Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 31- Niall y Barbara.

Diana

*UN MES DESPUÉS*

¾ ¿Le has contando sobre Hea a Lizzy?-. Me preguntó Araceli, haciendo que derramara parte de mi té en la mesa.- No lo has hecho, ¿no?-.

¾ No, luego de lo que pasó lo que menos quiero es tener un altercado con ella-. Respondí, haciéndole saber uno de mis peores temores.- Sé que no es lo mejor que pueda hacer pero por el momento, no tengo otra alternativa más que callar-.

¾ Sí, supongo que es lo mejor-. Suspirando profundamente, me dio a entender que se había resignado a muchas cosas como esta en el pasado.- Por cierto, ¿qué pasó con Harry? Se había ido contigo y luego volvió solo porque Jace iba a traerte. No entiendo qué sucedió.

¾ Lo que sucede es que tu hermano quiere hacernos la vida imposible y más, a Harry que lo único que hizo fue apoyarme como mi pareja a diferencia de él que cuando quiere cumple con su papel de "futuro papá"-. Frunciendo el ceño, traté de borrar nuevamente la idea de abofetearlo hasta que entre en razón. ¿Por qué debía comportarse así?

¾ ¿Has hablado con él?-.

¾ Dime, ¿Cuándo? Nunca está libre y menos cuando quiero hablarle de este tema que sabe que en cualquier momento hará que pierda mi paciencia-.

¾ Tal vez, busca eso-. Susurró lo suficientemente fuerte como para escucharla.

¾ Si es así, tendrá que soportar que le diga unas cuantas verdades a la cara, Araceli-. Tomando mi taza, la limpié y la dejé secarse a un costado-. Lo lamento, pero esta vez no dejaré de lado a Harry y lucharé por este bebé, si él no se comporta como debe-.

¾ Tienes razón, trataré de hablar con él para que...-.

¾ No, ya has hecho demasiado y lo que menos quiero es que te veas involucrada en un problema que él empezó y debe solucionar si no quiere atenerse a las consecuencias-. Abrazándola, caminé lejos de la cocina para ir hacia el jardín que permanecía cubierto de nieve ya que el invierno había iniciado su temporada con todas sus fuerzas mientras que cuando estuvimos en Argentina moríamos de calor. Sin dudas, la madre naturaleza mantenía su poder intacto.

¾ ¿Qué haces aquí? Te puedes resfriar, Diana-. Girando mi rostro que había perdido cualquier deje de color, traté de sonreír a la persona que amaba y amo con todo mi corazón.

¾ Tengo un pulóver y una campera para protegerme del frío, Harry-. Rodando los ojos, intenté hacerlo enojar por diversión pero surtió el efecto contrario ya que segundos después, me encontraba entre sus brazos mientras pasaba sus cálidos brazos sobre mi espalda, otorgándome algo más que protección porque lo que sentía florecer en mi interior era un sentimiento que hace mucho no sentía y eso se llamaba felicidad.

¾ Pese a que te cubras con todo tu guardarropa, no está de más regañarte de vez en cuanto para protegerte, cariño-. Sonriendo, tomó mi barbilla para levantarla lo suficiente y atrapar así mis labios.- Todavía puedo sentir el sabor del té y del terrón de azúcar en tu boca, Diana-. Estremeciéndome con esas simples palabras, pasé mis brazos a través de sus costados para unir mis manos en su espalda y así acercarme nuevamente a él para tener un poco más de ese calor que estaba quemándome por dentro.- Me parece que necesitaremos un lugar más privado para estar juntos-. Susurró, haciendo que volviera a la realidad y me encontrara sorpresivamente con los chicos y las hermanas Thompson que quedaron estupefactos frente a la escena que estábamos protagonizando.

¾ Lo siento, me dejé llevar-. Bajando mi mirada, me mantuve a su lado hasta que él tomó mi mano y saludó a los chicos como si nada hubiera pasado.

¾ ¿Harán algo para esta noche? -. Escuché que preguntó luego de que ellos habían tratado de no decir nada al respecto para no incomodarme aunque ellos ya sabían que éramos una pareja que se amaba y que anteriormente, le habíamos dado una presentación gratuita de ello.- Diana, ¿te gustaría?-. Levantando mi mirada, traté de recordar lo que habían dicho pero una laguna mental fue todo lo que obtuve-.

¾ No estaba prestando atención, ¿qué decías? -.

¾ Los chicos han decidido hacer una cena informal esta noche y como soy parte de la banda debo ir así que quería saber si tú podrías acompañarme-.

¾ Claro, no tengo problemas-. Contesté, sin pensarlo dos veces.

¾ Lo que sí necesitaremos de tu ayuda, Diana-. Dirigiendo mi mirada hacia él, asentí aunque la sonrisa de Niall ocultaba algo más.

¾ No hace falta, amor-. Dijo Barbara, ofreciéndole una mirada de advertencia.- Ella está embarazada y no puede hacer fuerza-.

¾ Podré ayudar en otras cosas, supongo-. Encogiéndome de hombros, traté de restarle importancia a su casi pelea porque cotidianamente, se peleaban por cualquier cosa como si fuesen dos niños.- Por cierto, ¿dónde es?-.

¾ En casa de las chicas-. Asintiendo, dejé que el rubio siguiera con lo suyo con una sonrisa resplandeciente. ¿Qué estaba tramando?

¾ Iré a recostarme un rato, Harry-. Susurré, una vez que mis párpados comenzaron a pesar.- Más tarde, nos vemos-. Acercándome, besé dulcemente sus labios para alejarme y caminar hacia mi habitación tratando de evadir los murmullos que poco a poco quedaban atrapados entre las paredes.

Niall

¾ ¿Qué es lo que pretendes? -. Me preguntó mi novia una vez que salimos de la casa de Harry debido a que debíamos comprar algunas cosas para la cena.

¾ Tal vez, saber la verdad-. Encogiéndose de hombros, traté de restarle importancia aunque estaba poniendo en juego mi propio pellejo.

¾ Ella está embarazada así que no cuentes conmigo para llevar a cabo tu plan-. Cruzándose de brazos, comprendí que ella no iba a ceder por lo que debía hacerlo solo.

¾ Está bien-. Rodando los ojos, salimos de mi auto para entrar al supermercado y llevarnos de allí los ingredientes necesarios para hacer los bocadillos y pizzas caseras que iba a cocinar con ayuda de un antiguo compañero que me había brindado sus servicios de cocina esta noche.- Creo que es suficiente, ¿no? -. Empujando el carrito que estaba por rebalsar, traté de hablar con ella pero esta se mantenía más ocupada en su IPhone que en otra cosa. - No es necesario que me evites, Barbie-. Haciendo un puchero, logré que sonriera a duras penas y eso era un gran avance.

¾ Por favor, no lo hagas-. Volvió a repetir antes de bajar su mirada a las bolsitas de condimentos entre las que se encontraba el orégano.- Sabes que hay otras maneras de averiguar lo que intentas saber. Además, no quiero perder la oportunidad de ayudarla en su entrenamiento ahora que Diana me lo pidió personalmente por su embarazo-. Haciendo una mueca, entendí que iba a hacer más daño de lo que quería hacer así que retractándome, devolví ese condimento a su lugar y pagué los demás, ganándome unos cuantos besos de Barbara y déjenme decirles que eso valía más que el oro en este mundo.

*Varias horas después*

La decoración del lugar estaba casi lista debido al trabajo que hizo Barbara junto a su hermana que no paraba de hablar de Liam que hasta ese momento, no le había pedido ser su novia y aunque esté con su hermana, debía reconocer que ella es muy linda por lo que creía que mi querido amigo estaba siendo bastante idiota por no pedírselo de una vez por todas cuando se moría por hacerlo.

¾ ¡Niall! -. Escuchando la voz de mi compañero chef, dejé de lado mis pensamientos para ver qué sucedía en la cocina.

¾ No me digas que has quemado la comida-. Bromeé, antes de cerciorar que no había humo ni olor a quemado allí.- Entonces, ¿qué sucede? -.

¾ ¿Acaso no lo ves? -. Apuntando a la mesa, me encontré con varios condimentos mezclados debido a que los recipientes que ocupaban estaban abiertos.- Parece que alguien los cerró mal y ahora, tengo este problema-. Juntando con su palma un poco, olió los mismos para luego ir colocándolos en la salsa. - Bien, asunto solucionado-. Rodando los ojos, lo dejé seguir con su trabajo para ir hacia mi habitación y cambiarme antes de que todos llegaran. Sólo esperaba que la noche fuese tranquila y llena de diversión luego de terminar de grabar nuestro cuarto álbum que pronto saldría a la venta.

Diana

¾ No te preocupes, puedo adelantarme con Marco y así, ustedes pueden ir juntos-. Besando su mejilla, me despedí con un simple "nos vemos" a los chicos para alejarme de la casa. Por su parte, ellos tratarían de dejar todo en orden para luego viajar en el auto de la hermana de Louis que gentilmente los iría a buscar para traerlos a la pequeña e íntima celebración.- Es ahí, Marco. Gracias-. Agitando mi mano en un saludo amistoso, toqué el timbre y esperé.

¾ Diana, por favor pasa-. Con una inmensa sonrisa, Barbara me saludó para que luego entrara a la gran sala que sería en escenario ideal para nuestra cena.

¾ Ha quedado muy lindo la decoración, chicas-. Felicitándolas, traté de acomodarme mi vestido largo que permanecía un poco ajustado en mi vientre de dos meses y medio-. ¿Cómo pueden aguantar ese aroma a pizzas horneadas? -. Pregunté, haciendo que rieran.

¾ Tal vez, nuestro secreto sea que nos estemos embarazadas-. Guiñándome un ojo, Sophia se acercó y sonrió al ver mi vientre.- Ya ha comenzado a notarse y te ves muy bien-.

¾ Gracias por el alago temporal porque dentro de unos meses no pensarás lo mismo-. Sentándome en uno de los sillones, acaricié mi estómago que comenzaba a chillar por un poco de comida haciendo que mi rostro se tornara rojo. Sí, si no eran los vómitos era la insaciable necesidad de comer y comer sin parar.

¾ Le pediré al chef que te traiga una rebanada de pizza-. Alejándose, Sophia siguió hablando conmigo hasta que decidió ir a cambiarse al ver la hora que marcaba el reloj. Mientras tanto, contestaba un mensaje de mi mamá que había salido a comer con mi papá a varias calles de allí y que me ofrecían llevarme de nuevo a casa en cuanto terminara la celebración-. Aquí tienes-. Guardando mi celular, agradecí a Barbara y sin esperar comencé a devorar mi porción que todavía permanecía algo caliente.- Está muy rica-. Por unos segundos, presté sólo atención a lo que estaba comiendo pero cuando mi garganta comenzó a cerrarse y un cosquilleo insoportable hacía que mi piel doliera por dentro, comprendí que algo más estaba pasando. Buscando el celular, tecleé el número de mi mamá y forzándome a hablar, le pedí que viniera urgentemente debido a que estaba teniendo una reacción alérgica.- Barbara, necesito agua- Ella que se había mantenido anonadada hasta el momento, sólo asintió para salir corriendo hacia la cocina. Poco después, tenía a ambas hermanas atendiéndome aunque nada se podía hacer sin el remedio que mi madre debía inyectarme.- Necesito ir a una habitación, no quiero que Harry me vea en este estado-. Levantándome, seguí a Sophia mientras Barbara parecía discutir con Niall que venía bajando los peldaños a la vez que yo los subía con mis piernas temblorosas. En cuanto él logró verme con más atención, abrió sus ojos desmesuradamente y eso me dio a entender que ya sabía lo que tanto había querido ocultar a los demás y en especial, a Harry.

¾ Lizzy no tardará en llegar así que por favor, recuéstate un rato mientras te traigo otro vaso de agua-. Asintiendo, seguí su consejo y cerré mis ojos, esperando que mi mamá acudiera y que las ronchas no se adueñaran de mi rostro o de mi cuerpo en su totalidad.

¾ ¿Por qué hiciste eso, Niall? -. Escuche que debía Barbara, con un tono bastante molesto.- ¿Acaso buscas dejarla en evidencia? Ahora, ¡puede que su bebé esté corriendo peligro! -.

¾ ¿Dónde está Diana?-. Escuchando su voz y el revoloteo que estaba generando junto a mi papá, sólo atine a quedarme quieta en cuanto la vi entrar y acercarse con sus ojos llorosos.- No te preocupes, todo estará bien-. Sacando una jeringa, extrajo de un tubo de vidrio un líquido que una vez que corrió por mis venas hizo que temblara de alivio.- Dentro de una hora te sentirás mejor, hija-. Acercándose, besó mi frente y acomodó algunos mechones rebeldes que se encontraban esparcidos por mi rostro pálido.

¾ ¿Cómo se encuentra? ¿Necesitaremos llevarla a una clínica? -. Con un atisbo de alegría, levanté mi mano para tomar la de mi papá.- Hija, ¿qué necesitas que haga? Sabes que puedo mover medio mundo por ti como por tu mamá-. Observando su rostro lleno de preocupación y luego la de los demás que se encontraban mirándonos desde la puerta, sólo atiné a negar con la cabeza porque no necesitaba ir a otro lugar cuando en esa habitación tenía lo que tanto había querido en mi infancia, unos padres que me quisieran tanto como ellos ahora lo estaban haciendo.

¾ Sólo necesito tenerlos a ustedes-. Girando mi rostro, sonreí a mi madre y derramé unas cuantas lágrimas al escuchar sus sollozos.- Los quiero mucho, mamá y papá-.

¾ ¿No se va a morir, no? -. Cortando todo el rollo de emociones, la voz casi tímida de Niall interrumpió nuestro momento y acompañado de Barbara que mantenía su ceño fruncido, entraron a la habitación junto a Sophia que no entendía nada.

¾ No, se recuperará-. Contestó mi madre, suspirando de alivio-. Por cierto, ¿quién fue el culpable? -.

¾ Yo no fui-. Haciendo una mueca, Niall se ganó otra mirada de advertencia de su novia.- Mi amigo que está cocinando tuvo un pequeño accidente con los condimentos en la cocina y mezcló varios de ellos. Desconozco si él trajo otros o habrá mezclado con los que tienen ustedes-. Dirigiendo una mirada a Barbara, esperó que ella dejara de acusarlo de lo que había pasado conmigo.

¾ Teníamos un poco y supongo que eso, sumado a la ineptitud de tu compañero provocó esto-. Acercándose, Barbara tomó mi mano-. Siento mucho lo que estás pasando. Indirectamente, participé en esto así que debo asumir mis responsabilidades como tal-.

¾ Nadie es culpable, chicos-. Susurré, haciendo que sus miradas se tornaran un poco más tranquilas.- Por suerte, tengo a mis padres y ya me estoy sintiendo mejor. Eso es lo importante-.

¾ Entonces... ¿Tú eres Ana? -. Sophia que hasta ese momento no había hablado, logró formular una pregunta que tanto su cuñado como su hermana la tenía en sus labios.

¾ Me gustaría poder ocultarles la verdad pero me han dejado en evidencia así que sí, soy Ana pero por favor, no quiero que esta información salga de esta cuatros padres. Estoy en peligro y Harry también por lo que no quiero provocar más problemas de los que ya existen-. Levantándome, me recosté sobre el respaldo de la cama.- Y tengan algo de paciencia porque no puedo darle muchas explicaciones hasta el juicio en el que se dirá todo la verdad y se hará justicia por el primo de Harry-. Escuchando la melodía de mi celular que indicaba un nuevo mensaje, esperé que mi mamá lo buscara en mi bolso como para leerlo.- Parece que Harry y los chicos llegarán un poco tarde debido a que hay mucho tránsito-. Agradeciendo a Dios, me sentí un poco más tranquila al saber que tendría tiempo de recuperarme.

¾ No lo puedo creer-. Susurró, sin poder procesarlo mi querido amigo Niall-. Tenía razón en cada una de mis sospechas-. Sentándose en el borde de la cama, me observó por uno segundos hasta que sus brazos rodearon mi cuerpo.- Perdóname por dudar de ti pero necesitaba saber la verdad, amiga-. Alejándose poco a poco, sonreí de emoción al verlo derramar algunas lágrimas.- Sabes que siempre te consideré como una verdadera amiga así que dolió perderte en su momento y ahora, me pone muy feliz de poder tenerte nuevamente a mi lado-.

¾ También a mí, rubio oxigenado-. Guiñándole un ojo, reí al ver que fingía sentirse molesto por lo que había dicho.

¾ ¿Rubio oxigenado? -. Repitiendo mi apodo, las hermanas Thompson riendo sobre el mismo mientras mi madre salía de la habitación para hablar por su celular. ¿Acaso alguien más sabría de lo que me estaba pasando? -.

¾ Papá, ¿alguien más sabe sobre esto? -. Pregunté, al verlo con su ceño fruncido.

¾ Sí, lamentablemente-. Y antes de que pudiera seguir hablando, algunos pasos apurados resonaron por la casa y pronto, el rostro de Jace apareció frente a todos.- Él lo sabía-.

¾ Vine lo más rápido que pude, ¿cómo te encuentras? ¿Está bien nuestro bebé? -. Sin alcanzar a responder ninguna de ellas, lo sentí acercarse y abrazarme como si se le fuese la vida en ello.- Estoy tan preocupado por ti y nuestro hijo, Diana-. Mirando a mis padres, traté de hacerles entender que necesitaba hablar con él urgentemente. Fue así que en cuestión de segundos quedamos a solas.

¾ Ya estoy de dos meses y medio, Jace. ¿Crees que sólo en este momento me sentí tan mal durante este lapso? -. Frunciendo mi ceño, intenté que comprendiera mi punto de vista, mis temores y mi rabia por no poder vivir libremente mi embarazo con Harry.- ¿Crees que todo es un maldito juego en el que desapareces cuando quieres? No, las cosas no son así, Jace porque así como yo me estoy haciendo cargo de un hijo que biológicamente no es mío, tú debes hacerte cargo de él de la mejor manera posible y eso no significa hostigar tanto a Harry como a mí. ¿Acaso te gusta hacerlo? Porque me da la sensación de que te gusta hacerme daño-. Deteniéndome en mis palabras que eran más que sinceras, esperé que reaccionara frente a ellas.

¾ Yo no busco hacerte daño, Ana. Yo te amo-.

¾ Entonces, no busques separarme de Harry porque a quien amo es a él, Jace-. Con un profundo sufrimiento le dije una verdad que no le gustaba escuchar.- Debes respetarlo porque también quiero que sea parte de este proceso, lo necesito a mi lado-.

¾ ¿Y dónde quedo yo? ¿Acaso soy menos importante que él? -.

¾ La forma en la que has estado comportándome no es la adecuada y si sigues así, no me dejarás otra alternativa que alejarme de ti-. Encontrándome con su mirada, no dudé en dejarle en claro que estaba siendo seria en el asunto.- ¿A qué tienes miedo, Jace? -. Pregunté, en cuanto reconocí esta aprensión en sus ojos azules.

¾ Tengo miedo de que Harry sea un mejor padre-. Susurró, luego de unos segundos.- También de que te aleje de mi lado y de Ed que lo considero como mi hijo-.

¾ Sabes que él es su padre biológico y que le fue negada la oportunidad de ocupar el lugar que durante este tiempo has ocupado. ¿Cómo te sentirías tú si él hubiera hecho lo mismo? ¿No crees que tiene el suficiente derecho de acompañarme en este embarazo? Sólo estoy tratando de darle la oportunidad de que disfrute de esta experiencia que tú lo has vivido dos veces, ¿acaso él no se lo merece? -. Planteándole esos cuestionamientos, dejé que él se sumergiera en sus pensamientos para luego verlo sonreír sorpresivamente.

¾ Aunque me cueste reconocerlo, tienes razón-. Tomando mi mano, la besó delicadamente antes de levantarse.- Dejaré que él se acerque a ti pero con una condición-. Sin comprender de qué estaba hablando, ladeé mi cabeza esperando su respuesta.- De que te haga feliz cada día de tu vida-. Asintiendo con mi cabeza, di por sentado que eso no era algo imposible y más cuando la mera presencia de Harry me hacía feliz.- Nos vemos en casa, Diana-. Abriendo la puerta, Jace se encontró con el rostro petrificado de Harry que no sabía qué hacer al vernos juntos y sin pelear.- Entra, Diana te necesita-. Negando con la cabeza, sólo esperé que su cuerpo se moviera.

¾ ¿Vas a quedarte ahí para siempre? -.

¾ ¿Qué hacía aquí? -. Acercándose, se acomodó a mi lado y observó detalladamente mi rostro que había permanecido intacto a las rochas gracias a la inmediatez de mi madre.- Se notaba tranquilo y eso era raro viniendo de él-.

¾ Creo que hicimos las paces, Harry-. Sonriendo, me acerqué y besé sus labios que se encontraban un poco fríos y dulces por algún chicle que seguramente había comprado por el camino.- Ahora, podremos estar juntos al tener su consentimiento-. Riendo, lo abracé por un largo rato.- Pero puso una condición como requisito-.

¾ ¿Cuál? -. Entrecerrando los ojos, siguió pasando sus brazos por mi espalda.

¾ Que me hagas feliz cada día de mi vida-.

¾ ¿Y eso cómo lo haría? No es algo fácil-.

¾ Sí lo es, cariño-. Alejándome de sus brazos, acaricié su mejilla con ternura.- Con sólo tenerte a mi lado, soy feliz-. Volviendo a sonreír, junté nuestros labios en un beso que esperaba que durara una eternidad porque el tiempo era poco estando a su lado y más, cuando lo amaba tanto.

¡Nuevo capítulo!

Espero que les guste y puedan votar o comentar.

¿Qué les parece hasta aquí la novela? ¿Y las aptitudes de los personajes?

Por cierto, ¡Ya quedan sólo 14 capítulos para el epílogo! Creo que ya estoy comenzando a extrañar esta novela pero es necesario que la termine por ustedes y por mí misma.

En fin, les mando saludos y que tengan un lindo día.

PD1: Foto de una de las parejas más comprometedoras luego de Ana y Harry.

PD2: ¿Cómo se sienten por la nueva canción de Harry? Yo estoy muy desesperada porque ya la quiero escuchar. Creo que sonará genial y por cierto, grabaré mi reacción por si quieren verla.

Ana

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro