Dedicado a RtxtcGurl

Me digía a mi apartamento, el cual comparto con mi novio Scott.
Al entrar por la puerta puedo oler un delicioso aroma.
Deje mi bolso y mi abrigo en la entrada y me dirigí a la cocina. Sonreí al ver que Scott estaba cocinando. Además de cantando y bailando al compás de Dont stop me now de Queen. Me acerqué lentamente y lo abracé por la espalda apoyando mi cabeza en su hombro, pues era un poco más pequeña que él. Note cómo se tensó por un segundo, pero al instante se relajó al darse cuenta de que era yo.
-Mmm, huele delicioso- Scott se giró y tuve que levantar la mirada.
-Has llegado más temprano que de costumbre- dijo haciendo una mueca rara pero divertida. Lo mire haciéndome la ofendida y nos reímos.- es que te quería preparar una cenita romántica, pero no me ha dado tiempo- dijo haciendo un puchero.
-Oww, no te preocupes, si quieres te puedo ayudar-dije mientras me remangaba.
-Vale, pero antes- se acerco hacia mi dejando un beso en mis labios. Se separó sonriendo. Pose mis manos en su cuello y lo atraje hacia mi para besarlo más apasionadamente. Scott me sostuvo de la cintura y yo jugueteaba con su pelo. Al separarnos le di una sonrisa juguetona.
-Bueno, ¡pues a cocinar!- exclamé mientras iba a por un delantal.
Al final la cena no fue como esperábamos. Se nos quemó la comida. Aunque fue una bonita y graciosa anécdota que contar.
Acabamos tumbados en el sofá con el pijama mientras esperábamos una pizza.
Sonó el timbre y me levanté a abrir.

Narra Scott:
Sonó el timbre y mi linda novia se fue a abrir. Me levanté del sofá y la vi. Con su pijama de estrellas, sus zapatillas de conejito y su pelo color chicle atado en un moño mal hecho. Para mi no podría ser más perfecta. La mire con ojos de enamorado. A pesar de llevar ya casi 3 años de relacion, cuando estaba con ella me sentía como si estuviera en la primera cita. Ella me hace sentir las mariposas en el estómago, los tartamudeos. A veces me pregunto que hice para merecer la.
-Scoty...- me decía mientras pasaba una mano por delante de mi cabeza.- ¿te encuentras bien?- dijo frunciendo ligeramente el ceño.
-Si, perfectamente- deje un casto beso en sus labios y cogí un trozo de pizza.

Y esa fue una de nuestras grandes noches románticas, cenar pizza y ver películas abrazados.

Son grandes las noches así, pero mejores son las mañanas en las que me despierto y la veo tan tranquila durmiendo, abrazada a mi, con su mano en mi pecho y mis brazos agarrados a su cintura.

La amo.

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Espero que te haya gustado!!!
Siento si es corto.