thor odinson;
—¡Bajalo ahora!
Cruzó la habitación dando grandes zancadas e intentando mantener la seriedad en las facciones de su rostro. Señaló al hombre de cabellos dorados con su dedo índice.
Su mirada se endureció a medida que transcurrían los minutos y sus plegarias eran ignoradas por la deidad de las tormentas. Thor se asemejaba en muchos aspectos a un niño pequeño cuando se trataba del mundo midgardiano, demostrando las millares de diferencias que existían entre sus costumbres y las de Lilliane.
—¡Puedes dejar a mi bebé en paz dos segundos!
La mayoría de sus discusiones se centraban en las relaciones protectoras que Lilliane tenía sobre sus animales, en especial aquel felino de sedoso pelaje dorado.
La mirada de la deidad se posó en el animal, desviándola en dirección a la muchacha unos segundos después.
—Es un gato —comentó, sin entender en lo absoluto el cariño que ella mostraba por el felino.
—¡Es mi bebé!
—No puedes conciderar como primogénito a un ser de una especie diferente.
El felino los admiraba con sus gigantescos orbes dorados, girando su cabeza cada vez que alguno dejaba escapar una exclamación.
—¡Es mi bebé y doy finalizada esta discusión!
Lilliane agradecía que las instalaciones se encontraran completamente desoladas para aquellas horas de la mañana, de lo contrario tendrían a los miembros restantes del equipo detrás de la puerta de la habitación. Incluso lograba imaginarse los comentarios de Clint y Tony al respecto y las bromas que hubieran realizado durante la cena.
Thor, cansado de la discusión, intentó hacerle entender su punto de vista y, disminuyendo el timbre de su voz, pronunció:
—Que no es un bebé.
—¿Acaso sabes cómo es un bebé?
—¿Tú no? —Thor elevó sus cejas con picardía— Puedo darte clases de como hacerlo, aunque hay que esperar nueve meses para cono... ¡Auch!
Lilliane alzaba sus brazos, sacudiéndolos en un vago intento de alcanzar a su mascota y rescatarlo del dios del trueno. Thor elevaba a la criatura más y más a medida que la muchacha se acercaba a su objetivo.
—¡Que lo bajes, maldita sea!
—No —setenció, haciéndole frente a los ataques de la mujer. Aunque se trataban de pequeñas cosquillas en sus brazos, le resultaba molesta la sensación—Acepta tener una tarde juntos y te regreso al animal.
—¿Estás empleando a mi hermoso bebé cómo chantaje?
Lilliane cruzó sus brazos a la altura de su pecho y permaneció observando al hombre de cabellos dorados y analizando la situación desde diferentes perspectivas para diseñar un plan que le permitiera salvar a su gato.
—Tal vez... —el cuarto quedó en silencio por unos segundos. Thor descendió su mirada— ¿Una velada? ¿Una película?
—Acepto, pero regresame a mí bebé.
Lejos de obtener lo que anhelaba con cada fragmento de su corazón, Thor prosiguió chantajeanla durante toda la tarde, hasta que apareció Steve a calmar la situación.
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stei_ruiz14 espero que te guste ❤️
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