Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

[ 3 ]

Jimin pegó un brinco desde su asiento cuando la puerta del aula fue azotada por un golpe, mirando al mismo tiempo a la persona responsable de su casi paro cardíaco.

— Buenos días, profesora. No me ponga ausente porque ya llegué.

Resopló y entornó sus lindos ojos, era más ni menos que Taehyung, su mejor amigo.

— Joven Kim, ¿cómo se atreve a llegar a mi clase media hora después? —preguntó molesta la mujer dejando de escribir en el pizarrón y colocar sus brazos en jarra.

— Tuve unos inconvenientes ahí, profe. Pero no se preocupe, lo importante esque ya estoy aquí ¿no?

Sí, aquél idiota incompetente era su mejor amigo. Kim Taehyung, mejor conocido como el chico más problemático de su clase y el que siempre llega tarde. También un completo ícono de la moda y uno de los más cotizados chicos entre las mujeres y hombres de aquella escuela. Pero a pesar de ser un idiota, era buena persona y por eso Jimin le quería. Aunque claro, cosas cómo el asustarlo de esta manera hacía que tuviera ganas de asesinarlo.

— Dios mío, eres un caso perdido Kim. Vaya y tome asiento. —ordenó la profesora.

Taehyung esbozó una sonrisa con avaricia y caminó hasta su asiento el cuál estaba al lado de Jimin. Se dejó caer como si de un sillón se tratase y volteó a ver al pelinaranja quién le miraba con una ceja levantada.

— ¿Qué? —soltó.

— ¿Qué mierda te hiciste en el pelo? —interrogó Jimin mirándole raro al notar los rayos verdes que el chico tenía en su cabello castaño.

Taehyung sonrió y toqueteó su cabello elegantemente, presumiendo.

— Se ve genial, ¿verdad? —levantó ambas cejas.

Jimin bufó antes de estirar una mano hasta el cabello de su amigo y desordenarlo como si de un niño se tratase. Taehyung en ese momento se sobresaltó y apartó su mano de un golpe.

— ¡Qué haces! —intentó ordenarlo—Lo arruinas idiota, ¡esto me tomó dos horas, sabías? —exclamó señalando su cabeza.

— ¿Es por eso que llegaste tarde? —insinuó Park entre risas.

— No, no fue por eso. Fue por algo mucho mejor... —hizo una cara perversa.

Jimin chasqueó su lengua y lo empujó.

— Eres un cerdo.

Taehyung rió.

— ¿Qué? ¿Demasiado para tú alma virgen, Jimin? Sabes que puedo ayudarte con eso, bebé... —se acercó peligrosamente con una sonrisa pícara.

Al instante Jimin lo apartó de un golpe.

— ¡Dios, no Taehyung! ¡Deja de ser tan raro, ahg! —volvió su vista a su cuaderno, molesto.

— Sólo bromeaba, Jimin. —rió—Aunque la propuesta sigue en pie cuando desees...

— ¡Taehyung!

— ¡Joven Park y Kim, a detención! —ordenó en voz alta la profesora quién hace minutos estaba pidiéndoles que guardarán silencio sin embargo no habían escuchado, desobedeciendo y hartando a la mujer.

— ¿Qué? ¡Pero qué hicimos? —cuestionó al instante Jimin con los ojos totalmente abiertos.

— Hablar durante mi clase, eso hicieron. ¡Ahora guarden sus cosas y salgan de mi aula!

— Oh vamos, profe. No sea así... —intentó el castaño haciéndole ojitos a la mayor.

La mujer se quedó callada y sólo extendió dos papeles hacia los chicos, papel el cuál obtenías cuando eras enviado allí y servía para entregarlo al encargado de vigilarlos como evidencia del respectivo castigo.

Los chicos suspiraron y rendidos guardaron sus cosas para proseguir a salir del aula con caras largas.

— Ah, y antes de que se vaya Kim... —le detuvo la profesora al castaño, el cuál volteó a verla— Una llegada tardía más a mi clase y reprobará matemáticas joven, a no ser que apruebe el próximo examen, el cuál la materia estoy explicándola hoy. Pero por su rebeldía, no podrá saberla, así que espero que encuentre la manera de verla.

Taehyung abrió su boca con los ojos abiertos, anonadado.

— Pe-pero...

— Pero nada, ahora porfavor salgan.

Jimin tomó el brazo de Taehyung quién estaba en shock desde su posición para arrastrarlo hasta la salida. Una vez afuera comenzaron a caminar hasta el aula de detención en un silencio molesto, el cuál el pelinaranja no dudó en romper.

— Todo esto es tu culpa, idiota
—soltó con rabia.

Taehyung le miró sorprendido.

— ¿Mi culpa? —se autoseñaló— ¡Tu me hablaste primero!

— Oh vamos si no te hubieras teñido el pelo así ni te hubiera hablado, claramente es tú culpa.

— ¡Eso no tiene ningún sentido, Jimin!
—reclamó— Pero el problema no es el que vayamos a detención sino que estoy por reprobar matemáticas, ¡joder!

— Já, ese es tú problema no el mío y si al menos hubieras venido al 60% de las clases en todo este año te habrías salvado pero no, eres un imbécil y ahora reprobarás. Yo te lo dije pero tú como siempre no me haces caso. Ahora ve a ver quién buscas que te explique porque por tu culpa me perderé la clase de hoy y no entenderé ni puta idea de nada, gracias mejor amigo.

Siguió caminando a pasos pesados y con el ceño fruncido pero se detuvo en el momento en que dejó de notar la presencia de Taehyung a su lado y seguidamente escucharle sollozar.

Giró sobre sus talones para encontrarse con el castaño hecho un mar de lágrimas mientras miraba al piso.

Mierda.

Inmediatamente se acercó a él y lo abrazó.

— Joder, lo siento... —murmuró sintiéndose mal.

Jimin era consciente de que Taehyung no era el mejor promedio de su clase, él menos, pero aún así no le costaba tanto como a su amigo. También sabía lo sensible que era el castaño y lo muy grosero que podía llegar a ser él mismo cuándo estaba enojado, juntos esos sentimientos no eran una buena combinación y era cuando pasaba situaciones como estas.

— No, tienes razón. Soy un imbécil
—musitó Taehyung sobre su hombro.

Jimin chasqueó la lengua y sobó su espalda.

— Eso es mentira, no me hagas caso. No eres imbécil, amigo mío. Lo lamento pero sabes que a veces puedo llegar a ser muy grosero en estas situaciones, sin embargo no dejaré pasar de largo en haberte dicho que te lo dije.

Taehyung rompió el abrazo de a pocos.

— Lo sé, lo sé... —dijo limpiando sus ojos— No se qué haré ahora Jimin, si repruebo no podré graduarme y no quiero repetir un año mientras te veo en la universidad estudiando lo que anhelas mientras yo sigo aquí estancado, sería una pesadilla...

El pelinaranja suspiró y acarició el hombro de su amigo mientras le obligaba a mirarle levantando su mentón con cariño.

— La profesora dijo que si apruebas este examen podrás pasar, aún no está todo perdido. Sólo debemos encontrar un tutor que nos enseñe a los dos la materia pérdida, o mejor que me explique a mí y que luego yo te explique, pues no creo que le entiendas a otra persona... —rió.

Taehyung también soltó unas risitas hasta de hacer una mueca.

— ¿Pero dónde encontraremos uno?

Jimin bufó mientras pasaba un brazo sobre sus hombros y le acercaba a él, retomando su caminar.

— Será fácil, tengo mis contactos —sonrió confiado.

— ¿Contactos o pretendientes? —preguntó el castaño mirándole y enarcando una ceja.

Jimin detuvo su caminar y le miró confundido.

— ¿Qué pretendientes de qué hablas?

— Oh, vamos. Tienes muchas personas detrás de tí que mueren por tener algo contigo y lo sabes, ¡hay hasta nerds! Podrías tomar algo de provecho con ello... —guiño un ojo.

— No lo creo. Son todos unos ineptos y buenos para nada —bufó.

— Mhm, no todos Jimin. Hay alguien más... —dijo el castaño con una mirada pícara.

— ¿Quién?

Jimin no entendía nada, todos su pretendientes eran de bajos promedios en matemáticas, hasta las chicas. Sin ofender, pero los nerds no podrían siquiera explicarle, se pondrían nervioso y tartamudearían hasta más no poder, teniendo el resultado de él no entendiendo nada.
Así que no tenía ni idea de a quién se refería el castaño.

— Jeon Jungkook, duh —respondió su amigo con una gran sonrisa.

Ah, él...

Esperen, ¡¿qué?!


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro