Ronnie anne aprovechó la única tarjeta de habilitación que consiguió con trueques de otras reclusas para poder llamar a su abuela al edificio de Great lake city, ella era la única que podía ayudarla con el pago a la chica emo para que ella pudiera sacar a Albert del patio.

-Abuela por favor, solucióname esto, necesito ese dinero ahora, sácalo del banco, como sea , pero lo consigues-

-...

-¡No me importa si tienes reunión en el edificio! ¡esto es de vida o muerte! Si no haces esto ahora , Carlota y yo saldremos de aquí en un condenado ataúd, lo digo en serio-

-...

-Gracias Abuela, no sabes cuánto te agradezco mucho-

Sintió una mano en su hombro fuertemente.

-AY!- se volteó asustada, con las manos en su pecho.

-Santiago, La directora quiere verte, vamos ¿Qué te pasa? No soy un fantasma-

-Maldita sea Sue, casi me matas- dijo Ronnie anne mientras se iba junto a Sue hacia donde se encontraba la directora de la prisión.

En la sala de carpintería...

Lisa se encontraba probando una sierra automática de carpintería, había cortado dos pedazos de madera gruesa.

-Me salió obsoleto, definitivamente mis manos no sirven para la carpintería- dijo la Loud genio para sí misma.

-Directora, aquí está Santiago- dijo Sue entrando junto a Ronnie anne.

-¿Qué onda Loud?-

-Gracias Sue, puedes retirarte-

Sue asintió y dejó a Lisa con Ronnie anne.

-Imagino que debe ser una razón importante para mandarme a llamar aquí- dijo la latina.

-No te equivocas Santiago, necesito que me ayudes con algo, esto nadie lo sabe, desapareció un guardia, no es tan difícil de reconocer, se trata de Albert Stimbelton, el único guardia masculino de la prisión-

Ronnie anne asentía mientras fingía estar sorprendida con la noticia que Lisa le daba.

Una prisionera tomó un martillo de la carpintería, pero otra reclusa la tomó de la mano.

-¡Oye! Voy a usar eso-

-Préstamelo , lo usaré un par de minutos-

La otra reclusa negó con la cabeza.

-De ninguna manera, dame ese martillo-

-Préstamelo o voy a usarlo para abrir esa cabeza tuya-

-¿¡QUE DIJISTE PERRA!?-

Repentinamente ambas mujeres se jalaron del cabello, llamando la atención de Ronnie anne y Lisa, Las guardias rápidamente fueron a separarlas.

-¿¡Qué rayos les pasa a ustedes cavernícolas!? – reprendió Lisa mientras golpeaba la mesa con un palo de madera que encontró.

-¡Pelean por cualquier cosa! ¡sáquenlas de aquí!-

Las guardias se llevaron a las revoltosas.

-¡Maldita sea! ¡Y después hablan de derechos laborales!- les gritó la directora.

Recuperando sus compostura, Lisa se volvió hacia Ronnie anne.

-Escucha Santiago, olvida lo que dije, tendré que adelantar las cosas, necesito que esta misma noche le declares la guerra a Lola, quiero saber si estás lista , dime Ronnie anne ¿Cómo tienes la valentía y tus cojones?-

Ronnie anne solo sonrió y le dio un guiño de ojo a Lisa.

Lisa sonrió, esa expresión era más que suficiente para ella.

- Perfecto, confío en ti, te diré el acceso al call center de Lola, yo dejare el camino despejado y desactivaré las cámaras para que tú y tus chicas puedan actuar-

Dicho todo Lisa dejó el lugar dejando a Ronnie anne entrecerrando los ojos y sonriendo, por fin ella tenía luz verde para ir a declararle la guerra a la gran Lola Loud.

"Ahora veremos quién de las dos tiene más "Ovarios" Lola Loud" pensó la latina.

Afuera de la prisión, en un restaurante...

La abuela Casagrande quien había retirado el dinero de su caja de ahorros en el banco fue directo a establecer el pago con unas chicas de quienes su nieta le pasó el número y la descripción.

Rosa notó una mesa donde se encontraban sentadas dos chicas rubias de piel pálida y ojos azules.

- Hola ¿Ustedes son las primas de Margaret?-

-Así es – respondió una de las chicas quien masticaba un chicle.

-¿Usted es la señora Casagrande?-

-Si, soy yo-

La abuela Casagrande tomó asiento, sacando el sobre con dinero de su cartera.

-Aquí esta el dinero, pueden contarlo aquí si quieren-

Las primas de Maggie tomaron el sobre, sacaron el dinero y lo contaron, la cantidad era la acordada.

-Perfecto, muchas gracias a usted señora- agradeció la chica.

-Usted es una persona considerada- dijo la otra chica rubia.

-Gracias , Ustedes son chicas muy educadas, tengo una pregunta ¿ustedes son colombianas? puedo notarlo en su tono- inquirió la abuela Casagrande.

-Somos norteamericanas, nacimos aquí pero fuimos criadas en Colombia- respondió la chica.

-Oh, bueno, yo soy mexicana, nacionalizada legalmente como norteamericana, si su prima es amiga de mi nieta entonces sé que nos llevaremos muy bien, pero me gustaría que llamen a su prima ahora y le avisen que el pago está hecho por favor-

Las primas de Maggie se sorprendieron.

-Vaya señora, usted sí que es astuta-

-Más sabe el diablo por viejo que por diablo- respondió la abuela Casagrande.

-Haz la llamada por favor- pidió la prima de Maggie a su hermana, ella asintió y marcó el número telefónico de su prima.

Afuera de la prisión...

El horario de trabajo de Francisco se había terminado, no sin antes dejar una denuncia o reporte respecto al tema de los gigolós ilegales en la cárcel, grande fue su sorpresa cuando se encontró a Darwin, el chico que había conocido tratando de ponchar las ruedas de su auto con un cuchillo.

-¿¡Pero qué haces chico!?-

-Tú!-

Darwin se acercó con el cuchillo a Francisco mirándolo con mala cara, el amigo de infancia de Lynn se sentía levemente asustado.

-O-Oye muchacho, cuidado con ese cuchillo, no hagas una tontería-

- ¡cierra la boca!- gritó el chico.

-¿Crees que no sé que tú eres el causante de que no me permitan entrar a Black Flower?-

-Solo quería ayudarte niño-

-¿Ayudarme? Hahahahaha-rió Darwin con burla.

-Tú no me conoces ¿y quieres ayudarme? Te lo diré una vez, no te metas en mis asuntos! Si no quieres que las ruedas de tu auto tengan otra visita-

Sin dejar de mirarlo con enojo, Darwin se fue caminando, Francisco suspiró de saber que el adolescente no hizo nada más que tratar de intimidarlo.

Al voltearse se encontró con Hugh quien tenía una mirada sería, entrecerrando sus ojos.

-Mejor hazle caso al chico, te metes con gente muy peligrosa, mejor deja las cosas en paz-

Lejos de mostrar miedo, Francisco sólo sonrió con burla.

-¿Gente peligrosa? ¿Cómo quien? ¿tú?-

Hugh se retiró hacia donde Darwin se había retirado, sin dejar de mirar en forma desafiante a Francisco.

En el patio...

Ronnie anne y sus chicas se encontraban nerviosas, esperando impacientemente la llegada de Maggie para deshacerse del problema de una vez por todas.

-No puede ser, por qué tarda tanto- se preguntaba Ronnie anne cruzada de brazos sin dejar de observar la entrada del patio.

Maggie salió de la cocina con un gran recipiente sobre una carretilla de dos ruedas, encontrándose con la mirada atenta de Sue, quien custodiaba la entrada.

-Hay que trabajar, tengo ir a lavar esta carne, es res de primera- explicó la emo sacando un pedazo de carne del recipiente para enseñarla.

La guardia arqueó una ceja.

-¿En el patio?-

-Si, en el patio ¿Dónde más?-

La guardia se encogió de hombros, sacó las llaves abriendo la puerta con barrotes, dándole a Maggie el acceso al patio.

-Adelante, sal-

Sam observaba todo desde su casucha.

Maggie miró a Ronnie anne, La emo asintió con una media sonrisa que la latina inmediatamente correspondió.

Maggie se metió detrás de la casucha para así escabullirse del ojo vigilante de las guardias, llegó hacia donde Carol y Nikki la esperaban, ellas habían colgado mucha ropa así las guardias no las verían mucho.

-Hola soy Carol Pingrey, un gusto- saludó Carol.

-y yo soy Nikki- saludó la rubia con capucha.

-Hola, soy Maggie- respondió la emo sin rodeos,

-Ahora, donde está el cuerpo?-

Carol y Nikki rápidamente sacaron los colchones y tablas revelando al cadáver de Albert en una bolsa negra de plástico, las dos rubias ayudan a Maggie a meter el cuerpo dentro del recipiente.

Sam le hace señas con la mirada a Ronnie anne, alertándola de la presencia de Sue en la entrada del patio.

Ronnie anne rápidamente le hace una seña con las manos a Carlota, Carlota les hace las mismas señas a las chicas.

Ronnie anne observa a la guardia que vigilaba desde arriba, de forma atenta, por fortuna para ella, la guardia se alejaba, Ronnie sonríe y les hace la señal para que continúen, Carlota asiente con una sonrisa.

-Vamos contínuen chicas-

-Bien...-

-No esperen, paren-

Maggie y Carol esperaron en silencio.

-No no, continúen-

Maggie siguió metiendo el cuerpo más adentro del recipiente con todas sus fuerzas.

-No no , paren...

Maggie se detuvo y miró a Carlota, mientras que la chica Casagrande se rió.

-No no, me confundí, mejor sigan hahaha-

-Maldita zorra...- murmuró Maggie molesta al darse cuenta de que Carlota solo les estaba tomando el pelo, Carol sólo miró confundida a la prima de Ronnie anne, Nikki negaba con la cabeza mientras sonreía.

-hehehe- reía la chica Casagrande para sí misma.

Por fortuna para las marginadas, el cuerpo del guardia Albert entró sin problemas en el recipiente, Sin perder tiempo, Maggie se lleva el recipiente lejos.

-Todo listo- dijo la emo sonriendo victoriosa mientras entraba de regreso a la prisión.

Ronnie anne sonrió con alivio y se sentó sobre una caja, ahora sí podía respirar con tranquilidad.

Viendo que todo el traslado secreto estaba exitosamente hecho, Sam se metió de vuelta a su casucha.

Carol y Nikki rápidamente quitaron los colchones, recogieron agua de la pileta y la derramaron sobre el pequeño charco de sangre que dejó el cadáver, barrieron cualquier indicio o rastro con la escoba, al terminar, aquí no pasó absolutamente nada, el incidente jamás ocurrió, era el pensamiento de la latina.

En la cocina de la cárcel...

Las reclusas ayudantes y compañeras de cocina de Maggie , Agnes, Stella y Becky, todas ellas esperaban aburridas a que la chica emo llegara de una vez.

-Ya estoy aquí- dijo Maggie llegando a la cocina con el recipiente.

-Te tardaste demasiado- dijo Agnes Johnson con una ceja levantada.

-Oh perdón Agnes- se disculpó Maggie con sarcasmo.

- hubiera ido más rápido así se me caía el cadáver a la vista de todas, no seas idiota-

Becky trajo los serruchos y cuchillos para entregárselos a Stella.

-Oigan chicas, no es tan gordo ¿verdad?- preguntó Stella dudosa.

-Sólo cállate y empieza a cortar Stella- ordenó Maggie quien fue la primera con utilizar el serrucho para cortar el brazo de Albert.

Dentro de la prisión, 7:00 hs de la noche...

La fiesta de cumpleaños del hijo de Lola había dado inicio, todos los invitados se hicieron presentes en la prisión de Black flower, amigos y amigas de Winston jr, el hijo de Lola, el padre quien también era su esposo también estaban presentes.

Los padres de los amigos de su hijo también asintieron, Fiona, quien tenía puesto un vestido verde y un moño del mismo color fue la pareja de baile de Winston junior, Jackie estaba presente, al igual que Meli Ramos, Robba y Shy Qt también, Sam también sentada junto a Lola y su esposo Winston observando la fiesta, La energía positiva de una festividad era lo que la ex rockera necesitaba para distraerse un poco.

-¡Trátala bien hijo!- dijo Lola a su hijo quien cumplía 14 años esta noche.

-Es la mujer más bella que te conseguí para tu pareja de baile, no sabes lo ansiosa que estaba Fiona-

El joven adolescente rubio asintió con una sonrisa mientras miraba a su madre.

-Tienes una gran madre ¿Te diviertes Winston?- preguntó Fiona.

El asintió en respuesta.

-Es la mejor madre del mundo, esto es una bonita fiesta, tú eres muy bonita-

-Ayyy, gracias, tú eres muy lindo y caballeroso- respondió Fiona halagada.

Sam miraba sorprendida ¿esa era Fiona? Se preguntó para sí misma, con ese vestido verde , el moño y esa encantadora sonrisa genuina se veía bastante diferente, no se parecía en nada a la prisionera matona que mataba incluso con la mirada, la mujer fría que la protegió a ella de Kat, Cristina y las demás.

-Sam, te agradecería que no observaras tanto a mi retoño, aún no quiero que ninguna chica lo mire-

Sam miró a Lola con los ojos abiertos.

-¿Qué? No Lola , no era eso, sólo miraba a Fiona, lo juro-

Lola arqueó una ceja.

-A veces olvido que te gustan las mujeres-

Sam rió levemente y negó.

-No, no lo digo por eso, solo tengo ojos para Mazzy, es solo que me sorprende ver a Fiona con otro atuendo y sonriendo, ella parece otra persona-

Lola miró a Fiona, su fiel subordinada durante un momento.

-Tienes razón, las apariencias siempre engañan Sharp-

-Eso no lo dudo Lola-

-Verás- comenzó a explicar Lola.

-Fiona alguna vez fue una chica feliz, ella tenía una familia, un esposo y un hijo que la amaban y viceversa-

-¿Y Luego que pasó?- preguntó Sam con curiosidad.

-La vida, eso le pasó, digamos que ellos eran su felicidad y la cruel vida se la arrebató, es todo lo que tienes que saber-

-Eso no explica cómo llegó a este...-

-Eso la cambió, las personas cambian Sam ¿entiendes? Cuando ella llegó, ella no estaba en buenas condiciones, yo la ayudé y la saqué de su depresión, la convertí en lo que soy yo, una mujer indestructible, desde entonces, ella me juró eterna lealtad, y hace todo lo que yo le pida-

-Ahora comprendo- asintió Sam mientras miraba a Fiona bailar con Winston jr.

-No le menciones lo que te dije y no le recuerdes de su pasado, o ella te golpeará hasta dejarte sin dientes- advirtió Lola.

Sam asintió en respuesta.

-No pensaba hacerlo-

-Excelente decisión- comentó La Loud rubia sin dejar de sonreír, su expresión cambió a una pensativa.

-Siento que falta algo aquí ¿pero qué cosa es?- se preguntó.

Dos prisioneras trajeron unos estantes de vidrio que contenían unos objetos, cuatro tiaras de cristal, objetos que eran considerados valiosos para la Ex princesa.

-Oh claro, mis preciadas tiaras de cristal, nunca voy a un evento importante sin ellas-

-¿Cómo es que tienes eso adentro?-

-Te diré un secreto no tan secreto- dijo Lola indicándole con el dedo a Sam que se acercara para poder susurrar, Sam se agachó cerca de Lola.

-Estas tiaras no son mías legalmente hahaha-

-¿¡qué!? ¿¡enserio!?-

Lola asintió mientras reía en forma maliciosa.

-Las palomas me las trajeron, no creí que lo lograran pero lo hicieron, esas tiaras eran mías por derecho, eran premios de grandes concursos que yo gané limpiamente- explicó Lola contando otra anécdota.

-cuando mis ex hermanas cometieron la estupidez de matar a mi único hermano , cuando ocurrió el juicio, cuando todo eso fue un escándalo en toda la maldita nación, el jurado del concurso me confiscó mis preciadas Tiaras, creyeron que no las merecía-

Lola entrecerraba sus ojos con odio, Sam solo se limitó a mirarla y escucharla.

-Pero ahora eso no importa, quedó en el pasado, ahora las tengo conmigo, nadie sabe que yo las tengo aquí-

Lola extendió su mano hacia todo el lugar.

-Todo lo que ves aquí es mío Sam, esta prisión es mía, todas las reclusas son mías, ese muchacho rubio es mío, mi esposo es mío- dijo Lola mientras se acercaba para darle un beso a Winston padre en los labios, que el aceptó afectuosamente.

-¡TODO ES MÍO! HAHAHAHA!-

Lola se calmaba mientras dejaba de reír, luego dio un par de aplausos fuertes llamando la atención de los invitados y el cumpleañero.

-¡Atención, todos los invitados!-

Lola apuntó con el dedo índice hacia su hijo, dándole una mirada de cariño y afecto, como cualquier madre con su primogénito.

-Winston Marie Loud junior, hijo mío, abre bien esos hermosos ojos que heredaste de mí, por que esta sorpresa es para ti ¡que pase el entretenimiento!- ordenó la Loud rubia.

Con un vestido rosa y moño del mismo color puesto, Cookie entró saludando a los invitados, Robba de repente la agarra por detrás y la levanta hacia arriba como si fuera una pequeña infante, disgustada con esa acción, Cookie empujó a Robba una vez que ella la bajó en el suelo.

-Qué te pasa imbécil!-

-¡Cuchi cuchi!-respondió Robba a la ex galletera, con la intención de fastidiarla.

-¿Qué les pasa a todos? ¿están todos dementes? ¿eh? ¿¡Eh!?- dijo Cookie haciendo su acto, luego dio un golpecito contra la mesa donde estaban sentadas, Lola, su esposo Winston, sus secuaces y Sam.

-Escúchame una cosa Lolita, si sabía que esto era una fiesta yo no aparecía-

-No te enojes chiquitina, no te enojes- dijo la Loud rubia sonriendo.

-¿Qué? ¿quieres que la pase bien o qué?- preguntó Cookie.

-Pues hazlo, sabes una cosa, esta es tu fiesta también, mira a mi hijo, abrázalo y sácate fotos con él- pidió

-¿Él?- preguntó Cookie mientras levantaba el brazo y señalaba con el dedo al chico de cabello rubio, Winston se acercó a darle un abrazo y un beso en la mejilla, pero Cookie fue más rápida y le dio un beso en los labios sorprendiendo al hijo de Lola, ganando unas risas de los invitados.

-Hahaha!- aplaudió Lola.

-¡Vamos, bailen todos!-

Ahora si la fiesta se había animado con todo.

-Vamos Sam, ve y baila, disfruta la fiesta- pidió Lola.

-Qué? N-No , gracias Lola, pero yo no bailo muy bien, domino una guitarra pero no bailes-

-Tonterías, sólo diviértete, te prestaré a mi esposo, Winston, baila con ella por favor-

-Claro mi dulce- respondió Winston sonriendo y levantándose de su asiento.

-Vamos- invitó el.

-Bueno, ya que- Sam cedió y tomó la mano del esposo de Lola y se fueron a bailar junto con los demás en la fiestas.

Lola se sentía genuinamente feliz mientras veía como su hijo disfrutaba de la fiesta, esta noche sería una gran noche para recordar.

-Lo hiciste bien como siempre Lola- se dijo ella para sí misma.

En el Call center de Lola...

Las prisioneras que trabajaban para Lola seguían haciendo en su labor de crear llamadas extorsivas y conseguir dinero para su jefa.

-Hola.... Tenemos a tu hija ... ¿hola? ¡Hola!- La carpintera colgó el teléfono, quien estaba sentada junto a su compañera de celda.

-Imbécil, me colgó-

Una prisionera joven junto con Joy estaban sentadas en otra mesa haciendo otra llamada, La prisionera joven fingía ser una chica secuestrada afligida a la perfección.

-Mamá mamá por favor ¿me escuchas? Tienes que darles el dinero por favor, estas personas me van matar!- dijo fingiendo desesperación.

Joy toma el teléfono.

-Ya escuchó a su hija señora, más vale que nos entregue cantidad que exigimos si no quiere que le devolvamos a su hija parte por parte , si entiende lo que digo-

"Pero....pero no tenemos esa cantidad de dinero!" *llorando*

-Eso no me interesa, usted consigue ese dinero como sea, o su hija lo pagará-

Ronnie anne y su banda, quienes usaban máscaras de animales para proteger su identidad se acercaron sigilosamente al lugar, Carlota llevaba una máscara de tigre, Carol llevaba una máscara de gato negro, mientras Nikki tenía puesta una máscara de jabalí, y Ronnie tenía una máscara de ardilla.

-Más vale que tengas el dinero por que si no...- la prisionera dejó de hablar por teléfono cuando notó la presencia de las cuatro intrusas inesperadas, intentó correr pero Carlota la tomó por los hombros y la estrelló contra la pared.

-¡A dónde crees que vas perra!- preguntó ella mientras le enterraba una patada en el estómago.

Carol quien tenía un fierro golpeó a otra prisionera con él una y otra vez, Joy tenía un cuchillo guardado e corrió a utilizarlo contra Ronnie anne.

Viendo venir ese ataque, Ronnie anne sujetó su brazo donde tenía el cuchillo y le dio un cabezazo en la cara, acto seguido, estrelló el rostro de Joy contra la pared con todas sus fuerzas dejándola inconsciente.

Nikki dejó de castigar con el fierro a la última prisionera cuando notó que esta dejó de moverse, una vez que terminaron de desmovilizar a las operadoras.

Nikki, Carlota y Carol tomaron unos galones de gasolina que trajeron con ellas y empezaron a derramar todo el call center con gasolina, los teléfonos, las mesas, las prisioneras insconcientes, todo.

-Lo quiero todo cubierto de gasolina, tiene que arder todo- ordenó la chica Santiago.

-Ya está listo Ronalda- dijo Carlota.

-Perfecto prima- Ronnie anne sacó una caja de fósforos de su bolsillo y encendió uno.

Ronnie anne miró a su prima y a las dos rubias, las cuatro comenzaron a reírse en forma triunfal, la latina lanzó el fosforo y todo el lugar ardió en llamas en una pequeña fracción de segundo.

-¿Puedo lanzar uno?-

-sírvete prima-

-Hahaha, Como me encanta el fuego- dijo Carlota lanzando otro fósforo encendido avivando más las llamas ardientes en el sitio.

Una vez que el trabajo estaba hecho las cuatro chicas marginadas salieron corriendo del lugar mientras reían, este acto que cometieron no era un ataque, era una declaración de guerra, además de un golpe directo a Lola.

En el cumpleaños...

-¡Atención todos!- exclamó Lola volviendo a interrumpir la música, llamando la atención de los invitados de nuevo.

-Reciban todos con un aplauso a la cantante de country del momento, Lindsay Sweetwater!-

La pelirroja entró a la fiesta, con una sonrisa, un poco maquillada, con la intención de ocultar un poco su ojo morado, pero mucho no le sirvió.

Con el micrófono en mano , Lindsay animó la fiesta, los amigos y amigas de Winston jr se emocionaron por la presencia de la famosa cantante de los últimos años.

La mayoría de ellos consideraba inocente a la pelirroja, no creían que ella fuera capaz de envenenar a sus dos representantes.

-¡Hola a todos!- saludó Lindsay con una sonrisa.

-¡Ha llegado el momento de cantar!¡todas mis canciones dedicadas al querido cumpleañero Winston Junior!-

Winston jr sonrió emocionado de saber que Lindsay sweetwater le dedicaría sus canciones en su día, Lola formó un corazón con sus manos para su hijo.

Lindsay comenzó a cantar uno de sus singles.

"Qué puedo decir, tu me haces falta, no lo puedo negar"

"Por qué tu te fuiste lejos de mí"

Lindsay caminaba mientras cantaba y acariciaba las cabeza de los invitados, luego se acercó al esposo de Lola, mirándolo al rostro mientras cantaba, como parte de su acto.

"El sol, El campo, El cielo, daría todo eso con tal de verte a ti"

Lola celosa le dio una leve cachetada a la pelirroja, mirando a su ex rival con molestia, a pesar de la música alta, Lindsay pudo leer sus labios.

(qué te pasa) preguntó Lola desafiante.

La ex princesa aún recordaba con enojo esos días en los concursos de princesa cuando Lindsay coqueteaba con Winston para obtener un puntaje más alto.

Robba sólo se rió ante la escena, al igual que Shy Qt, Lindsay caminó hacia el escenario para continuar cantando y animando la fiesta, Un invitado se subió a abrazarla y correspondió sin soltar el micrófono y seguir cantando.

En el patio...

Las chicas ingresaron de regreso al patio, corriendo silenciosamente, en forma sigilosa, pudieron entrar en su casucha, se quitaron las máscaras, Carol Pingrey empezó a reír.

-Hahahaha, realmente quisiera ver la cara de Lola cuando se entere de lo que hicimos con su pequeña operadora-

-Apuesto que estallará como una bomba, quedará sin cabeza, como en las caricaturas- dijo Carlota empezando a reír junto a ella.

-Esto requiere una celebración ¿qué dicen chicas?-sugirió Nikki.

-Si, no podría estar más de acuerdo – opinó Carol.

-Shhh hablen en voz baja- pidió Ronnie anne con el dedo en sus labios, llenó unos vasos con vino y se las entregó a su prima y a las dos rubias.

-Hagamos un brindis chicas, esto es un golpe grande que hay que celebrar-

-Por nosotras- dijo Carlota.

-Por nosotras!- dijeron las cuatro chicas al unísono, se bebieron el vino, Ronnie siguió hablando.

-Esto es sólo el comienzo chicas, no lo duden, ni por un segundo, la meta es destronar a Lola Loud y ocupar su lugar-

Mientras Carol y Nikki reían y conversaban, Carlota miró a su prima recostarse en un lado de la entrada de la casucha para observar el firmamento nocturno, La chica Casagrande se acercó junto a ella.

-Creí que las estrellas no llamaban tu atención-

-Sólo cuando pienso en el futuro, espero que sea algo glorioso lo que nos espera más adelante, Carlota-

Carlota sonrió mientras colocaba su brazo sobre el hombro de su prima.

-Será grandioso nuestro futuro Ronalda, ya lo verás-

Ambas chicas, primas ,pero hermanas en cierto sentido, miraron al cielo estrellado con una sonrisa, esta noche era de ellas, mañana sería el día en que tendrían que prepararse para cualquier piedra que el enemigo les lanzara.

En la sala de visitas, durante el cumpleaños...

Lindsay terminó de cantar, ganándose los aplausos de los invitados, ella sonrió.

-Gracias, muchas gracias a todos-

Robba le arrojaba pedazos de pan a Lindsay, La pelirroja tenía que soportar esa pequeña humillación, no tenía opción.

-Ya deja de hacer eso- pidió Shy.

-¿qué? estoy aburrida- dijo Robba con una expresión aburrida.

-Si Robba, ya detente, vas a matar a la pobre chica- dijo Lola sonriendo, la Loud rubio volvió a dar otro anuncio más.

-¡Bien invitados! Ahora reciban con aplausos a Winston, quien cantará un dueto con la talentosa Lindsay Sweetwater!-

Lindsay frunció el ceño, Lola nunca le había dicho que tenía que hacer eso, sin embargo fingió un sonrisa falsa y aplaudió.

Winston, quien tenía un sombrero y traje campirano, con un micrófono, fue abrazado por una reclusa antes de subir al escenario junto con Lindsay.

-¿Estás listo chico?- preguntó ella.

-Si, claro Lindsay-

-¿Sabes mis canciones de memoria? Igual no importa si te equivocas con algunas letras-

El negó en respuesta.

-Descuida, ahora empecemos- dijo el joven con una sonrisa.

Dos prisioneras llegaron con el pastel con una vela en forma del número catorce.

-Vamos, sopla las velas conmigo Lindsay- pidió el hijo de Lola con una sonrisa.

-Claro, con mucho gusto- respondió ella sonriendo.

Ambos soplaron las velas del pastel juntos.

"Realmente espero que no seas como tu madre" pensó la chica pelirroja.

El cumpleañero y la cantante empezaron a cantar su dueto.

Mientras Lindsay cantaba junto a Winston jr, Lola se emocionaba al ver a su retoño , la Loud rubia sonreía, con lágrimas en los ojos.

-¡Ese es mi muchacho!-

Maggie, quien era una de las encargadas y meseras designadas de la fiesta, apareció con un vestido negro con toques de gris, con un plato de una de las tradicionales comidas mexicanas en mano.

-¿Burrito?- ofreció la chica emo a Robba.

-Oh, gracias tarada- la chica ex interdimensional tomó uno y le dio un mordisco.

-No, gracias a ti- respondió Maggie sonriendo en forma maliciosa, quien sabía perfectamente de la procedencia secreta de esos burritos.

-¿Burrito?- ofreció a Lola.

Lola tomó uno, al igual que Fiona lo hizo, ambas comieron sin notar nada raro en el sabor de estos.

Sam inmediatamente rechazó los burritos que ofreció Maggie, esta tarde ella le había preguntado a Carlota que habían hecho con el cuerpo de Albert.

*Flashback*

Sam se encontraba caminando por el patio cuando se encontró con Carlota quien estaba barriendo y cantando por el patio.

-Oye....Carlota-

-Oh, como estás Sam ¿qué me cuentas?- preguntó la chica Casagrande en forma alegre.

Sam susurró en voz baja.

-Dime ¿qué hicieron con el cuerpo de ese guardia?-

Carlota miró a quien consideraba su mejor amiga de la cárcel durante un momento.

-No comas burritos en la fiesta Sam, nos vemos!- se despidió Carlota antes de seguir cantando y barriendo con la escoba, dejando a la ex rockera confundida.

-¿Eso qué tiene que ver con lo que te pregunté?-

*Fin del flashback*

Ahora Sam realmente deseaba que esa respuesta hubiera sido una broma, pero no, aparentemente, no lo era.

Viendo con asco y repulsión como Lola, Fiona y Robba se comían y degustaban el burrito, Sam llevó la mano a su boca, conteniendo las ganas de vomitar que tenía en mismo momento.

-Hehehe- reía Maggie para sí misma.

Joy , quien pudo escapar con vida del call center fue corriendo hacia el salón de visitas donde se desarrollaba el cumpleaños.

Jadeando, Joy llegó al lugar, sorprendiendo a Lola, Fiona y Sam, llamando la atención de los invitados y el cumpleañero.

-L-Lola-

-¿¡Qué rayos haces aquí Joy!? – Le reprendió Lola muy enojada.

-¿¡por qué no estás trabajando!? Fiona, sácala de aquí-

Fiona estuvo a punto de sacar a Joy pero la chica de color recuperó el aliento y explico.

-N-No Lola, atacaron nuestro Call center, lo destruyeron, lo prendieron fuego, fueron un grupo de prisioneras enmascaradas, no las pude reconocer pero eran cuatro, casi me matan, apenas pude escapar de ahí para avisarte-

-N-No puede ser- El rostro de la ex princesa enrojeció con ira pura.

-Seguramente eso fue obra de Lisa con las brujas del patio- dijo Robba.

-¿Quién más les permitiría el acceso al Call center?-

Sam se encontraba mirando hacia el suelo pensativa, Lola notó eso de ella, sospechando de inmediato.

Sin mediar palabra Lola tomó su cetro y golpeó la cara de la ex rockera, luego la agarró del cabello y la acercó a ella, colocándola cerca de ella cara a cara.

-Tú sabes quienes fueron ¿No? ¿¡NO!?-

-N-No ...no tengo idea Lola!- respondió Sam asustada.

-IIRGH!- Furiosa, Lola Loud hundió la cara de Sam contra el pastel de su plato, embarrando su rostro en el postre.

La música se detuvo, Winston junior y Lindsay dejaron de cantar y miraron sorprendidos la reacción violenta de Lola.

-¡Mamá! ¿¡que haces!? ¡Arruinas mi fiesta!- gritó Winston jr.

-¡CÁLLATE! ¡ES ASUNTO DE TU MADRE!- gritó la ex princesa, Winston jr miró a su madre con miedo, al igual que el esposo de Lola quien se mostraba más aterrado.

Lola volvió su mirada furiosa de nuevo hacia Sam.

-¿¡QUIENES FUERON!? ¡HABLA AHORA!-

-N-No lo sé, lo juro!- respondía Sam mirando a Lola tratando de formular palabras con el pastel en gran parte de su cara.

-¡HABLA! ¿¡CREES QUE SOY ESTÚPIDA!? ES LOLA LOUD CON QUIEN HABLAS!-

Fiona, Meli Ramos, Jackie quienes estaban detrás de Lola le daban una mirada asesina a la ex rockera.

-¡HABLA O TE ASESINO!- amenazó furiosa la Loud rubia.

-¡Realmente no lo sé!- juraba Sam.

CONTINUARÁ...

El capítulo 4 , y así empezó la guerra señores, jajaja, Ronnie anne le pudo declarar la guerra a Lola Loud , ahora ¿qué represalia tomará Lola con Ronalda? Pronto en el siguiente capítulo.

Ella se la va a cobrar y con intereses.

Por si aún no notaron que ocurrió con el cuerpo de Albert, vuelvan a leer el capítulo.

Realmente amo cuando actualizo dos fanfics, The Loud house: La arena de los dioses, por si quieren pasar a leer.

Próximo capítulo, Darcy regresa al patio recuperada del hospital.