(Hitoshi Shinso) Toallas , lluvia y anticongelante
Varados... Si, varados en plena carretera, estaban cerca del río Ōi y a unos kilómetros se encontraba el "AutoCamp Mitsuboshi".
Pero ese era el problema, kilómetros y por una razón "desconocida" su camioneta se había sobre-calentado...
- Corazón, basta ya, estoy seguro que fue el anticongelante.
- Mierda Aparicio, por qué se te olvidó echar eso, sabes que es importante.
- ¿Disculpa Hitoshi? Se supone que tú eres el que maneja, siempre te quieres hacer cargo de esto ¡¿y ahora es mi responsabilidad?!
No siempre todo va a estar en bandeja de plata para ti...
Empapados y enojados, no era la mejor combinación a decir verdad, la lluvia no paraba y empezaba a hacer mucho frío; Soleil, brinco hacia los asientos de atrás de su camioneta para sacar algunas toallas y sábanas para cubrirse.
Y aún que no lo quisiera admitir gracias a su gran orgullo, tenía que aceptarlo; le encantaba ver a su esposo Hitoshi Shinso, mojado, su camiseta se pegaba a sus pectorales y lo hacía ver tremendamente sexy.
Esos mechones morados que tanto le encantaban estaban hacia abajo y algunos pegados a su rostro, sin pensarlo mordió muy levemente su labio inferior.
- Ten sécate, lo único que falta es que te resfríes -extendió el brazo ofreciéndole una toalla a su marido.
- No, no quiero que me lo des en "bandeja de plata", prefiero hacerlo yo mismo -hizo comillas en sus dedos para darle más énfasis a esa frase.
- ¡¿CUÁL ES TU MALDITO PROBLEMA TOSHI?! -tiro la toalla en las piernas de Hitoshi, se cruzó de brazos y le dió la espalda.
El de cabellos violetas no se molestaría en contestarle a su esposo, ya que si algo distingue a Aparicio Moreno, era su fuerte y obstinado carácter, además de que tenía un gran orgullo y no era de los que pedían disculpas...
Pasaron 15 minutos y la lluvia aún no paraba, Moreno seguía sin dirigir ni una sola palabra o mirada a Hitoshi, lo cual empezó a molestar al de púrpura mirada ya que no le gustaba ser ignorado por su pareja.
Después de algunos minutos pensando por fin "Toshi" cómo lo suele llamar Moreno, vio la oportunidad perfecta para pedir un perdón a su esposo sin decirlo directamente. La mano del mencionado se encontraba en el asiento reposando; la idea de Hitoshi, era simple: Poner su mano sobre la del contrario y acariciarla un poco en forma de un "Perdón".
La idea era brillante, solo faltaba ejecutarla... Cuidadosamente Hitoshi, deslizó su mano hacia la de su pareja, y después la acarició un poco. Miro a Soleil quien aún le daba la espalda. Creyó que su plan habia sido un tremendo fracaso, hasta que su esposo devolvió la caricia al contrario.
- Te ves sexy así... -musitó Aparicio.
- ¿Qué fue eso?, no logré escucharte bien cariño -sonrió fanfarrón y miro con algo de ternura a el contrario.
- No veo necesidad de repetirlo -su mirada seguía en la ventana.
Shinso, se pasó al asiento trasero para estar más cerca de aquel lindo hombre. Una pequeña mirada de Soleil, fue hacia Toshi, quien lo miraba con suma atención.
- Deberías quitarte la camiseta, te puedes resfriar si tienes la ropa mojada.
- Claro, lo que digas. -quito está prenda de su cuerpo, dejando su torso totalmente desnudo.
- ¿Hay algo más que quieres que me quite?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro