No voy a negarlo, aunque sea mal momento, la ropa que le han puesto hace que se vea más sexy. Hace unos tres años quizá se hubiera vuelto mi favorito... Aunque eso no es lo que me tiene maquinando un plan a la velocidad de la luz. Los números suben demasiado rápido. ¿Vamos ya en los setecientos? Ah, no, ochocientos. Joder, ¿debería yo también dar una apuesta? Creo que llevo conmigo mil dólares... Mierda, de verdad que Taehyung me está costando mucho.

-¡ochocientos setenta y cinco!

-¡novecientos!

-¡novecientos diez!

Acabemos ya, Jeon. Sólo debes alzar la voz y darlo todo. Es por Taehyung.

Te odio, voz irritante de mi madre en mi cabeza. Ojalá no me arrepienta.

-¡mil!

Silencio. Creo que he ganado, los demás se hunden en sus asientos y bufan, quejándose que un chico tan sexy y hermoso debería ser sólo para ellos. Hablan entre sí sobre quién es el joven misterioso y encorvado de cubrebocas y lentes. Da igual, Taehyung está a salvo.

-¡mil cien!

Creo que incluso yo suelto un grito ahogado. Mierda, ¿qué hago? Le ordené a Kim no traer nada. Si termino por ganar la subasta, no tendré el dinero para pagar. Y aquí eso es el peor error del mundo.

-mil ciento cincuenta... - digo sin seguridad, pero lo suficientemente alto para que lo anoten.

-¡mil quinientos!

Esta vez es mi turno de hundirme en la silla, ignorando la mirada alarmada de Tae y las lágrimas que empiezan a resbalar por sus mejillas. Un joven castaño le toma por los hombros; sin embargo, Kim trata de correr en mi dirección. Tengo que recopilar todo mi autocontrol para no extender los brazos hacia él o golpear a quien lo derriba y arrastra hacia detrás de bambalinas. Un hombre, de no más de treinta años, se levanta de su lugar y me mira victorioso. Luego, va casi corriendo al mismo lugar donde se han llevado al rubio.

-el que sigue es un bombón, compañero. No desesperes. Tampoco es como si fuera el único chico guapo de aquí - me consuela un hombre a mi lado, sonriendo un poco. Le devuelvo el gesto y me quedo unos minutos participando y haciendo apuestas mínimas. No debo verme tan sospechoso si quiero ir con Tae.

Con mucha cautela, cada ronda me voy acercando tres asientos más hacia el telón, conversando un poco con los compradores. Asombrosamente los productos no duran ni cuarenta segundos en el escenario, a comparación de Tae que permaneció temblando unos tres minutos. Hasta ahora es la apuesta más alta que he visto. ¿Debería comprar a un muchacho de la misma complexión que Kim y hacer un canje? Mierda, no. Ese hombre no lo querría. Tae es demasiado hermoso, y, si yo fuera él, tampoco lo cedería... Aunque nada pierdo con intentarlo. Y tengo exactamente tres minutos antes de que se le acabe la oposición a mi lindo rubio. Por suerte, el camarero que sube es jodidamente sexy...

Idiota.

Siento un tipo de pánico subir por mi garganta al reconocer a ese drogado pelimorado: HyuRi. Aquí hay dos opciones, y ninguna me gusta: o lo compro y lo intercambio por el bobo del rubio; o hago eso, y le pido ayuda... No, si alguien más llegara a adquirirlo, lo perdería. Son rentas de  dos semanas.

-¡seiscientos a la una, a las dos...!

-¡setecientos! - grito, y casi brinco de la silla por el susto de estar tan distraído al punto de por poco perder a Hyu.

-¡vendido al caballero del cubre bocas! - exclama el vendedor después de hacer el debido conteo.

Hyu me mira con los ojos curiosos. Su sonrisa lujoriosa se desvanece cuando me quito el barbijo y le sonrío con superioridad. Es tan divertido ver cómo su rostro va cambiando de a poco. Primero se pone pálido, luego abre mucho los ojos y pone cara de querer gritar, por ello le cubro velozmente la boca... Aunque retiro la mano cuando me muerde.

-¡estás muerto! No, no, no... Es el efecto de la coca, sí, eso debe ser. Debo controlarme mejor si no quiero acabar con una sobredosis... O...

El impacto de su mano con mi mejilla hace que mi cabeza gire. Empieza a dar unos agudos chillidos y grita "¡eres tú, hijo de puta!". Yo escucho sus quejas sin parpadear, pero, al escuchar unos sollozos más que familiares, le devuelvo su golpe para que reaccione.

-sí, estoy vivo. Cállate y escucha. Quiero dividir el clan, y sé que me vas a ayudar. Escuché que Nae está a cargo ahora, y, por lo que te hizo, estoy seguro que deseas derrocarlo. Por eso necesito que me sigas la corriente. Mi... novio se hizo pasar por camarero por error. Creo que es Al quien lo compró. Te daré trescientos dólares si me ayudas a recuperarlo.

Silencio.

-quiero el dinero ahora. Y le daré a Al una semana de cinco estrellas - dice, guiñándome el ojo y dándose un golpe en el trasero.

-hecho.

No sé qué tan desesperado me veo, porque se ríe, pero luego de recibir el pago, me señala una habitación con la cabeza. Ambos pegamos la oreja a la puerta, y mi corazón se rompe al escuchar gritos de mi rubio, rogando que lo suelte, así que con furia abro la puerta y empujo al sujeto que está sobre mi TaeTae, y él se oculta en mi espalda.

-no seas... ¿Jeon? ¿Tú no estabas muerto? Da igual. ¡Ese es mío, idiota!

-no, Al, es mío. Si lo vuelves a tocar, te cortaré el cuello. Así que mejor acepta por las buenas un cambio de camareros, ¿sí? Tae no es de aquí, tú lo sabes. ¿Qué chico en este burdel se opone tanto tiempo a que lo sometas?

-me costó mil dólares, Jungkook. No lo dejaré ir sólo así. Estás estúpido. Hyu no vale ni la mitad que este bombón.

-¡oye!

-mira, idiota, Hyu tiene más experiencia y es igual de bonito. Este es  mi jodido novio, Al, déjalo en paz. Lo traje por error y me lo voy a llevar a casa. Te daré a Hyu y la diferencia de precio... O lo que quieras, mierda. Sólo deja a mi chico.

Se lo piensa un segundo, sonriendo al siguiente.

-quiero la memoria.

Me quedo petrificado y luego comienzo a reír con fuerza. ¿Está loco? Sí, igual que todos en este trabajo, aunque eso no significa que le daré la USB, pasé y sacrifiqué muchas cosas (incluida mi hermosa casa de playa) para conseguirla.

-¿no quieres algo más?

-no. Quiero la memoria.

Dejo de reír, dando paso a los nervios.

-oye, Tae, ¿y si te quedas cuatro días? Digo, no creo que sea tan malo.

-¡Jeon! - me regañan Hyu y el rubio al mismo tiempo.

Suspiro, dándome por vencido.

-bien, bien. Era broma, amargados... Al, son sesenta carpetas, cada una con tal vez más de treinta documentos sobre cada uno de nosotros. Es la única prueba de que existimos, lo sabes. Si esto cae en manos de la policía, nos van a cagar. Espero que sepas lo que haces. Y dame tu navaja, la necesito. Juro que no te sacaré el ojo.

Con una gran desconfianza, me da lo que le pedí. Cierro los ojos y muerdo mi lengua con fuerza mientras entierro en mi abdomen la cuchilla, jadeando de dolor. Creo que para los otros también es una sorpresa, porque Hyu empieza a tener medio arcadas, Tae chilla y Al se pone un poco pálido. No es para menos, la herida que he abierto es un poco grande y profunda, en donde me veo obligado a escarbar. Mis dedos pronto chocan con algo metálico, así que saco el pequeño objeto de dentro de mi cuerpo. La vez que lo metí no dolió. De verdad extraño no sentir nada.

-si alguien más lo encontraba, me hubieran matado - explico con sencillez ante las miradas asqueadas y, sólo en el caso de Tae, preocupadas que me dirigen -. No tuve opción. Dije que siempre la tendría junto a mí. Dicho y hecho.

Al toma la USB con una mueca que está entre el asco y la victoria, Hyu de verdad que se va al baño y comienza a vomitar al ver la gran herida en mi cuerpo, Tae se ha quedado medio en shock (parece ni siquiera notar que tiene la ropa rota y que su increíble figura es más que una vista tentadora), y yo... Bueno, el gran Jeon Jungkook se está quejando y tratando de contener una hemorragia. Creo que corté de más. La sangre corre en una cantidad alarmante y me estoy sintiendo medio somnoliento. Mejor no provoco al destino.

-ahí está. Hyu se encuentra en el baño. Taehyung es mío - gruño.

Me doy la vuelta, dándole un empujón que saca al rubio de su ensoñación y lo vuelve a poner paranóico, abrazándose a mi brazo con fuerza. Tiembla tanto que estoy seguro él se desmayará antes que yo.

-Jeon, quiero una cosa más.

-no, jódete.

-bueno, entonces supongo que a Nae le encantará saber de ti. Has sido una clase de tendencia entre nosotros, Kookie.

Bufo ante el infantil apodo. Los únicos en llamarme así son Hoseok y, hace mucho tiempo, Gyeomie. El maldito lo sabe. Sabe jugar y tiene buenas cartas. Se lo dejaré pasar porque me conviene.

-¿qué quieres, Al? - murmuro, poniéndome frente a él y dándole una mirada llena de repugnancia u odio. Más reproche que nada, en realidad. Sé bien qué desea. No sé lo daré.

-¿una noche?

-no. No soy un puto camarero. Te dejo a Hyu para eso. Pide otra cosa.

-sabes lo que deseo, sicario Jeon. Déjate de juegos, idiota.

-usted manda, sicario Byeong.

Taehyung ahoga un grito, mientras que yo sólo me resigno al trato. Hyu vuelve a vomitar al ver la escena. Son unos exagerados, estoy seguro que han hecho algo similar o peor.

Literalmente la lengua de Al me llega hasta la garganta, por lo que me es difícil mantenerle el ritmo. Pelea por el dominio, pero eso no se lo cedo a nadie, así que termino ganando nuestra pequeña batalla por el control. Si lo dejo con ganas, Hyu me asegurará una alianza con él. La mejor parte es que soy un chico que besa muy bien. De tan sólo verme te provoco algo. En algunos miedo u horror, pero algo al fin y al cabo.

-¿he satisfecho sus deseos, sicario Byeong?

-me daré por bien servido, sicario Jeon. Hyu, deberías aprender algo bueno de este idiota. Por fin una cualidad salió a la luz.

-¿y tú me vas a enseñar, Al? - dice coqueto el mencionado, sonriendo con maldad. ¿En qué momento se cambió por algo más revelador? Sepa su madre, aunque se ve muy tentador.

-con gusto, cariño.

¿Ven? Alianza segura... A menos que Al termine por traicionarme. Eso sería un problema... Aunque por ahora sólo me voy a contentar con no ver a dos de mis "amigos" follar frente a mí, qué asco.

-así que... ¿Tu novio? - susurra Tae, poniéndose mi chamarra con una sonrisa tímida que se ve borrada al mirar mi rostro molesto.

-no me hables. Juro que llegando a tu casa te voy a castigar tan fuerte que no podrás caminar, Kim. Espero que tus puertas y paredes sean insonorizados. No quiero a Park jodiendo de por qué tanto grito.

...

Feliz día de Hobi!!! No puedo creer que tenga 27, parece un nene de cinco :'(.

Vi muchos proyectos que se cumplieron, y en serio lloré de felicidad cuando la torre BBVA en verdad proyectó una felicitación para Hobi!!

¿Recuerdan mi maldición con los Lives? YA ES GENUINA. Siempre lo supe, pero me negué a creerlo hasta hoy >:(. Puse una aplicación para que me despertara si la Vapp hacía el más mínimo movimiento, además de que me puse a leer una historia con un brillo para dejarme ciega y ¡PUM! ¿Qué pasó? Me quedé dormida Y LA APLICACIÓN NO FUNCIONÓ. Nononono, necesito hacerme una limpia, ¡esto ya no es normal! NINGÚN live me he visto por mucho que me desvele o cuide mis horarios. ¿Cumpleaños de Jungkook? Acabó antes de que mi teléfono terminara de reiniciarse. ¿Cumpleaños de Nam? Vacaciones con mis papás que no me permitieron una desvelada decente. ¿Cumpleaños de Jimin? Me quedé despierta hasta las diez de la mañana Y NUNCA LLEGÓ. Eso lo entendí por el tema de China, pero dos semanas después, JUSTO cuando no me puedo desvelar, hacen live. ¿Qué pasó al día siguiente? JUNGKOOK Y YOONGI TAMBIÉN HICIERON LIVE!! Va. Superado (ay ajá). ¿Cumpleaños de Jinnie? Me quedé en cas de mi abu y me apagan el Internet en la noche. ¿Cumpleaños de Tae? LO HIZO JUSTO CUANDO ESTABA EN CLASE, TEMPRANO, A UNA HORA QUE JAMÁS CREÍ POSIBLE. Y AHORA CON HOBI ME QUEDÉ DORMIDA AÚN CUANDO TENÍA ALARMA, NO PUEDOOOOOOO

En fin, mucho drama xd. Les dejo ya, ¿oka? Me siento mejor, pero realmente no lo suficiente como para volver a actualizar semanalmente, por eso les dejaré uno o dos capítulos de cada historia que voy actualizando! (aunque lo más probable es que mañana haga algunos ajustes)

Por cierto, muchísimas gracias. Si he tenido algún avance en mis problemas todo se debe a ustedes. Sus hermosos comentarios me alegran la vida, se los juro. Me dan un segundo para escapar de mi realidad, y eso es algo que de verdad he necesitado y que ustedes con sus lindas palabras me dan. Mil gracias, de verdad. Prometo estar de vuelta pronto, con más ánimo e inspiración! Hasta ese entonces, cuídense mucho, tomen agua, amen a los chicos y lean mucho Vkook!! Nos leemos!!