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capítulo 4: Primera batalla

Genzo estaba sorprendido, al igual que Shinobu y Kanae. Ambas mujeres habían estado luchando por unos minutos en contra de Doma, la segunda luna superior. Sin embargo, la velocidad con la que se había movido no se podía comparar con la que usaba en contra de ambas mujeres.

Al ver ese nivel de velocidad, se dieron cuenta de inmediato, Doma simplemente estaba jugando con ellas. No hubiera sido nada más que un juego, era un depredador. Y, simplemente las estaba guiando en su juego antes de matarlas.

Pero mientras ellas pensaban en esto, Genzo pensaba en otras cosas. No importa si era un solo segundo, pero para el parecía todo más lento. Su cerebro parecía procesar todo mucho más rápido y su cuerpo se sintió diferente de lo normal.

Su cuerpo sudaba, parecía que podía sentir cada gota empapando su cuerpo, su cuerpo se sentía frío. Pero, incluso con el miedo al ver los ojos de la luna superior, su mano se movió involuntariamente hacía la Saya y su mano derecha se movió hacía la Tsuka de su Nichirin-to.

Su respiración pareció cambiar por un momento y, el se movió.

Los ojos de Doma se abrieron con genuina sorpresa al ver la espada de su presa dirigirse hacía su cuello. Con un movimiento veloz, retiro dos abanicos y bloqueo el golpe.

Clang!

Bang!

Kanae y Shinobu vieron esto en estado de shock, todo pareció durar tanto, pero solo fueron dos segundos. En un parpadeo, Doma ya estaba frente al hombre que había aparecido del cielo y, en el otro segundo, había desenvainado a una gran velocidad apuntando al cuello. La espada y los abanicos chocaron con un sonido resonante seguido de un gran sonido sordo, haciendo retroceder a la luna superior y a Genzo.

Genzo exhalo lleno de alivió mientras sus pies se arrastraban por el suelo. Aun así, con el miedo y nerviosismo que plagaban su cuerpo, sus ojos no se despegaron de Doma. El sabía perfectamente que en el momento que aparte la mirada de la luna superior, sería el momento donde podría morir.

Miedo era algo predominante en el, estaba frente a un demonio, uno de los más poderosos. Pero sus ojos seguían fijo, nunca antes en su vida había sentido arrepentimiento. Incluso con sus fallas, su padre le había enseñado a no arrepentirse de sus decisiones.

Recuerda, hijo. Cuando te equivocas en algo, no tienes por que sentirte arrepentido o mal. Esa decisión mal tomada te podría enseñar algo, al reconocer tu error, podrás crecer y ser una mejor persona.

Solo ahora supo que su decisión de ser un soldado de Amarie podría ser realmente peligroso, que podría morir en el camino, dejando sus sueños quebrados y sin nada. Pero, Genzo decidió dar un paso adelante.

Doma entrecerró los ojos al ver a Genzo dar un paso adelante.

Kanae y Shinobu detuvieron sus movimientos, justo cuando estaban por correr hacía Doma para comenzar la batalla una vez más.

En este momento, Genzo se había olvidado que su habilidad de maestría de la espada había modificado su cuerpo para que sea mucho más adecuado para un espadachín. Su espada se envaino y curvo su cuerpo hacía delante, sus ojos se agudizaron y desapareció bajo la vista de todos.

Doma abrió los ojos y sus pupilas se achicaron mientras movía su vista hacía un lado.

Genzo había aparecido a su lado, desenvainando a gran velocidad.

Slash!

Doma retrocedió mirando en estado de shock como un corte aparecía en su torso, la herida se abrió y exploto en sangre. Si no hubiera sido por sus sentidos mejorados, no habría podido moverse y esquivar.

"Hana no Kokyuu", Kanae respiro y se movió frente a Doma, aprovechando la oportunidad en la que la luna superior estaba sorprendido y movió su espada.

"Go no Kata: Ada no Sukuyaku", La espada de Kanae se movió a gran velocidad, y Genzo pudo apreciar nueve movimientos consecutivos fluyendo y entrelazandose uno después del otro, mostrando lo que parecían pétalos de flores color rosa y blancas.

Shinobu tampoco dudo, se movió a una enorme velocidad apareciendo frente a Doma.

"Houga no Mai: Manabiki", su espada atraveso a Doma, saliendo por su espalda. Shinobu retiro su espada y retrocedió, administrando efectivamente el veneno de su katana.

Ambas mujeres retrocedieron un poco mientras Genzo las seguía, mirando atentamente al sorprendido Doma. La luna superior los miro en estado de shock, como si no pudiera creer que fue cortado tantas veces. Sin embargo, cuando sus heridas comenzaron a cerrar y sanar, sus ojos perdieron cualquier emoción que fingía y los miro como si fueran cuerpos muertos, causando escalofríos en todos.

Genzo frunció el ceño, su mirada se desvió solo un segundo hacía un reloj en su muñeca izquierda. 

04:25

Si no estaba equivocado, el amanecer comenzaría en cinco minutos a más tardar. El sol saldría a las 04:30, era la hora del amanecer en japón. Solo tendrían que resistir un poco más.

"Son bastante fuerte~", Doma hablo lentamente, mirando a los tres mientras su sonrisa se ensanchaba, mostrando sus dientes y colmillos blancos.

"Kekkijutsu", Doma levanto sus abanicos lentamente.

"¡Prepárense!", Kanae exclamo tensando su cuerpo.

"¡Karesono Shizuri!", La luna superior balanceo sus abanicos, enviando diez ataques consecutivos; ráfagas de viento afilado fueron disparadas a gran velocidad hacía ellos.

Shinobu saltó hacía la derecha y Genzo hacía la izquierda, Kanae saltó hacía arriba. Todos se habían movido al mismo tiempo para esquivar los ataques.

"¡Guh!", Genzo gruño de dolor, su hombro había sido cortado. Incluso con su nuevo cuerpo, todavía seguía siendo mas lento que personas como Kanae y Shinobu, quienes usan estilos de respiración constantes.

Doma se dio cuenta de eso y se movió hacia el.

"¡Kekkijutsu: Itegumori!", Genzo abrió los ojos nervioso, sabía lo que hacía ese ataque. Era una ráfaga de viento generada por el abanico de Doma que creó una nube de partículas de hielo, congelando objetos que entran en contacto con él. También extendía aire frío que, si se inhala, podría congelarse por completo y destruir los pulmones de la víctima.

Conteniendo la respiración, Genzo uso todas sus fuerzas para saltar hacía atrás y salir del camino del aire frío. 

"¡He~!", Doma se rió mientras saltaba frente a Genzo, extendiendo su abanico para cortar su cabeza y, disfrutar de su victoria.

Clang!

La luna superior frunció el ceño al ver como al katana de su enemigo desviaba su abanico con dificultad. Podía ver como sus ojos temblaban ligeramente al tratar de defenderse de sus ataques. Podría ser más fuerte que un humano normal, Doma sabía esto. Pero también sabía que su nivel no llegaba a de el mismo o las otras dos mujeres.

Doma contorsiono su cuerpo y movió su abanico, justo a tiempo para repeler varios ataques de picadura por parte de Shinbu. 

Esta fue: Cho no Mai, un ataque de empuje repetido para inyectar veneno en el enemigo, y la primera forma del aliento de insectos de Shinobu.

Genzo vio esto y pensó: Esta es mi oportunidad. Al ver la espalda de Doma el podría atacarlo, pero su postura estaba mal al tratar de defenderse de los ataques anteriores, y si arreglaba su postura, ese segundo podría hacer que saliera de su alcance. Es por eso que levantó su pierna y pateo a Doma con todas sus fuerzas.

"No puedo creer que estén resistiendo", Doma giro su cuerpo en el aire y aterrizo en el suelo a salvo. El los miro a todos, su mano se levanto hacía su sien y un dedo atravesó su cabeza.

"Ah~... ", el no tenía expresión mientras movía su dedo dentro de su cabeza. "Si... Mm... Nunca había pasado esto.... ¡Son los primeros en durar tanto!"

"Hehehe~.... pero es suficiente, los matare ahora", Doma retiro su dedo de su cabeza y la herida se cerro. La temperatura comenzó a bajar a una velocidad aterradora y neblina helada comenzó a aparecer, rodeando todo el lugar.

"Kekkijutsu: Tsuru Renge", fragmentos de hielo se formaron casi de inmediato, acompañados de una tormenta helada. Los fragmentos formaron pétalos de flores de loto que fueron directamente hacía los tres.

Los tres sintieron el aterrador frió y vieron con miedo como sus pies se congelaban poco a poco, afectando su velocidad.

"¡Nee-san!", Shinobu grito con miedo al ver como pétalos de hielo estaban por golpear a su hermana. Sus dientes se apretaron hasta que sus encías sangraron, tratando de moverse.

Sin embargo, Genzo apareció frente a ella, sus piernas y brazos con escarcha cubriéndolos. Levanto su espada y corto diagonalmente.

Cling! Cling! Cling!....

Los pétalos de hielo se rompieron en pedazos, creando un hermoso sonido pero, Genzo escupió sangre al ver como esos pequeños pedazos se clavaron en su torso.

"Por.... que.... ", Kanae pregunto en estado de shock. 

Ni siquiera se conocían, se habían unido solo por la luna superior. No entendía por que este hombre la protegió y se dañaba en el proceso.

"Hmph!", Genzo resoplo, mostrando una rara sonrisa hacía Kanae.

"Ni siquiera lo se..... mi cuerpo se movió por si solo"

"No entiendo.... ¿Por que la salvaste?.... Quizás podrías haber sobrevivido si no ayudabas", Doma pregunto perplejo. El no entendía ese tipo de cosas, el sacrificarse por otros y ayudar eran cosas que desconocía y no entendía.

"No importa", el sacudió la cabeza y sonrió. "No tendrán la misma suerte"

Kanae frunció el ceño, sosteniendo a Genzo que escupió otro poco de sangre. Ahora realmente estaba cansado. 

Sin embargo, parece que realmente tenían suerte. En el momento que Doma había vuelto a levantar sus abanicos, sintió un ardor en sus brazos. El levantó la cabeza y frunció el ceño, viendo como se estaba quemando lentamente.

Los ojos de Doma y su cabeza giraron para mirar hacía atrás.

El sol se estaba levantando y sus hermosos rayos comenzaban a iluminar el lugar donde estaban. Doma miro a los tres frente a el, podría matarlos ahora que estaban más cansados e indefensos, sin embargo, había algo dentro de el que no quería hacerlo. Frunciendo el ceño, bajo lentamente sus manos y los miro, tratando de entender por que no los mataba de una sola vez.

"He.... Bastardo", Genzo tosió y soltó una risa seca. "Disfrutando de todo esto, parece que le gusta luchar"

Doma levanto las cejas al escuchar esto, no sabía el por que de esas palabras del humano frente a el. Hasta que sus dedos se levantaron junto a su mano y, toco sus labios. Había una sonrisa emocionada en ellos, sorprendiendo en gran medida a Doma.

Sin decir más, salió corriendo al ver como los rayos del sol seguían quemando su piel.

Shinobu cayó agotada de rodillas. Su cuerpo estaba lleno de sudor y no podía creer que hubieran sobrevivido a una luna superior. Ella miro al hombre que las ayudo, siendo sostenido por su hermana mientras lo ayudaba a sentarse.

"¿Cual es tu nombre?", Kanae pregunto con cuidado. Abriendo la camisa de Genzo y revisando sus heridas.

"Genzo..... Murakami Genzo"

"Murakami-san.... muchas gracias por ayudarnos", Kanae le agradeció sinceramente. Estaba segura que habrían muerto en este encuentro. Incluso si Genzo no era tan fuerte como ellas, sus instintos y velocidad lo ayudaron ha acertar ataques lo suficientemente buenos como para que ellas usaran sus ataques.

Genzo miro a Shinobu y no despego su mirada de ella.

"¿Que?", luego de unos momentos, ella pregunto confundida.

"¿Tienes las cejas de esa forma siempre? ¿Pegada en un ceño fruncido?.... que raro.... ", Shinobu se molesto y una marca apareció en su frente. Kanae escondió su risa detrás de sus manos. Su hermana pequeña casi siempre tenía un ceño fruncido, como si hubieran nacido con esa expresión.

"Bien.... ", Kanae aplaudió una vez, mostrando una sonrisa. "Tenemos que volver y, también ayudar a Murakami-san con sus heridas. No son fatales, pero necesitan revisión y cuidado delicado"

Genzo miro hacía el cielo y levanto un poco las cejas, notando por primera vez el cuervo con un papel en en su cuello, volando sobre ellos.

El solo suspiro y dejo que las chicas lo ayudaran a levantarse, comenzando a caminar hacía el pueblo más cercano.

. . .

"¡Kochou Kanae, Kochou Shinobu y Murakami Genzo han sobrevivido!", Luego de un tiempo, el cuervo que había sobrevolado sobre el grupo de tres, apareció frente a un hombre de cabello oscuro y largo, usando túnicas blancas.

"Eso es bueno.... ", el suspiro lleno de alivió, pero luego pensó en la persona que ayudo a las cazadoras de demonios.

"Murakami Genzo, ¿Eh?.... Quizás acepte ayudarnos", el murmuro.

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