Capitulo 34
Sus ojos verdes miraban absortos la pared blanca frente a él, Son muy bonitos, los comparo con los de la rubia, los de ella también son hermosos, juzgo y decidió que los del muchacho les gustaba más, Contrasta muy bonito con su piel, a pesar de la situación en la que se encontraban no podía evitar sonreír al verlo tranquilo.
-¿Ya me analizaste lo suficiente?- rodo los ojos tratando de no sonrojarse, no entendía como una persona podía sonrojarse tanto, algo en su organismo no andaba bien con seguro.
-Sí y por lo visto ya estás muy bien- tenía suficiente confianza con el ojiverde como para responderle así, era su amigo después de todo, al menos ella lo veía de esa forma y eso la hacía feliz.
-¿En serio? Mi pierna dice lo contrario- sonrió socarrón acomodándose sobre la cama de aquel hospital.
-¡Oh pobrecito Lían!-
-No seas irónica pelirroja- rio por el puchero que le hizo.
-¡A que se me da bien la actuación!- bromeo Nathaly, el castaño negó dramáticamente.
-Definitivamente no, la pintura y dibujo es lo tuyo- Agradeció su sinceridad, era extraño ver al castaño con el cabello suelto, era largo, bueno no tan largo como el suyo, pero para un hombre era algo llamativo.
-¿Sucede algo?- la mirada agua marina de la muchacha sobre él lo inquieto un poco pero supo disimularlo, Nathaly tenía unos ojos muy bellos, Más lindos que los de Adrianne, sonrió por que la pelirroja ni siquiera se lo imaginaba.
-Nada realmente...es solo que...es extraño verte con el cabello suelto- por inercia el italiano se tomó algunas hebras chocolate entre sus dedos, para su familia y él no era nada llamativo, sin embargo no había muchos chicos que llevaran el cabello de tal forma.
-¿Te desagrada?
-¡No, no! ¡Para nada!- una enfermera asomo su cabeza indicando que se no gritara, la pelirroja asintió apenada por su extravagante reacción.
-Que escandalo para alguien tan tímido- frunció el ceño fingiendo enojo pero la sonrisa de lado de Lían no la dejaba hacer su papel de mujer indignada.
-¿Y bien? ¿Qué tiene mi cabello?- Nathaly se levantó del asiento y camino para tomar su maletín con sus cuadernos y utensilios de dibujo que solía llevar, saco un folder y un lápiz de carboncillo especial para sus dibujos.
-Es muy bonito- respondió sonriéndole cálidamente, Lían pudo jurar que por un momento sus mejillas ardieron, desvió la mirada sin dejar de sonreír tratando de controlar el calor que quería acomodarse en su tez canela.
-Déjame dibujarte...¿Si?- sus ojos verdes miraron levemente asombrados a la muchacha que lo observaba esperando su respuesta, asintió lentamente y se acomodó lo mejor que pudo, había visto a la pelirroja dibujar muchas veces a Mario sin que esta se diera cuenta, incluso vio como dibujaba a Rod y Julek, pero aun así no pudo evitar que los nervios cedieran un poco en él por tal pedido, decidió pensar en que sus padres llegarían dentro de una hora y tal vez podrían sacarlo de aquel lugar, aunque estar con Nathaly era sumamente agradable.
(Aww, a mi me gusta Lian, no lo hice a color por que me dio pereza :v )
Estaba casi por caer en los brazos de Morfeo cuando el sonido de alguien llamándole desde el otro lado de la puerta le arrebato su amado sueño, con los ojos cerrados frunció el ceño y se levantó toscamente de la gran cama, arrastrando los pies cual perezoso abrió la puerta de mala manera, unos ojos turquesa tras las gruesas gafas lo recorrieron de pies a cabeza antes de lanzarse contra el en un efusivo abrazo.
-¡Samuel! ¡¿Qué rayos tienes?!- el pelinaranja lo soltó aliviado y se introdujo en la habitación como pancho en su casa, el rubio lo siguió levemente indignado.
-Venía a ver que estuvieras bien, y por lo visto te encuentras en perfecto estado- acomodándose las gafas tomo asiento sobre el amplio sillón, Colín lo imito con el mueble del frente.
-Y dime ¿Dónde te metiste cuando te buscaba para salir huyendo?- el rubio con brazos cruzados miraba cansado a su amigo, sus músculos dolían levemente por correr tanto y creía que aún no se le quitaba el olor a humo de los cabellos húmedos.
-¡Que sabré yo! ¡Solo quería salir de ese lugar! Pero al final termine atrapado junto con Aly- Samuel sonrió al escuchar el nombre del bloguero de los labios del ojiazul, le agradaba la idea que Colín entablara relaciones con alguien más.
-Pero lograron escapar juntos- Bourgeois asintió con una sonrisa de autosuficiencia en la cara.
-Y eso no es todo, ¡Incluso queme un tentáculo de esa cosa!- parecía un niño contándole sus hazañas a su padre, le relato como el castaño le salvo la vida de ser aplastado por la akumatizada, Samuel se acordó de la situación anterior con la torre Eiffel.
-Igual que Kurtzberg- ¡Listo! Ya lo había dicho, Colín nunca le dijo quien había salvado su existencia aquella noche de la feria gastronómico, pero él pudo intuirlo con solo escuchar lo que dijo su amigo, Fue una mujer...Una torpe mujer, Definitivamente se refería a la pelirroja.
Colín palideció por lo escuchado, ver al pelinaranja tan calmado como si siempre lo hubiera sabido lo desencajo, pero al fin y al cabo debía de admitir que el de gafas era muy perceptivo, se recompuso y respondió lo más calmado que pudo - ¿Y tú como sabes eso?- podría haber dicho algo como, No sé de qué hablas o estas delirando, pero ya era inútil negarlo, además la sensación de desagrado que antes se apoderaba de el al recordar el evento había sido reemplazado por agradecimiento, estaba muy agradecido con Nathaly.
-Lo sospeche desde un principio- el rubio arrugo el rostro por la frase que juro oír en algún programa de humor mexica, no le dio importancia.
-¿Así? Pues como sea, al final solo salió herido Rossi y... Nathaly se fue con él al hospital- el desagrado con que pronuncio lo último hizo que Samuel confirmara una más sus dudas respecto a la relación que traía con la pelirroja.
-Ya veo- guardo silencio por unos segundos tratando de formular la pregunta adecuada.
-Colín...-el rubio lo miro fijamente, ambos estaban serios.
-¿Qué son tú y Kurtzberg?- No mostro emoción alguna, simplemente se levantó del sillón y camino serenamente hacia la puerta vidriosa corrediza que daba al balcón, la abrió completamente ante la atenta mirada de los ojos turquesas, el viento y rayos naranjas de la tarde impactaron de lleno contra su cuerpo, Samuel estaba preparándose para irse por si lo echaban.
-Ella es especial- las gafas casi se le del rostro al ver la respuesta segura y el rostro sonriente del rubio, No miente, el Bourgeois sonreía sinceramente hacia el atardecer, el pelinaranja carraspeo un poco.
-¿Quieres decir que tú y ella-
-No seas mal pensado Samuel- el mencionado rio nervioso.
-Lo que quiero decir es que la considero alguien especial en.... Mi vida-
-Oh, entiendo- respondió picaron moviendo las cejas asiendo que el rubio se sonrojara fuertemente.
-¡No confundas las cosas! ¡Es decir la quiero! ¡Digo! ¡Es mi amiga! ¡A los amigos se los quiere!- La risa estruendosa de Samuel invadieron la habitación, un sonrojado rubio lanzo lo primero que encontró contra el pelinaranja, este lo esquivo y corrió hacia la puerta -¡Deja de reírte!- abrió la puerta y la cerro antes que un zapato se impregne en su cara.
-¡Uno intenta cambiar y no le dejan!- arrequintando de su amigo y pensamientos decido que lo mejor era hacer el repaso del Banquete, dentro de dos días seria la gran presentación, reclino su rostro en su puño, sería una larga hora de estudio.
La arrastraban de tienda en tienda como si de un muñeco se tratara, pedía internamente que alguien viniera a rescatar, su amigo pelinegro solo la miraba con lastima siguiéndolos desde atrás, Rod se veía sumamente emocionado por escoger ropa nueva para su "muñeca", Julek daba palmaditas en la espalda de la pelirroja antes de entrar a probarse la media docena de vestidos que el rubio había elegido, Nathaly se preguntaba si era necesario probarse tanta ropa, solo era un exposición y si, sabía que tenía que ir elegante ya que eran el tema principal de filosofía y que además estarían padres de familia y también otras instituciones, suspiro derrotada, Papá no podrá verme, decidió comenzar a divertirse y no dejar que la tristeza la invada, después de todo su padre vendría dentro de dos semanas.
-¿Y bien?- las miradas examinándola le avergonzara, estaba acostumbrada a estar con Rod y Julek pero eso no quitaba el hecho de que eran hombres.
-Muy corta, puedo ver tus blancas y flacuchas piernas a la perfección- se ruborizo y miro "molesta" hacia el pelinegro que miraba reprobatoriamente el vestidito.
-Julek tiene razón.... ¡No sé ni porque lo escogí!- regreso de vuelta al probador y después de intentos fallidos salió con el ultimo vestido que quedaba.
-¿A-Ahora?- no se había desvestido tantas veces en su vida, bajo la mirada aprenda a ver que ninguno de sus amigos emitían palabra algunas, Definitivamente esto no es para mí, suspiro derrotada.
-Nathaly...estas... ¡Bellísima!-los brazos del rubio la apresaron en un efusivo abrazo mientras se elogiaba a si mimo, la pelirroja sonrió por el ánimo de su compañero y por al fin poder terminar con ese "calvario".
-¡¿Te gusta Julek?!- el pelinegro que no había emitido palabra alguna se encontraba con la mejillas coloreadas y mirada fija en el cuerpo de la pelirroja, la aparto de inmediato avergonzado y asintió.
-¡No tienes nada que envidiarle a Adrianne!- rio por la ocurrencia y entro a cambiarse con su ropa de siempre, después de todo no había sido mala idea venir a comprar ropa con ellos después de salir del hospital cuando llegaron los padres del castaño.
.
.
.
.
.
Hasta ahora quien tiene los feeling mas claros es la abejita :3 por otro lado la tomate esta confundida.... y bueno Lian, podra ser mentiroso y todo pero el esquema de personaje a mi me encante y la serie original, Lila es un enemigo muy prometedor ademas de sacar el lado paranoico/obsesivo de LadyBug para con Adrien, así que solo dire que a los que no les gusta Lila no sean ofensivos, imprudentes e inmaduros con el personajes que solo es eso queridos(as) mios ....¡Recapacita, baby, Recapacita! .... ¡Basta de Hate! <3 saludos - YCYR
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro