CAPÍTULO 30
Han pasado dos semanas desde que Isa me dijo que podría estar embarazada, he intentado de todo para hablar con ella, he tocado su puerta incontable número de veces, sin importarme que Guille estuviese ahí, que hubiese hecho el ridículo afuera de su casa, pidiendo por favor que abra la puerta.
Pero no me rendiría, quiero decirle que la quiero y quiero hacer esto con ella, pero ella me ha estado evitando, siempre acompañado de alguien o simplemente ignorándome, pero eso ya no más, teníamos que hablar, de cierto modo íbamos hacer padres, y quería y veía mi vida con ella, solo me faltaba convencerla de que me merecía su perdón.
Andrea viene a casa acompañarme de vez en cuando, hemos pasado bastante tiempo juntos, pero ella se niega hablar conmigo sobre Isa, dice que eso le corresponde a ella, y que tampoco pondrá en riesgo su amistad con ningún de los dos.
Ayer bebimos un poco y entre copas comento que Guille se iría el fin de semana, esta es mi oportunidad para acercarme a Isa.
Me senté en mi sofá esperando ansioso que se largara, y por fin los vi salir, iban juntos cargando unas maletas, supongo que lo acompañara al terminal.
Una hora después me sorprende ver a Isa manejando el carro de Guille, se ve tan jodidamente sexy manejando.
Sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos de mi mente.
Lo único importante ahora es tu hijo Cesar, dice mi subconsciente
sí Isa está embarazada quiero estar ahí con ella, quiero ver crecer su vientre, quiero sentir las patadas que del bebé.
Se que fui un gilipollas, pero quiero retractarme de lo que dije.
He llegado a Soñar con dos niños....
SI DOS
Uno de ellos tenía ojos celestes como el cielo, igual que los de mi madre, tenía su nariz tan pequeñita que era adorable.
El otro niño tenía los ojos de color Gris, igual que yo he Isa, y tenía sus labios, no podía dejar de pensar en esos niños, quería tenerlos en mis brazos, quería estar con ella, criarlos mimarlos.
Aún no nacían y ya los amaba.
Había hablado con mi madre al respecto, ella estaba feliz, dijo que jamás pensó verme entusiasmado con la idea de ser padre.
Esta feliz de que por fin asiente cabeza.
Dice que me enamorado como un idiota, pero que le encanta, no puede esperar la hora de viajar hacia Chile para conocer a Isa, lo que ella ignora es que si viaja en este momento nos vería en la peor situación, o persiguiéndola, y ella arrancando de mí.
Vuelvo a mi realidad y me dirijo hacia su casa.
Antes de poder tocar la puerta, ella abre, al veré quiere cerrar la puerta, pero la mantengo abierta con mi brazo, y me escabullo en su casa.
—Tenemos que hablar.
—No tengo nada que hablar contigo
—Entiendo... reaccione mal... Pero quiero estar contigo en esto... —lo deseaba más que nada
—¡No necesito que estés conmigo! — dijo gritando
—Sabes que ese hijo es mío. —digo intentando tocar su vientre igual de plano, quizá sea de esas mujeres que no se les nota el embarazo.
—¡¿Ahora es tu hijo!?... porque pensé que yo solo quería atraparte con un hijo que no era tuyo. — al escuchar su acusación doy un gran suspiro.
—Tienes que entenderme, como se supone que yo iba a saber que en esa semana que pasaste en su departamento no tuvieron sexo.
—Independientemente yo tenga sexo o no con quien se me dé la gana. — dijo y sentí como sus palabras salían con ira de sus labios —estaba en tu casa Cesar... en serio me creías capaz de decirte que esperaba un hijo tuyo y que no fuera así
—De verdad... Lo siento. —dije bajando la mirada
—Si no hubiese estado segura, ¿tú crees que hubiese ido a pasar la humillación de que me dijeras todo lo que me dijiste? — yo solo escuchaba lo que me decía, sé que tenía razón me había comportado como un verdadero capullo.
—Deberías irte. —
—No me puedes dejar fuera de esto por favor... — dije a modo de súplica —No voy a permitir, que Guille se haga cargo de un hijo que es mío... que te quede claro. —
—No estoy embarazada Cesar... solo fue una falsa alarma... Así que solo te quiero pedir que mantengamos la distancia... El hecho que seamos vecinos no significa que tengamos que ser amigos, y te agradecería que dejases de buscarme.
¿No está embarazada? no sé porque razón, pero me siento ¿triste?
Quería esto, quería que un bebe nos uniera por siempre, siento que algo se derrumba en mí, no quiero que me vea así, decido bajar la mirada e ir a mi casa, necesito pesar...
Al llegar a mi casa, paso demasiado en el sofá, sin pensar nada, solo me quedo en silencio.
De un momento a otro las lágrimas caen por mis ojos, siento que el pecho me duele, y las lágrimas no paran, no sé porque estoy llorando exactamente, pero necesito desahogarme.
Paso un fin de semana horrible, no puedo dejar de pensar en esos niños con los que soñé, me dediqué a beber solo en mi casa, Andrea no puede venir a mi casa para acompañarme, porque dijo que tenían una reunión de chicas.
Trato de concentrarme solo en mi trabajo, reviso los proyectos nuevos, entre otras cosas, necesito despejarme y dejar de pensar en Isa con una barriga cargando un hijo mío.
No puedo creer que me ilusionara tanto con ser padre en un par de semanas, que viese mi vida con ella, aquí, con una niña y un niño llamándome papá, defendiéndola de los idiotas que quisieran lastimarla, y criando a un niño junto a Isa, celebrando sus cumpleaños, celebrando nuestra vida juntos, era un gilipollas, la quería y la había perdido.
Ya es lunes, me dirijo a la empresa y me quedo en la oficina, lleno de papeles, me sirvo un vaso de whisky mientras trabajo, sin darme cuenta la asistente de la oficina llega a despedirse, en ese momento me doy cuenta de que mi ya son las 10 de la noche, y yo ni siquiera he almorzado.
Decido pasar a comprar una pizza para poder comer algo, a pesar de que no siento hambre, pero sé que necesito comer.
Cuando llego a Casa, veo a Isa discutir con Guille en la entrada de su casa, no sé qué discuten, pero esto me recuerda la primera vez que interactuamos, ella discutiendo con Simón y yo defendiéndola.
Ella desconsolada llorando en mi hombro.
Recuerdo su olor la primera vez que la abracé para poder consolarla.
Y pensar que todo comenzó así.
Pero ahora todo es todo tan diferente, he arruinado todo, sé que ella me odia, me pidió que ojalá no interactuemos, y estoy dispuesto a cumplir mi palabra, ahora a diferencia de aquella vez, no me acercare, no podre abrazarla mientras llora, no podre besarla en un par de días, y muchos menos pensar en hacerla mía y recuperarla, porque esa historia ya fue, y la perdí, ahora teníamos un final distinto, yo seguía mi camino, y ella seguía el suyo.
***
Aquí el nuevo capítulo.
Pensaban que Cesar estaba ilusionado con el posible embarazo?
Les cuento que esta historia está llegando a su fin...
No se aún cuantos capítulos quedan pero quedan pocos.
Dejen sus votos y comenten
Los quiero ♡
Por cierto hoy es mi cumple...
Por eso actualice de madrugada ya que mañana no iba a poder.
Los quiero gracias por leer mi historia ♡♡♡♡☆☆☆☆
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