|°•°•°•°•💙•°•°•°•°|

CALEB.

Mes de Noviembre.

Un mes más había llegado.

Todo iba bien en mi vida, desde esa vez que encontré a Mateo en mi casa no había vuelto a saber nada de él, las notas de amenazas habían desaparecido, al fin podía respirar tranquilamente, y ya que lo menciono, tampoco lo había visto en la universidad, ¿será que se habrá ido?, bueno no importa, al menos así estoy mejor.

— ¡Me voy al instituto bíblico! — soltó de golpe Elias, mientras se sentaba frente a mi en la cafetería de la escuela.

— ¿Qué? ¿Por qué? — pregunté

— Este no es mi lugar — dijo — yo quiero servir a Dios con toda mi vida...

— ¿y tus padres, que opinan?

— están de acuerdo...— sonrió

— ¿y tu, estas seguro de eso?

— más que seguro — afirmó — cuando estaba por terminar la preparatoria, no sabía que estudiar...así que me decidí por: Astronomía, pero siempre había una duda en mi...y en estos meses no he podido estar tranquilo, si me gustan las clases y todo lo que he aprendido pero siento que no es lo mío, siento que hay algo más.
Y ahora que he decidido estudiar en el instituto, la decisión me genera paz y tranquilidad...

— lo entiendo — le dije — voy a extrañarte.

— y yo a ti, amigo

— ¿cuándo te vas?

— Hoy es mi último día aquí — dijo mirando todo alrededor — mañana vendré por los papeles y pasado mañana viajaré al instituto.

— ¿esta muy lejos? ¿ya te inscribiste?

— no mucho, unas cuantas horas...— explicó — las clases comenzaron en Septiembre pero me aceptaron, ya envié los requisitos...así que si...ya estoy inscrito.

Aparte de Elias, no tenía otros amigos, si le hablaba a los chicos de mi clase pero solo como compañeros, no existía la confianza como con Elias.

Para mi sería un poco difícil asimilar la decisión que había tomado, pero estaba  bien, se que Dios lo está llamado para algo grande...

Solté un suspiro al imaginarme almorzando solo o caminado por los pasillos sin nadie.
Elias se había vuelto mi mejor amigo desde el primer día que llegué a la universidad.

Al día siguiente, ya no vi a Elias, solo le envié un mensaje en la mañana, agradeciéndole por su amistad y deseándole un buen viaje.

Fui a la universidad, sonreí en cuanto al entrar vi a Sol, se veía tan hermosa como siempre, su sonrisa irradiaba alegría.

Al verla solo pude agradecer a Dios por ella, por haberla puesto en mi vida.

Mi Sol...la estrella más brillante de todo el universo.

— Hola mi sol — saludé con una enorme sonrisa en mi rostro

— Hola Caleb

— eres la mujer más bella de todo el mundo — le dije, sus mejillas se tiñeron de rojo, se veía adorable

— y tu eres el más hermoso de todos...

Sonreí, la amaba, la amaba con todo mi corazón.

La acompañe a su salón de clases y después yo fui al mío.

— muy bien chicos — enunció la profesora — les dejaré un proyecto que deberán entregar la próxima clase.

Muchos de mis compañeros comenzaron a abuchear y quejarse, la próxima clase era dentro de 3 días.

— ¡Silencio todos! — Exclamó y prosiguió — Deberan hacer un ensayo de por qué decidieron estudiar la carrera de Astronomia...

Bueno, eso era fácil ¿no?

Al salir de la universidad me diriji hacia la biblioteca, quería relajarme un poco, después iría a casa a hacer el ensayo.

Me senté en un lugar apartado y saqué de mi mochila la libreta que ocupaba para escribir, ¿escribir qué? Canciones, aveces cuando me inspiraba tomaba el lápiz y me ponía a plasmar todo en el papel.

Hasta ese momento llevaba por lo menos 5 o 6 canciones, y estaba escribiendo una dedicada a Sol.

Eres especial para mi
Cautivaste mi corazón con tu brillo
Con tu mirada, con tu sonrisa
solo tu me haces suspirar.

Apenas llevaba una estrofa, cuando la veía era cuando me inspiraba...

— ¿Caleb?

— ¿si? — levanté mi vista cuando escuché que alguien pronunció mi nombre.

Una muchacha de pelo rojizo rizado, ojos verdes esmeralda, vestida con un jean negro y una blusa Blanca, sobre esta una chaqueta de mezclilla, me miraba fijamente.

— ¿Hola? — dije, recuerdo haberla visto antes

— ¿eres Caleb? ¿Cierto?

— así es — respondí — ¿y tu eres?

— Suheyla

— ¿Su? ¿Qué? — que nombre tan raro

— Suheyla — volvió a decir — puedes decirme Su

— ¿okey? — pronuncié — no quiero sonar descortés, pero...¿se te ofrece algo?

— mmsi de hecho si — contestó — verás...un grupo de amigos y yo iremos al planetario de la ciudad, y nos preguntábamos si ¿te gustaría venir?

— ¿cuándo? — realmente sonaba genial la idea y así podría hacer nuevos amigos.

— mañana al salir de la universidad, después iremos a comer Pizza ¿qué dices? — sonrió

— esta bien — sonreí — iré con ustedes.

— Genial, hasta mañana entonces — me guiñó el ojo mientras se retiraba de aquel lugar.

Me pregunto ¿será buena idea ir con ellos? ¿Qué tendría de malo?.

[.....]

Día siguiente.

1:00 p.m

— Hola mi sol — le di un beso en la mejilla

— Hola mi amor — me dijo sonriente, era la primera vez que me decía de esa forma y estaba tan feliz y emocionado.

— ¿Hace mucho saliste? — pregunté, en la mañana cuando nos vimos habíamos acordado que a la salida nos reuniriamos en la Biblioteca.

— Hace una hora — respondió

— lamento hacerte esperar tanto...

— por ti esperaría mil años — sonrió

— yo también — sonreí

— ¿a dónde dijiste que vas? — ayer por la tarde medio le había comentado que saldría con unos compañeros.

— al planetario, ¿quieres venir?

— no se si a tus amigos les agrade esa idea — respondió

— seguro que si, por Cierto ahí viene una de las chicas del grupo — dije en cuanto vi a una chica aproximarse

— Hola Caleb — Suheyla se acerco a mi y me dio un beso en la mejilla.

Sol la miró desconcertada.

— Hola, Su — dije algo incómodo por lo que ella había hecho — Ah, mira te presento a Sol — señalé

— Hola Sol — le dijo con una sonrisa falsa — Soy Suheyla.

— Hola — respondió amablemente Sol

— ¿es tu hermana? — preguntó la pelirroja, yo negué con la cabeza — ¿prima? ¿Amiga?

— Es mi Novia — respondí sintiéndome afortunado de tener el privilegio de llamarla así.

Suheyla abrió la boca sorprendida.

— ah — dijo después de varios segundos — bueno...¿Iras Caleb?

— si — contesté — ¿no hay problema si ella va? — señalé a Sol

— mmm — Su pareció dudar de la respuesta, miró a Sol y luego exclamó — No, claro que puede venir también...los espero afuera...

La chica pelirroja salió, Sol parecía algo triste o molesta ¿por qué?

— ¿Vamos?

— ve tu — respondió — ve, diviértete con tus amigos...tengo que ir a casa

— ¿estás segura?

— aja — tomó su mochila — Te veo después — sin decir nada más salió dejándome solo.

Tiempo después ya nos encontrábamos en el planetario de la ciudad, ingresamos al lugar en grupo y nos llevaron a realizar el recorrido para ver los planetas, Estrellas, Galaxias.

Todo era tan lindo. Tan impresionante.

Suheyla se acercó a mi y me pidió que nos tomáramos una foto.

— ¿te gustan las estrellas? — me preguntó

— me encantan — respondí

— ¿puedo ser tu estrella? — preguntó de pronto, yo la miré confundido

— ¿cómo?

— mi nombre significa: Estrella Brillante — sonrió — pero jamás he sido la estrella de nadie, ¿puedo ser la tuya?

Oh no, no podía.

— Lo siento, Su — dije — yo...tengo novia...

— eso lo se — respondió tranquila — pero ella no tiene por que enterarse — se acercó a mi y trató de besarme, me aparté bruscamente de ella.

— No Suheyla — Dije — esto no está bien...me voy...

— Caleb...— me llamó — espera...

Salí rápidamente de aquel lugar y me diriji a casa de Sol.