Radiaciones electromagnéticas transcurrían por todo el interior de mi cuerpo, dejándome paralizado en el piso, a tal grado que mi corazón explotariá en cuestión de segundos.

El destino había tomado la decisión de borrar mi existencia, pero sucedió algo inesperado.

Como anillo al dedo, un hombre encapuchado entró a la habitación cobrando la vida de unas de las chicas.

Dos tiros bala fueron los suficientes para acabar con la vida de Grabiela, entrandole uno por el lado izquierdo del pecho y el otro en el centro de su cabeza.

Por tanto Génesis súplica por su vida al ver como su amiga Grabiela fue asesinada en la cama, por el sujeto desconocido.

El causante de la muerte de Grabiela era nada más uno de los tantos hombres que se encontraban prisioneros en el burdel, de alguna forma se había adueñado de una arma y está misma podría salvarle la vida más adelante.

Joel le ordena a Daniel que se levante del suelo, sin dejarle de apuntar a Génesis con el arma. -busca algo que ponerte y que sea demasiado rápido, los guardias que custodian este maldito burdel no tardarán en venir.

A la ver encontrado Daniel entre los cajones de los armarios un boxer que ponerse, ambos se retiran de la habitación. -Sin antes darle un fuerte golpe en la cabeza a Génesis con la cacha de la pistola.

Al recorrer por las habitaciones de los estrechos pasillos, Daniel logra ver en unas de las habitaciones el cuerpo fallecido de Matheus. Decepcionado al verlo muerto, Joel le pregunta si era algún ser querido. -no, nomas fue un tipo que conocí cuando desperté en esta maldita pesadilla.

-Ok, por lo tanto yo desearía saber en éste momento, quién está detrás de éste mundo sexual.

-¿por qué te interesa tanto eso Joel?

-No te parece muy extraño que estás mujeres estén tan obsesionadas con el sexo.

-Pueda ser que actúen así por la cocaína que han ingerido en su cuerpo, oh ya están acostumbradas hacer este tipo de trabajo por órdenes de arriba.

-explícame con más razón Daniel.

-Mira Joel, no estoy muy seguro. -Pero lo que he visto hasta el momento, creo que ellos nomas llevan a su víctima al placer más dulce que hay en este mundo; complaciendose hasta ellos mismos y en el momento mínimo que su presa se descuida, es ahí que ellos lo conducen a la muerte, matandolo al instante con cualquier objeto que tengan a su alcance.

-Si es así, no hay hombre o mujer que pueda hacerme daño amigo, mientras tenga está maravilla en mis manos.

En un acto seguido se mira una mujer teniendo relación sexuales con un tipo, ambos se encuentran de pies dándole ella la espalda y él la atrae hacía su cuerpo, penetrandola por detrás.

Colocando sus manos sobre la cadera de su acompañante, donde ella se bascula totalmente hacia adelante y tomando apoyo sobre un soporte por de bajo de su cuerpo, lo que viene siendo un cojín o almohada, para una posición muy excitante y profundizada.