Genzo miro la maquina frente a el, pensando en muchas cosas, pero una de las cosa más importantes, era el limite de esta cosa. No sabía si podía jalar la palanca una cantidad de veces ilimitadas, sobre todo por que tampoco sabía cuantas personas reencarnaban y cada cuanto tiempo se hacía. Por que estaba seguro que Amarie, la diosa Tsundere no tomaba a todos los muertos para reencarnarlos.

"Probemos", se dijo Genzo, jalando la palanca una vez más. Pero, la maquina tembló por unos segundos antes de que palabras se proyectaran desde la nebulosa entre los ángeles.

[Energía insuficiente]
[Por favor tenga paciencia y espera hasta que exista energía suficiente]
[Tiempo de espera: 30 días, 24 horas, 32 segundos]

"Entonces solo puedo usarla una vez al mes", Genzo asintió. "Sin embargo, estaba dentro de mis pensamientos, incluso si el tiempo es menor de lo pensado"

Genzo no se sintió insatisfecho, de hecho lo encontró justo. La posibilidad de ganar cosas asombrosas como conocimiento, dinero, idiomas o incluso poderes una vez al mes era inimaginable.

"Pero quizás en un futuro pueda recargar la maquina yo mismo, de esa forma podría tener más oportunidades", Genzo murmuro, pero luego suspiro al ver que tendría que mover la maquina hacía un lugar más seguro, lugar que no tenía en la casa.

"Solo la moveré hacía mi habitación", Genzo gruño mientras empujaba la pesada maquina. Estaba maldiciendo a la diosa Tsundere por no ayudarlo, incluso si le dio esto por un trato, ella todavía era la culpable de que esto cayera en su casa.

Cuando por fin había terminado, miro su habitación. No era demasiado grande, tenía un escritorio con su silla y una cama en una esquina, a un lado de una ventana. La maquina quedo del otro lado de la habitación, a un lado de su televisor.

"Bien.... por ahora se quedar aquí", el salió de inmediato de su habitación y cuando bajo, vio su mesa reparada con su computadora encima. Y justo a un lado, estaba su barra de oro, era bastante gruesa.

"Mmm... ", Genzo la tomo y se sorprendió al ver lo pesada que era. "Esto.... podrían ser doce o quince kilos, quizás más"

"Mañana iré a venderla, ahora es demasiado tarde", Genzo asintió para si mismo y se sentó en su silla, encendiendo otro cigarillo.

"Parece como si nada hubiera pasado, pero sucedió", Genzo comentó, y miro la pantalla de su computadora portátil. 

"Por ahora.... solo me relajare", Genzo se recostó en el respaldo de la silla, disfrutando de la mierda peligrosa que podía ser un cigarrillo mientras buscaba un anime del cual disfrutar en esta noche extraña.

. . .

Genzo caminaba por las calles de Ginza, la cual podría decirse que es una de las calles más lujosas de Tokio junto a Harajuku y la avenida Omotesando. Aunque se sentía un poco extraño caminando fuera de los escaparates llenos de lujo. De hecho, nunca antes había pisado un pie en esta calle, pero era el mejor lugar para vender su oro, sobre todo a las joyerias de mayor renombre.

"Bien.... ", Genzo se detuvo frente a una joyería, en realidad no la conocía, incluso si muchos otros podrían hacerlo. Pero no estaba muy interesado en la joyería.

"Tanaka... ", murmuro Genzo al ver el nombre de la tienda. El entro y suspiro al ver todo el lujo de la tienda, esto podría ser molesto, sobre todo al ver la expresión extraña de la mujer vendedora.

"Buenos días", comenzó Genzo.

"¿Si, que podemos hacer por usted?"

"Mm", Genzo asintió, sin prestar atención a la mujer, era como si no le importara, incluso si la mujer era hermosa. De cabello negro y cortro hasta los hombros con gafas simples pero elegantes. Ella usaba un traje de negocios con una idetificación.

"¿De casualidad ustedes compran oro?", pregunto Genzo.

La mujer parpadeo un poco desconcertada, las personas que venden oro por lo general lo venden en pequeñas tiendas o por Internet, no venían a una tienda de lujo y elitista.

"Disculpe, pero creo que sería mejor que venda su oro en otra tienda"

Genzo suspiro.

"Se que no comprarían pequeñas cosas", dijo Genzo, gruñendo un poco. "Pero tengo una maldita barra de oro que no me interesa tener, prefiero billetes que una pesada barra de oro"

"¿Barra?", la mujer pregunto un poco sorprendida. Genzo asintió, un poco aliviado que esta mujer no era como otras que lo podrían mirar despectivamente al entrar a una tienda como esta.

"Espere un minuto.... ", la mujer se inclino un poco y salió por una puerta, hacía detrás de la tienda. Genzo no había esperado ni dos minutos antes de que la mujer saliera en compañía de un hombre de cabello negro con algunas lineas grises. Los ojos del hombre eran oscuros y tenían un brillo inteligente en ellos; usaba un traje de color gris, que parecía costoso y fino.

"Buenos días, mi nombre es Tanaka Gorou, ¿Quiere vender una barra de oro, verdad? ¿Puedo verla?", Genzo asintió, satisfecho con que el hombre fuera respetuoso. El retiro su mochila de su espalda y casi la dejo caer con el peso de la barra de oro dentro. El abrió la mochila y entrego la barra de oro.

Tanaka Gorou parpadeo al sentir el peso de la barra y sus ojos brillaron por un momento.

"Esto es bastante bueno", el hombre parecía satisfecho y miro a Genzo. "¿Podría seguirme atrás por favor?... Me gustaría evaluar su peso e impurezas"

"Por supuesto", Genzo asintió y siguió a Gorou. Cuando entraron por la puerta, Genzo se encontró con una oficina espaciosa y limpia. En una mesa ha un lado del que parecía ser el escritorio del hombre, habían varias joyas ordenadas junto a lo que parecía una pistola y varias piezas de plata y oro.

"Por favor", Gorou le indico para que lo siguiera.

"Esto se llama analizador XRF", indico Gorou, apuntando hacía la pistola. "Esto sirve para analizar metales preciosos en áreas como: su peso, impurezas y otras cosas"

"Entiendo", Genzo asintió y miro como Tanaka Gorou apuntaba la pistola pegada a la barra de oro y sus ojos se abrían sorprendidos al ver el resultado.

"Bastante increíble", el murmuro y miro a Genzo. "Señor, ¿puedo saber su nombre y como consiguió esto?"

"Lo conseguí por herencia y, mi nombre es Murakami Genzo", Tnaka Gorou asintió lentamente.

"Tengo que decir que esto es mucho oro", comento Gorou. "Tiene un peso de 13 kilogramos y es de 24 kilates"

Genzo sabía que el oro de 24 kilates era el llamado oro puro y era bastante costoso.

"¿Que tal 77.000.000 yenes?", Genzo se sobresalto al escuchar ese número. Sabía que era mucho dinero, pero también había investigado el precio del oro. Y si no estaba mal, estaba cerca del los 77.700.000. Sin embargo, sabía que el hombre frente a el necesitaba tener ganancias, de hecho este era un muy buen precio, incluso si no le estaban dando lo justo.

Sin embargo, el podría jugar un poco con esto.

"Bueno.... podría traer más en el futuro", fue la jugada de Genzo. Al entablar una relación de negocios con este hombre, sería una buena jugada para el, incluso para el hombre que podría tener un suministro de este tipo de oro fácilmente.

"¿Tienes más?", pregunto Gorou, sorprendido al escuchar al joven a un lado de el.

"Si", fue la simple respuesta de Genzo. El realmente no tenía más, pero las posibilidades de que vuelva a salir una barra de oro de la maquina pachinko era alta, después de todo era un premio de una ranura.

"Entonces esteremos encantados de comprar su oro, señor Murakami", Tanaka Gorou dijo con seriedad. Un negocio como el oro podría ser rentable al tener este tipo de cantidad y purezas. Sobre todo si era traído a ellos de esta forma tan fácil. No había manera que deje pasar una oportunidad como esta.

"Entonces por favor espere un momento", Tanaka Gorou salió por la puerta y Genzo espero por unos minutos.

"Gracias por esperar, Murakami-san", Gorou entro y le entrego dos tarjetas a Genzo.

"La primera es una muestra de gratitud por nuestra transacción y futuras más. Es una tarjeta VIP para nuestras tiendas y, para nuestras subastas. La segunda es una tarjeta con el dinero de la venta del oro"

Genzo estaba bastante sorprendido con la eficacia y velocidad de todo, pero no cuestionaría esto. El recibió las tarjetas y un papel con la contraseña de la tarjeta. La cambiara después, por seguridad, pero tener una era bueno.

Ambos se inclinaron y se agradecieron mutuamente con una sonrisa.

"Espero un feliz operación", dijo Gorou.

"Feliz cooperación", dijo Genzo, sonriendo antes de salir de la oficina y tienda. Cuando el salió, Gorou se acerco a la vendedora.

"Kimiko, hija, cuando el joven regrese, llámame", dijo Gorou. Que de forma sorprendente, llamo hija a la vendedora.

"¿Era realmente importante, Otou-san?", ella pregunto un poco desconcertada.

"Una lección, no tomes a las personas a la ligera, sobre todo si no visten cosas lujosas. Podrías perder una gran oportunidad de negocio. Acabamos de terminar una transacción, 13 kg de oro de 24 kilates y podría traer más en el futuro"

"¿Tanto?", ella pregunto un poco sorprendida. Gorou solo asintió con una sonrisa.

. . .

Genzo camino feliz hacía el banco y cambió la contraseña de la tarjeta antes de que sonriera al ver el saldo en el cajero automático. Estaba satisfecho con su actual cantidad de dinero, pero sabía que necesitaría más, eso podría irse en un abrir y cerrar de ojos. Por lo menos, tenía una beca en la universidad, lo que lo dejaba más relajado con el tema de pagos hacía la universidad.

El camino hacía su casa, pero se detuvo en un Izakaya cerca de su casa, para comer un poco. U gran bazo de cerveza y Tempura era algo bueno para celebrar por su pequeña fortuna, sobre todo por que no era demasiado caro.

Sin embargo, ayer era viernes y el sábado y domingo pasaron rápido. Era hora de que Genzo volviera a la universidad, con sus clases agotadoras y compañeros molestos.

. . .

"Bien.... es hora del examen", muchos gimieron, era un pequeño.... pequeño era la palabra clave, por que era sobre un solo tema, pero la cantidad de cosas que el profesor pidió memorizar eran muchas. Sobre todo cuando se habla de osteología.

Memorizar el nombre y funciones de los doscientos seis huesos del cuerpo humano no era una broma.

Había preguntas simples como la cantidad de huesos que tenía un adulto y un recién nacido y el por que de ello, pero muchos se equivocaron en ellos o se les olvido con toda la cantidad que había que memorizar. 

La respuesta simple es que los adultos tenemos un total de 206 huesos, mientras que los recién nacidos tienen 300. Esta diferencia se debe a que en los bebés hay muchos huesos que se fusionan al crecer, formando uno más grande.

Al tener un extenso conocimiento de medicina y sus ramas, Genzo no tubo dificultades al completar esta prueba 'pequeña' en un corto periodo de tiempo. El profesor, Motohama Shu miro a Genzo cuando entrego su prueba, pensando que había decidido rendirse, pero al ver todas las preguntas respondidas, levanto una ceja y comenzó a revisar de inmediato.

El parpadeo varias veces mientras continuaba y una pequeña sonrisa se formaba en sus labios.

Al final, soltó una pequeña risa, llamando la atención de los estudiantes.

"Bien hecho, Murakami-san, tienes todo correcto. 100 puntos, felicitaciones. Puedes retirarte si lo deseas", el sonrió de forma un poco tortuosa antes de hablar una vez más.

"No tenía nada más pensado que repasar una vez terminaran con la prueba, pero viendo que sabes y memorizaste todo de forma excelente, puedes retirarte"

Muchos soltaron maldiciones en su mente, pensando que el profesor era un demonio al hacerlos repasar lo mismo luego de que los treinta minutos de prueba terminaran.

"Gracias", Genzo asintió y fue a tomar su mochila antes de salir del gran salón. Estaba satisfecho con su resultado y la habilidad que le dio conocimiento de medicina.

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Dejen unas pocas estrellitas si les gusto, por supuesto, no es obligación, pero sabre que les gusto. Una vez más, gracias por leer mis ideas y espero que disfruten la primera misión de Genzo, que comenzara en el capítulo 4.