Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo Tres: Labial rosa


Capítulo Tres: Labial rosa.

Rayan


19 de mayo, 2016.

—No vino con Gabriel —digo.

Parker y Derek dejan de hablar para darme toda su atención o al menos eso veo de manera breve porque de nuevo mi mirada va hacia Breana, quien destaca por la manera en la que el azul rey queda con su tono de piel, además ese vestido ajustado la hace ver preciosa... Cómo siempre.

Es la fiesta de compromiso de Jocker y Adelaide, una que debió suceder hace tiempo. La música agradable resuena, todos parecen felices y la comida es buena, pero mis ojos están empeñados en ver a Breana Stone.

—Escuché que Gabriel debió quedarse adelantando trabajo y que por eso no pudo venir—me hace saber Parker.

—No lo extrañamos —digo manteniendo la vista en Breana—. Es agradable en ocasiones no verme en la obligación de respirar el mismo aire que él.

—Nunca te vi cómo un hombre celoso hasta Gabriel —comenta Parker.

—Eso es porque nunca me viste en una relación.

—No estás en una relación con Breana —me recuerda Derek.

—Detalles —Me encojo de hombros.

—Grandes detalles —me hace saber Parker.

—El punto es que es bueno que esté aquí sin compañías molestas.

—Tengo que admitir que Gabriel no es que me agrade demasiado luego de todas esas advertencias y charlas que me da sobre relacionarme con Breana —comenta Derek—, pero a ti no te ha hecho nada.

—¿Estorbar no te parece suficiente, Derek?

—Ahora es culpa de Gabriel el que no estén juntos —murmura Parker—. Cuán interesante es tu perspectiva.

—¿Y cuál es la tuya? —pregunto.

—Qué estaban tan ocupados ocultando sus sentimientos que no prestaron atención en el otro, es evidente que para nosotros era obvio, pero no juzgaré sabiendo que es más fácil notar cosas en los demás que cuando se trata de nosotros mismos.

—Ay, me haces sentir mejor —digo sin verlo y lo escucho reír.

—El punto es que no creo que sea culpa de Gabriel, él simplemente tomó su oportunidad.

Tiene sentido es incluso razonable, pero poco me importa.

Es evidente que debí ser más rápido cuando Elise me lo dijo, que toda esa táctica de vamos a dar tiempo a procesar la información y confirmar que soy correspondido no contaba con la llegada del actual estorbo.

Si soy honesto conmigo mismo, tengo parte de la culpa de la situación, pero cómo soy bueno mintiéndome, prefiero desentenderme y dedicarme a evitar, ignorar y decir en voz alta a mis amigos cómo Gabriel es un molesto accesorio al que no me gusta ver.

—Estás siendo racional, Parker y Rayan no quiere racionalidad, él simplemente quiere que sus amigos le digan: guau sí, que molesto es el tipo —Le hace saber Derek y sonrío.

—Lo entendiste todo bien, Derek.

—Al menos somos conscientes de que eso no está bien ¿Verdad? —pregunta Parker, aunque detecto la diversión en su voz.

—Sí, lo somos, pero supongo que a Rayan no le importa y debido a que no le importa, espera que a nosotros tampoco.

—De nuevo, lo entendiste todo, Derek.

Breana ríe y de manera distraída se toca el cuello antes de hablar y ¡Joder! Nunca entenderé cómo hace que cualquier gesto parezca fascinante.

Antes me atraía verla, prestar atención a pequeños detalles, era algo que no podía evitar, pero desde que me permití ser abierto conmigo mismo sobre cuánto me gusta y el saber que le gustaba, ha hecho que todo se intensifique. Sin embargo, siempre me recuerdo que hay límites que no debo pasar por respeto.

Es ese respeto el que me hace permanecer tranquilo, sin actuar, porque conozco los principios de Breana y ser infiel no está en el plato, pero esto de contenerse sabiendo que hubo oportunidades y que hay miles de posibilidades, es bastante difícil.

—Deja de verla así —Se ríe Derek tronando los dedos frente a mí cómo si me sacara de un embrujo y le sonrío cuando finalmente le doy mi atención.

—¿Qué tiene de malo ver? —pregunto bebiendo lo que resta de mi trago.

—Que pareces idiotizado, eres un imbécil —Derek decide acompañar sus palabras con una sacudida de cabeza—. Todos teníamos tanta fe en ti y esperaste a que otro apareciera para sacar la cabeza de tu culo.

—Pensé que no le gustaba, ella era buena ocultándolo y luego ese apareció.

—Gabriel no tiene la culpa de tu lentitud —señala Parker.

—Gabriel es un estorbo —es mi brillante respuesta que tiene a ambos rodando los ojos— ni siquiera pudo venir con ella hoy. Hace un horrible trabajo como novio.

—¿Crees que tú lo harías mejor? —me pregunta Derek con diversión.

—No lo creo, lo sé.

Vuelvo dirigir la mirada a Breana que ríe de lo que sea que Jackson Hans le diga mientras sostiene a su hija.

Me encantaría que el vomito verbal de Elise hubiese venido hace mucho tiempo, al contrario de lo que muchos podrían decir, Breana siempre fue muy buena ocultando su atracción por mí, nunca envió señales, sentí que me trataba igual que al resto, exceptuando el asunto de no hacerme un caramelo de su repertorio, estoy seguro de que si ella no lo decía a sus amigas ellas tampoco lo habrían sabido.

Sí, siempre compartimos miradas, pero pensé que eso era tan común como los coqueteos que tenía con Derek, que me consideraba de sus amigos más cercanos. Es una excelente actriz o al menos lo ha sido sobre ocultar su atracción por mí.

Tras todo lo que Elise me dijo sobre Breana teniendo sus ojos en mí, tontamente pensé que habría tiempo de tener una charla, pero entonces Gabriel apareció y ellos comenzaron a salir.

No soporto al infiel del novio de Breana, porque sé que la razón por la que terminaron en la universidad fue por sus múltiples infidelidades, no entiendo qué hace con él y aunque me encanta la idea de que sea feliz, detesto que lo sea con él.

He tenido citas desde entonces e incluso ahora he tenido un par con la maestra de Summer, pero sé que no va a funcionar y que no puedo forzar algo mientras mis ojos no se despegan de la rubia.

Tendría que bastarme con el sexo casual de mujeres que no quieran conexión emocional conmigo y solo quieran follar, pero ¡Joder! Vivir la vida de un mujeriego no está en mis planes cuando básicamente soy un papá soltero que siempre trata de estar en casa para Summer.

Ser papá soltero y tener folladas casuales no son tan compatibles, porque no puedo ir de bar en bar conociendo a mujeres y no creo en los folla-amigos, esas historias casi siempre terminan mal, pero tampoco estoy capacitado en este momento para tener citas porque todo lo que hago es ver a Breana.

Breana, mi amiga con novio.

Breana la mujer que en este momento alza esos bonitos ojos azules haciendo que nuestras miradas conecten y la presiono para saber si va a desviarla, pero acepta el desafío sosteniéndomela y cuando curvo los labios en una sonrisa, veo que se muerde el labio inferior para no sonreír.

—Por favor, es que ustedes son unos insoportables —Se queja Derek—. Tuvieron que esperar todo este asunto del novio para lanzarse miraditas así de directas, no puedo con esto.

Y dicho eso se va, dirigiéndose hacia Adelaide y Alice Hans en tanto volteo a ver a Parker que me sonríe.

—¿No es un poco descarado ser tan obvio? —Me pregunta.

—Pero si no estoy haciendo nada —finjo inocencia y suelta un bufido.

Volteo nuevamente para ver a Breana, pero descubro que ya no está, casi de manera inmediata mi ceño se frunce.

Es un crimen nacional no deleitar a mis ojos con ella y es molesto haber roto la conexión de miradas por Derek.

—Se fue por el pasillo de la derecha —Se apiada Parker antes de comenzar a alejarse.

—¡Gracias! —grito a su espalda antes de girar y dirigirme exactamente a dicho pasillo.

Asiento a un par de personas y camino a paso lento con una mano en el bolsillo y la otra escribiéndole rápidamente un mensaje a mi mamá para verificar que todo marcha bien con Summer y una vez recibo respuesta afirmativa, me guardo dicho teléfono y apresuro el paso encontrando a Breana dentro de lo que luce como una sala de lectura o descanso.

Ella sostiene el teléfono en la mano y hay un mohín en los labios pintado de rosa claro mientras escribe a toda prisa.

—No te vuelvas un asfixiante —murmura en voz alta antes de suspirar y guardar el teléfono en su pequeño bolso.

La veo hacer diversas muecas con los labios, lo que me tiene sonriendo y luego me aclaro la garganta cuando parece que meterá una mano en el escote de su vestido para reacomodar sus pechos.

Se sobresalta y voltea a verme, susurrando mi nombre de una manera agitada que me hace tensarme porque mi mente quiere viajar a territorios que definitivamente no deben.

—¿Por qué huiste de nuestra lucha de miradas?

—¿Huir? —Se ríe— Tú perdiste cuando volteaste a ver a Derek.

—Eso tiene sentido —avanzo a paso lento hacia ella que sigue cada uno de mis movimientos—. Te ves preciosa, por cierto, quise mencionarlo cuando nos saludamos, pero luego iban a bromear sobre ello.

—¿Y desde cuándo te intimidan las bromas?

Esta vez soy quien ríe por lo bajo en tanto me detengo frente a ella y meto las manos dentro de los bolsillos delanteros de mi pantalón.

—Veo que hoy olvidaste un accesorio —comento y me ve con desconcierto—, a Gabriel.

—¡Rayan!

La mordedura de labio inferior delata que quiere reír. Breana solo se muerde el labio inferior cuando contiene una sonrisa o el llanto... Tal vez lo hace en otras situaciones, pero esos territorios aun no los conozco.

—Es lo que parece, pero no quiero hablar de él... Podemos hablar de otras cosas.

—¿Cómo cuáles? —pregunta recargando la espalda de la pared detrás de ella.

—¿Cómo por qué no soy un caramelo?

—Ya es momento de superar eso.

—Dime.

—¿Por qué debería decírtelo?

—Porque quiero saber —avanzo otro poco más— ¿Cuál es la secreta razón de tal destierro?

—Así que ahora serás dramático al respecto.

—Ahora incluso voy a cerrarte cualquier salida para que me respondas.

—Tú...

Su voz se silencia cuando alzando los brazos poso cada mano a un lado de su cabeza, haciendo barreras con ellos y no me pierdo la manera en la que sus labios se abren y sus pupilas brillan.

—¿Por qué, Breana? —vuelvo a preguntar acercando mi rostro al suyo para que no consiga escapar de mi mirada.

—Porque sí.

—Eres lo bastante inteligente para saber que esa no es una respuesta racional.

—¿Qué pasa si solo soy tonta?

—Ambos sabemos que no lo eres, nunca te creí tonta y no comenzaré a hacerlo ahora.

Su mirada cae a mis labios y se lame los suyos haciéndome respirar hondo y apretar la mandíbula porque me doy cuenta de que esta cercanía no nos hace ningún bien.

—Breana... —susurro y soy capaz de notar que mi voz se ha vuelto más grave.

—No me gustan los infieles, Rayan, no puedo...

Tomo una profunda respiración y dejo caer los brazos para dar un paso atrás, puedo respetar eso y tampoco quiero hacerla pasar un mal momento, pero verla a los ojos y descubrir un sinfín de lo que parece deseo, hace que casi resulte doloroso el retroceder.

—Gracias —susurra y soy capaz de percibir que su voz suena afectada y contrariada.

Asiento mientras permanecemos frente a frente y de alguna manera soy capaz de darme cuenta de la manera en la que la tensión incrementa, mi cuerpo se tensa con la contención y no encuentro la fuerza de voluntad para irme, no ayuda el que sus ojos azules brillen de esa manera ni que sus labios pintados de rosa se mantengan entreabiertos. El pecho le sube y baja con una respiración que no es errática, pero tampoco evoca a la calma.

Ella suspira y yo me lamo los labios.

—Rayan... —susurra como si me implorara.

¿Quiere que me vaya? ¿O quiere que sea yo quién cruce los limites?

—Estoy aquí —Es todo lo que susurro.

Entonces no me queda claro quién se mueve primero, pero solo sé que en mi próxima respiración le estoy sosteniendo el rostro entre las manos y mis labios se están estrellando contras los suyos sintiendo su gemido.

Mis labios atrapan su labio superior en tanto mis manos viajan, una encontrando un agarre en su nuca y la otra presionándole la espalda para que su cuerpo esté al ras del mío cuando abre la boca para permitirle acceso a mi lengua. Un escalofrío placentero me recorre cuando la saboreo y la manera en la que se arquea contra mi en tanto sus manos se agarran a mis costados, amenaza con hacerme perder el control mientras la beso en profundidad.

Hace un tiempo cuando fuimos encerrados en un armario, le pregunté a Breana si le gustaba obedecer y ella lo negó, pero sintiendo la manera en la que me otorga el control tan libremente y se deja ir en mi agarre y beso, me doy cuenta de que puede que estuviese en lo correcto sobre mi deducción.

Adentro los dedos de mi mano dentro de su cabello y mi otra mano hace un recorrido corto desde su espalda baja hasta tomarle un puñado del trasero y otro gemido cae contra mi boca mientras acaricio su lengua con la mía antes de lamerle el labio, pero no es suficiente y ahora ambas manos se posan sobre su culo, pegándola a mí y sus manos me sostienen del cuello mientras su boca quiere tomar y recibir todo lo que le doy.

Nos tomo años tener un momento como este y existe la posibilidad de que sea la primera y última vez que suceda, porque Breana no es un infiel y no le haré esto.

Solo necesito saber cómo parar porque no sé cómo dejar de besarla ni cómo liberarla de mi cuerpo. Estoy seguro de que ella es capaz de percibir contra su vientre la manera en la que me estoy endureciendo.

Nos hago retroceder hasta que mis nudillos sienten la superficie de la pared, hasta que siento la hinchazón de sus pechos contra mi torso y dos de mis dedos sienten el pequeño triangulo de su tanga. Mis manos no son gentiles estrujándole el trasero, pero a ella parece encantarle mientras me sostiene del cuello y mueve sus labios debajo de los míos con la misma insistencia que empleo.

Un grito agudo me hace tensarme y nos hace separarnos con rapidez en tanto vemos hacia la entrada encontrándonos con Alaska Hans y Drake Harris, ella tiene las mejillas muy sonrojadas y él simplemente luce sorprendido.

—Mierda —alcanzo a escuchar a Breana.

No es un secreto que ella tiene novio y que no deberíamos besarnos.

—Drake... —comienza Breana.

—Hola, Breana... Y Rayan. Yo...Buscaba a Alaska y llegué aquí ¡Sorpresa!

La torpeza es evidente en la voz de Drake que no sabe qué hacer, su atención va a mi lado y descubro que Breana se encuentra con una sonrisa brillante, mejillas sonrojadas y mirada desconcertada. La veo saludarlos con un abrazo y nerviosismo.

—Es genial ver lo grande que están y ¿Qué tal si volvemos a la fiesta?

Pero no le da tiempo a nadie de responderle porque sale del lugar dejándonos a los tres con los rastros de su nerviosismo.

Vuelvo la atención a los dos jóvenes y les sonrío serenándome, entendiendo que me corresponde el control de daño.

—¿Sabes? Cuando Jocker y Adelaide comenzaron a ser más que asistente y presentador famoso, siempre parecía que los encontraba en sus deslices —acorto la distancia entre nosotros—. ¿Saben que me decía Jocker?

—Uhm...No —responde Alaska.

—Que no había visto nada, que fingiera ser ciego —Hago una pausa breve—. Así qué... ¿Qué tal si aplicamos eso en este momento?

—Pero... —comienza Alaska, pero Drake habla antes de que ella pueda continuar.

—Aquí no pasó nada.

Sonrío porque sé que guardaran el secreto y me permito salir del lugar y dejarlos a sola porque me queda claro que ellos tal vez tengan una conversación pendiente.

Doy los pasos suficientes para recargar la espalda de la pared y llevarme dos dedos al labio inferior y al retirarlos sonrío cuando descubro labial rosa en las yemas.

¡Joder! Realmente nos besamos y no fue un simple beso.

Breana odia a los infieles y me preocupa que esto la haya convertido en una, que se sienta horrible o se esté culpando. No quiero ser considerado un error incluso cuando sé que lo fui.

—Cálmate —me ordeno—. Busca a Breana y habla con ella.

Y eso hago, pero no la encuentro porque descubro que Breana se fue.

Y días después descubro que lo sucedido es algo de lo que definitivamente ella no va a hablar.

Es algo que sucedió, pero que nunca conversamos.

Y algo en lo que no dejo de pensar.



Me reí mucho cuando las veía llorando en comentarios sobre este beso, porque OBVIAMENTE yo tenía el pov de este suceso, solo que todo van en un orden para que funcione la trama, pero bueno, siempre es divertido leerlos colapsar.

Redes sociales:

Instagram|Tiktok: DarlisStefany

Twitter: Darlis_Steff

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro