionar.

— Mira Sourwolf, no voy a discutir contigo, menos por un tema así –Dijo Stiles, ya algo cansado de tanta discusión.— No es a mí a quien le tienes que decir esto, es a Liam, así que mientras tanto yo iré a ver a mi padre. Tú habla con el niño o, no sé, relájate un poco, que no es el fin del mundo.

El humano se despidió con un beso para luego salir del Loft, Derek se quedó allí, ni por asomo iba a ir a hablar con Liam, el chico no le escuchaba. Ahora que lo pensaba, ningún miembro de la manada lo había a excepción de Stiles y, en ocasiones, Malia. Aunque esta última era en casos muy aislados, de vida o muerte.

El problema fue que, a pesar de que él no quisiera ir a hablar con Liam, fue Liam quien apareció en su Loft. El chico entró como gato por su casa, aunque todos siempre entraban así, pero ahora Derek estaba demasiado molesto como para pensar en aquello.

— ¿Qué quieres niño? –Preguntó sin siquiera molestarse en levantar la vista del libro que se encontraba leyendo cuando el chico entró.

— Vengo a hablar contigo, Derek –Dijo Liam con obviedad.— Y no me llames niño.

Esta vez, y ante el tono severo del menor, Derek alzó la vista de su libro y le miró con incredulidad. Como si no creyera que Liam acababa de responderle de aquella forma.

Clavó su vista en el menor, esperando a que este dijera algo más.

— Quiero saber por qué te pusiste de esta forma, normalmente no te metes en la vida de los demás y ahora te metes con mi vida.

— Te emancipaste de tus padres –Le reclamó el Hale, como si aquello fuera excusa suficiente.— Las dos personas que te criaron, cuidaron y alimentaron.

— Corrección: las dos personas que me tuvieron, forzaron a cumplir sus sueños fallidos y cuidaron mal por 16 años de mi vida. Y ni siquiera me emancipé por eso.

El mayor alzó una ceja, no entendiendo a dónde quería llegar Liam diciéndole aquello.

— Mi madre intentó prohibirme ver a Peter ¿Qué crees que hubiera pasado si se enteraba de que espero un hijo de tu tío? Me hubiera obligado a hacerme un aborto y hubiera conseguido que metieran a Peter en la cárcel por abuso, esta vez no sería Scott quien denunciara, sería la madre de la víctima, eso sería mucho más difícil de inimputar.

Derek bajó la vista unos momentos, comenzando a pensar en lo que el menor acababa de decirle. Ahora que lo pensaba y sabía la otra versión de la historia, hasta él se hubiera emancipado si sus padres le decían que no le querían ver cerca de Stiles. Aunque sabía que ni Talia ni Robert Hale le hubieran hecho hacer aquello, sus padres sabían perfectamente lo importantes que eran los compañeros.

Antes de que alguno de los dos pudiera decir algo más, escucharon pasos acelerados en la escalera, para que luego la puerta se abriera de golpe y por ella entraran Malia y Peter, ambos con expresiones de horror.

— ¡No mates a Liam! –Gritaron ambos recién llegados al mismo tiempo.

— ¡Es demasiado hermoso para morir! –Agregó el mayor agitado.

— ¡Y tiene a mi hermanito en su estómago!

— Por última vez, Malia –Dijo Liam, pasándose una mano por el rostro.— No me comí al bebé, no está en mi estómago.

— Entonces dónde está, genio –Le preguntó la coyote cruzándose de brazos.

Peter fue hacia Liam y le abrazó con fuerza. El chico se había ido de su departamento para luego mandarle un mensaje diciendo que iría a aclarar todo con Derek. Teniendo en cuenta el temperamento de ambos, había creído que ambos iban a acabar o muertos o muy heridos, porque la verdad es que ninguno de los dos tenía un carácter muy estable en aquellos momentos.

Por suerte, las sospechas de que aquello acabaría mal fueron erróneas, ambos estaban bien.

Derek se puso de pie y fue junto a su tío, el cual se separó de Liam en cuanto tuvo a su sobrino a centímetros.

— Lamento haber dicho lo que dije sin saber tu versión antes, Liam –Dijo con voz seria pero con la que se notaba su arrepentimiento.— Ahora me doy cuenta de que, si estuviera en tu situación, hubiera hecho lo mismo.

Peter les miró a ambos sin entender ni media de lo que ocurría.

— ¿De qué hablaron ustedes dos? –Preguntó alzando una ceja.

Liam y Derek compartieron una sonrisa cómplice.

— De nada –Dijeron al mismo tiempo.

— Ya que estamos aquí, pidamos unas pizzas –Pidió Malia.— Papá me sacó de mi casa y aún ni había almorzado, me comeré el brazo de alguien si no tengo pizza en la siguiente media hora.

Liam rápidamente saco su móvil y marcó el número de la pizzería que ya se sabía de memoria de tantas veces que había pedido comida.

Había ido para hablar con Derek y acabaría allí almorzando con los Hale, nunca creyó que llegaría a esas instancias.

NOTA DE LA AUTORA:

Que poca fe le tienen a Liam, se pensaron que se iba a matar con Derek. Ellos dos son buenas personas, nunca harían algo así como atacarse entre ellos, ahora son familia.

En fin, sin más que decirles me despido deseándoles un buen resto del día y mandándoles muchos besos y abrazos para todos. Adiós mi linda manada.