
Capítulo 14
Adaria
Se oye el sonido de las chispas del fuego explotar, me mantengo sentada cerca del calor y Rells se pone a mi lado.
—Costó, pero lo logré. —Se ríe él—. Hace tiempo no hacía una fogata, mi manada era experta en eso.
Quedo pensativa.
—Sobre tu compañera, te aislaste de los tuyos luego de lo que pasó con ella, ¿cierto?
—Me obligaron a irme, pero sí. —Suspira.
—No fue tu culpa. —Pongo mi mano sobre la suya.
Rells me mira.
—¿Sabes? Estos últimos días... —Hace una pausa—. La verdad, ha pasado mucho tiempo en el que no formo un vínculo con alguien y contigo se generó tan rápido.
—Lobo solitario. —Alejo mi mano—. Bueno, está es mi primera vez teniendo a alguien que se hace cercano a mí. Sé que ha sido por poco, pero definitivamente creo que puedo confiar en ti.
—¿Cómo está tu brazo? —Lo toma de forma cuidadosa y ve la mordida—. Quisiera saber cómo arreglarlo.
—No importa. —Lo aparto despacio y le sonrío—. Gracias por ayudarme.
—Me gusta tu sonrisa, ahora sonríes más, espero que permanezca.
—¿Y tú? —Miro hacia el fuego—. Cuando crucemos el portal, ¿a dónde irás?
—¿Qué? ¿No puedo ir contigo? —Se ríe.
—Supongo, es que... —Hago una pausa—. Interrumpí tu vida de repente.
—Puede ser, pero no es como si estuviera anclado en algún lugar, así que si me dejas acompañarte, no le veo el problema.
—Así que no tienes lugar al que pertenecer —susurro—. Como yo.
—Eso parece. —Mantiene su sonrisa.
—¿Eres muy optimista, cierto?
—¿Se nota mucho? —Ríe, entonces me provoca otra sonrisa.
En esta ocasión, en vez de alejarme, me acerco hasta Rells, así que se calla, poniéndose serio también, entonces nuestros rostros están a centímetros.
Una atracción que creció en tan poco tiempo no puede ser buena.
Nuestros labios se tocan despacio y es un beso que me roba un suspiro. Supongo que es mi primer beso consentido, así que tenía que sentirse bien. Aunque no fue bien, fue fantástico.
Dejamos de perdernos en el tacto de nuestras bocas cuando se escucha un sonido. Hay sombras entre los escombros, es como si se hubieran activado luego del beso.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro