capítulo 4: Olvídate de mí
Betty toca la puerta dos veces y espera un segundo para que Efraín le acceda el paso para entrar a su despacho.
Estando adentro él se encuentra sentado en una silla a lado del escritorio leyendo una revista de fútbol, sin darle mucha importancia a la persona que ha entrado al despacho. Pero al oír la anhelada voz de Betty, él reacciona rápidamente apartando la revista de sus ojos y viendo las curvalineadas líneas de la mujer que lo loquece.
- No te esperaba tan luego. Al levantarse de la silla y ir en busca de un beso, el cual es rechazado. Por que Betty lo invade rápidamente y ella le dice que ya no puede seguir con esto.
Efraín estalla de ira en ese momento y la toma del brazo asiendo presión sobre la piel y volteandola nuevamente hacia él, luego que ella le hubiera dado la espalda.
-Dime quién es ese desgraciado que a robado tu corazón.
- No te lo diré, si no te tranquilizas Efraín. -Y por favor sueltame que me estás lastimando.
-Maldita estúpida asi es como me agradeces, todo lo que hecho por ti. - Al darle una bofetada en la mejilla.
- Por que no me matas Efraín, si tanto odio me tienes. -exclamó Betty al sentirse lastimada emocionalmente.
- No puedo llegar a esos limites por que te amo aún Betty. - al darse la espalda y apoyar sus manos sobre el escritorio, arrepentiendose por haberle pegado.
-Entonces te diré quien es la persona con la cual me casare.
- Pero que carajo me acabas de decir Betty. - al girarse nuevamente y tomarla sobre los hombros.
-Esto te dolerá tanto que no se como lo tomaras, pero la persona con la cual me voy a casar, es tu hijo Daniel.
Efraín retrocede dos pasos hacia atrás y lleva sus manos sobre su cabeza al sentirse atormentado por lo que acaba de oír.
- Lo siento mucho, pero empezaré honrar a tu hijo.
-Pero desde cuando hubo algo entre ustedes que no lo note.
-Desde que él tenía quince años de edad.
- Por que nunca me lo dijiste.
- Asi como eres tu Efraín capas al saberlo, golpearias a tu hijo por estarse acostando con su mucama. -doy gracias que él ya es un adulto y no le podrás poner una mano encima ahora que lo sabes.
-Aún no me hago la idea de lo que me estás contando Betty, sabiendo tu cuanto te amo. - Pero te dejaré ir con mi hijo con una condición.
- ¿Que tipo de condición? - al sentirse atemorizada por lo que está pensando Efraín en este momento.
- Que te entregues a mi por última vez.
- Como te atreves a pedirme eso, sabiendo que me casare con tu hijo.
-Entonces si no lo quieres hacer, sabes muy bien quién pagará las consecuencias.
-Si lo hago me dejaras en paz a mi y a mi madre.
- Te doy mi palabra Betty. - al tomarla de las manos.
-Esta bien, lo aré.
-Excelente, en ese caso cerrare la puerta bajo llave y será mejor que entregues todo de ti, si quieres conseguir tu libertad.
Betty piensa en Daniel en ese momento, si que pasaría si él se diese cuenta de esto. Pero la idea se le desvanece de la cabeza al oír el látigo de Efraín.
- No me digas que lo usaras.
-Tu sabes como disfrutaba hacerlo contigo, todo modos será la última ocasión.
-Solo procura de no azotarme muy fuerte, no quiero que Daniel se entere de ésto.
-Simplemente relajate, que yo me encargaré de no dejarte ninguna marca.
Ella cerró sus ojos y con sus manos temblorosas, empezó a bajar sus pantaletas por debajo de sus pantorrillas, acostandose al mismo tiempo en el escritorio.
-Era doloroso cada embestida que me proporcionaba con su látigo, no podía seguir haciendo me la fuerte, fue así que dejé que mis quejidos se liberaran por si solos. -aaah...uuum.
Daniel había llegado a la casa de sus padres y fue atendido por la dama de llaves.
-Buenos dias, joven Daniel.
-Buenos dias, Camila. - ¿podría decirme adonde se encuentra mi padre?
- En este momento el señor Efraín, se encuentra en su despacho, joven Daniel. -¿Desea que lo anuncié?
-No mi querida Camila, yo personalmente iré donde él. -solo haz me el favor de avisarme, cuando llegue mi madre.
-Como usted ordene, joven Daniel.
Daniel se acercó detenidamente al despacho de su padre y al otro lado de la puerta escuchó un gemido muy parecido al de su amada. -fue entonces que tiró de la puerta y encontró a su padre haciéndole el amor a su futura comprometida.
-No puedo creer, lo que mis ojos estan viendo. -Nunca me llegue a imaginar que entré ustedes dos hubiera algo íntimo.
-Déjame explicarte lo Daniel. -miestras se acomodaba la pantaleta alrededor de su cintura.
-No hace falta Betty, al parecer e visto lo suficiente. -mejor desaparece de mi vida y no quiero volver a saber nunca jamás de ti. -dejando ir la puerta de un portazo, al momento de retirarse del despacho de su padre.
Betty se quedo con el alma hecha pedazos, al resignarse que había perdido el amor de su vida. Todo por liquidar una deuda pendiente que tenia con Efraín.
Efraín se vio obligado ir detrás de su hijo y decirle que fue él, quién insistió a Betty que se le entregará por última vez en sus brazos. ya que se veía necesitado de ella y no podía renacer su vida, si no tenía un encuentro erótico con ella por última vez.
Martha la esposa de Efraín, vio a su hijo salir rápidamente de su casa, como si algo terrible hubiese sucedido ahí adentro. seguido de su padre que lo llamaba por su nombre. -Daniel, por favor, hijo mío, no te vayas -Déjame que te lo explique todo.
-¡Por Dios! -¿Efraín que sucede? -Al mirar a su hijo largandose en el auto en una obsesiva velocidad.
-No puedo decirte nada Martha, solo déjame que vaya detrás de mi hijo y pueda hablar con él. -solo haz me el favor de prestarme las llaves de tu coche.
-¡por qué! -¡por que! -Era la pregunta que se hacía en su cabeza, a la ver visto a Betty sometida en las manos de su tan anhelado padre.
Su corazón se sentía lastimado y incitado en tomar represalia contra su propio padre.
Fue entonces que miró en su retrovisor y vio venir de lejos el automóvil de su madre, acercándose rápidamente hacía él.
Daniel disminuyó su velocidad, dejando que el otro auto se incorporara aún costado de él, invadiendo el carril contrario.
Ahí se lleva la sorpresa que era su padre quién conducía el coche de su madre y de esta forma le explica todo por una llamada celular.
Arto de la verdad, Daniel discute con su padre mientras van conduciendo en el camino. -como tuviste el valor de aprovecharte de la situación que enfrentaba Betty en aquel entonces cuando su madre sufría de cáncer.
-Lo peor de todo que la sometiste aque se costara contigo, acambio del dinero que tu le otorgabas para que pudiera pagar el tratamiento.
Eso es lo que más odio de ti padre, prefiero en este momento que estuvieses muerto, para no matarte yo mismo. -dijo Daniel mientra llenaba de ira su corazón.
Entonces un vehículo apareció desprevenidamente de una curva, donde el conductor se desvía de su carril. Tras botar su botella de alcohol entre sus piernas.
Daniel queda en pleno shock al mirar el vehículo que iba a colisionar contra él.
Efraín inmediatamente embiste a su hijo con su coche, sacandolo del camino, dejando Daniel todo aquél estruendo automóvilistico detrás de su espalda.
En cuestión de segundos el vehículo de su padre se encontraba volcado por el impacto, quedando nada más y nada menos a unos cuantos metros de distancia de su hijo, dejando muchísima sangre esparcida por el pavimento.
Daniel se baja de su auto rápidamente y corre donde hasta su padre, lastimosamente ya no podía hacer nada. Ya que el cuerpo de Efraín se encontraba sin vida.
Daniel liberar sus llantos de dolor...
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