Clark Kent
Título: Nunca voy a estar solo.
Advertencia: ninguna.
Tipo: romántico.
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Ser un extraterrestre en la tierra no es nada fácil por fortuna nunca estuve sólo, ___ siempre fue mi amiga desde que fui adoptado por los Kent, pero siempre tuve miedo decirle que era.
Nuestra infancia y adolescencia pasó, yo me convertí en periodista y ellaa científica, yo comencé a trabajar en él Daily Planet y ella en LexCorp Industries, pero nunca dejamos de hablar, constantemente ella iba a mi casa y yo a la suya.
Tenía cierta certeza de que su jefe, Lex Luthor, no era un buen tipo y que además estaba intentando ligar con ella.
-Hola señor Kent.- entró ___ por la puerta de la cocina.- huele bien ¿Qué es?.- dijo acercándose a mi odio y oler entre el espacio de mi cuello.
-Algo muy rico y super elaborado.... pizza comprada.- dije riendo.
-Oye Clarky, te contaré unas cosas.- dijo mientras tomaba una rebanada de pizza y de sentaba en la barra.
-Claro, dime.- le respondí, ella mordió su pizza.
-Prrimerro...- la paré.
-Traga primero.- ella se sonrojó un poco y yo reí, ella tragó lo que tenía en su boca.
-Ahora si, primero, últimamente me han traído materiales extraños a la compañía, me han pedido que trabaje con ellos, eso es genial, y técnicamente ahora podría ir a la cárcel ya que no puedo contarle a nadie de esto.- me miró.- si le dices a alguien... tendré que matarte.- la miré con un poco de susto fingido, ella rió sonoramenre.- bueno, y lo último es... que... tendré una cita.
-¿Con quién?.- le pregunté un poco serio.
-Lex Luthor.- ahí mi sonrisa desapareció, el resto de la noche tuve que disimular.
Días después ___ estaba en su cita con Luthor, no pude evitarlo y aparecí en el restaurante como Superman.
-Y luego caí encima de él y nos embarramos en el lodo.- esa historia era nuestra, la escuché reír y a Luthor también, en ese momento hice mi aparición.- ES SUPERMAN.- gritó ella, el restaurante se conmocionó, los perdí de vista entre la multitud.
Una semana después de esa noche ___ llegó a mi puerta golpeandola de forma agitada, abrí e inmediatamente ella entró sentí una debilidad profunda.
-Clark, te tengo una noticia para el periódico, robé un poco de la rica con la que experimentamos.- de su abrigo sacó un pedazo de piedra verde.- le llaman Kriptonita.- se acercó a mi.- dicen que es la debilidad de Superman y por eso te la traigo, te harás famoso con esta noticia.- me tendió la mano en la que tenía la roca, yo sólo pude arrodillarme ante ella, la debilidad me invadía.- ¿que te pasa?.- hizo una pausa.- Espera... tu eres Superman.- lanzó la piedra lejos, me sentí mejor.
-Lo siento por no decírtelo antes.- le dije nervioso.
-¿Estás bromeando?, eres un héroe.- me abrazó, su cercanía era muy agradable, nos miramos a los ojos, todo lo que desde hace tiempo quería expresarle salió a flote y la besé, para mi sorpresa ella no se separó.
Salimos unos meses y como todo lo bello se va rápido, estábamos cumpliendo 3 años de relación, y para mi era el momento de dar el paso.
Estábamos en un concierto de su banda favorita, por los contactos que tenía, pude decirles a ellos lo que quería para ella ese día, y con gusto accedieron, y en medio del show me hicieron el gran favor.
-___ ___ y Clark Kent, al escenario por favor.- ella y yo nos comenzamos a mover entre la multitud y llegamos a la tarima.
- ___, ¿te casarías conmigo?.- dijo el vocalista de la banda, ella lo miró confunfida, volteó a mirarme y allí estaba yo, con el anillo, todo el público gritaba.
Ella se abalanzó sobre mi y me besó con pasión.
-Eso lo dejamos para después... por ahora responde.- le dije.
-Claro que me caso contigo, mi héroe.- volvimos a besarnos y el público se volvió loco.
Pasó el tiempo entre viajes, comida, pequeñas peleas y cosas más divertidas, completamos 2 años de feliz matrimonio.
Un dia llegué a nuestra hermosa casa, abri la puerta y la llamé, ella no apareció, me preocupé, asi que subí a nuestra habitación, en la cama había una caja de regalo, la abrí, en su interior había una muy pequeña pijama de Superman, me confundí.
-Sorpresa.- dijo ella desde la puerta.- no serás el único héroe en la casa.- dijo tocando su estómago, me emocioné mucho, que feliz me hacía, la tomé y le besé todo su cuerpo.
8 meses después ella tenía una hermosa panza y dentro llevaba a mi pequeño hijo, una noche todo se complicó, comenzó a sangrar y a respirar con dificultad, inmediatamente la llevé al hospital.
La ingresaron a la sala de partos, después de una hora salió una enfermera.
- Tiene un hermoso niño, señor Kent, pero su esposa está un poco complicada ahora, deberá esperar.- Yo asentía, las lágrimas se acumularon en mis ojos.
-Familiares de la paciente ___ Kent.- dijo el doctor, yo me paré.- lamento decirle que su esposa....- se pausó, yo pensé lo peor.- está estable, puede pasar.- sentí mucha tranquilidad.
Entré y estaba ella cargando nuestro bebé.
-El pequeño Andrew Kent.- le di un beso a mi bebé en la frente y a ella en los labios.- Nunca voy a estar solo y tu tú nunca estarás sola.- le dije al oido para besarla y cargar a Andrew
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