Capitulo 7
Incomodo. ¿Cómo más se podría describir a esa situación? No era un tema de apatía ni de resentimiento hacia Sasuke, de hecho los chicos se sentían gustosos de gozar de esta oportunidad para entablar amistad con el moreno. Entonces, ¿de que se trataba? La atmósfera se había vuelto normal incluso alegre una vez que ambos compañeros se adentraron en la sala, procediendo con los saludos. Lo incomodo comenzó cuando Sasuke se adentró en el agua seguido por Naruto, quien parecía no tener sentido del espacio personal. No contento con posicionarse extremadamente cerca, tanto que era casi imposible evitar que sus piernas se rozaran bajo el agua, también siguiendo el hilo de la conversación, lo rodeó con su brazo sobre la altura de los hombros. Era inevitable que sus compañeros se sintieran cohibidos intentando hablarle a alguien que estaba prácticamente en los brazos de otro hombre. Cualquier intento de plática se sentía tan poco natural ante la atenta mirada de Naruto que finalmente se rindieron.
Shikamaru era el más incómodo de todos, pues siendo también el más observador, no pudo evitar notar el tinte rojo que comenzaba a invadir la tez blanca de Sasuke, ni pasar por alto sus reacciones cada vez que la pierna del rubio rozaba la suya. Se veía un claro esfuerzo de su parte por ocultar estos detalles sentándose completamente derecho y cruzándose de brazos con la mirada perdida en algún punto de la habitación. Sin embargo, uno a uno los chicos comenzaron a sentir una atmósfera distinta, casi íntima rodeando a Naruto y Sasuke, aislándolos por completo del resto de los presentes.
La tensión llegó a extremos insoportables ante el cándido pero completamente inoportuno comentario de Sai.
—¿Sasuke que es esa marca roja en la parte trasera de tu cuello? Primero pensé que se debía al calor, pero si fuera así estaría del mismo rojo que tu rostro, pero este es definitivamente distinto, ¿no es verdad?
Todos lo miraron expectantes. Era cierto. Sasuke evitó sobresaltarse, simplemente se limitó a mirarlo fijamente.
—No lo se—afirmó extremadamente serio.
—Oh, pero si es cierto mira-tebbayo ¡es enorme!—exclamó Naruto mirándolo más de cerca.
—Suéltame ahora, dobe.
—Pero si es verdad-tebbayo ¿Qué será lo que...?—y entonces se detuvo en seco entrando en cuenta que esas marcas las habían dejado sus propios labios.
Shikamaru, al conectar los puntos, supo de inmediato que había pasado. La incomodidad era tal que decidió que debía hacer algo. ¿Pero qué podía hacer que fuera tan rápido y efectivo como para atraer la atención de todos los presentes y hacerlos olvidar?
—Chouji—dijo entonces. Él se volteó a verlo.—Gordo
—¡¿Qué dijiste cretino?!—exclamó atrayendo todas las miradas.—¡Yo no soy gordo, solo estoy llenito!
Y entonces comenzó un caos en que Chouji rodaba por la habitación arrasando con todo a su paso en un intento de asesinar a Shikamaru. Todos se dedicaron a huir de la bola humana, dejando detrás cualquier recuerdo de la anterior conversación. Sasuke desapareció apenas comenzó el jaleo, pero nadie lo notó, pues cada uno se concentraba en salvar su propia vida.
A Shikamaru esta maniobra le costaría cara, pero era un bajo precio a pagar por la salud mental del grupo. Esto no podía salir a la luz tan abruptamente. Para sus amigos, aceptar fuera de bromas y suposiciones la relación entre Naruto y Sasuke, conllevaría un proceso largo. Él lo había tomado bien debido a su mente abierta, pero no se podía esperar lo mismo del resto. Por el momento él contribuiría a que ellos consolidaran su relación antes de enfrentarse a sus conocidos, era lo único que podía hacer para ayudarlos.
...
El sauna, que precioso lugar. Tranquilo y silencioso, y por sobre todo aislado, de modo que podría tranquilizarse y reflexionar en paz. Era un tanto estrecho, forrado con madera, rodeando un pequeño fuego que evaporaba el agua flotando por la habitación.
Sasuke cerró la puerta para luego soltar un largo suspiro. Muchas cosas estaban pasando en poco tiempo, dejándole escasas oportunidades para reflexionar en frío. Llevó sus manos a su cabeza sintiendo su cabello aún húmedo. Tomo un par de respiraciones profundas, preparándose para reflexionar. Justo cuando se sentía con suficiente calma la puerta se abrió súbitamente, revelando la presencia de Naruto, quien estaba jadeando y con gotas de agua aún recorriendo su cuerpo.
—Te encontré-tebbayo—afirmó cerrando la puerta tras él y sentándose a escasa distancia del moreno.
—¿Qué haces aquí?—cuestionó el moreno intentado recuperar el espacio personal. El rubio cambió su semblante. Se veía serio y determinado, sus ojos ya no reflejaban la confusión de esta mañana.
—Te estaba buscando teme...
—Quería estar solo un tiempo—confesó llevándose las manos a la cabeza.
—¿Por qué?-Tebbayo?
—Quería reflexionar dobe, pensar un poco en las cosas que han pasado estos últimos días.
—¿Acaso estabas pensando en mí teme?—cuestionó de manera juguetona, acercándose un poco más.
—En parte—afirmó el moreno.
—Eso me hace feliz-debbayo
—No te emociones dobe, dije que solo en parte...—hubo una pausa, un silencio en que ambos se preguntaban si valía la pena decir lo que querían que el otro supiera.
—Yo también he estado pensando en ti Sasuke... En nosotros...—ante esa afirmación Sasuke se sobresaltó, y lo miro expectante.
—Y...¿Llegaste a alguna conclusión?
—Creo que finalmente lo entendí Sasuke...no sólo lo que evitaste decirme esta mañana, sino todo lo que me has ocultado dios sabe desde cuando...—parecía tanteando el camino, como si se sintiera asustado por las consecuencias de sus palabras. Y lo estaba.
—¿Y que vendría siendo eso?—Sasuke intentó sonar serio, ocultando el miedo que lo paralizaba, el miedo a ser rechazado, el miedo a que lo volverían a abandonar. Hubo un pequeño silencio, en que ambos se dedicaron a observar al vapor saliendo de las brasas.
—Lo que quiero decir es que...eres lo más importante para mí. Y finalmente entendí que para ti es lo mismo, ¿no?
-Sí—afirmó seriamente para luego desviar la mirada.
—Entonces, ¿te quedarás conmigo por siempre, por favor?—Naruto buscó la mirada del moreno con sus ojos, pero él miraba hacia el otro extremo de la habitación. Gentilmente posó una mano en su mejilla, obligándolo a conectarse.
—Naruto, ¿qué pasa si yo ya no puedo ser tu amigo?—dijo bajando la mirada.
—Tu piel es muy blanca—afirmó Naruto acariciando la parte superior de su clavícula.—Apenas la he tocado y ya tiene marcas jejeje...
Sasuke se entregó a las castas caricias que le entregaba el rubio, confundido por la falta de respuesta a su pregunta. Entonces Naruto cesó su tacto.
—Si te soy sincero, aun no logró comprenderlo del todo-tebbayo...Lo único que se es que al verte aquí en este momento, solo se que te quiero más de lo que puedo explicar y que me arden las manos por el deseo de tocarte...¿puedo..?
—Hazlo
Entonces el rubio lo envolvió en un abrazo, hundiendo la cabeza en su cuello.
—Hueles bien, teme...
—Cállate, dobe
————————————
Holi espero q le haya gustado (^。^)
Gracias por leer
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro