— Nuevamente a Hogwarts —

Los dias de vacaciones en Grimmauld place estaban por terminar y el regreso a Hogwarts estaba cada vez más cerca. La marca casi no les dolió gracias a Narcissa y todas las pociones y ungüentos mágicos que había utilizado en Lucius, los uso en los chicos.

Regulus había discutido con su madre por no decirles que recibirían la marca.

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El expresso de Hogwarts traqueteaba en dirección al colegio de magia y hechicería. Cuatro slytherin's se mantenían en un compartimiento callados, tenían la suerte de que Voldemort no les dio otra misión.

– Nuestro último viaje hacia Hogwarts. – Dijo Evan mientras quitaba una lágrima falsa de su rostro. – Me pongo...

Keira dejo de prestar atención cuando al voltear hacia el pasillo vio a su hermana pasar y detenerse al verla dentro. Ni una ni otra hizo algo más y ella retiro la mirada cuando Sirius llegó con su hermana y se fueron.

Nadie volvió a decir nada durante el viaje, todos se encontraban cansados. Evan Rosier hizo ciertos trabajos para el señor oscuro, mientras Severus debía salir y esconder la marca de su madre la cuál le suplico que evitará unirse a los mortifagos.

El tren se detuvo en Hogsmeade y el grupo bajo de el transporte para después subir a un carruaje que los dejaría en el castillo.

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Keira trato de evitar a su hermana a toda costa en el castillo, hubo un partido de Gryffindor contra Hufflepuff dónde los leones dejaron a los tejones sin posibilidades de conseguir la copa este año.

Los de Slytherin entrenaban cada vez más mientras Keira planeaba estrategias y jugadas.

– La fecha de entrega del trabajo es para el primero de febrero. – Decía Mcgonagall mientras todos escribían en los pergaminos.

La clase termino y la pareja salió del aula mientras se dirigían a la mazmorras para tener clase de pociones.

– Solo deseo salir de Hogwarts. – Dijo ella mientras bajaban las escaleras del vestíbulo.

– Cuando estemos afuera vamos a desear no haber salido nunca. – Dijo Regulus mientras llegaban al aula donde ya esperaban algunos alumnos de todas las casas, al ya ser materia optativa la clase se impartía a todas las casas.

La puerta se abrió y todos comenzaron a sentarse en su sitio correspondiente.

Keira se sentó junto a Regulus y frente a ellos se sentaron los gemelos Carrow.

– Black, ¿que tal?. – saludo Alecto.

Regulus solo movió su cabeza como saludo para que Keira no se molestará por ser mal educado.

– Hoy ustedes trataran de hacer un antídoto para el veneno que tomen de esta mesa. – Dijo el profesor mientras señalaba los múltiples frascos. – Tienen cincuenta minutos para hacerlo.

Keira se mantuvo sentada mientras todos se levantaban a tomar un frasco y cuando ella se levantó en la mesa solamente quedaba uno.

Regreso a su mesa y primero trato de identificar el veneno— Poción sanguinaria— pensó y eso era, no sabía cuál era su antídoto.

Durante los cincuenta minutos se mantuvo sin hacer nada viendo como todos tenían sus calderos en el fuego y Regulus la miraba sin entender su actitud.

Cuando ya casi el tiempo llegaba a su fin se levantó y del armario saco una piedra y la puso en el bolsillo de su túnica mientras regresaba a su lugar.

Regulus apagaba el fuego de su caldero y removía dos veces hacia la derecha cuando el profesor Slughorn decía que el tiempo había concluido.

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– Realmente ingenioso y sorprendente. – Decía Regulus mientras caminaban a la sala común y ponía su brazo sobre los hombros de su novia.

– Solo me llevo pensarlo casi cincuenta minutos. – Respondió ella y después dijo la contraseña frente a la pared que se abrió mostrando la sala común llena.

Keira subió a su habitación porque quería dormir un rato pero no logro hacerlo porque una carta arriba de su cama la distrajo totalmente.

"Baños del primer piso, hoy a la medianoche"

K.M

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Otro capítulo más que serán un poco de relleno porque lo interesante viene cuando tanto Keira como Kiara se graduen de Hogwarts.

Porfavor voten y comenten en la historia si les está gustando.