Efectivamente Louis se fue tres días después a Londres junto a Barry, alegando que debían empezar de nuevo con el proyecto del centro comercial, aún cuándo era fin de año y no estaba trabajando.

──El niño se va a sentir muy mal, Louis. ──Barry era el encargado de conducir. Louis iba escuchando música.

──Ya, suficiente. Dos besos nos dimos, ni que fuera la gran cosa. ──Barry rodó los ojos.

──Odio cuándo actúas cómo niño, te gusta, le gustas, ¿por qué tienes que ser así? ──preguntó, doblando en una esquina y acelerando. ──En serio, debes pensar más en los sentimientos de los demás, si te da miedo que sea menor que tú solo enfrentalo, pero esto de huir solo porque te asusta sentir es bastante infantil, y el infantil de la relación tiene que ser él que tiene dieciocho.

──Barthomelew no pedí consejos tuyos. ──rodó los ojos. ──Harry tiene dieciocho, ¿que iba a hacer con alguien cómo yo?, tengo treinta y seis, sus padres lo matarían.

──Louis. Solo me hace sentir mal que él se va a sentir mal consigo mismo porque te fuiste sin siquiera despedirte, además que dijiste la estupidez de que fue un error besarle. El niño tiene sentimientos. ──Louis trago saliva.

──Escucha, es un adolescente, lo superará rápido, ya tendrá a otra Omega u otro y fin de la historia, ni siquiera sé va a recordar que beso a un señor. ──Barry aprovecho el semáforo en rojo para voltear a ver hacia Louis.

──Louis, te conozco cómo la palma de mi mano, estarás mal por esto, muy mal, y no quiero verte así, prométeme que tu Omega y tú pensaran en esto, ¿sí? ──Louis suspiró algo frustrado.

──¿Por qué?, ¿por qué precisamente tú tienes que estar haciendo esto tan complicado?, ni siquiera ha pasado algo, a ti nunca te ha pasado algo así, no te he conocido ni usa sola pareja, sólo personas que follas, ¿que sabes tú sobre esto? ──preguntó, Barry cerró sus ojos y suspiró.

──Yo tengo una buena razón para estar soltero, Louis. ──habló. ──Pero tú no tienes ninguna buena razón para no dejarte llevar está vez.

──Tú mismo dijiste que era inapropiado. ──lo apuntó.

──Sí, hombre, pero a ti no te van a matar si besas un Alfa en la calle, a mi sí. ──suspiró cansado, y empezó a conducir nuevamente. ──Pero ya no te diré nada más porque estás insoportable. Solo si quieres al chico, no lo lastimes por tu inmadurez.

Louis abrió la boca indignado.

──¿¡inmadurez?! ──Barry asintió.

──Sí. ¿Huir, estar a la defensiva?, es precisamente lo que haría un inmaduro cómo tú, o cobarde tal vez, con lo que te sientas mejor. ──Louis se cruzó de brazos.

──Eres idiota. ──murmuró.

──Ajá. ──Barry dobló nuevamente. ──Pero tengo razón en lo que te digo.

El resto del viaje fue un silencio demasiado incómodo, Louis iba bastante molesto, ¿que problema había en irse de un lugar para no cometer más errores? a él le parecía bastante razonable.

A Barry no, pero ¿a quién mierda le importa lo que piense ese Alfa?, a él no, por supuesto, ¿pero su Omega?, su omega parecía estar de acuerdo con Barry.

Louis bajó del auto cuándo llegaron a su departamento, tomó su maleta, jalandola con algo de dificultad.

──¿Necesitas ayuda, Omega? ──se burló Barry.

──¡Vete a la jodida mierda! ──gruñó, su maleta se había caído y abierto.

──Ten buena noche, karma. ──rió, luego simplemente arrancó el auto y se fue. Louis se dejó caer en la acera.

Y empezó a llorar de frustración, tiró una camisa suya al lado cuándo intentó meter toda su ropa nuevamente. Su omega empezó a gimotear desesperado, Louis terminó por acostarse en el pavimento, eran las tres de la mañana.

──¿A quién mierda llamas?, nadie va a venir, que no viste que nuestro amigo se fue.──habló a su Omega, pero los gimoteos no pararon.

Luego sintió una presión en su pecho, se sentó con dificultad, luego de eso, solo sintió un alivio recorrer cada parte de su cuerpo, suspiró relajandose.

──¿Cómo hiciste eso? ──preguntó, pero su lobo se encontraba ronroneando, cómo si hubiese obtenido una caricia. ──Oh, mierda.

Busco entre la ropa tirada en el suelo su celular, marco rápidamente el número de Barry.

──Barry. . . ──su voz sonaba demasiado asustada.

──¿Qué te pasó? ──preguntó, escuchó los pasos de su amigo y el abrir de la puerta. ──¿Lou, te hicieron algo?

──Sí.

──¡¿Qué?!, ¿quién? ──la voz de Barry empezó a exaltarse.

──No, no, no. Nada de eso, yo-estaba llorando de frustración porque-. . . Barry, sentí un alivio.

──¿Okey?, genial.

──No. No lo produjo mi Omega, Barry. ──hubo un silencio al otro lado de la línea. ──De todas las cosas que pudieron pasarme, está es la más jodida.

──Sí, Louis, está es definitivamente la más jodida. ──suspiró. ──Dormiré contigo está noche, ¿okey?

──Okey, por favor. ──pidió su voz sonando más pequeñita. ──Barry. . .

──Yo no te voy a dejar, Louis. ──escuchó cómo encendía el auto. ──Soy tu mejor amigo, no te voy a abandonar.

──Sí, gracias.

──Voy a colgar porque maneja-

──No, por favor, no.

──Okey, déjame ponerte en altavoz. ──susurró.

Louis suspiró, su lobo estaba tranquilo con la onda de alivio que recibió, pero él no, porque sabía perfectamente que pasaba.

Tenía un Alfa, tenía un lazo natural a medio formar con un adolescente de dieciocho años.