1. 1. 1. Asamblea ONU, Nueva York.

El bedel llega con un par de latas y las coloca al lado del vaso en el atril. Marko abre una, da un trago largo y continúa explicando:

—Propongo, que se declare un alto el fuego global y que se detengan todos los conflictos armados de manera inmediata. Que todos los ejércitos y grupos armados se acuartelen en sus respectivas bases militares terrestres, aéreas y navales. —Hace un receso para añadir a continuación—. Y que se garantice la vida y seguridad de los civiles y poblaciones de las zonas en conflicto. Tienen cinco minutos para votar.

Nuevamente, los mensajes, las estadísticas y datos por zonas van actualizándose de manera inmediata, mostrando los datos. Pasado el plazo, una vez más, se detienen las votaciones y Marko informa de los resultados.

—Bien, como todos podéis comprobar, una amplia mayoría ha votado a favor de la propuesta. —Se gira buscando al Secretario General—. Por lo que le solicitamos...

—Puedo asegurarle... —entrecorta la conversación, visiblemente emocionado el aludido—, que en estos momentos todos los operativos que la ONU tiene desplegado por todo el mundo han recibido el mandato y se preparan para tomar el control de la situación en las zonas en conflicto y garantizar lo acordado —hace un receso buscando las cámaras—. Quiero aprovechar la oportunidad para pedir a todos los que están sirviendo en esas misiones, a los gobernantes del mundo, mandos militares, grupos armados y a la población civil, que colaboren con las delegaciones para el buen desarrollo de sus actividades.

Los miembros de la Asamblea y asistentes en el salón se levantan y aplauden efusivamente las palabras de su Secretario apoyando la moción aprobada.

—Y aquel que oponga resistencia, será considerado "hostil" —sentencia con rotundidad Marko.

Con la confirmación del máximo dirigente de las Naciones Unidas, el gran engranaje que mueve la ONU en todos los sectores se están movilizando en todos los sentidos ayudados por IAC, porque todos saben lo que hay que hacer, porque tienen las herramientas y el conocimiento para llevarlo a cabo, solo necesitaban el mandato y la firme determinación para hacerlo, de esa manera demostrándolo han empezado ya.

—Si me lo permite... —Se levanta una representante de la Asamblea—. Quiero pedir desde mi puesto de responsabilidad, en este día histórico para la Humanidad que procedamos de manera voluntaria a la eliminación de todas las armas convencionales, y que se abran museos y se hagan estatuas con ellas como recordatorio del día en el que la Humanidad encontró el camino para la Paz.

Las noticias de los medios de comunicación van retransmitiendo imágenes del despliegue de cascos azules, el envió de material de ayuda y de equipos de voluntarios de todo el mundo para paliar las necesidades de la población vulnerable, comida, ropa y equipos y personal médico y de rescate, mientras los ejércitos se van replegando. A las puertas del edificio de la Asamblea, así como en muchas plazas de ciudades y pueblos de todo el mundo se van concentrando de manera espontanea y pacífica, con carácter festivo y fraternal, centenares y miles de personas en muestra de su respaldo, apoyo y solidaridad con las medidas adoptadas.

—¡IAC! —avisa mentalmente Marko.

—Dime, amigo.

—Sería bueno que el general tomase el control y verificación de...

—Ya estamos en ello —entrecorta la conversación—. Aunque hay mucha confusión en los estamentos militares del mundo, hemos tomado el control del Pentágono, el General está en comunicación con altos mandos para tranquilizarlos y se está mostrando enérgico con todos aquellos que se están manifestando reacios. —Trata de tranquilizar al muchacho—. En estos momentos existe una tensa calma, pero los ejércitos de todo el mundo están en situación de alerta ante el rápido desarrollo de los acontecimientos, pero de momento todo va mejor de lo que se podía esperar.

—Está bien...

Marko detiene en seco la conversación, da un par de tumbos y cae sin sentido sobre el atril golpeándose contra los micrófonos. Todos vuelven sus miradas preocupados por el estado de ese joven orador que los tiene encandilados, el mundo entero mantiene la respiración. El capitán corre en su ayuda, recoge el cuerpo inconsciente del muchacho.

—Marko, ¿estás bien?, responde —intenta comunicarse IAC con él—. Detecto graves problemas en las conexiones. Estoy haciendo algunos reajustes pero me es imposible... Marko, ¿puedes escucharme?

El joven parece reaccionar levemente gracias a las actuaciones llevadas a cabo por la IA, y con dificultad va recuperando el conocimiento.

—He perdido la visión en ambos ojos y me cuesta mucho esfuerzo mantener el equilibrio y sostenerme erguido... Pero estoy bien, el capitán me está ayudando.

—¡Marko! Soy el doctor Lee —entra en la conversación desde la Cueva atento a las imágenes que le llegan al monitor—. Es necesario que vuelvas de inmediato para que podamos hacerte un chequeo más detallado y corregir los errores detectados —su voz suena enérgica y preocupada—. Puede ser peligroso si no actuamos con celeridad...

—Está bien, no se preocupen —entrecorta con rotundidad al doctor—. Estamos en un momento muy complicado, no puedo dar una imagen de debilidad al mundo, debemos mantenernos todos firmes y seguir con determinación.

Marko se alza apoyándose en el atril con el brazo derecho el otro le cuelga, los ojos cerrados, por el lagrimal de su ojo mecánico comienza a caer lágrimas de sangre, al igual que por la nariz. El capitán trata de limpiarle el rostro y cortar las hemorragias mientras le ayuda a mantener el equilibrio.

La rapidez y contundencia en el inesperado desarrollo de las propuestas y su aprobación en un día festivo, ha dejado perplejos, durante un breve tiempo, a una parte de los dirigentes políticos y grandes oligarcas mundiales que controlan el actual sistema político-económico que gobierna el mundo y no saben que decisiones tomar, pero pronto comienzan a reaccionar ante la posible amenaza que pueden traer estas decisiones y otras que pudieran venir.

El orador recoloca los micrófonos para continuar hablando:

«Hace más de medio siglo hubo un movimiento social que hastiado de la violencia e irracionalidad con la que se dirigía el mundo, de la devastación y el sufrimiento que provocaban las interminables guerras y la insoportable intransigencia religiosa que trataba de controlarlo todo, decidió que había que superar todo aquello y propusieron un ilusionante "renacimiento" de la humanidad. Quizás no lo consiguieron, pero dejaron sembrada la semilla del camino a seguir en importantes campos como la educación, las artes y la cultura, la ciencia y la investigación... que pusieron al ser humano en el centro del universo.

»Ha llegado la hora de un nuevo renacer de la Humanidad, de dejar atrás las pesadas cadenas que nos atan al pasado, de superar el capitalismo voraz y el consumismo insaciable, de abandonar las ideologías desfasadas del siglo pasado y superar los sangrantes conflictos políticos-religiosos. Aprendamos de nuestros errores pasados para poner un nuevo Ser Humano en el centro del universo, un ser más libre, más justo y más igual. Es la hora de la hermandad de hombres y mujeres, basada en el respeto, la tolerancia, el esfuerzo y el sacrificio entre todos para salir vencedores del estancamiento en el que nos encontramos.

»Contamos con las herramientas y mecanismos para llevarla a cabo, solo tenemos que seguir la ruta marcada en el respeto y correcta aplicación de los treinta artículos recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, porque no se puede avanzar mientras cerca de mil millones de seres humanos pasan hambre en el mundo, mientras el 1% de la población acapara el 63% de la riqueza mundial, esto es inadmisible y una ofensa a la dignidad y a la inteligencia humana.

»La economía mundial se sustenta en organismos, instituciones y grandes corporaciones que se sostienen en la especulación y la usura cuyo único objetivo es conseguir el máximo beneficio económico posible a costa del expolio de los recursos naturales sin importar el daño que se está causando a las poblaciones y a los entornos naturales; esto es inaceptable y no se puede permitir que continúe.

»Los líderes mundiales no solo se han demostrado incapaces de dar solución a los graves escoyos que afronta la Humanidad, y se han erigido como el verdadero problema que frena un desarrollo y progreso efectivo. Y si no lo hacen ellos, seremos nosotros los que tomaremos la iniciativa para garantizar mediante programas de actuación urgente que sirvan para eliminar el hambre, la pobreza, la esclavitud y las desigualdades entre iguales.

»Hemos de desarrollar iniciativas efectivas para implantar mejoras en la agricultura, la educación, la producción y la correcta distribución de la riqueza para un crecimiento global más justo y sostenible».

Marko hace un receso, a duras penas tiene fuerzas para mantenerse consciente, con gran dificultad trata de hablar:

«Propongo dotar a esta Asamblea y los órganos que dependen de ella, tengan la capacidad de decisión efectiva para garantizar y llevar a cabo la transformación necesaria en todos los ámbitos para la consecución de los objetivos marcados de desarrollo y sostenibilidad.

»Que sus miembros sean elegidos por los ciudadanos del mundo en base a las capacidades y méritos personales en los diferentes ámbitos de la sociedad humana.

»Y que todos, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición, formemos parte de una única y nueva Hermandad Humana, como ciudadanos libres e iguales de un único mundo sin fronteras...

»Que hoy sea el día 1 del mes 1 del año 1 del nuevo calendario común...

»Que así sea».

Marko, con un último esfuerzo, en un apenas inapreciable susurro agrega:

—Yo voto que sí...

El muchacho cae inconsciente entre los brazos del capitán.

—Marko, ¿puedes oírme? ¡Marko, responde...!