Cesar:

Los policías se acercan y ni siquiera preguntan por mi, supongo que era conocido por ser el dueño de este casino, por ser tan joven y si no recuerdo mal, salí en muchos diarios de la cuidad, cuando recién llegué.

Uno de los oficiales apuntó hacia mi, y me coloco las Esposas.

Vi la mirada triste de Isa y se lanzó a abrazarme con sus ojos resplandecientes de lágrimas.

— todo va estar bien, Te amo —

Dije antes de que el policía me alejara de sus brazos, salimos del casino y era obvio que iba a estar lleno de  periodistas capturando el momento, me metieron en un carro policial y me llevaron, le había dejado las llaves de mi coche a Isa, para que ella fuese a poner una denuncia contra el imbecil.

Llegamos a la comisaría y ella aún no llegaba.

El idiota de Simón estaba ahí sentado, con la cara hecha un desastre pero con una maldita sonrisa en la cara, se paro y pasó por mi lado y aproveche de decirle unas cosas.

— podrás hacer que me encierren, pero en tu puta vida hubieses logrado hacerla sentir como yo la hago sentir. — le dije con sorna, su cara cambió, y borro esa sonrisa. Y a pesar de estar esposado e ir  directo hacia un calabozo, me sentí victorioso.

Me hicieron firmar unos papeles y me entregaron la multa que debía pagar, quería pagarla y largarme, pero Isa tenia razón.

Me mandaron a un calabozo junto con otros tipos, sabían que yo podía pagar sin problemas la suma que pusieran, por lo que me dijeron que tenía que pasar al menos 12 horas aquí.

Me quitaron mis pertenencias, mi billetera, mi teléfono y una vez encerrado, no llevaba aquí ni un minuto y ya extrañaba a mis hijos y me preocupaba que ese imbecil intentase acercarse a Isa mientras yo estaba encerrado.

— ¿no es el dueño del casino? — Dice uno de los cuatro hombres del calabozo, mientras todos se acercan y me rodean.

— Si... Yo diría que si es — dice otro sacando una navaja y dejándola visible.

Apreté mis puños dispuesto a defenderme.

— ¿Sabes porque estamos aquí?, nos capturaron tus cámaras, intentando tomar prestado algo de dinero... — se acercó el primero a darme un golpe y le di antes de que me tocase.

— ¡Venga! Alguien más quiere pelear, porque si no saben, estoy aquí por moler a golpes a un gilipollas. No creerán que les tengo miedo a un par de ladrones — sonreí demostrando superioridad. Sabía que en este lugar no podría dormir, tenía mis puños apretados y ganas de moler a alguien.

Otro intento golpearme, y está vez se lanzaron todos juntos, uno tomó mis brazos, impidiendo mi defensa, di una patada a uno e hice que soltara la navaja.

— Sean hombres y peleen a mano limpia ...— dije antes de sentir la navaja atravesar mi piel.

El hombre detrás de mi se rio con sorna y soltó su agarre, me dolia, pero con las fuerzas que tenía golpe al imbecil que me a sujetaba y a los dos que quedaban, incluyendo al que me había apuñalado.

Caí rendido por la fuerza que había gastado, vi el piso lleno de sangre y todos desmayados a mi lado, cuando caí sentí la navaja moverse y romper más mi piel.

No había pensado las cosas bien, intentó acercarme a la parte donde está la celda y hacer ruido para que vengan por mi.

Pero no puedo moverme, no puedo llegar a ella, antes de poder tocarla mis ojos se cierran.

***

Despete en la clínica Isa y mis dos pequeños hijos estaban a mi lado, Isa estaba durmiendo apoyada en uno de los sillones de la habitación, Dash y Lu jugaban y María y Guille les observaban.

Mi pequeño hijo, contacto sus ojitos del mismo color que los míos y sonrió y grito fuertemente.

— PA.... — alzó sus brazos para que le tomase, intente moverme y mi cuerpo me lo reprochó.

Isa abrió los ojos y me sonrió.

— iré avisar al médico que despertó — aviso Guille y salió junto a María.

Volví mi mirada hacia Isa y sus ojos estaban llenos de lágrimas.

— estoy bien princesa, por favor no llores —

— no sabes lo mal que lo pase — me abraza y yo me aguanto el dolor para que ella se sintiera reconfortada en mis brazos.

— los hombres del calabozo ya los trasladaron a la cárcel de la cuidad, y no debes volver a ese horrible lugar.

— dime que denunciaste a Simón  — pregunte porque quería que ese imbecil pagara por cada mal rato en ese calabozo— ella asiente y le abrazo.

El médico viene y me revisa la herida.

— tuviste suerte, la puñalada dio muy cerca de un pulmón, pero resultó sin ningún rasguño. — sonrió y le agradezco la curación. Me aviso que hoy podía volver a casa, y le pedí de favor que aun no dejara pasar a Isa.

Tome mi teléfono y llame a mi abogado.

Me confirmó lo de Isa, le pregunté por los cargos que podíamos levantar si el había violado la privacidad de Isa grabando una intimidad sexual.

Me informó de todo, al cortar esa llamada, la siguiente fue al investigador que contrate cuando me marche a España y el quedo vigilando a isa.

— hola señor Grayson, supe que se caso con la señorita, felicidades.

— Hola, si felizmente casado, te tengo un trabajo, sera tan bien pagado como el anterior—

— ¿De quién se trata?

— el ex novio de Isa, se llama Simón, no me se el apellido, recuerdo que Isa me contó que estudia en la universidad San Sebastián derecho, no recuerdo que año. Necesito todo de él , hasta quien entra a su departamento. Se metió con la persona equivocada y se lo voy a demostrar.

— perfecto señor, ¿para cuando necesita la información? —

— para lo antes posible, que llegue a mi correo por favor —

— Claro que si, hoy mismo recibirá la información —

— Gracias —

Corto la llamada y salgo, firmó los papeles necesarios y nos marchamos.

Llegando a casa y me toca llamar a mi madre, por supuesto Isa le llamo asustada.

Le conté que todo estaba bajo control, la herida debía seguir con curaciones, pero nada más relevante que eso.

Cenamos en casa con los pequeños y los pusimos a dormir.

Estábamos en la cama e Isa me tocaba con cuidado alrededor de la herida a modo de caricia.

— Aún no puedo creer todo lo ocurrido, quien diría que después de una hermosa luna de miel, llegaríamos a la cuidad y pasaría todo esto.—

— no dejaremos que esto arruine nada. Eres mi mejor decisión princesa, pase lo que pase. —

— nada arruinaría lo que tengo contigo mi amor— suspira — Aun no puedo creer lo del video, el jamás pidió mi concentimiento para ello —

— no se que te sorprende tanto, se cogia a tu mejor amiga Isa, el jamás fue el hombre que te hizo creer—

— tienes razón, sabes... Eso me gustaba de ti— le observó esperando a que continúe — siempre fuiste sincero, excepto en aquel incidente donde nació la pequeña Lu.

Sonrio  porque si era sincero, pero aveces en extremo, tanto así que me volvía un gilipollas.

Le abrace y ella se durmió, en ese momento recién revisé el correo que me había llegado hace unas horas con la información que quería.

Sonreí al ver que con esto podía hacer mucho, apague el celular y abrace a mi esposa y me dormí cómodamente.

***

Eran las 8 am y estaba en mi oficina, estaba esperado que él atravesará mi puerta.

Llego junto a mi abogado y me sonrió egocéntrico.

—¿como estuvo la estadía en el  calabozo? Me dijeron que encontraste  enemigos, una pena — dice y yo sonrió porque se que lo tengo en mis manos.

— si, me hice enemigos, quizás te toque acompañarlos en prisión — su rostro cambia— lo diré una vez, te iras de la cuidad, porque te juro por mis hijos que si te quedas me encargaré no solo de que no consigas mas  trabajo, si no que también lograré que te vayas directo a la cárcel.

— si lo dices por la demanda de Isa, dudo que le crean, es su palabra contra la de un prestigioso abogado, todo el mundo lo tomará como una venganza por mi infidelidad.

— ¿prestigioso? — me rio en su cara — por favor eres recién titulado, que te hace pensar que tienes más prestigio del que yo pueda tener sobre una corte— le observó con odio — además es mucho más que su palabra, me mostraste aquel video en las instalaciones del casino, una cámara capta justo el momento en el que tu celular se ilumina con las imágenes en su pantalla, además logre conseguir una orden de registro para tu departamento, dudo que Isa sea la única mujer que grabaste sin su concentimiento — su cara palidece — pero si haces caso, aquel hombre que ya llegó a tu departamento dejara de buscar las pruebas que necesito— me mira con odio y yo sonrió —te marcharás de la cuidad, y en tu puta vida te volveras a acercar a mi familia, porque te juro que no me importaría verte en una cárcel. —  hable firme, me levante y antes de salír de mi oficina le doy una palmadita en la espalda.

Mientras hablo con mi secretaria, el se marcha en silencio, le aviso a mi abogado que guarde las pruebas respaldadas que tenemos, y que el hombre salga de su departamento, dejando todo intacto.

— las pruebas quedarán en tu correo. —yo asiento y le sonrió de forma victoriosa.

Me voy hacia mi oficina y pasa la enfermera del edificio para hacerme curaciones en la herida.

Terminado la curación, el investigador me avisa que Simón salió en destino hacia el aeropuerto.

Sonrio en mi soledad de la oficina a modo de victoria.

Le aviso a mi secretaria que cancele mis citas, pasó por una florería y luego me voy a casa.

Cuando llego Isa no esta en comedor, subo a la pieza de los pequeños y me quedo observándola.

Ella tararea una canción que no es de cuna, pero que me sorprende la intensidad del mensaje, su tierna voz comienza a cantar.

🎶 Hay un cuento - Cris morena 🎶

Hay un cuento
Que me trajo un día el viento
Que me enseña a reír
Que da ganas de vivir

Le acaria la nariz con su dedos en forma tierna mientras sigue cantando.

Haz que tu cuento valga la pena
Haz de tus sueños la ilusion
Y que se asome la primavera
En las calles de tu corazón
Haz que tu ángel nunca se vaya
Que cuide el niño que hay en vos
Y cuando crezcas nunca lo pierdas
Porque perderás tu corazón.

Los niños comienzan a cerrar loa ojos y ella sigue cantando de forma dulce.

Hay un cuento
Que contaban las abuelas
Que te puedo contar
Para que puedas dormir
Donde la maldad se paga
Y siempre ganan los buenos y es así
Los que sueñan son felices hasta el fin
Los que sueñan son felices hasta el fin

Haz que tu cuento valga la pena
Haz de tus sueños la ilusión
Y que se asome la primavera
En las calles de tu corazón

Haz que tu ángel nunca se vaya
Que cuide el niño que hay en vos
Y cuando crezcas nunca lo pierdas
Porque perderás tu corazón
Y cuando crezcas nunca lo pierdas
Porque perderás tu corazón.

Repite el estribillo dos veces y los niños ya duermen cómodamente.

Ella se voltea y me ve, le entrego las flores y le beso, definitivamente esta es la mejor mujer que pude escoger para ser la madre de mis hijos.

-💜-

Nota de la autora:

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