"_My songs know what you did in the dark_"
_Music♫︎
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Eran las doce de la noche y en aquella penumbra del bosque, sus ojos azules llenos de oscuridad iluminaban el terror en cada corazón puro.

Y si, el terror es una sensación que puede dejar paralizada a cualquier persona, haciendo que esta piense en lo peor, haciendo que los pensamientos que rondaban anteriormente en su cabeza sobre el salir corriendo ante el miedo desaparezcan y solo quede el vacío mental frente a su causante.

La sensación de miedo es pasajera y no se puede comparar con la sensación de terror, porque se diferencian bastante.

¿Has sentido miedo?

Claro, el miedo crea un espacio mental donde todas las opciones de como salir perjudicado salen, donde la sensibilidad y la adrenalina se activan y la sensación de que, en cualquier momento, alguien tomará tu hombro y se llevará tu voz en un dulce grito, se hace cada vez más grande.

El miedo, que hace que tu propia alma se manifieste, que hace que tu cuerpo hable por sí solo y que el inicio de aquel sentimiento oscuro, empiece a hervir en el interior de tu corazón.

La respiración se descontrola y el cuerpo empieza a sentirse débil, indefenso, el frío empieza a dominar tu garganta a medida que respiras agitadamente el aire que se vuelve más pesado a tu alrededor, y a medida que experimentas más y más esta sensación, tu cuerpo empieza a reaccionar con mucha más sensibilidad de la que piensas, aquella opresión en tu corazón ante cualquier sonido o movimiento que hagas, la agresividad con la que puedes llegar a reaccionar ante cualquier sensación  extraña que percibas a tu alrededor.

Y en cualquier momento en el que el pánico tome el control de tu respiración y de la conciencia que llevas en ese instante, empezarás a sentir el famoso °Deja Vú° aquella sensación en la cuál, los sonidos de tu alrededor se van y quedas sumido en tus propios pensamientos, en un vacío el cuál no puedes reaccionar y en el cuál, puedes hacer cualquier cosa de la cuál te puedes arrepentir.

Por ejemplo, tirarse de un puente.

Bueno, hay que ser de tan mala suerte como para estar en un puente antes de que eso pase, igual, el terror es algo peor.

Imagina al terror como el miedo multiplicado por 3, el terror te deja tan paralizado que incluso, los peores recuerdos pueden llegar a tu mente, y como verás, así me encuentro yo.

Enfrente de un asesino junto a su hermana gemela, de la cuál aún no recolectamos información suficiente, pero nos atrevemos a decir, que es lo suficientemente peligrosa.

¿Que como averiguamos esto? Irónicamente, nosotros no preguntamos, a nosotros nos dijeron que es diferente.

Al principio pensábamos que posiblemente se tratara de una coincidencia y que no debíamos prestarle atención a esta extraña muchacha, ahora, sabemos que no era una coincidencia que ella tuviera ese parecido con el, pero aún cabe una duda.

¿Sus acciones son similares?

Eso, necesitamos averiguarlo pero por el momento, necesitamos comprobar si sus rasgos son lo suficientemente similares como para determinar su parentesco con alguien en especial.

Volviendo al tema.

Estaba perplejo, nunca llegué a pensar que él siguiera vivo, mi mente volvió a vagar por aquel borroso recuerdo.

Las paredes de aquel sitio oscuro fueron iluminadas por mi linterna, mis botas chapoteaban en los charcos de aquel espacio reducido donde apenas, escuchaba el eco en cada paso que daba.

Hasta ahí llegó el recuerdo, siempre se cerraban las puertas en mi cabeza cuando se trataba de recordar algo importante.

Lo único seguro aquí era que lo más probable los dos nos volvamos un punto fácil si es que en verdad existen criaturas malignas en este mundo.

Además de las personas, claro.

Recuerdo una vez en la que alguien me dijo algo que se quedó en mi cabeza. En estos momentos me atrevo a decir que no se que hacer.

¿Qué vas a hacer cuando haya sangre en el agua?

Si dejamos de lado el sentido literal, aprendemos a entenderlo.

¿Alguna vez has hecho algo irreversible y has sentido... La inmensa preocupación de no saber que hacer?

Claro, si te ha pasado, pero analicemos más profundo; el pasado muchas veces puede ser de lo más normal, posiblemente, es lo más común que puedas ver.

Pero tranquilo, aquí la cosa no termina, dije "puedas ver" ¿entiendes?

El punto es, todas las personas por más inocentes y perfectas que parezcan, siempre han vivido algo lo cuál han llegado a odiar, algo que probablemente hayan olvidado, que posiblemente ha quedado fuera de esa burbuja de pensamientos y fortalezas armadas, ha quedado tan atrás que apenas puedes llegar a recordar parte de ello, lo puedes negar pero si ha pasado, de distintas maneras, pero ha pasado, a todos nos ha pasado.

Creamos nuestras propias corazas y nos refugiamos en lo más profundo de nuestros corazones, donde escondemos los más oscuros secretos de nuestra vida, por esto, duele el miedo, duele el pecho al presenciar la sensación de terror, porque piensas que todas las personas a las que quieres proteger de tu propio ser están en peligro, en peligro, de su propio miedo.

¿Como te sentirías al ser un peligro para aquellos que aprecias?

Y hablando en ese sentido, así estoy yo, con miedo de mi mismo, de mis emociones, de pensar que todo lo que he hecho se puede derrumbar en cualquier momento que él clave su mirada en mi, por eso, tengo que huir, pero no me pienso ir antes de comprobar y memorizar algo.

Voy a terminar haciendo que se gire, que no pase, por favor, que no pase.

Con disimulo analizo su rostro, ella ha comenzado a decirle algo que no me permito escuchar, en el fondo él se está riendo en su interior, eso sale a la luz a simple vista, poco tiempo después, el se permite reírse y sonreír.

Y allí encuentro algo, además de el hoyuelo que se forma en su mejilla por la sonrisa ladeada, logro identificar una pequeña cicatriz en la esquina de sus labios, mantiene su mirada agachada y ahora, levanta la cabeza para mirarla aún con esa sonrisa que me fastidia tanto. En medio del fastidio que tengo, localizo algo más, otra cicatriz, esta vez en una de sus cejas, un corte que parece hecho en una peluquería. 

Se tomaron muy en serio eso de ser casi un espejismo.

En fin, estas entendiendo ¿verdad?

Si no es así, relee, la solución a todo, releer.

Mi vista estaba clavada en su rostro mientras el prestaba atencion a las palabras de ella, me había olvidado del mundo hasta que siento un tirón en mi brazo.

Ah

Pensé, si, un pensamiento bastante raro, volví a la realidad y ahora estoy corriendo junto con Paul para al menos, intentar llegar antes de la 1 de la mañana a casa.

Si, cuantos años crees que tengo ¿20? No, no tengo ni siquiera 18.

Soy menor de edad y estoy metido en un lío del cual no estoy seguro si saldré.

Atravesamos unos cuantos árboles y salimos al camino, llegamos al punto en el cuál, había que empezar a utilizar métodos más eficientes como para que no escucharan nuestros pasos y ese método era, correr en puntitas.

¿Qué? Es una opción eficiente, corres más rápido y no se escuchan casi tus pasos.

Y así, empezamos a correr, las piedras que se aflojaban del suelo eran bastante fastidiosas, estuve a punto de caerme tres veces y el frío viento del otoño estuvo a punto de volar mi capucha azul más de una vez, esto explica porque casi me caigo en el camino, no había que dejar que vieran nuestros rostros, era muy peligroso.

Iba por la cuarta vez que la capucha intentaba abandonar su sitio pero seguí corriendo, esto parecía una maratón, al menos, logramos localizar las viejas farolas de la calle que poco a poco empezaban a apagarse.

Oh no, no otra vez...

Eso quería decir que faltaba poco para la una de la mañana, así que había que correr aún más rápido, cosa que se dificulta en una noche helada, si corres más rapido, te vas a congelar más rápido de lo previsto.

Por lo visto esta noche fue más extraña de lo que pensé que sería.

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Te preguntarás que nos pasó después, pues, bueno, casi nos encuentran, y no pudimos dormir más.

Iba saliendo de mi casa a las 5:30 de la mañana, lo cual es bastante raro en mí, porque, aunque la entrada al instituto es a las 6:30 de la mañana, yo tenía que comprobar algo.

Estaba caminando por el mismo sitio que habíamos cruzado anoche, aquella zona llena de callejones sucios a los cuales nadie prestaba atención.

Genial, ya te diste cuenta porque vine ¿no?

Me acerqué al callejón que, por lo que recuerdo, fue el mismo en el cuál nos detuvimos a observarla cuando saco las notas extrañas esas.

Y cuando terminaste traumado querido.

Mi consciencia me reprocha pero se que no es verdad lo que dice.

Si como no.

¡QUE NO ES CIERTO!

Bien, volviendo al tema, solo quería comprobar si habían quedado rastros visibles aquí, solo para saber si había estado alucinando anoche y si no hubiera estado seguro de lo que vi anoche, diría que habia estado alucinando porque no había rastro de nada.

Ni gotas, ni manchas, ni siquiera la maleta que vimos anoche.

Es obvio que volvió pero ¿en qué momento? ¿Como hizo para que no se diera cuenta nadie? Volver a este sitio e irse posiblemente a su casa le debió de tomar bastante tiempo, es casi imposible pasar desapercibido por las calles después de la una de la mañana.

Con esas preguntas en mi cabeza pasé por distintas calles, estaba tan absorto en mis pensamientos que ni me di cuenta de dos cosas.

*1. No me di cuenta de por donde caminaba.
*2. Tampoco me di cuenta de la hora.

Revisé mi teléfono.

6:15 am.

Y... A correr.

Tenía que hacer algo más y para eso tenía que recorrer medio pueblo.

Tenia un acuerdo con Paul de que, nos  íbamos a reunir en la salida de su casa para aclarar dos cosas.

La primera es obvia, aclarar la situación de anoche.

La segunda ya muy pronto te darás cuenta.

Pasé corriendo por calles y más calles, casi piso un gato por andar distraído, una farola casi me cae en la cabeza y el tiempo se estaba agotando.

Hasta que llegué.

Estaba esperándome mientras revisaba algo en su teléfono recargado en un farol algo oxidado.

Típico de el, se dio cuenta de que llegué y empecé a hacerle señas de que era bastante tarde.

Claro, Paul es el único que se la pasa metido en el teléfono y nunca revisa la hora.

Miro la pantalla del celular nuevamente y sus ojos azulados se abrieron como platos.

Lo siguiente fue correr como si fuéramos a morir en cuestión de segundos. Llegamos a la calle que nos dirigía a la puerta del instituto.

Pero, antes de entrar tenía algo que reclamar, entramos por el callejón de la esquina y dirigí la mirada a Paul, que alzó las manos al lado de su pecho en un gesto de que esperara un poco.

Se agachó en una de sus rodillas y abrió su maleta, reviso entre sus miles de cuadernos y sacó uno con una portada negra con detalles rojos.

El cuaderno de matemáticas.

Es prácticamente obvio que ya te diste cuenta de para que lo necesitaba a él. Y no te sorprendas, no soy el único aquí que trafica guías de trabajo.

Soy un, Traficante de guías.

Es decir, colaboro con varios trabajos escolares a cambio de algo y viceversa.

Excelente trabajo, claro, hay que ser minucioso para que no sepan que el trabajo no lo hiciste tú.

Le das dos cuadernos al traficante para que sepa tu letra y al otro día te lo devuelve, le das algo a cambio y sigues como si nada.

En este caso, Paul hacía mi tarea de matemáticas y yo hacía su tarea de química.

Todos somos buenos en algo pero no en todo ¿no?

O bien, a veces si, pero no todos tenemos esa suerte.

Hicimos el intercambio y pasamos entre los estudiantes que estaban entrando poco al instituto y se distribuían poco en las aulas.

Fuimos a la nuestra y nos encontramos con la persona que menos queríamos ver, estaba en su pupitre en una esquina mirando su teléfono, su típica capucha negra sobre su cabeza, no tengo ni idea de que era lo que revisaba en su teléfono y tampoco me importaba.

Paul entró mientras yo me quedé observándola durante unos segundos, fruncí el ceño y una sonrisa ladina se posó en sus labios.

¿Que es lo que tanto ocultas Dama Gótica?

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Ayyyy, me encanta ese sobrenombre, se me vino a la cabeza y me encantó.

¿Desde cuándo tan melosa?
Mor, desde que empecé esto xD.

Les confieso algo, no tengo ni idea de que es lo que ella oculta ¿o si?
Nuestra adorada dama gótica tiene muchos secretos que serán revelados poco a poco y nosotros, nos convertiremos en cómplices de sus secretos aunque no quieran.

Comenten por favor, quiero saber que piensan... Se que ya saben uno de los secretos de ella pero hay más, pero, secretos como... ¿Cuáles?...

Saben que los quiero ¿no? Gracias por leer hasta aquí, por favor dejen su voto, no saben lo mucho que eso significa para mí.

Los adoro mis locxs.
Adiós!..