Mi corazón late a mil por hora, ella observa cada espacio de la cuidad, mira emocionada, y me alegra saber que yo soy el dueño de aquellos sentimientos.

He tomado una desicion mientras viajábamos.
No la llevare directo a casa, primero quiero hacer una parada importante.

Alex nos guía encantado, haciendo un mini tour por la cuidad, yo me limpio las manos del sudor que generan mi nerviosismo.

Después de una hora de tour, llegamos al cementerio y ella quiere hablar, pero le digo que espere a que lleguemos al lugar donde necesito que estemos.

Me plantó frente a esa pequeña lápida y mi pecho vuelve a doler como ese primer día en que me enteré que estaba enferma.

Violeta Grayson
1992-2000

—esta es la tumba de mi hermana— digo sin mirarla, Isa no dice nada por unos minutos.

— yo creí...

— que estaba viva, lose... — acarició la foto que esta en la lápida. — la perdímos este año.

— yo lo siento.

— la primera vez que te deje sola en Chile, me vine por ella, era muy pequeña cuando le detectaron cáncer, yo no quería irme a Chile, pero mi madre insistió. Un día llamo que me necesitaba, violeta estaba muy mal, y al poco tiempo murió— limpio unas cuantas lágrimas y ella solo me observa — después de eso necesitaba verte, tomé el avión privado y llegué a tu casa, mojado con lágrimas en los ojos, decidido a quedarme contigo, pero las cosas no salieron como esperaba.
Tu me perdonaste, pero mis celos e inseguridades me llevaron a cometer el error de enredarme con Anna, yo me había enterado que los papeles de la empresa estaban listos, que podía volver con mi madre y apoyarla en este proceso.
Pero yo no quería volver, quería quedarme junto a ti, y no sabía cómo sobrellevar lo importante que te volvías en mi vida.
Luego tu me descubriste con Ana, y lo mejor que supe hacer fue huir, venir a pasar tiempo con mi madre, los dos nos levantamos de esto, le conté de ti, y ella me impulso a ir tras ese amor que había cambiado mi vida.
Cuando volví estabas con Guille, no sabía cómo recuperarte.
Aún no se como lo logré, lo que quiero que sepas, es que te amo, no quiero perderte, si en este momento me abro ante ti, es porque no quiero ningún secreto entre nosotros.

Ella sigue sin hablar y me abraza, me hundo en su cuello y me desahogo como nunca lo logre, llore por la muerte tan ingusta de mi hermana pequeña y ella se encargo de estar ahí para mi.

Después de varios minutos abrazados me apartó de su cuerpo.

Caminamos en silencio hacia donde está Alex esperándonos, y la tomó del brazo.

— ¿pasa algo?

— No.

— pequeña, que pasa.

— simplemente no lo entiendo, porque no me lo dijiste.

— No lo sé, simplemente es algo que nadie sabe, no es tan fácil de hablar.

Nos subimos al coche y no habla en todo el camino, a unas pocas cuadras de mi casa, de manera cariñosa volteo su rostro para que me mire.

—Mi amor, sonríe por favor, con esa linda sonrisa que amo, y no me preguntes nada, aun duele demasiado.

Ella sonríe y me abraza. Su calor me encanta adoro todo de ella, acarició su barriga y Dash patea fuertemente.

Llegamos a casa, y la veo sorprendida, esta era la casa que tenía mi padre, mi madre se mudo aquí, ya que yo quería venderla.

No es una casa tan grande, las otras propiedades que ahora están a mi nombre son mucho más grandes, pero en esta casa mi madre dice que tiene lindos recuerdos de ella cuando yo era pequeño, por mi parte, no recuerdo nada de mi infancia en esta casa, ni mucho menos con mi padre.

Mi madre sale efusiva a abrazar a Isa, ella le devuelve el abrazo y yo sigo caminando, no quiero que vea mis ojos llenos de lágrimas que me quedan por violeta, se que no es un tema fácil de hablar, por lo que debido seguir avanzando.

Una vez recompuesto me sumo al tour que le da mi madre por la casa, le muestra el lado exterior, la piscina y todo los rincones.

Sonrio al verla tan emocionada junto a Isa, mi madre tenía todo preparado para recibirnos, nos sentamos a la mesa y conversamos.

Después de eso, le muestro la habitación que será nuestra por el tiempo que pasemos aquí.

Esta habitación es moderna, las paredes son color blanco, y mi madre hizo traer toda mi ropa aquí.

Tenemos una linda vista hacia la zona residencial de la cuidad.

Esta casa está un poco alejada de la cuidad, pero desde aquí la vista se ve perfecta.

Ella observa el lugar y en sus ojos se ve la emoción.
Yo me acerco y la abrazo.

— este lugar es hermoso.. — dice frente al gran ventanal.

— aunque no lo creas no tengo recuerdos en este lugar, pero me encanta la idea que mis primeros momentos aquí sean a tu lado.

Ella se voltea y me besa de forma efusiva... Amo a esta mujer como jamas imagine amar a nadie en mi vida.

Nos acostamos y ella se acomoda en mi pecho, muero por tocarla, pero no quiero precionarla.

Además quizás no sea de su agrado hacer el amor conmigo cuando mi madre está en la misma casa, aunque las habitaciones están lo suficientemente lejos para que no escuche sus gemidos con mi nombre.

Aunque pensándo de modo coherente y respetando la presencia de mi madre, no me importaría pasar mi vida con ella así, abrazados, entregándonos ese calor y ese amor que nos tenemos.

Ella acaricia mi abdomen y pregunta

—¿en que piensas?

— en qué eres lo más bonito que me ha pasado en la vida.

— que dices.. — se sonroja.

— te quiero vivir  hasta el último día de mi vida.

Ella se arruca con más fuerza en mis brazos y yo la sostengo.
Imaginando que esto puede ser para siempre, no sólo con este primer hijo que viene en camino, si no con todos los niños que pretendo tener junto a ella.

Estaba tumbada en su pecho aun asimilando estar en otro país que no es el mio, con el hombre que en este momento amo.

No lograba dejar de pensar en todo lo que había pasado, perdió a su hermana de 8 años por una enfermedad que aquejaba su pequeño cuerpo.

Ahora entendía porque ese tema fue tan sensible para la madre ese día que  estuvimos en casa con mi madre.

Yo no tenía hermanos, pero me imagino el dolor que logró sentir, yo perdí a una amiga, que tenía su visa por dentalte, y me aun me duele pensar en ella.

No logro entender porque no confío en mi.
Aquella noche que llegó llorando a mi casa, con su ropa mojada, el estaba pasando un mal momento, y me hubiese gustado saberlo, para poder haber hecho más por el.

Sigo acariciando su pecho y su respiración es calmada, logró ver el esplendor de la cuidad por el gran ventanal que tiene el dormitorio, cierro mis ojos y me duermo.

Despierto con Cesar aprisionando mi cuerpo, nos levantamos después de esa típica pelea de 5 minutos más.

Tomamos desayuno junto a su madre y salimos a recorrer la cuidad de Madrid.

Es un cuidad hermosa, paramos por tres horas junto a Alex que es el chófer de Cesar.

Nos dirijimos hacia su empresa y quedó sorprendida al ver el lugar en donde estamos.

En un edificio gigante y moderno, está cubierto por inmensos ventanales de color azul.

El toma mi mano y yo dejo de admirar el lugar.

Entramos y todos saludan de forma respetuosa a Cesar.
Muchos también se sorprenden de verlo aquí, y más acompañado de una mujer embarazada.

Supongo que seré el cotillo del mes en esta empresa.

Cesar me presenta a algunos socios y muchos le dicen lo guapa que soy, lo cual supongo que es de cortesía.

Aveces dudo lo bien que puedo verme con esta barriga de casi 5 meses de embarazo.

Cesar avisa que como ya es 24 de diciembre solo se trabajará medio día, todos los trabajadores celebran y el me abraza.

La secretaria del edificio me come ta que Cesar jamás ha dado salida temprana en estas fechas, que al parecer ahora que quiere pasar estas fechas conmigo, entiende que sus trabajadores también merecen pasar este día en familia.

Sonrió al pensar que conmigo jamás fue ese hombre duro que describen.

Así como muchos trabajadores se acercaron a mi de forma amable, también habían mujeres que me miraban con odio.

Y comentaban haber estado con Cesar, algo que no me importa, dado que en ese momento no estaba conmigo.

También escuché comentarios de su ex novia Anna, que había venido a la empresa a buscarlo, Cesar ignoro el comentario de la mujer de grandes pechos que le informaba de forma coqueta.

La madre de Cesar comienza a llamarnos para preguntar a qué hora llegaremos a casa.

Me despido de aquellos que me recibieron de forma amable y nos vamos a casa.

Me sorprende llegar y ver que a diferencia de ayer, hoy la casa está totalmente adornada de manera navideña.

Hay luces por donde mires, y adornos en el antejardin.

— llegaste a traer esa alegría que quedó vacía cuando violeta partió. — me habla Cesar y acaricia mi abdomen.

Sin poderlo evitar mis ojos se llenan de lágrimas, recordando lo que conversamos ayer, de cuanto le dolía su pérdida y del vacío que había dejado su muerte en esta familia.

— no llores princesa— limpia mis lágrimas.

— Yo... Yo... Lo siento, las hormonas me hacen llorar por cualquier cosa.

— Te amo pequeña —

— También te amo Cesar.—

Nos abrazamos y entramos a casa.

Su madre nos sorprende con mucha gente en la casa, hay un Set de fotografía completo.

Cesar frunce el ceño al ver todo el alboroto.

— Mamá. ¿Que es esto?

— Vinieron de la revista, se enteraron que volviste a la cuidad, y con mujer.

— no quiero sesión de fotos mamá.

— solo quiero hacer un lindo álbum de fotos hijo.

— podemos hacer el álbum, pero sin exponer a Isa a todo el mundo mediático.

— tienes razón hijo, lo siento.

Vi su cara de desilusión y actúe de forma impulsiva.

— no me importaría hacer una cuantas fotos para un álbum.

Su cara se ilumina y Cesar desvía su mirada hacia mí.

— Isa... Esto es un mundo muy mediático, si accedemos a estas fotos, después estarán pidiendo más y más.

— pero sólo nos quedaremos un tiempo aquí, en Chile volvemos a ser una familia normal... Tu madre quiere un álbum y yo también.

— ok. Hagamos el album

Me acerco a las personas que están en la sala y me entregan una ropa para cambiarme y me maquillan.

Sin querer logro escuchar mientras Cesar y su madre hablan.

— Ana estuvo en casa Cesar, se entero que volviste a Madrid acompañado de Isa.

—¿cómo se entero?

— hay fotos en algunas revistas.

— joder , lo que menos quiero es  exponer a Isa a todo este maldito mundo mediático.

— por eso preferí hacer esto de las fotos, así es una forma sensilla y no tan invasiva como los paparazi, ellos prometieron no acosarlos si accediamos al álbum.

— gracias mamá... ¿Anna dijo que quería? — ella se pone nerviosa y responde rápidamente.

— No lo sé hijo, no la deje hablar, no permitiré que arruine lo que estas formando con isa.

Sonrió al escuchar eso, y por fin me juntan con Cesar.

Me sorprende saber que estoy en una bata negra y solo llevo mis bragas negras.

— te ves hermosa, tu solo relajate y olvidate que todas estas personas están aquí.

Nos acomodamos en el sillón grande, elblleva un pantalón de buzo y una polera negra.

Hacemos una pos as fotos y después de unas horas todos se marchan.

Tomamos algunas fotos a modo de familia, junto al árbol de navidad y algunas junto a su madre.

Nos preparamos para realizar la cena de navidad y todo sale hermoso.

Hacemos una video llamada con mi madre y ella llora emocionada.

Yo por mi parte también lloro, Cesar me consuela y por fin me siento mejor...

Llegamos a la cama y me siento mimosa, le acarició y el me observa de forma seductora.

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Fotos