Con este capítulo voy a hacer un poco de trampa jejejeje ... no contiene nada sexualmente explícito, pero sí hay un par de desnudos, así que ... no sé ... imagínalos con ropa interior o algo XD

Un nuevo día comenzaba en el planetario de Rosalina, quien poco a poco comenzó a abrir los ojos, soltando un pequeño bostezo cuando finalmente pudo enfocar al techo de su cama. Llevó sus manos hacia su rostro para restregarlo, levantando un poco el mechón de pelo que cubría su ojo derecho. Dejó sus manos sobre su rostro por un par de segundos, tras lo que las comenzó a retirar lentamente, estirando ligeramente la delicada piel de su rostro mientras soltaba un suave quejido, aún haciendo un esfuerzo por mantenerse despierta. Sin embargo, no podía permanecer en la cama todo el día, por lo que apoyó sus brazos sobre el colchón debajo de ella y comenzó a levantarse, sentándose en la cama mientras las sábana caía a su regazo, revelando su torso desnudo. Mechones de pelo cayeron de inmediato sobre su rostro, pues su pelo estaba echo un desastre, con varios mechones sobresaliendo de todos lados e incluso algunos estaban enredados entre sí. La madre de los destellos intentó aplanarse el pelo, quitándose los mechones del rostro, y de inmediato notó que su pelo estaba algo tieso, tal vez por no haberse secado el sudor de forma apropiada. Soltó un suspiro de derrota y dejó caer las manos sobre su regazo, tras lo que volteó a ver hacia la pared más cercana, observando unas sábanas amontonadas y unas cuantas toallas, tras lo que el olor de su cuerpo finalmente fue registrado por su cerebro. 

Rosalina (pensando) : 'La mayor desventaja de solo tener tiempo a solas en la noche es que terminamos durmiéndonos antes de darnos un baño.'

Acto seguido la rubia levantó sus brazos y los estiró a los costados de su cuerpo mientras se sentaba erguida, bostezando. Y de repente, sintió que alguien le estaba tocando la espalda baja, lo que causó que un pequeño escalofrío recorriera su cuerpo. La madre de los destellos se quedó quieta mientras sentía como algo se movía lentamente hacia abajo por su espalda baja hasta llegar a su trasero, dándole un ligero apretón a su retaguardia. Una pequeña sonrisa se formó en los labios de la rubia, quien volteó a ver hacia su costado, topándose con el rostro medio dormido de su pareja, quien le estaba sonriendo.

Mario (con los ojos medio abiertos) : Hola.

Rosalina : Hola ... veo que no pierdes el tiempo ¿eh?

Mario (ríe suavemente) : Yo solo quería acariciarte, que esta sea la parte que me queda más cerca ya no es mi culpa.

La madre de los destellos se dejó caer en la cama de nuevo, por lo que el pequeño héroe retiró su mano de su cuerpo. Rosalina se acercó a Mario y le dio un beso en los labios, colocando sus manos sobre las mejillas de su pareja, quien colocó las suyas sobre la espalda de la rubia, abrazándola.

Mario (entre besos) : ¿Ves? ... yo solo quería ... darte cariño ...

Rosalina (suelta una risilla) : Bien ... te creo.

Ambos rieron suavemente antes de darse otro corto beso, tras lo que Rosalina se recostó sobre el hombro izquierdo de Mario, quien comenzó a acariciar su cabeza, jugando con su pelo.

Rosalina (suspira) : ¿Sabes? ... parte de mí no quiere salir de la cama.

Mario : Todo yo no quiere salir de cama.

Rosalina (suelta una risilla) : ¿Ni si quiera para darte un baño?

Mario : Eh ... como ex fontanero he olido peores cosas que mi propio sudor. Además, pocas cosas me pueden convencer de salir de la cama.

Rosalina : Y entre esas cosas ... (en un tono juguetón) ¿está darte un baño conmigo?

Mario : Mmmmm ... no lo sé ... 

Rosalina (hace su voz más aguda de lo normal) : ¿Ni si quiera si es en mi bañera súper espaciosa y divertida?

Mario (haciéndose el difícil) : Bueno ... así tal vez lo considere. (sonríe) Me gusta cuando dejas tu seriedad de lado y te comportas así.

Rosalina : Bueno, algo tuyo se me tenía que pegar con el tiempo ¿no?

Mario (haciéndose el ofendido) : ¿Disculpa? 

Rosalina : Ayer gastaste quién sabe cuantas duplicerezas solo para jugar un partido de baseball con los destellos, con narradores, entrenadores y público incluido.

Mario (voltea a ver a otro lado) : De acuerdo, admitiré que a veces yo ... no le doy un uso correcto a ciertos power ups.

Rosalina (le da un beso a Mario en la mejilla) : Tranquilo ... me gusta que seas así. Me ayudaste a recordar lo divertido que puede ser relajarse y no pensar demasiado en absolutamente todo.

En ese momento la madre de los destellos se separó de su pareja y se levantó de la cama mientras Mario se sentaba en esta, dejando ver que él también estaba desnudo. El pequeño héroe no le quitó la vista de encima a la rubia mientras ella sacaba una toalla y una bata celestes con estampados de maxiestrellas de su armario, tras lo que se colocó la bata junto a unas sandalias blancas. Acto seguido volteó a ver a Mario, quien estaba sonriendo.

Rosalina (suelta una risilla) : Creo que estas disfrutando esto demasiado.

Mario : ¿Puedes culparme? Lo haces todo de forma tan elegante que no puedo evitar verte mientras lo haces.

Rosalina solo le sonrió de vuelta a Mario, tras lo que se dirigió a la entrada de su habitación, retirando la barrera mágica que la mantenía cerrada.

Rosalina (voltea a ver a Mario) : Si no vas a bañarte hazme el favor de arreglar la cama y llevar las sábanas y las toallas manchadas a la lavandería, por favor. Recuerda que ...

Mario (la interrumpe) : Hay ropa extra para mí en tu armario y puedo lavar también la ropa que me traje ayer y dejarla como el nuevo repuesto para cuando vuelva a quedarme aquí en la noche.

Rosalina : Exacto.

La madre de los destellos salió de su habitación y pasó saludando a los pocos destellos que estaban despiertos mientras se dirigía a la cúpula del baño. Al llegar colocó una barrera mágica en la entrada, colgó su toalla y la bata, y se metió al agua, colocándose debajo de una de las fuentes de agua que alimentaban el área central. Lo primero que hizo fue lavarse el pelo, lo que le tomó más tiempo de lo usual debido a que el ambiente relajante del baño la incitó a quedarse a disfrutar un poco, llegando a calentar un poco el agua del lugar, generando vapor que poco a poco fue cubriendo todo el lugar. Todo estaba en paz y silencio ...

Mario : ¡¡Alla vooooooooy!!

Rosalina abrió los ojos de golpe y toda la paz que sentía desapareció por un par de segundos, colocándose de espaldas al área central del baño para evitar que le entrara agua en los ojos ¿Por qué? Por que Mario aterrizó casi de inmediato en el agua del área central mientras sostenía sus piernas cerca de su cuerpo, lanzando agua por todos lados con un fuerte chapuzón. El agua mojó todo el suelo del baño y una buena parte le dio en la espalda a Rosalina, quien también cerró los ojos. Por suerte, las toallas y la bata estaban colgadas en un lugar protegido por una barrera mágica para evitar que se mojaran por accidente. 

A los pocos segundos Mario emergió del agua, sacudiendo su rostro para quitarse un poco el agua. Acto seguido llevó sus manos a su rostro y se quitó de encima de los ojos el pelo mojado que le había caído, escupiendo un poco de agua. Mientras tanto, Rosalina lo volteó a ver algo confundida, y luego de que él abrió los ojos sus miradas se toparon.

Rosalina (aún confundida) : ¿Qué fue eso?

Mario (de muy buen humor) : Bueno, hice lo que me dijiste y ya que no habías terminado de bañarte decidí aceptar tu oferta de bañarnos juntos.

Rosalina : Eso lo entiendo pero ¿Por qué te lanzaste al agua?

Mario (confundido) : ¿Porqué es divertido?

Rosalina (se cruza de brazos) : Solo porque el área central es profunda no quiere decir que es una piscina.

Mario : Los destellos lo usan como piscina, además, si hay un área así de grande y no se usa como piscina se estaría desperdiciando el espacio ¿no crees?

En ese momento Rosalina dio media vuelta sin decir nada más, por lo que Mario se preocupó un poco, pensando que la había echo enojar.

Mario : ¿Rosy ... mi trocito de estrella? ... yo ... no era mi intención molestarse y ...

El pequeño héroe no pudo terminar de disculparse pues su pareja dio media vuelta rápidamente y le lanzó una esponja de baño, la cual le dio de lleno en el rostro. Lo siguiente que Mario escuchó fue una suave risa de parte de Rosalina, lo que causó que se relajara mientras se quitaba la esponja del rostro, sosteniéndola con su mano derecha.

Rosalina (aún riendo) : No tienes remedio jajajaja ... (le da la espalda a Mario pero mueve su rostro para verlo, cerrando ligeramente los ojos) pero te perdono ... si me ayudas a limpiarme la espalda.

Mario (se sonroja levemente) : Será un placer.

El héroe de rojo se acercó a la mujer de los ojos celestes y le colocó jabón a la esponja, tras lo que Rosalina colocó su pelo delante de su hombro derecho y se agachó un poco para que él pudiera alcanzar su cuello con facilidad. Acto seguido, Mario exprimió la esponja sobre la espalda de Rosalina, causando que una mezcla de jabón y agua, con algo de espuma, cayera sobre la delicada espalda de la rubia, deslizándose lentamente hacia abajo. Esto causó que la rubia se estremeciera ligeramente, soltando además una boba risilla. Se notaba que lo estaba disfrutando.

Rosalina : Que manera más ... curiosa de enjuagar una espalda.

Mario : Me quiero asegurar de dejarte bien limpia.

El pequeño héroe volvió a echarle jabón a la esponja y repitió la misma operación, tras lo que dejó la esponja a un lado y comenzó a usar sus manos para limpiar la espalda de Rosalina.

Mario : Y ¿Cómo haces para lavarte la espalda cuando no estoy?

Rosalina (de forma juguetona) : ¿Quieres que te enseñe?

Mario : No, no hace falta una demostración. (pensando) 'Uf, casi ... eso me pasa por querer hacerme el gracioso.'

Luego de un par de minutos, Rosalina encendió la pequeña fuente que tenía sobre su cabeza y el agua empezó a caer sobre ella, por lo que Mario, quien sentía caliente el rostro, tomó la esponja nuevamente y comenzó a usarla para quitarle el jabón a la espalda de su amada, quien también sentía el rostro caliente. Esto le parecía bastante sensual a ambos, por lo que continuaron ayudándose a darse una ducha.

Nota: Ya que mi otro libro de one-shots desapareció ¿les gustaría ver otra versión del one-shot en que Mario y Rosalina se bañan juntos? Obviamente ese sería más explícito y con más detalle ... así que ... allí dejo la idea jejeje.

Una vez que salieron del baño se dirigieron a su habitación para vestirse, colocando nuevamente una barrera mágica en la entrada. Rosalina llevaba su toalla celeste sobre el pelo, y lo primero que hizo fue quitarse la bata y sentarse en la orilla de la cama mientras Mario había empezado a vestirse, colocándose su ropa rápidamente. Él estaba acostumbrado a vestirse rápidamente, pues siempre estaba atento en caso de que algo sucediera y necesitaran su ayuda ... además de que ya lo habían interrumpido más de una vez mientras se estaba vistiendo. Por ello, se estaba abotonando las correas de su overol cuando notó que Rosalina estaba colocándose su sostén, con su pelo ya suelto y la toalla que había usado para secarlo colocada a su lado. El pequeño héroe dejó la correa derecha de su overol sin abrochar y se subió a la cama, gateando hasta colocarse de rodillas detrás de la madre de los destellos, tras lo que tomó los elásticos de su sostén con sus manos, causando que ella los soltara mientras sonreía. Mario abrochó su sostén y se aseguró de que las correas en sus hombros estuvieran bien colocadas, ganándose una suave risilla de parte de su amada, quien dejó quietos sus brazos para que su pareja pudiera revisar su ropa interior sin problemas. Una vez que el héroe de rojo se sintió satisfecho, le dio un beso en el hombro izquierdo a la rubia y la abrazó por la espalda, reposando su frente en su hombro mientras acariciaba su estómago con sus manos.

Mario (en un tono juguetón) : Para que veas que no solo te quito la ropa, sino que puedo ponértela también.

Rosalina (ríe) : Sí, pero ... me gusta más cuando me la quitas ...

Mario solo rio también y quitó sus manos del vientre de Rosalina, separándose de ella y ambos continuaron vistiéndose. Como Mario fue el primero en terminar, salió de la habitación para despertar a los destellos y juntarlos en la cocina para el desayuno mientras Rosalina se arreglaba el pelo. Y una vez que estuvo lista se dirigió a la cocina para que toda la familia desayunara junta, tras lo que el pequeño héroe decidió alistarse para regresar a la Tierra.

Destello M. (mirando a Mario) : ¿Ya te vas a ir?

Mario : Bueno, estuve todo el día de ayer aquí.

Destello M. : ¿Y eso qué? (voltea a ver a Rosalina) ¿No lo dejas quedarse más de un día aquí?

Rosalina (sonríe) : Yo no le tengo restricciones a Mario, pero él debe regresar a su hogar en la Tierra.

Mario : Pero, si no es mucha molestia, puedo quedarme hasta la tarde.

Destello M. : ¡Sí!

Destello azul : ¡Así podremos jugar otro poco más!

Destello rojo : Además, estoy seguro de que Mario querrá revancha por lo de ayer.

Mario : Estaba siendo suave con ustedes.

Destello verde : Estrellarte contra un asteroide a medio vuelo me parece un poco exagerado si solo querías dejarnos ganar.

Mario (fingiendo) : Es porque cuando hago algo, lo hago bien. (pensando) 'Debería practicar más con la estrella roja o no seré capaz de mentir a la próxima.'

Rosalina : Muy bien, entonces Mario se quedará un poco más.

Todos los destellos estaban felices de que el héroe de rojo se quedara más tiempo en el planetario, por lo que se dirigieron a hacer sus tareas en el hogar con mucha emoción. Mientras tanto, Mario y Rosalina se quedaron juntos en la cocina, lavando los platos que habían usado durante el desayuno.

Rosalina : Entonces ... ¿te vas a regresar luego del almuerzo?

Mario : Bueno, si no es mucha molestia. Me siento mal quitándote espacio y comida jeje.

Rosalina (algo sonrojada) : A mí no me molesta. Al igual que ellos ... quisiera que te quedaras más tiempo.

Mario (suspira) : Oye, yo ...

Rosalina (lo interrumpe) : Tranquilo, no sientas que debes darme más explicaciones. Yo ... entiendo que no te sientas listo para abandonar tu hogar de forma tan drástica. Acostumbrarse a esta vida toma tiempo.

Mario : Bueno ... podríamos hacerlo por temporadas.

Rosalina : ¿Uh?

Mario : Ya sabes ... gradualmente. Podría vivir aquí un par de meses mientras estamos cerca de la Tierra. Luego viviría aquí durante un viaje a otros rincones de la galaxia para buscar destellos perdidos o que acaban de nacer ... y así hasta que me acostumbre a la idea de vivir aquí y no estar siempre cerca de la Tierra.

Rosalina (abraza a Mario) : Me parece una excelente idea.

El pequeño héroe dejó el vaso que estaba secando sobre la mesa y le devolvió el abrazo a su pareja.

Y ya en la tarde, cuando era el momento de regresar a su hogar, Mario se despidió de Rosalina con la promesa de que pronto se mudaría temporalmente a su casa, para así comenzar un nuevo capítulo en su vida ...

Lamento que este one-shot sea más corto que el resto. No he tenido mucho tiempo libre, así que escribí esta idea que tuve algo rápido antes de que se me olvidara jajaja. Intentaré que el próximo one-shot sea mejor :D