—No es modelo. —asegura el fotógrafo.

—¿Cómo? —pregunta el ejecutivo.

—Que no es modelo. Estaba en la playa el día que hicimos la sesión con Marcus. Sentía que le faltaba algo en las últimas fotos, la vi...Y bueno, aquí está. —asegura el fotógrafo.

—Interesante historia. —comenta el ejecutivo acariciándose la barbilla con los dedos pulgar e índice de una mano. —Estas fotos son fuego puro. No son las primeras fotos de este tipo que he visto de Marcus con modelos pero ninguna de ellas desprendían este fuego, sensualidad y deseo. Esa es la palabra ; deseo. Mirándolas pareciera que estos dos se atraen muchísimo física y sexualmente y están a punto de sucumbir a la tentación.

—Eso fue lo que yo pensé al verlas. Sin embargo, cuando estaba haciendo esas fotos, la sensación que usted me describe era mucho más intensa. Han hecho un gran trabajo, han logrado convencernos que de verdad se gustan.

—Me da igual que no sea modelo. Búscala. Esas fotos calientes darán mucho que hablar y se venderán muy bien. Quizás podemos repetir algo parecido.

Lejos de allí, Sofía sigue con su vida normal de casting en casting sin imaginar lo que esas fotos para las que posó junto a ese hermoso chico van a originar una vez que vean la luz ante el mundo. Para ella son solo unas fotos con un chico irresistible, le costó bastante mantener la compostura en ellas porque por momentos deseaba acariciar ese rostro tan hermoso y rozar esos labios que la atraen como un imán. Le conoció el día anterior en una situación un tanto comprometida cuando su torpeza con los patines la hizo dar con su trasero en el suelo. Entonces él se acercó y la ayudó a levantarse. En ese momento se dio cuenta de lo hermoso que era ese hombre que tenía ante ella y que con tanta galantería la había ayudado a levantarse del suelo. Pero los hombres así se suelen fijar en otro tipo de mujeres que nada tienen que ver con ella. Al parecer es modelo aunque ella no tiene ni idea de quien es y debe estar acostumbrado a relacionarse con mujeres hermosas. 

En otra parte de la ciudad, aunque no muy lejos de donde se halla Sofía, Marcus se encuentra hablando con su representante que desea saber quien es la mujer con la que dicen que posó en sus últimas fotos.

—No lo sé. —se sincera Marcus recordando su primer encuentro con ella y los momentos en los que posaron juntos para esas calientes fotos y sonríe.

Esa mujer le encanta desde que la vio por primera vez y cuando la vio en la playa con ese bikini...

¡Santo Cielo!

Tuvo que reunir todas sus fuerzas y su resistencia para poder posar con ella como el profesional que es, pero se moría por abrazar a esa mujer a solas, besar su cuello  sus labios.

—¿Cómo es posible que no sepas quien es si has posado durante horas con ella? —le pregunta su agente.

—Pues así es. No es algo que estuviera previsto. Al fotógrafo se le ocurrió de repente hacernos esas fotos. Y yo soy un profesional y tuve que hacerlo. «Y me encantó hacerlo. Me encantó tener a esa chica tan cerca de mi. No sé ni como pude comportarme de manera profesional porque es demasiado hermosa y me tienta demasiado.» piensa el modelo con una sonrisa en los labios. —En cuanto salgan las fotos la podrás ver. ¡Es tan hermosa..! —asegura el chico de la melena castaña recordando una vez a su compañera de fotos.

—Has trabajado con muchas mujeres hermosas, esta no será diferente del resto. —responde su agente.

—Ella no es como el resto en absoluto. —asegura Marcus. —Ella es... —comienza a decir el modelo.

—Ella es,¿cómo? —pregunta el hombre.

—Nada. No me hagas caso. Cuando la veas me cuentas. Enamora.

—se sincera el castaño.
Sofía sale del último casting de la mañana satisfecha aunque sabe que eso no significa nada. Puedes hacer muy bien una prueba pero no ser lo que están buscando en ese momento o no ajustarse al perfil. Nada personal y como tal se lo toma.  En el mundo del espectáculo hay mucha competencia,  en todos los países. Pero en Estados Unidos la gente como Sofía tiene que competir no solo con artistas de otras nacionalidades sino también con los oriundos de Estados Unidos que buscan lo mismo.
Aquellos que han nacido en Estados Unidos no ven con muy buenos ojos que actores de otros países lleguen hasta allá pues consideran que "les roban el trabajo". Lo que no es cierto porque si un personaje no es para un actor no lo es, si lo será, aun a pesar que no haya actores extranjeros compitiendo por el mismo papel.
Muchas sueños con llegar a la cima, a Hollywood, sin sospechar que no es oro todo lo que reluce en el Star System. Sin embargo, están tan cegados por llevar una vida de fama y fortuna que están dispuestos a lo que sea, lo que sea, por triunfar aunque eso suponga pasar por encima de quien sea o ser cómplice de alguna injusticia.
Eso es lo de menos

La competencia es dura y si para llamar la atención y sobresalir deben hundir a otros artistas pues que así sea.

En la cafetería, Marcus sigue degustando su café acompañado de su representante de la agencia cuando ve a un grupo de gente en la calle armando bulla, o al menos eso parece.

En realidad son un grupo de personas que se han puesto a bailar por las calles ritmos latinos. Salsa en concreto. Son personas que graban un vídeo para una escuela de Salsa con el propósito de emitirlo en diversos medios de comunicación y  de esa forma promocionarse.

Están cogiendo personas al azar para darles unas nociones de baile y han solicitado los permisos pertinentes para hacer eso en la calle.

Sofía, que pasa en ese momento por allí, es abordada por uno de profesores que la toma con el propósito de enseñarle unos pasos básicos. Sin embargo, el sorprendido es el bailarín cuando ella demuestra manejarse muy bien en esa clase de baile. Ambos se mueven al son del sensual y caliente ritmo caribeño.

En cuanto Marcus ve bailando a Sofía no puede evitar salir de la cafetería imaginándose allá con ella compartiendo ese baile sensual, aunque lo cierto es que no tiene ni idea de como bailar ese tipo de música. El erotismo que ella desprende al bailar está volviendo loco al sueco.

Cuando ella le ve, y mientras baila con su compañero le guiña un ojo al tiempo que le sonríe. Más tarde llevada por la sensualidad de la música se acerca al modelo, le acaricia el rostro y acerca su boca a la de Marcus mirando sus labios. Él también le mira los labios y  acaricia un brazo a la latina.

Siente tantos deseos de besarla desde que la vio por primera vez...