La manada pasaba por muchas tensiones. No había pasado ni una semana desde que una alfa había intentado atacarles y había sido asesinada por Peter. Convirtiéndose él en un alfa.

Aunque ese problema quedó un poco de lado cuando otro ocupó su lugar. Todo comenzó con un partido de Lacrosse.

Liam lo estaba haciendo bien, él lo juraba, había podido jugar todo el partido sin ningún problema, sin siquiera sentir que iba a perder el control.

El partido se acabó y él fue quien metió el punto ganador. Lo cual fue probablemente el desencadenante del problema.

El partido se había acabado y él estaba caminando hacia los vestidores, Scott y Stiles iban delante de él. El alfa iba abrazando a su novia Kira mientras que el humano gritaba sobre lo asombroso que había sido aquél último punto, haciendo que Liam se sintiera halagado y avergonzado.

Lo siguiente que sintió el rubio fue la misma bola de Lacrosse con la que había metido el último punto impactar contra su nuca con una fuerza que obviamente no era humana. Tal fuerza de impacto hubo que le hizo caer al suelo.

Fue ese el momento en el que todo se fue a la mierda.

En un momento, Liam se estaba volteando para descubrir que Brett había sido quien le golpeó y, al segundo, ya estaba encima de Talbot, rompiéndole la nariz.

Scott tuvo que noquearle para que no acabara matando al otro adolescente.

Para cuando recuperó la conciencia, estaba encadenado contra un arbol y su cabeza sangraba.

— ¿En serio, Scott? –Escuchaba a Derek regañando al mencionado.— ¿Por qué diablos le golpeaste la cabeza contra las gradas? Pudiste causarle una contusión.

— ¡No se me ocurrió nada más! –Se excusó el alfa verdadero.— Además, no es mi culpa que no se sepa controlar.

Liam volvió a bajar la cabeza al escuchar eso último.

No era justo, no era su culpa tener problemas para controlarse. No sabía cómo hacerlo.

Cuando finalmente Scott volvió a prestarle atención a su beta, se dio cuenta de que estaba consciente. Aunque fue Stiles quien le soltó.

— Vaya golpe te has dado –Siseó el humano haciendo una mueca.— Pero no te preocupes, se irá en uno o dos días.

— ¿Uno o dos días? –Preguntó Liam, sorprendido.

— Pudo ser peor.

El rubio no dijo nada más, solo se puso de pie y se quitó la tierra del uniforme de Lacrosse.

— Me voy a casa –Dijo ignorando a los demás.

Escuchó que Stiles estaba a punto de ofrecerse a llevarle, pero fue detenido a media frase por Scott.

— Si nos apresuramos, llegaré a la fiesta con Kira.

Eso era lo que le importaba a su alfa, ir a una estúpida fiesta, con su estúpida novia por toda la estúpida noche, mientras que él iba a tener que mentirle a su madre con alguna excusa de por qué tenía tremendo golpe en la cabeza.

Dicho y hecho, tuvo que inventarse toda una excusa diciendo que había sido durante el partido y que ya le habían revisado en la escuela, que no le dolía nada y que se veía peor de lo que era.

(...)

Al día siguiente tuvo que ir con dolor de cabeza y todo al entrenamiento de la manada. En el cual, además, no le incluyeron porque según Scott era peligroso.

— Kira tiene más posibilidades de lastimar a alguien que Liam –Le defendía Stiles.

A pesar de que el humano le estuviera haciendo de abogado, no hubo forma de que Scott le dejase entregar. No ayudó en nada que Derek también se negase a entrenarle.

— Solo un loco le entrenaría sin que aún sepa controlarse.

Y ahí fue cuando supo qué necesitaba. Debía pedirle ayuda a un loco para que le entrenase. Viviendo en Beacon Hills, no iba a ser difícil encontrar a alguien.

NOTA DE LA AUTORA:

Primer capítulo de esta historia, espero que les guste. Mi segunda historia Piam porque tengo otra que es toda de One-Shots.

Se lo dedico a dekkosv, a QueenMacCall, a KamuInfanteRamos, a lauvelga y a Nickita2506.

En fin, sin más que decirles me despido deseándoles un buen resto del día y mandándoles muchos besos y abrazos para todos. Adiós mi linda manada.