Después de cruzar las grietas con la ayuda de las lianas, el viejo y yo nos pusimos en marcha para buscar al niño

Fuimos a la orilla donde estaba parado el niño, encontrándonos con sus marcas de dedos en el suelo, como si el estuviera siendo arrastrado por algo

Las marcas nos conducían al Interior del bosque, corrimos a toda velocidad al interior del bosque gritando su nombre del niño esperando una respuesta de él

Las marcas desaparecieron en un cierto punto, donde solo se encontraban aves alrededor del lugar

—¡Niño ¿Estas ahí? ! ¡Responde!—grite con mucha fuerza sin encontrar respuestas

—¡Niño! ¡Niño! ¡Responde!—gritó el viejo mientras caminaba alrededor del lugar

Gritamos varios minutos sin encontrar ninguna respuesta por ningún lado

—¡Guardian! ¡Guardian!—grito agitado—unos individuos están buscando al niño desesperando

El guardián se quedo en silencio sin producir ningún tipo de palabra o sonido

—¿Cuántos son?—respondió un ave

—son dos personas—aleteo desesperadamente

—¿Qué quiere que hagamos guardián?—pregunto una de las aves a su alrededor

Las aves se empezaron ha alborotarse, proponiendo matarlo o herirlo  de alguna forma mientras alteaban dando fuertes azotes en el aire

El guardián se siguió quedando en silencio sin responder la pregunta mencionada

Max y el señor se acercaban mas a donde estaban ellos y al guardián parecía no importarle en lo absoluto

—Guardian ya están cerca —aleteo alrededor de guardián—debemos hacer algo rápido

El guardián alzo unas de sus manos y con delicadeza la bajo haciendo que las ramas y hojas de los arboles los oculten

—preocuparse por eso no tiene sentido—suspiro—vayan, obsérvenlos desde los cielos y sean mis ojos en las alturas

Las aves salieron con mucha rapidez volando en dirección al cielo mientras veían abajo a Max y al señor gritar el nombre del niño

Solo dos aves se quedaron al lado del guardián , el búho y una harpía la cual siempre estaba al lado del guardián

—las aves son tan ruidosas—dijo la harpía prepotentemente mientras se acercaba al guardián

—¿y tú no eres un ave? —exclamó el guardián

—no me compares con ellos—puso una mirada fulminante—soy mas de los que ellos serán algún día

El guardián solo se limito a oír lo que la harpía decía y sin agregar palabras se quedo esperando al niño

Me apresure a tocar algunas prendas del niño que yacían en el suelo, es como si él se las hubiera estado quitando para señalarnos en donde estaba

—¡Max, por aquí encontré mas prendas!

Me dirigí al señor para ver a donde nos llevaba el camino de prendas, a lo lejos se sentía una fuerte brisa que nos cubría de frio intenso, las ramas alrededor empezaron a moverse juntos a sus hojas haciendo un tipo de pared frente a nosotros

Al momento de pasar esta ventisca el camino era irreconocible, gritamos nuevamente el nombre del niño sin encontrar respuesta alguna.

Las aves seguían revoloteando en el cielo haciendo movimientos circulares como si nos estuvieran vigilando.

Sin tener ninguna pista a la vista y estando perdidos, parecía que las esperanzas se hubieran disipado, suspire unos segundos y agarre un de las prendas del camino sin que el viejo se diera cuenta olí algunos pequeños rastros de sangre que había en la prenda y me guíe por el olor para encontrar al niño

—¡Viejo! Vamos por ahí—refute mientras corría entre los árboles dejando caer de mis manos la tela

Los rastros de sangre en el aire se desvanecían poco a poco, lo que me hace pensar que quizás él se allá curado la herida que tenía

—¿estas seguro Max?—corrió intentando seguirme el paso

—Muy seguro

Dejamos la pared hecha de ramas, corrimos atravesando arbustos y ramas en medio del todo el bosque, parecía un camino que nunca iba a terminar, apresure mas mi paso sin prestar atención a lo que había a mi alrededor

El olor a sangre del niño ya no era tan profundo como era antes y en un punto deje de olerla, es como si se hubiera esfumado por completa

Seguí corriendo intentando volver a encontrar ese olor pero ya era imposible, me detuve y mire alrededor de bosque sin tener señales de el niño y ni del señor, ahora era yo el que estaba perdido, intente volver por donde venía   cuando a lo lejos visualizo un zorro que parecía muy alterado al lado de un lago

Me acerque intentando ver de que se trataba y cuando estuve al lado del zorro, este se me abalanzó precipitadamente como si quisiera decirme algo, pero yo no entendía lo que quería decirme, lo alejé de mi lado y me puse a mirar al lago

Mientras mas lo miraba no encontraba nada en su interior excepto por algunas piedras que lo rodeaban en su interior, cuando ya me disponía a irme, observé en lo profundo del lago algo que se asemejaba a un dedo, sin dudarlo me avente al lago para ver de que se trataba

Nade hasta lo mas profundo del lago intentando ver a quien pertenecía ese dedo y cuando estuve mas cerca de él, pude ver que él dedo se pertenecía al niño quién al parecer estaba inconsciente

Envolví mi brazo en su cintura he intente salir de lago, el agua se hacia ca vez mas espesa, es como si esas piedras absorbieran algo dentro de mi, con todas mía fuerzas intente nadar a la orilla del lago, cada segundo era importante ya que si permanecía demasiado tiempo también quedaría inconsciente.

Vi como el zorro lanzaba una cuerda, agarre la cuerda con fuerza y este empezó a jalarla haciendo que llegue a la orilla junto al niño, al salir del lago bote agua de mi boca y recosté al niño aun lado

—¡Oye niño! ¿Estas bien?—moví su cuerpo—responde niño

El zorro que estaba alrededor empezó a lamer al niño pero él no reaccionaba, a lo lejos pude ver como el señor recién llegaba, al parecer lo había perdido en el camino

El se postro en un árbol por lo exhausto que estaba mientras yo aún intentaba reanimar al niño

Intente sacar el agua del cuerpo del niño pero no daba resultado, al parecer las piedras habían absorbido mucho mana de él

El zorro que estaba a mi lado empezó a olfatear algo en el bolsillo del niño , metió su nariz en el bolsillo y saco uno piedra de su interior, al parecer esta piedra seguía absorbiendo su mana del niño

Las aves empezaron a revolotear en el aire y a hacer sonidos muy molestos, en una de las copas de los arboles vi algo que se asemejaba a una harpía mirándonos fijamente, agarre al niño fuertemente envolviéndolo entre mis brazos

Algo en los arbustos empezó a moverse como si algo saliera de él, se movió unos instantes hasta que de él salió el señor, que al parecer logro encontrarnos

—Max ¿Qué paso? —nos miro preocupado

—E-El niño e-esta—una fuerte ventisca volvió a interrumpir pero esta vez traia a alguien consigo

Una sombra yacia sentada en una de las ramas de un árbol, la harpia que estaba en la copa de un árbol lejano bajo y se posicionó al lado de este individuo mostrando un aura intimidante

—¿Quien eres tú?—lo mire fijamente

El solo se limito a verme sin mostrar ninguna expresión, lo que me hacia dudar más de este ser

—viéndote de cerca me pareces más intrigante—sonrió

—¿Te conozco?

—No, pero una de mis mascotas jugo contigo hace un rato

La voz de este individuo es aguda, tiene un aspecto delgado semejante a una mujer pero no lo es, su sonrisa recorre su cara como si de un payaso se tratara y la harpía no para de mirar el cuerpo del niño

—¡oye! ¿Quien eres tú?—exclamó el viejo

Alrededor del viejo se formaron varias enredaderas que enrollaron todo su cuerpo apretándolo como si quisieran asfixiarlos,  una rama se alejo de el viejo y tomando impulso perforó el cuerpo de este dejandolo tumbado en el frio suelo

Me quede mirando tal espectáculo como si no fuera realista, quisiera pensar que solo es una de las muchas pesadillas que he tenido en mi vida

¡Buenas! ¡Buenas! Queridísimos Lectores

Hoy les vengo trayendo un nuevo capitulo, espero que lo disfruten

Vimos como el Max ya pudo rescatar a Lio del Lago pero ¿Por qué no despierta aún?

Por cierto, el guardián siempre aparece en momentos inoportunos y al parecer es un chico no una chica. Que cosas

Bueno hasta aquí mi reporte, recuerden hacer la tarea y hacer ejercicios (aunque esto hasta yo lo omito) nos vemos en la siguiente actualización