Fecha de nacimiento: 25 de octubre de 851 DFM

Lugar de nacimiento: Lazaward, Territorio Azul.

Edad: 137 (En La chica del Cubo), 154 (En Rojo)

Rasgos distintivos: Cabello azul con flequillo, que le llega hasta las orejas, ojos del mismo color, rasgados. Tez pálida, rostro delgado y rasgos asiáticos. Estatura alta y complexión delgada pero fuerte a causa de los entrenamientos.

Carácter: Pacífico, callado y serio. Se toma las cosas con calma y piensa muy bien antes de actuar.

Aficiones: Meditar y practicar con la espada. También le gusta leer, dibujar y la caligrafía antigua, como el shūfǎ o el Shodō (china y japonesa respectivamente).

Miedos, fobias o manías: Su mayor miedo es perder a alguien a quien quiere mucho. Fobias no tiene, o por lo menos no ha estado expuesto al miedo extremo, siempre es muy calmado y trata de controlar la situación. Cuando está nervioso o pensativo, tiende a "juguetear" con el anillo del Cubo, haciéndolo girar con el pulgar.

Sueños u objetivos: Como todo Dios, vela por el bienestar de sus pueblerinos. Pero como todo ser humano tiene un deseo profundo y prohibido que guarda para sí. Creo que muchos sabemos de qué se trata. O mejor dicho sobre quién.

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Fei Long es el décimo sexto Dios del Territorio Azul, el cual ha tenido los Dioses más longevos y, después del Violeta, el que ha tenido menos portadores del Cubo.

Es el menor de tres hermanos y ha vivido con su familia hasta cumplir los diez años, momento en que la Diosa Sun Hee lo tomó para instruirlo. En su infancia fue educado como los demás hermanos en las artes marciales.

Los siguientes años luego de convivir en el Castillo pasaba más que nada en la biblioteca y en el salón que le había proporcionado la Diosa para seguir con su entrenamiento, ya que Sun Hee le parecía adecuado que siguiera la herencia familiar.

En la primer asamblea que asistió, conoció a la Diosa Verde y al Dios Rojo, con los cuales hizo buenas migas. Pero con el paso del tiempo, Selba y él se hicieron muy buenos amigos y Seteh se fue alejando cegado por sus propósitos.

Fei Long nunca se alejó de su familia, pero a medida que sus allegados fueron envejeciendo y pereciendo, fue perdiendo poco a poco del carisma, evitando así forjar más lazos de amistad y cariño.

Se puede decir que si no fuera por Selba, sería un Dios muy solitario.