Parte dieciséis: 30. Desesperación
Parte dieciséis: 30. Desesperación
–Kyungsoo no es culpable de nada, no encontramos a Jongin en ninguna parte. Yo no puedo ver destruidas nuestras vidas de esta forma– Baekhyun deja salir un sollozo y enseguida se tapa la boca. –¿Sabes lo difícil que es para mí creer que esto en serio está pasando? Me acostumbré a dormir cómodamente, a comer a horas adecuadas, a estudiar, tener un trabajo, a vivir con mi pareja. Me encanta saber que puedo servir para algo decente en esta vida, tener a mis amigos cerca– el chico limpia sus lágrimas antes de continuar. –Después de todas las cosas feas que me pasaron desde que nací, después de ser parte de ese mundo horrendo y cambiar drásticamente a una vida digna... yo no podría regresar a ver como nos sumimos en la miseria.
–Yo tampoco– Luhan interviene igual de afectado. –No sé que debamos hacer para parar esto, pero es imposible para mí regresar a las calles o ir a la cárcel . Ya no pertenezco a ese mundo, ya no encajo ahí, ya no sería capaz de sobrevivir.
–Kyungsoo jamás haría una cosa así. Es imposible que arriesgue todo por una cantidad tan miserable de dinero, lo sabríamos, esto es una trampa. Él no sería capaz de hacer algo malo a cambio de billetes. Todo este tiempo ha sido tan cuidadoso en mantener su historial limpio. Alguien ha hecho esto para verlo caer, estoy seguro de eso– Chanyeol se escucha preocupado, tiene unas ojeras marcadas y el ánimo por el suelo.
–Y es muy extraño que haya pasado justo al mismo tiempo que Kris secuestró a Jongin. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras ellos están sufriendo de esta manera.- Luhan se cubre el rostro frustrado.
–¿Y qué podemos hacer? Pienso desesperadamente, considero todas las opciones y no veo una forma eficaz. La policía está ayudando, pero no conocen como funciona esto, no saben cómo es que Kris piensa, y el daño real que les quiere hacer– Baek solloza mientras expone sus ideas, sin darse cuenta que ha iluminado a su novio.
–¡Exacto! Ellos no saben como es el mundo de las pandillas y como se manejan las cosas, pero nosotros sí.
–Hemos estado fuera de ese mundo por demasiado tiempo– Luhan niega con la cabeza ante la ocurrencia, pero eso no desmoraliza a Chanyeol.
–Pero Kris fue de los nuestros. Sabemos exactamente qué es lo que quiere y hasta ahora hemos visto por qué camino va. Somos varias personas que estuvimos bajo su mando. Sé que Kyungsoo suele ser el de las ideas, pero no podemos dejarlo solo. No podemos tomarnos mucho tiempo, recordemos que Jongin y él están en peligro.
El gigante se cruza de brazos y frunce el ceño, mordiéndose el labio mientras piensa sobre sus siguientes acciones.
–Si fueras Kris... ¿Qué harías?– Baekhyun imita a su novio y murmura cosas para sí mismo mientras se pasea pensativo.
–Engañaría a Jongin para atraparlo, mandaría información falsa que se demore en verificar para atrapar a Kyungsoo, y que su grupo no pueda salvarlo. Luego torturaría a Jongin para sacarle información o inculpe a su novio de crímenes que no ha cometido, intentaría deshacerme de las personas que pudieran salvarlos....–las palabras de Luhan parecen ir perfectamente con la realidad.
–O sea nosotros...– Chanyeol empieza a comprender la línea de pensamiento. –Tenemos que hacerle pensar que somos lo inútiles que piensa que somos y atraparlo en el intento de engañarnos o deshacerse de nosotros.
El plan era ese, buscar la forma de parecer vulnerables, dejarse espiar, decir cosas comprometedoras, confabularse con la policía como había hecho el mismo Jongin, exponerse tontamente a riesgos que parezcan un error de buena fe. Kris no desperdiciaría ninguna oportunidad, era su hora de lucirse frente a Kyungsoo y salvarlo a él y a Jongin.
–Chicos– Sehun aparece de la nada en la habitación, asomando sólo la cabeza.
–¿Qué pasa, amor?– pregunta Luhan.
–Tenemos refuerzos.
* * *
Jongin escucha a los hombres conversar cerca de él y se mantiene atento, con la mirada fija en el piso. Lo han golpeado por puro placer, así que lo más inteligente es no moverse hasta que se olviden que existe. Las cosas se le han ido de las manos, jamás se imaginó que estaría en una situación como esta de nuevo, así que no ha tenido tiempo para pensar en cómo solucionar un problema de esta magnitud. Y se siente culpable, terriblemente culpable.
Se ha enterado de la fatal noticia. Kyungsoo está preso y no sabe cómo es que han logrado que algo así suceda. Pensó que era una mentira, pero no, Kris tuvo el placer de hacerle ver el video de él siendo arrestado una y otra vez durante cinco horas, por reloj. El tipo estaba realmente loco.
–He sido yo...–susurra sin poder evitarlo, no quiere mostrarse débil, pero el peso de la culpabilidad es más grande. Todo ha sido a causa de su tontería, por hacer planes e intentar arreglar sus asuntos sin comentarle nada a Kyungsoo. Él probablemente le hubiera ayudado y las cosas hubieran salido mejor.
Ahora, más que nunca, lo necesitaba tanto, más cerca. Dejó salir un suspiro inquieto, estaba mareado, como borracho, por culpa de los golpes a traición que lo han noqueado. Su mente vaga entre imágenes de Kyungsoo y planes absurdos para escapar.
La luz apenas si entra en el lugar donde está. Sumido en esa desesperante oscuridad, está atrapado intentando contar el tiempo para no volverse loco. Hace una diferencia entre día y noche, intenta soñar con cosas agradables para despertarse con más ánimos de vivir.
Incluso si no logra salvarse, no va a dejar que Kris se salga con la suya y gane su batalla con su mente, puede romper sus huesos pero no quebrar su espíritu. Todavía tiene ese "yo" adentró que va luchar con fiereza, porque él es quien decide cuando las cosas han terminado.
Tiene que ser fuerte, tiene que pasar por encima de sus propias limitaciones y aceptar la realidad sin dejar de intentar seguir adelante. Tiene que confiar que puede lograr hacerlo. Ha vivido una historia tan larga, cruda y complicada. Se ha zafado de peores situaciones, sabe puede lograrlo.
–¿Por qué no ha comido la princesa?– Kris aparece en la habitación y nota el sucio plato de Jongin todavía lleno con la mazamorra que le sirven irregularmente cada día.
–No tengo hambre, todavía no es mi hora de comer– responde con voz seca, debido a la ausencia de líquidos suficientes.
–¿Cómo carajo puedes saber que hora es? Traga cuando te sirvan, punto. No puedes matarte de hambre, idiota.
–No han pasado ni tres horas desde que me dieron lo que ustedes llaman "desayuno". No tengo nada mejor que hacer, puedo armar un intento de horario y comer cuando tenga hambre.
– Mira, gusano– Kris lo agarra de la ropa para alzarlo sin consideraciones, el cuerpo cansado y golpeado del chico no puede hacer mucha fuerza para defenderse. –Si te digo que te atragantes con la comida, lo haces. Deja de pensar que estás en un puto hotel. Te necesito vivo hasta terminar con este asunto, después puedo matarte si quieres.
–¿Entonces este rato te sirvo más vivo que muerto?– la pregunta traía una trampa, Kris lo sabía, así que decidió no responder. Pero su ausencia de palabras, aquel delator silencio también decía mucho de sus intensiones. Jongin se quedó en callado, era lo mejor.
* *
El abogado está en la hora de visita. Kyungsoo parece cada vez más impaciente, porque tiene la urgente necesidad de salir para poder ayudar a Jongin. Tras las rejas, no va a conseguir nada y su temor más grande en este mundo puede hacerse realidad: perder a Jongin.
–Kyungsoo. No me mal interpretes, sólo con fines prácticos quiero hacerte una pregunta, como tu abogado.
–¿Algo malo pasó?–quiere saber de inmediato.
–Tal vez... ¿podrías considerar que... pudo ser Jongin?
–¿Qué cosa? ¿Jongin pudo ser qué?– cuestiona sin entender, pero fastidiado por cualquier posible suposición en su contra.
–¿Y si realmente Jongin fue quien ayudó a esta gente a meterte aquí?
–No- la mirada del CEO de la empresa le provocó escalofríos al hombre que lo defendía. Entendió que ese era un tema que no iba a ser tocado nunca más.
–La prensa y la investigación policial pueden decir lo que sea, pero Jongin sigue desaparecido y él jamás haría una cosa así. No es ingenuidad de mi parte, si Jongin fue quien conspiró para meterme a la cárcel, pues me quedaré voluntariamente aquí el resto de mi vida.
–Sé que es difícil para ti creerlo, pero incluso si sabemos que no es cierto, tengo a la prensa encima y...
–Y nada– interrumpe sin consideraciones. –Jongin no será culpado de nada bajo ninguna circunstancia. Me tiene sin cuidado lonaue opine la prensa amarillista de este país. Sólo quiero salir de este lugar para poder salvarlo. Esa es la prioridad ahora. No importa si piensa que Jongin pudo traicionarme, no es así, él está en peligro y yo necesito ser libre para ayudarlo.
El abogado hace un gesto de preocupación. Kyungsoo no tiene forma de ser incriminado por ningún negocio sucio, él mismo ha hecho tanto papeleo para la empresa.
Incluso si Kris le ha tendido una trampa, sería muy fácil darse cuenta que ha sido falsificada porque las firmas son muy difíciles de imitar y no hay vídeos, fotos ni grabaciones. Lo único que estaba retrasando todo era el mero trámite burocrático.
–Esto tomará mucho tiempo, eres una figura pública, te has hecho muy famoso y no sólo tenemos el problema legal, sino además a los medios de comunicación detrás de la noticia con gente que te defiende con fiereza y otra que te ataca con la misma fuerza. Para mí está clarísimo, sé como manejas las cosas y no habrá nada que encuentren que pueda culparte de nada. Mi preocupación radica en tu gente. Confías en ellos, has crecido con ellos...
–¿Pero?– Kyungsoo no se está con cosas, quiere saber exactamente qué está sucediendo para empezar a tomar decisiones.
–Te has convertido en un héroe, porque has ayudado a mucha gente a que sus vidas mejoren, cambien, a que logren llegar a ser alguien. Pero estás rodeado de gente que ha cometido errores, que ha estado en la cárcel, que ha pertenecido a grupos ilícitos. Tú mismo perteneciste a uno, no has estado en la cárcel, pero muchos saben que te hiciste famoso por trabajar para un pandillero y ser miembro activo del grupo. Muchas personas no confían en ti, en tu empresa, en tu gente, en tus métodos. Tus enemigos económicos quieren verte caer y esta es su oportunidad de oro para hacerlo. La presión social es muy grande, por lo tanto las investigaciones deben ser minuciosas y públicas hasta cierto punto si no quieres tener problemas con la gente.
–¿Entonces?– pregunta impacientemente el CEO, cansado de tantas vueltas y resuelto a conseguir respuestas.
–Que quiero que te hagas a la idea que puedes estar algún tiempo aquí, ante de que pueda sacarte– el hombre se rascó la cabeza preocupado.
–¿De cuánto tiempo estamos hablando?
–Semanas, tal vez meses. Te juro que estoy haciendo todo lo posible para acelerar este proceso, pero no hay mucho en lo que pueda intervenir.
Imposible.
Jongin estaba en peligro ahora, era necesario ayudarlo rápido, no estar a la espera de que un juez mande a revisar cosas que no tienen sentido, Kyungsoo ha demostrado su inocencia hasta el cansancio. Si no se apresuraba, la vida de Jongin estaba en un riesgo cada vez más grande.
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