Heart se había prometido asi misma hacer feliz a Desmond.

Ella no tenía ni la más mínima idea de lo difícil que sería.

¡Especialmente hoy!

Desmond estaba actuando realmente extraño.

Ya eran las dos de la tarde, y Desmond no se había levantado de la cama. El usualmente se levanta a las ocho de la mañana y comienza su rutina diaria de ver la televisión, jugar alguno de sus videojuegos juegos, y luego salir a caminar por un par de horas.

Heart estaba completamente segura de que el hombre no estaba dormido. Es decir, ella básicamente era su almohada. Desmond estaba descansando su cabeza sobre su estómago felpudo, por supuesto que ella sabría si el está despierto o dormido.

Lo cual solo hacía mucho más extraño que Desmond no hubiera hablado o hecho nada desde que se despertó.

"Ummm, Desmond?"

"...", al escuchar la voz de Heart Desmond pareció recordar que esté no estaba solo en su cama y que su almohada está viva, "... Si Heart, ese es mi nombre. ¿Que pasa?"

"Por qué no te has levantado?"

'Tuve un mal sueño', Eso, fue lo que Desmond casi se atrevió a decir cuando su boca se abrió para responder la pregunta de Heart, pero todo lo que salió de su boca como respuesta fue; "... No dormí bien anoche", fue eso.

'Ooooohh, eso era una mentira', Heart al instante lo supo arqueando una ceja caricaturesca y viendo a Desmond con una expresión confundida, 'El durmió como un muerto durante toda la noche. Lo vi dormir toda la noche ... Uuuhh ¿Por qué eso suena extraño incluso en mi cabeza?'

Heart 'respiró' hondo, sintiendo la frustración acumularse en su pecho relleno de felpa. Desmond había estado más distante de lo habitual en las últimas semanas, pero hoy parecía especialmente desconectado. Ella quería ayudarlo, a hacer lo que había prometido, pero se sentía impotente.

"Desmond, sabes que puedes hablarme de cualquier cosa, ¿verdad?" intentó suavizar su tono, deseando evocar al menos una respuesta genuina.

Desmond giró su cabeza hacia ella, sus ojos mostraban una mezcla de incomodidad y cansancio. "No es nada Heart. Solo... no tengo ganas de hacer nada hoy."

Heart sintió un cosquilleo de preocupación. "Pero eso no es como tú. Usualmente te levantas y haces cosas. ¿Qué cambio?"

Él se quedó callado, mirando al techo como si las respuestas estuvieran escritas en el yeso. Heart no estaba dispuesta a rendirse tan fácilmente.

"¿Te pasó algo afuera? ¿Te sientes mal? No quiero que te guardes las cosas, Desmond. Estoy aquí para ti."

Finalmente, después de un largo silencio, Desmond suspiró y se sentó. "Puedes dejar la cama cuando quieras, tengo otras almohadas que puedo usar además de ti"

Heart sintió que un pequeño puñal de tristeza se hundía en su suave interior al escuchar la respuesta de Desmond. Era evidente que había algo más en su mente, algo que lo estaba atrapando en ese estado de apatía. Pero, en lugar de rendirse, decidió intentar un enfoque diferente.

"Desmond, no sigo aquí solo por ser la almohada perfecta", dijo con suavidad. "Sigo aquí porque quiero creer que soy tu amiga. Y como tú amiga, quiero ayudarte, pero ... Bueno, ya sabes que aún hay muchas cosas que aún no entiendo. Para poder entender, necesito que me dejes entrar"

Desmond la miró por un momento, sus ojos mostraban una lucha interna. Heart sabía que estaba lidiando con algo, y ella estaba decidida a no dejar que se encerrara sólo por miedo o vergüenza.

Una idea de repente surgió en la cabeza interior rellena con nada más que felpa de Heart.

"Oye ¿Qué tal si hacemos algo diferente hoy?" sugirió Heart, intentando darle un aire de normalidad a la conversación. "Podemos quedarnos en la cama y simplemente hablar. No necesitas hacer nada. Solo... Dime lo que sientes".

Desmond pareció contemplar su propuesta. Finalmente, su rostro se relajó un poco, como si estuviera considerando la idea más allá de la superficie. "No sé si tengo mucho que decir, Heart", murmuró, como si estuviera tratando de convencerse a sí mismo más que a ella.

"Bha. ¡Eso está bien!", respondió ella, moviendo su cabeza un poco para hacerla parecer más animada. "Creo que a veces, solo decir 'no sé' ya es un buen inicio".

Fueron unos momentos de silencio, pero esta vez, no era incómodo. Era un silencio lleno de posibilidades. Heart esperó, sintiendo que su presencia podía proporcionar un poco de calidez y confort.

Finalmente, Desmond rompió el silencio. "Es solo... todo se siente pesado últimamente. No sé cómo explicarlo bien. Siento que tengas que verme así, pero hay días en los que me cuesta simplemente levantarme de la cama, y no sé si es porque estoy cansado de todo o porque realmente no tengo ganas de hacer nada".

Heart sintió que su corazón de felpa se apretaba un poco. Sabía lo difícil que era lidiar con esos sentimientos. "Es comprensible sentirse así a veces. El mundo puede ser abrumador. Pero no estás solo, Desmond. Estoy aquí, y quiero apoyarte".

Desmond asintió lentamente. Las palabras de Heart parecían alcanzarlo profundamente. "Gracias, Heart. Realmente aprecio lo que tratas de hacer aquí, con esa promesa que me hiciste y todo, pero ... Realmente no soy bueno expresando mis sentimientos. Me siento incomodo siempre que tengo que explicar cómo me siento", confesó de una manera apatica, una pequeña y fragil sonrisa apareciendo en su rostro.

"Creo que ... Entiendo", respondió Heart exclamó de manera pensativa, suavizando su tono. "Sentirse incómodo, es decir. Me sentí bastante incómoda ese día en que me quitaste toda la felpa y luego me guardaste en un armario oscuro donde guardas tus sabanas. Si así es como te sientes cuando expresas tus sentimientos, entonces entiendo por completo por qué no quieres expresar tus emociones más amenudo".

Desmond miró a Heart con una mezcla de sorpresa y diversión. "Nunca había pensado en eso de esa manera", dijo, dejando escapar una pequeña risa, como si el recuerdo le resultara un poco absurdo. "Esa fue una experiencia realmente extraña ahora que lo pienso. Una parte de mi aún estaba sorprendido y procesando todo el hecho de que un peluche podría tener pensamientos y sentimientos".

"Bueno, sorpresa", respondió Heart, con una chispa de humor en su voz. "Ahora ya sabes que soy más que solo un peluche; soy tu amiga. Y estoy aquí para ti, incluso cuando te pones todo gruñón y apatico".

"He. Si, supongo", Desmond se acomodó un poco en la cama, sonriendo levemente. "Quizás deberíamos hacer de esto una costumbre: hablar de las cosas que normalmente guardo adentro, o de las cosas incómodas. Tal vez... No lo sé. No es como si tuviera algo más importante en todo el dia"

Es decir, además de comer e ir al baño ... Pero bueno, está no es la primera vez que Desmond pasa un día entero sin comer.

Lo cual no era para nada saludable. El realmente deberia-

"Oh, si. Eso de echo es una muy buena idea, Desmond", contestó Heart, sintiéndose animada. "Y podemos hacerlo a nuestro propio ritmo. Sin presion".

Desmond asintió, sintiéndose un poco más ligero, como si la conversación le hubiera despejado una parte de su mente que estaba nublada. "Sí, a nuestro propio ritmo. Eso suena bien. No tengo que sentir que estoy forzado a hablar de inmediato".

Heart se acomodó un poco, buscando un ángulo que le permitiera mirarlo mejor, como para recordarle que estaba allí para él, siempre dispuesta a escuchar. "Si. Podemos tomarnos nuestro tiempo para compartir lo que sentimos, y no hay presión. Solo... ser nosotros mismos".

Desmond respiró hondo, tratando de encontrar las palabras correctas mientras sus pensamientos se arremolinaban. "No sé por qué, pero a veces me siento como si estuviera atrapado en una burbuja. Todo lo que hay afuera parece distante y ruidoso, pero yo solo quiero quedarme aquí. Dónde todo es más fácil".

Heart sintió que volvía a abrirse una herida en su interior. "Una parte de mi quiere pensar que eso es normal. Sentir eso, es decir. La primera vez que vi el mundo afuera, yo, sentí muchas cosas. Muchas cosas que no creo que eran nuevas para mí", Heart no pudo evitar recordar el día en que ella y Desmond habían salido a cambiar, "Fue ... Mucho. Me sentí feliz porque había muchas cosas nuevas, luego me sentí enojada por qué empezó a llover y el agua de la lluvia se filtraba en mi cuerpo. Y cuando esperábamos que la lluvia terminara, me sentí un poco culpable por tenerte sentado a mi lado esperando en la lluvia a qué se calmara"

"...", Escucho atentamente todo lo que Heart le estaba contando.

"Y cuando el primer trueno se escuchó, yo-"

"He. Gritaste como una niña asustada y me abrazaste pensando que algo malo había pasado"

"Si, yo- hehe, hice eso ...", Heart dijo algo avergonzada de como había actuado en esos momentos, "... Ese día también sentí mucho miedo porque era la primera vez que escuchaba un trueno", Heart explico suavemente, "Y cuando sentí ese miedo, no pude evitar sentir aún más miedo por todo lo que aún no se. Más aún cuando me explicaste lo que eran los rayos. Ese día, entendí que el mundo de afuera tiene muchas cosas bonitas pero también muchas cosas feas y que dan mucho miedo. Aún me cuesta entender por qué no le tienes miedo a los rayos"

"... Yo tengo otro tipo de miedos Heart", admitió Desmond, bajando la vista hacia las cobijas. "Miedo de no ser lo suficientemente bueno, o de que nadie realmente entienda lo que estoy pasando".

Heart sintió un nudo en su interior al escuchar las palabras de Desmond. "¿Miedo de no ser lo suficientemente bueno? Desmond, eso no es cierto. Eres un gran amigo, y estoy aquí para apoyarte en lo que necesites. No tienes que sentirte así".

Desmond suspiró, como si llevara un peso enorme sobre sus hombros. "A veces, creo que estoy decepcionando a todos. O que no cumplo con las expectativas que mi familia tuvo o tiene de mí. Y lo peor de todo es que ni siquiera se por qué me siento de esta manera cuando no pasa ni un día en el que no me diga a mi mismo que no importa lo que otros piensen de mis mismo".

"Pero las expectativas son solo eso, expectativas", replicó Heart suavemente. "Es decir, solo mírame a mí. Día con día te demuestro que tus expectativas de mi siendo algo más que una peluche parlanchina son ciertas".

Desmond levantó la vista, sus ojos reflejando una mezcla de tristeza y gratitud. "Me gustaría creer eso Heart, pero a veces es difícil. Es solo que ... Hay días en los que me siento realmente aislado, como si estuviera viendo a todos desde detrás de una ventana sucia, incapaz de unirme a ellos".

Heart se movió ligeramente, buscando estar más cerca de Desmond. "Entiendo. Más de lo que me gustaría hacerlo. Es decir, solo mírame, soy un peluche que se mueve y habla. Si salgo afuera e intento hablar con alguien sin usar un disfraz, lo más probable es que termine asustando a quien sea que me vea", Heart explico luciendo triste.

"He-hey, vamos. Eso no es ... Completamente cierto"

"Desmond. Puedes mentirme acerca de lo que tú quieres, pero no sobre esto. Nunca sobre esto. Por favor", Heart suplico un poco herida. "Soy ... Muy consciente de que no soy lo que la gente espera ver. Pero eso no significa que no pueda ser una buena amiga para ti. Lo mismo va para ti. No tienes que ser perfecto para que te acepten o te quieran. La amistad se trata de ser auténtico, de ser tú mismo. Y, por favor, cuéntame más sobre lo que sientes".

Desmond la observó, su corazón sintiendo un leve levantamiento al escuchar las palabras de Heart. “Es solo que hay días en los que me siento como un fraude. Como si no perteneciera a ningún lugar y como si fuera una carga para los demás”, confesó con un hilo de voz. “La verdad es que me sorprende mucho que tú, siendo un peluche, entiendas tanto sobre esto”.

“Porque, aunque soy un peluche, me gusta pensar que en algún lugar dentro de mi entre toda la felpa tengo un corazón que late, como el tuyo incluso si no es de la manera típica. Siento cosas, incluso si no siempre sé cómo expresarlas. A veces, solo quiero que puedas ver que no estás solo en esto. Todos tienen sus luchas, y es bueno hablar de ellas. Siento que eso nos hace más fuertes”, dijo Heart, haciendo su mejor esfuerzo para alentar a Desmond.

Él la miró, sintiéndose algo más ligero, aunque aún cargado de esa tristeza profunda. “Heart ... No quiero que te sientas mal por lo que estoy pasando. Deberías estar disfrutando de ser un peluche lleno de energía. No puedes sentirte así porque yo no sé cómo manejar mis propios demonios”.

Heart movió su cabeza enérgicamente. “¡No, Desmond! No es un sacrificio estar aquí contigo. Esto es lo que quiero. Si no fuera así, probablemente solo sería una almohada o algo. Pero soy tu amiga, y eso incluye estar a tu lado en los momentos difíciles. Quiero que me cuentes sobre esos demonios. Tal vez juntos podamos encontrar una forma de manejarlos”.

Desmond cerró los ojos por un momento, sintiéndose abrumado por la compasión de Heart. Finalmente, decidió dar un paso en su proceso. “A veces solo quiero desaparecer. No porque no quiera estar aquí, sino porque me da miedo no cumplir con las expectativas. Y me siento mal por sentir eso, porque ... Bueno, se que hay gente ahí afuera que les importo, co-como tú, supongo”.

Heart sintió que su corazón se encogía. “No dudes de que eres importante para mí, Desmond. Aquí estoy, y siempre estaré aquí, incluso cuando sientas que no lo mereces. Está bien sentirse abrumado. Está bien no tener las respuestas. Y está bien querer salir de ese lugar donde te sientes atrapado”.

Desmond tomó una profunda respiración, sintiéndose un poco más abierto. “Gracias, Heart. A veces siento que soy un constante eterno ciclo de dudas y desesperación. Esto me hace sentir un poco más en paz. Quiero seguir hablando, realmente quiero. No quiero dejar de hablar de estas cosas ...”.

“¡Eso es lo que quiero escuchar!”, exclamó Heart, sintiéndose llena de energía renovada. “Hagamos una promesa, entonces. Hablaremos de nuestras luchas y miedos cada vez que lo necesitemos. No seremos perfectos, pero estaremos juntos en esto”.

"Si ...", Desmond sonrió débilmente. “Supongo que eso suena bien. Nunca pensé que, hablando con un peluche, empezaría a liberar todo esto. Quizás no sea tan malo, después de todo”.

“Asi se habla Desmond ¡Mírate! Ya empiezas a sonar menos como un zombie”, afirmó Heart, dándole ánimo. “Además, no podemos olvidar disfrutar del proceso. Hay mucho que podemos explorar juntos, incluso en los días difíciles”.

Desmond asentía lentamente, sintiéndose aliviado. “Si, eso suena bien”.

“¡Okey! Empezamos el dia mejor de lo que esperaba. Huh. No esperaba desempacar tantas cosas que llevaba dentro. Me siento extrañamente más ligera”, concluyó Heart, sonriendo con calidez.

"Tu y yo Heart", Desmond exclamó finalmente levantándose de la cama y luciendo listo para iniciar su día. El ya podía sentir como su estómago le exigía comida. Eso era una buena señal.

(>>>>Continuara<<<<)