Por alguna razón, la espada de Genzo - Nichirin-to - no había cambiado de color cuando el la usaba, era algo extraño en lo que Genzo había pensando en todo su tiempo de entrenamiento. Si, desde que había salido de la mansión mariposa, habían pasado seis meses completos.

El viejo Jigoro, como Genzo ahora llama a su maestro, siempre parecía querer disciplina y era estricto cuando se trataba del entrenamiento. Sin embargo, por dentro era un anciano amable y que amaba a sus discípulos. Cuando Genzo había llegado, se encontró con un arrogante Kaigaku, el primer discípulo del viejo Jigoro.

Pocos meses después, el viejo Jigoro había pagado una deuda de un niño y lo tomo como suyo. El era Agatsuma Zenitsu. La primera vez que lo vio, se emociono un poco, era de sus personajes favoritos por el humor que traía. He incluso si era un cobarde, sus ojos tenían un brillo siempre persistente.

El viejo Jigoro no le había enseñado el aliento del trueno. Por seis meses completo, le hacía entrenar a blandir su espada de cierta forma y, una respiración total. Todavía le faltaba para lograr una respiración total constante. Después de todo, no era algo fácil de aprender. Tenía que respirar de una forma completamente distinta y, era como cuando alguien sufría un accidente y tenía que volver a aprender a caminar nuevamente.

Pero a diferencia del entrenamiento que recibió Tanjiro en el anime, el viejo Jigoro lo había entrenado en formas de caminar y correr distintas, además de meditación. El aliento del trueno se traba de una velocidad explosiva y los movimientos de las piernas sobre todo. Para eso necesitaba un gran poder en sus piernas, es por eso que cargaba piedras mientras entrenaba en su respiración, caminaba en el agua mientras sostenía una enorme piedra, e incluso habían viajado a una playa para entrenar en la arena para entrenar su estabilización.

Y ahora, luego de un arduo y agotador entrenamiento por seis meses, estaba parado frente a un tronco de entrenamiento. Kaigaku, Jigoro y Zenitsu estaban a un lado, mirando con atención.

Sería la primera vez que Genzo trataba de probar la respiración del trueno y su primera forma.

"Kaminari no Kokyuu", Genzo bajo su espalda hacía adelante mientras sostenía su espada. Pequeños arcos de rayos color purpura aparecieron mientras desenvainaba lentamente. El color sorprendió a los otros tres y Jigoro sentía orgullo al ver que su discípulo lo lograría.

"Ichi no kata.... ", Genzo exhalo mientras tenía sus dientes juntos y rayos purpuras lo rodeaban.

"¡Hekireki Issen!"

Bang!

Hubo un sonido de explosión que rompió el suelo y Genzo desapareció. El tronco fue dividido por la mitad, dejando una linea de rayos purpura y detrás, Genzo envaino su katana.

"¡Maravilloso!", Jigoro exclamo mientras se acercaba cojeando con su bastón. Sus ojos brillaban con orgullo y felicidad.

"¡Bien hecho, Genzo!"

"¡Increíble, Genzo Oni-san!". Zenitsu se acerco casi dando saltos mientras gritaba. Sin embargo, Kaigaku apretó los puños con ira. El había aprendido casi todas las formas de aliento del trueno, solo le faltaban la primera y ultima. Pero le había tomado mucho tiempo. Y ahora, Genzo había logrado aprender la primera forma en solo seis meses, algo que el no ha podido hacer hasta ahora.

Kaigaku apretó los dientes con rabia y se giro, saliendo hacía otro lugar.

"Solo seis meses y lograste aprender la primera forma en tu primer intento. Eres un genio, Genzo", Jigoro asintió, pero volvió su semblante serio. "Sin embargo, no quiero que bajes la guardia o bajes el nivel de entrenamiento"

"Entendido. Se que todavía necesito más entrenamiento", Genzo asintió reconociendo ese hecho. Sabía que todavía le faltaba mucho para dominar el aliento del trueno.

"¡Ahora entrenemos Zenitsu!", Genzo exclamo, golpeando con su espada. El cuerpo de Zentisu se contorsiono mientras levantaba los brazos.

"¡Gyaaaa! ¡Casi me matas Genzo Onii-san!", Zenitsu chillo mientras temblaba frente a Genzo, quien tenía sus ojos brillantes. Tratando de sacar lo cobarde a su hermano de entrenamiento.

Jigoro solo los miro con una sonrisa mientras Genzo perseguía a Zenitsu mientras trataba de cortarlo y el ultimo gritaba como una niña enloquecida.

. . .

Genzo se sentó debajo de un árbol, comiendo un durazno lentamente, pensando en algunas cosas. Habían pasado seis meses desde que llego ha este mundo y, había algo de lo que se dio cuenta. El tiempo para su cuerpo se había detenido, no parecía envejecer por alguna razón. Es verdad que con solo seis meses apenas se podría notar algo como eso, pero incluso su cabello no crecía, se mantenía de la misma forma que desde cuando llego.

Eso lo tranquilizo un poco, sabía que este no era su mundo y, si envejecía, sería una molestia para cuando regresara. 

"¡Genzo, es hora de entrenar una vez más!", el grito de Jigoro se escucho y Genzo se levantó mientras caminaba hacía el viejo.

El entrenamiento continuó de esa forma, todos los días Genzo los pasaría comiendo y entrenando mientras entrenaba el aliento del trueno.

Y de esa forma, los días pasaron, hasta que Genzo había pasado un año seis mes entrenando.

. . .

Kaigaku se burlo con despreció de Genzo, gruñendo con desagrado mientras entrenaba la primera forma del aliento del trueno.

"¡Basta! ¡No puedo seguir mirando!", El grito enojado y se paro frente a Genzo. Jigoro y Zenitsu lo miraron, el primero con el ceño fruncido.

"Lucha conmigo. Te enseñare lo débil que eres", Kaigaku tomo la Tsuka de su espada con fuerza.

Genzo frunció el ceño, el chico siempre lo miraba con despreció por entrenar nada más que la primera forma del aliento del trueno.

Genzo miro hacía el viejo Jigoro, quien no movía su mirada de Kaigaku, su primer discípulo.

"Bien.... las heridas están permitidas, sin mutilaciones o muertes", dijo Jigoro con un tono de extrema seriedad.

Genzo se preparo asintiendo.

"¡Comiencen!", Jigoro dijo de inmediato, sin dar más oportunidades de prepararse.

Genzo desapareció de inmediato en un rayo purpura. Solo se escucho el ruido, más no hubo destrucción.

"Kuuak!!", Kaigaku gruño de dolor al ver un corte en su torso. La sangre exploto hacía el frente y cayó arrodillado, mirando al suelo lleno de shock.

"Eres demasiado arrogante, Kaigaku", Jigoro lo miro con tristeza, acercándose junto a Zenitsu, quien tenía una mirada llena de sorpresa al ver a Genzo detrás de Kaigaku, envainando su espada.

"Pensaste que Genzo solo podía usar la primera forma pero, te equivocaste, Genzo no sabe solo eso", Jigoro sacudió la cabeza con tristeza por la actitud de Kaigaku.

"Genzo ya ha aprendido todos. No solo Hekireki Issen, pero el aprendió todos"

"¡Entonces por que solo uso la primera forma! ¡Es absurdo!", Kaigaku grito lleno de ira, no podía creer que perdió de forma tan patética.

"Tonto", Genzo lo miro mientras se giraba. "Que aprendiera cada forma no quiere decir que las dominara. Son cosas completamente diferentes"

"Una vez que aprendí todas las formas del aliento del trueno, me enfoque en dominar el primero hasta el máximo. Luego de eso sera el segundo, y luego el tercero, hasta llegar al ultimo"

"Solo en ese momento podre decir que domine el aliento del trueno"

Kaigaku se levanto tambaleándose mientras su mano apretaba el corte en su torso. El miro a Genzo con ojos oscurecidos, llenos de ira y odio ilimitado.

Jigoro asintió con las palabras de Genzo. Kaigaku era demasiado impaciente y arrogante, el pensaba sacar eso, pero no ha podido hasta ahora. Sabía que sin aprender la primer forma, las otras formas que sabía Kaigaku solo llegarían hasta un cierto nivel. Después de todo, la primera forma era la base de todas las otras.

Kaigaku camino hacía la casa, sin mirar hacía atrás. Pero si Jigoro hubiera visto sus ojos oscurecidos, lo habría mirado con una increíble tristeza. 

Cuando llego a su habitación, gruño mientras apretaba su puño lleno de su sangre.

"Les enseñare.... a todos.... ¡Soy el único que puede ser heredero de el! ¡Te enseñare lo que pasa por menospreciarme, Murakami Genzo!"

. . .

Genzo exhalo un soplo de aire, mirando las estrellas sobre el bosque de melocotones. El miro hacía la casa con un ceño fruncido, decidió caminar hacía ella y entrar, pasando por los pasillos lentamente.

Se habían cumplido dos años desde que comenzó a entrenar y, solo faltaba una forma, una sola forma para dominar por completo el aliento del trueno. Sin embargo, hace días algo paso. Kaigaku, quien había salido, se convirtió en demonio. 

Genzo sabía que esto pasaría, pero no lo detuvo. Incluso si causaba dolor en Zenitsu y Jigoro, era algo que eventualmente sucedería con la mentalidad de Kaigaku. Zenitsu había estado en shock por lo que había hecho Kaigaku.

Sin embargo, el que más le preocupaba a Genzo, era sin dudas Jigoro.

El abrió la puerta y sorprendió al anciano de baja estatura, arrodillado con un cuchillo apuntando hacía su abdomen.

"¡Viejo tonto!", Genzo gruño mientras se acercaba rápido y pateaba el cuchillo.

"Genzo.... ", Jigoro lo miro. "¡Déjame, es una deshonra que mi discípulo se volviera un demonio!"

"¡No seas tonto, viejo!", Genzo gruño una vez más mientras se sentaba frente a el.

"¡Soy tu discípulo, Zenitsu es tu discípulo! ¡Nos encargaremos de el si lo encontramos!"

"Como tus discípulos, también es nuestra tarea entregar castigo a otros por deshonra. ¡No tienes que cometer Seppuku!"

"... ", Jigoro miro a Genzo y exploto en lagrimas, abrazando a Genzo.

"¡Eres tan bueno, Genzo!"

"¡No me abraces, viejo!", Genzo grito, pero no se movió. Sabía que Jigoro estaba sufriendo por lo que había hecho Kaigaku.

"Ademas.... ", Genzo suspiro. "Todavía necesitas criar a Zenitsu. El mocoso es demasiado pervertido y estaría devastado si mueres"

"Tienes razón..... lo siento. Ese niño podría morir por una mujer", Jigoro suspiro al pensar en Zenitsu. Genzo asintió de acuerdo.

"Es bueno que entraras en razón, viejo", Genzo dijo con alivió, ganando una mirada de cariño del viejo Jigoro. Solo ahora pensaba en lo triste que se vía Genzo y lo que podría sentir el y Zenitsu se cometía Seppuku.

. . .

"¡Gyaaa!", Zenitsu grito sorprendido al sentir un soplo en su nuca.

"¡No hagas eso! ¡De hecho, ¿Como lo haces?!", el grito mirando a Genzo detrás de el.

"Se trata de movimientos de pie, respiración y agilidad. Entrene para ser lo más sigiloso posible", dijo Genzo, sonriendo entretenido por las reacciones de Zenitsu.

"¿Ya te marchas?", pregunto Jigoro.

"¿Eh?", Zenitsu miro a ambos sorprendido.

"Si.... tengo que ir, necesito comenzar el trabajo como cazador de demonios"

"Bien", Jigoro asintió satisfecho. Había pasado otro mes y Genzo ya había dominado el aliento del trueno a la perfección. Era hora de que comenzara su trabajo asesinando demonios y Jigoro no lo detendería.

"Déjame enviar una carta", Genzo asintió

"Zenitsu"

"A- Ah... Hai"

"Tienes que entrenar, si quieres mujeres hermosas como esposa, necesitas ser confiable y poderoso para protegerlas", Zenitsu quien escucho esto se paro recto, sobre todo al escuchar las palabras 'mujeres hermosas'.

"¡Entendido! ¡Me esforzare!"

"Bien... ", Genzo sonrió y desordeno su cabello rubio, color rubio desde que fue golpeado por un rayo.

"Toma.... ", Jigoro volvió con una carta y sonrió. "Estoy orgulloso de que seas mi discípulo. Ve y acaba con esos demonios"

Genzo asintió y se inclino respetuosamente.

"¡Gracias por todo!"

Jigoro sonrió satisfecho antes de darle la espalda, para que no vean su rostro con lagrimas. Sin embargo, Zenitsu podía ver su rostro con una expresión graciosa tratando de aguantar las lagrimas.

. . .

"Kami.... tarde más de lo pensado en encontrar este lugar", Genzo suspiro mientras caminaba rodeado de árboles y nieve. Entre los árboles, podía ver una casa en un claro, rodeada de nieve hermosa.

Pero su rostro se volvió severo y sin emociones, un hombre se acercaba lentamente a la casa por el otro lado. Gracias a su respiración, podía moverse con sigilo sin ser detectado.

Cuando el hombre toco la puerta y la abrieron, el desapareció dejando rayos purpuras en su anterior ubicación.