Narra Juan

Son como las tres de la mañana y aún estoy despierto, no puedo dejar de pensar en lo que pasó en la escuela, en lo que pasó con Martín. Realmente no me entero aún que él se me haya declarado.

Juan, me gustas

Sentí mi cara arder cuando recordé sus palabras. Realmente no creía que diría algo así, digo, él tiene a Julieta, ¿por qué querría declararse teniéndola a ella? Aunque, a decir verdad, aún me pregunto eso.

-No debería preocuparme, parecía que lo decía de verdad-susurré-el beso...-toqué mis labios inconscientemente para luego volver a sentir como mi cara ardía nuevamente. No era la primera vez que me besaba, pero ahora la cosa cambia, ahora que se declaró todo es distinto. Escuché mi celular vibrar sobre la mesa de luz; ¿quién está tan despierto como yo a estas horas? Tomé mi celular y lo miré, era un mensaje de Mio.

-"¿Qué sucedió hoy? ¿Ya son novios?"-¿acaso no duerme? Digo, agradezco que me esté ayudando en esto, pero ¿tiene que estar las veinticuatro horas del día preocupada por lo que pase entre nosotros?

-"¿Cómo se te ocurre preguntar algo así a estas horas?"-tecleé rápidamente y envié el mensaje, rápidamente recibí una respuesta.

-"Estaba aburrida y pensé en molestarte un poco. No me has contestado, ¿Martín ya es tu novio?"-suspiré pesadamente; de haber estado durmiendo seguramente la hubiera mandado a la mierda.

-"No, él no es mi novio"-respondí.

-"¿Entonces qué te dijo después de clases?"-suspiré nuevamente; no tengo ganas de decirle, no a estas horas ni por mensaje, pero no sería bueno que se lo diga en la escuela, teniendo en cuenta que cualquiera puede oírnos.

-"Tenían razón, él se me declaró"-hasta puedo oír su risa completamente eufórica por lo que acabo de decirle, sin contar el típico "te lo dije" que suele soltar en estos casos.

-"¿De verdad? Me imagino que le dijiste que te gusta, ¿no?"-¿se cree que soy idiota? tal vez lo sea un poco, pero luego de todo lo que pasó sería realmente estúpido de mi parte decirle que no.

-"Claro que le dije que me gusta, no soy tan idiota, ¿sabes?"-ahora que lo pienso, estoy ventilando esto sin saber si Martín está de acuerdo o no; ¿y si se enoja por esto? Nos pelearíamos de nuevo. Miré la hora, era demasiado tarde para mandarle un mensaje. Supongo que podré decirle que ventilé todo más adelante.

-"Bien, ya puedo ir a dormir, ya te saqué la información que quería. Nos vemos el lunes en la escuela"-suspiré pesadamente; "ya te saqué la información que quería", sólo se quedó despierta para eso, peor aún, mandó un mensaje sin saber si yo estaba despierto o no. dejé de darle importancia a eso, dejé mi celular en la mesa de luz para luego acomodarme e intentar dormir.

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Entré al aula y me desplomé en la silla; estaba realmente cansado, anoche no había dormido mucho por estar pensando en Martín. Recosté mi cabeza en el escritorio y cerré los ojos, tal vez podría dormir un poco hasta el recreo.

-No te duermas, Juan, te van a regañar-escuché la voz de Martín a mi lado; que poco duró mi idea de dormir. Me giré y lo miré.

-Tengo demasiado sueño como para que me importe si me regañan o no-dije para luego cerrar los ojos nuevamente.

-Está bien, le diré al profesor que te sientes mal-tiró un poco de mi mochila, la cual estaba usando de almohada.

-Creí que me dejarías dormir-volví a abrir los ojos.

-Te dejaré dormir-hizo un gesto con la mano para que me levantara-vas a estar más cómodo con esto-en cuanto me levanté, movió mi mochila, dobló su campera y la puso sobre el escritorio-listo-volví a acostarme, cuando lo hice sentí su perfume en la prenda.

-Gracias-musité, él solo me dedicó una sonrisa.

-¿Pasa algo?-preguntó cambiando su expresión.

-¿Por qué lo preguntas?-se encogió de hombros.

-Te me quedaste mirando-mi cara comenzó a arder; ¡¿me le quedé mirando?! Eso quiere decir que tenía esa cara de idiota que se me queda cuando veo algo que me gusta. Me giré nuevamente; ahora ya podría dormir sin estar distrayéndome con él.

Estuve dormitando durante las horas de clases, sin poder quedarme dormido completamente. Cuando escuché el timbre de salida, abrí los ojos con pereza, para luego hundir mi cabeza en la campera que estaba usando como almohada.

-Juan, ya tenemos que salir-Martín comenzó a tirar un poco de su campera para, imagino, que me levantara.

-Lo sé, pero tengo pereza de levantarme-musité volviéndome hacia él para mirarlo.

-Aún estás cansado, ¿verdad?-asentí; creo que sería estúpido negarlo, puesto que mi cara estaría delatándome. Me levanté con pereza, tomé mi mochila y me dispuse a salir-espera, Juan-me detuve en seco y giré sobre mis talones, Martín se acercó a mí rápidamente-seguramente afuera no pueda saludarte como se debe y aprovechando que estamos solos ahora...-me tomó del mentón y, antes de que pudiera asimilar si quiera lo que me había dicho, me besó, mi rostro comenzó a arder; acá alguien nos vería, aún no quiero que medio mundo se entere, pero a Martín parece no importarle en lo absoluto, él solo me besa sin más. Dejé de darle más vueltas al asunto y terminé correspondiéndole al beso.

-Sigue sin importarte que estemos en medio de la escuela y que medio mundo puede enterarse de esto-dije una vez que nos separamos, él solo me mostró una pequeña sonrisa.

-¿A quién le importa lo que hagamos o dejemos de hacer? Si quiero besarte en frente de todos en medio de una clase lo haré-mi cara comenzó a arder nuevamente.

-¡Qué ni se te ocurra hacer algo así!-soltó una carcajada ante mi reacción-¡no te rías, idiota!-detesto cuando se burla de mí.

-Tranquilo, no tienes por qué gritar tanto-solté un suspiro-vamos antes de que venga alguien-¿ahora se preocupa por que venga alguien? Confirmado, Martín es idiota.

-Sí-mascullé saliendo del aula seguido de cerca por Martín. Ni bien dimos un par de pasos fuera del aula Julieta se acercó rápidamente a Martín.

-Hola-sonrió para luego besarlo; decidí ignorarlo, por ahora será mejor que lo haga-¿nos vamos juntos?-sentí una opresión en el pecho; ¿se irá con ella? Me giré para luego comenzar a caminar. No quiero verlos así.

-Lo siento, Juli, iré con Juan a su casa-me detuve en seco al escuchar eso, me giré y lo miré, él simplemente me dedicó una mirada cómplice-no te molesta, ¿verdad?-ella negó con la cabeza para luego irse; sé que le molesta que elija a su "amigo" antes que a ella, pero, poniéndome en su posición, ¿qué otra cosa puede hacer si quiere evitar una pelea con él?-bien, ¿nos vamos?-dijo mientras me rodeaba por los hombros con su brazo, simplemente asentí con la cabeza.

-No creí que la rechazarías-dije mientras salíamos del edificio, evité mirarlo mientras le decía eso.

-¿Por qué no? ahora tú eres más importante que ella-mi cara comenzó a arder por enésima vez hoy-eres mi "mejor amigo", tengo que elegirte antes que a mí "novia"-sentí como me acercaba más a él.

-Sí, tu mejor amigo-repetí con cierto tono sarcástico.

-Por ahora solo podemos ser mejores amigos, al menos para los ojos de los demás-dijo en un tono más bajo, puesto que aún estábamos cerca de la escuela y alguien podía escucharnos. Saqué una de mis manos de mi bolcillo y tomé la mano con la que me tomaba el hombro-que cariñoso...-desvié la mirada, sabía de sobra que tenía una sonrisa un tanto burlona en su rostro.

-No te acostumbres, es solo hasta que lleguemos a mi casa-sentí como entrelazaba nuestros dedos; nunca creí que terminaría así con mi mejor amigo.

Estábamos a una cuadra de mi casa, solté la mano de Martín y lo aparté un poco de mí; no quiero que Felipe o mis hermanas se enteren de lo que pasa entre él y yo, al menos por ahora.

-¿Por qué me sueltas?-preguntó Martín.

-Porque estamos cerca de mi casa-respondí metiendo mi mano en mi bolcillo-no quiero que mis hermanos nos vean así-escuché un pequeño suspiro de su parte-¿qué sucede?-desvié la mirada hacia él.

-¿Por qué no quieres que nos vean?-arqueé una ceja; ¿es tonto o lo pregunta en serio? Felipe, al menos, sabe que él está saliendo con Julieta. Además de que sería algo bastante sorpresivo llegar de la nada de la mano con mi mejor amigo.

-¿Eres tonto? Mi hermano sabe que estas con Julieta, sin contar lo extraño que sería que, de la noche a la mañana, volviera a casa de la mano con un chico-soltó nuevamente un suspiro.

-Tienes razón, se me había olvidado ese detalle-se detuvo de golpe-en ese caso... tenemos que aprovechar que aún estamos lejos de tu casa-me tomó del mentón y se acercó a mi rostro, rápidamente cerré los ojos esperando a que me besara, pero no lo hizo, abrí nuevamente los ojos y lo miré-veo que ya te acostumbraste a que te besara-se formó una sonrisa en su rostro.

-No diría que me acostumbré, es solo que...-desvié la mirada en cuanto sentí mi cara arder.

-¿Es solo que...?-no quiero decirle que quería que me bese, me avergonzaba decírselo.

-N-nada-musité aún sin mirarlo.

-¿Quieres que te bese?-mi cara ardía más que antes, seguramente mi cara está más sonrojada de lo que estaba antes.

-E-eh... y-yo...-dije torpemente para finalmente asentir, rápidamente sentí sus labios sobre los míos, rápidamente correspondí. Nunca creí que terminaría así con él, con un chico, peor aún, con mi mejor amigo; realmente es raro, pero sé que terminaré acostumbrando a esto.

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Muy buenas~ vuelvo tarde como siempre con el nuevo capitulo, pero después de dos años así supongo que ya deben de estar acostumbrados a que tarde tanto en publicar xD. Lamento de verdad la demora pero entre la escuela y la escasa inspiración que tuve estos días se me hizo casi imposible escribir. Espero que les guste tanto como a mi me gustó escribirlo :3. Se les agradece muchísimo los votos y comentarios.