Chanyeol se encontraba construyendo una bonita casa con la ayuda de Sehun y otros alfas de la manada de aquel pueblo. Él había hablado con el alfa líder y este le dejo quedarse junto a su familia por lo que ahora se encontraban viviendo en la casa de Sehun hasta que la suya esté lista.

Baekhyun por su parte estaba lavando la ropa y suspira cuando ve las camisetas sucias de su hijo. El pequeño a veces era muy salvaje jugando y al omega le costaba quitar las manchas de mugre. 

—Hola, oye si quieres yo puedo hacerlo, —Luhan se acerca para hablarle amablemente. —Deberías descansar, estás a poco tiempo de dar a luz. 

—No pasa nada, es la ropa de mi hijo y de mi marido así que no es tu obligación, —sonríe de manera fingida. 

—Sé que no nos llevamos bien, y que principalmente es por mi culpa, —respira profundamente y mira al omega. —No me he portado bien y jamás me perdonaré que por mi culpa tu hijo se haya ido siendo un niño, —ve que Baekhyun deja de lavar, pero no lo mira. —En realidad lo siento mucho, —su voz era baja y se notaba el arrepentimiento. 

—Yo te agradezco que nos ayudes aunque sé que es por Sehun, si fuera por tí no lo sería. —Voltea su cabeza hacia Luhan y su voz es firme, —pero también te agradecería que dejes de fingir amabilidad. No te lo creo, además no es fácil olvidar todo lo que tuvo que pasar mi cachorro cuando se fue porque te estorbaba. —Vuelve a la labor de fregar las telas. —Sé que no era tu responsabilidad cuidarlo, por lo mismo no te reclamo nada y simplemente vivo mi vida mientras me aparto de tí hasta que mi casa este completa.

—No es fingido, realmente estoy arrepentido, mi actitud fue mala, pero entiendo que te sientas así, —suspira resignado.

Baekhyun no soportaba a Luhan; en un pasado pudo haber dado una oportunidad de amistad al omega incluso luego de que lo insulto, pero ahora no, simplemente no. El omega no podía olvidar que por culpa de Luhan su bebé había sufrido tanto. Jongdae ni siquiera era un niño malcriado o malvado.

Luego de terminar de lavar la ropa y colgarla, Baekhyun decidió ir a la habitación para cambiarse de ropa y descansar un poco. Estaba a pocos días de dar a luz por lo que se sentía más fatigado de lo usual. 

—Niños, por favor no se muevan tanto, —le dice a su abdomen mientras lo acaricia. —Tengo mucho sueño, —susurra para si mismo mientras bosteza y se acomoda quedándose dormido. 

Baekhyun despertó por un leve dolor en su barriga, hizo una mueca mientras lentamente abría sus ojos hasta que se abrieron por completo. Se sentó y vio que su ropa estaba teñida de rojo, se asustó de inmediato. 

No tenía contracciones y su fuente no se había roto, decidió respirar profundamente ya que quizás podría no ser tan grave porque no se estaba desangrando, solo era una mancha en la túnica, aunque aquella leve punzada en su abdomen seguía ahí. No sabía que hacer, su marido no estaba ahí; solamente estaba Luhan y no quería pedirle ayuda. 

Se levantó con cuidado y camino hacia el baño para revisarse a si mismo y suspiro aliviado cuando vio que simplemente se había cortado superficialmente en el abdomen, quizá pudo haber sido con una espina de alguna rama. Se lavo con agua y jabón para luego cambiarse de ropa.

—¿Qué pasó ahora? —pregunta Chanyeol molesto cuando ve a su hijo sucio junto a otro niño que lloraba. —¿Qué hiciste? —levanta una ceja mientras seca el sudor de su frente con una toalla porque estaba construyendo la casa.

—Yo-

—El demonio de su sobrino lastimo a mi cachorro, —la madre del niño interrumpió a Jongdae mientras hablaba con indignación. —Debería ser apaleado.

—¿Mi sobrino? —alza ambas cejas. —Señora, no es mi sobrino, es mi hijo, —la omega se sorprendió y el niño llorón se calló. —¿Por qué lo golpeaste? —pregunta ahora a Jongdae. 

Jongdae frunce el ceño y baja la mirada manteniéndose en silencio a lo que Chanyeol rodó los ojos y resoplo; estaba cansado por lo que se encontraba de mal humor.

—Él lo golpeó porque Jil estaba burlándose de él diciendo que era huérfano, —dice Minseok metiéndose ya que no quería que el alfa sea castigado. —Estaban diciéndole cosas feas él y sus amigos. 

—¿Huérfano? —vuelve a rodar los ojos, —señora, si su hijo vuelve a fastidiar al mío, créame que no responderé bien. —Su voz sale más gruesa asustando a la omega. —Ahora si no tiene nada más que decir, por favor retirese y aprenda a educar bien a su cachorro. 

—Como se atre- —la mirada afilada del alfa la hizo guardar silencio. 

Chanyeol chasqueo la lengua cuando la señora se fue, —ve a dónde tu madre para que te cambie de ropa, estás sucio, —le dice a su hijo quien asiente para luego irse con Minseok. 

—¿Qué sucede? —pregunta Sehun acercándose.

—Una vieja loca con su mocoso fastidiando a Jongdae, —suspira. —Ya quiero terminar la casa, me duele todo el cuerpo.

—Tu sabes que puedes descansar y quedarte en la mía el tiempo necesario, —estira sus brazos y sonríe.

—No me gusta abusar de tu amabilidad, —lo mira por un momento, —pronto nacerán mis cachorros y dudo que quieras tres llantos en la madrugada. —Sonríe ladino.

—No niego que podría ser molesto hasta para tí, pero son mis sobrinos, así que no importa, —se encoge de hombros. 

Chanyeol solo niega con la cabeza suavemente mientras ríe para luego volver a la construcción. Él desde siempre había querido una familia grande por lo que quería hacer muchas habitaciones, una casa un poco más grande que la que tenía antes. 

.

—¿Por qué no le querías decir a tu papá? —pregunta Minseok mientras camina junto a Jongdae. 

—No quería hacerlo, —mira para otro lado, —no quería que supiera que me decían esas cosas, —se cruza de brazos y resopla.

—¿Por qué? Tú no eres huérfano y así lo fueras no deberían molestarte, —forma un puchero con sus labios.

—Por eso lo golpee y no debiste decir nada, —se detiene y le reclama al pequeño omega. —Eres un entrometido.

—No me trates así, —susurra triste mientras ve al suelo, —solo quería ayudar. 

—Yo no necesitaba la ayuda de un omega, —le dice enojado.

Minseok arruga su rostro mientras empieza a llorar hasta que el corazón de Jongdae duele y su consciencia le recrimina por lo que de inmediato va a abrazar a Minseok quien no para de sollozar. 

—Lo siento, Min, no debí decirte eso, —acaricia el cabello del omega. 

Jongdae no se sentía cómodo hablando sobre sus problemas, incluso le daba vergüenza contarle a sus padres sobre ello, por lo que muchas veces actuaba con violencia, aunque era Minseok la persona que usualmente lo tranquilizaba. 

Baekhyun vió que su hijo llegó con la ropa llena de tierra y el cabello alborotado mientras que su cara estaba fruncida. No entendía que había sucedido así que tomo la muñeca de su cachorro para luego sentarse con el alfa de pie mirando al suelo.

—¿Qué pasó? —le habla en un tono dulce mientras el otro solo sacude su cabeza en un signo de negación. —¿Peleaste con Minseok? —pregunta.

—No… No me pasó nada, solo me caí, —susurra, —mi papá dijo que me tenía que cambiar de ropa. 

—¿Él te regaño? —pregunta preocupado, —¿Te golpeó?  

—No, solo me dijo que me cambié de ropa.

—Está bien, ve a bañarte. —Jongdae asiente y se va al cuarto de baño.

Baekhyun suspira sabiendo que no podría hacerle hablar y se levanta para buscar algo de ropa para el niño. Quería averiguar que era lo que le sucedía a su pequeño. Generalmente su hijo era alegre, juguetón y sincero, aunque había ocasiones como esa dónde se mantenía cabizbajo y callado, lo que le preocupaba mucho.

En la noche Chanyeol llegó y luego de cenar fue a acostarse. Quería terminar rápido su casa, no era que odiará estar ahí, era que simplemente su propia naturaleza de alfa quería su propia casa para él y su familia. 

—Channie, —Baekhyun se arrodilla en la cama junto a su marido. 

—¿Sí? —pregunta al omega.

—Es sobre Jongdae, —Baekhyun frunce el ceño cuando Chanyeol resopla. —¿Le hiciste algo? 

—No, simplemente se peleó con un niño por un malentendido, —respira profundo. —Al parecer los niños pensaban que él era huérfano y lo molestaban por eso. —Le explica.

—¿Qué? Voy desgarrar las gargantas de esos mocosos, —empuña sus manos mientras que muerde con fuerza su labio inferior. —Como se atreven a meterse con mi bebé. 

—Tranquilizate, —acaricia el brazo del omega, —ya lo arregle. No lo volverán a molestar.

—Pero y si realmente no estuviéramos vivos, eso no les da el derecho de molestarlo, —se cruza de brazos molesto. 

—Ya sabes cómo son los niños de idiotas, igual a sus padres, —jala el brazo de Baekhyun para ponerlo junto a él. 

—Mi pobre cachorro, era por eso que no me quería decir que le pasaba, —pone su mano sobre el pectoral de Chanyeol mientras se acurruca junto a él.

—No te estreses tanto, —dice mientras acaricia la cadera del omega, —estamos ahora aquí para protegerlo, —besa su frente.

Chanyeol quiso seguir besando al omega quien empezó a suspirar por la humedad cálida sobre su piel, pero luego ya no sintió nada y abre sus ojos encontrandose con que el alfa se había quedado dormido. Baekhyun se rió un poco y luego los tapo a ambos con la manta.

Al día siguiente Baekhyun estaba ayudando a Jongdae con sus tareas, pero el niño estaba muy confundido por lo que se estresaba y terminaba frustrado y de mal humor.

—Cariño, ¿Qué sucede? —pregunta en un tono dulce mientras mira como el niño baja la mirada y empuña sus manos sobre sus muslos. —¿Se te hace complicado? —Jongdae asiente luego de un rato. —Oh cariño, no te preocupes. Es normal que se te haga complicado, pero para eso estoy yo o bueno tu papá si es que estoy muy ocupado. —Suelta una pequeña risa y su hijo lo mira, —no tienes que sentirte enojado. 

—Siento que soy tonto, —susurra bajando nuevamente su vista. —Eso me dijo la maestra de lenguaje. 

—Mañana iré a hablar con el director de la escuela sobre eso, —sonríe y por dentro su lobo aulló queriendo la cabeza de aquella maestra.

—¿Mamá crees que soy tonto? No puedo hacer eso, —suspira y luego recuesta su cabeza sobre el regazo de Baekhyun.

—Por supuesto que no, eres muy inteligente, simplemente no has tenido a alguien que te ayude con las tareas desde que no estuve aquí, —acaricia los mechones del alfa. —Ahora no te frustres, solo déjame explicarte y pon atención ¿Sí? —Jongdae se aparta para asentir con la cabeza. —Perfecto, —besa la frente de su hijo quien empieza a sonreír. 

—Te extrañe mucho, —sus ojos empezaron a enrojecerse mientras su garganta se cerraba. —No te vayas nunca más, —sin poder aguantarlo empezó a llorar de nuevo.

—Nunca más, —abraza al niño que comenzó a desahogar todas aquellas emociones que había tenido guardadas. —Te amo mi pequeño cachorro, —besa la cabeza de Jongdae.

—Yo también te amo, mami, —dice entre lágrimas con la voz entrecortada.

Chanyeol entra a la habitación aunque Baekhyun y su niño no se percataron ya que estaban en su burbuja maternal. El alfa mayor no entendía muy bien el motivo de aquel acto, pero decidió salir de la habitación para darles espacio. 

.

—¿Te pasa algo? —pregunta Sehun mientras toma un poco de jugo, —te ves medio raro.

—Solo estoy cansado, —mueve la cabeza de un lado a otro tronando sus huesos, —desde que volví a ser yo, siento más cansancio de lo normal.

—Quizás tu cuerpo aún se está adaptando, estuviste varios años en ese estado, —apoya su torso a la pared de a lado. —Por cierto ¿Recuerdas lo que hacías? ¿Cómo te sentías? —pregunta sumamente curioso.

—No recuerdo claramente, a veces simplemente me vienen como imágenes rápidas o voces, pero no es nada claro. —Se cruza de brazos y suspira, —¿Por qué le permitiste ir a Baekhyun? Pude haberlo matado.

—Oye que yo no soy su alfa, —levanta un poco sus brazos en señal de inocencia y se ríe, —sabes como es tu omega, a veces ni a tí te obedece y crees que me iba a hacer caso a mí, —levanta una ceja en señal de obviedad.

—Supongo que es cierto, —se ríe relajándose un poco al recordar la actitud tan terca de Baekhyun. 

—Papi, —la voz de Minseok llamó la atención.

—¿Qué sucede, cariño? —pregunta a su pequeño para luego alzarlo en un brazo. 

—¿Es cierto que Jong se va a ir pronto? —su rostro era afligido lo que causó ternura en ambos hombres. 

—Sí, cariño. ¿Por qué? —pregunta Sehun mientras mira con atención al pequeño.

—Yo no quiero que se vaya, ¿Se van porque hicimos algo malo? —pregunta Minseok con un puchero en sus labios. 

—No, pequeño, —Chanyeol sacude su cabeza y ríe, —simplemente tenemos que tener nuestra propia casa como antes. Podrás seguir viendo y jugando con Jongdae. —Le tranquiliza a lo que el cachorro sonríe contento.

***

Baekhyun estaba contento porque ya había sido terminada su nueva casa, aunque no podía demostrar mucho sus emociones ya que su muy abultado vientre le impedía moverse demasiado.

Mientras iba con Jongdae y Chanyeol a comprar cosas para la casa, vio algo que hizo correr a su corazón. El pequeño y ojón rostro de su amigo junto a aquel alfa moreno; quiso correr hacia él, pero no pudo ya que sus bebés no le dejaron hacerlo, además el chico se perdió entre la gente. Posiblemente después lo podría ver y conversar, luego vio otra cosa que llamo su atención.

—Alfa, —jala la manga de Chanyeol quien le presta atención. —Vamos allá, —señala con su dedo a una tienda.

—¿Para? —pregunta el alfa confundido. 

—Hay unas cunas muy bonitas. —Señala con su cabeza a la tienda donde estaban productos para bebés. 

Chanyeol suspira y agarra la mano de Jongdae para ir junto a su omega para ver las cunas. Después de eso toda la tarde se dedicaron a comprar cosas para amoblar la casa. Tenía suficiente dinero debido a que en esta manada estaba trabajando de cazador nuevamente, lo que le encantaba.

Los días pasaron y finalmente pudieron mudarse a su casa aunque para los cachorros fue algo triste, pero más para Minseok; el cachorro lloro. Jongdae le dijo al omega que era dramático, porque iban a vivir cerca. 

Baekhyun últimamente tenía que ser atendido por Chanyeol ya que no podía ni siquiera levantarse o verse las puntas de los pies. En cualquier momento podría entrar en labor de parto y eso le asustaba un poco. 

—Mami, ¿Me ayudas? —pregunta Jongdae entrando a la habitación. —Papá dijo que no te molestará, —forma un puchero, —pero es que no entiendo algo y mañana tengo un exámen. —Mira al suelo.

Baekhyun con algo de dificultad se sienta quedando con su espalda contra el respaldar de la cama y suspira por el esfuerzo. Luego sonríe a su pequeño y le hace un gesto con la mano para que el cachorro se acerque.

Jongdae va con su cuaderno y lápiz hacia su madre para sentarse a un lado sobre la cama. Baekhyun comienza a explicarle de manera sencilla y aquello le ayudo a despejar su mente.

Esa noche Chanyeol baño a Baekhyun y le puso una bata ancha para que estuviera cómodo, luego lo arropó para que durmiera calentito. Le había propuesto al omega dormir en otra habitación para darle espacio, pero Baekhyun le dijo que no, que quería dormir a su lado.

—Chanyeol, Chanyeol, —Baekhyun despierta en la noche por un dolor en su abdomen, —alfa, —mueve al alto quien empezó a despertar poco a poco.

—¿Q-Qué sucede? —pregunta algo desorientado. 

—L-Los bebés, —sujeta su barriga y respira profundo, —duele. —Su voz era baja.

—¿Qué? ¿Ya van a nacer? —se altera asustado mientras se levanta para prender la luz encontrandose con que su omega estaba cubierto de sudor. —Deberías convertirte, —coge un pañuelo para empezar a secar el rostro de Baekhyun. 

—Eso intento, pero no puedo, —dice con dificultad, —debido al dolor no tengo fuerza para convertirme, —agarra la muñeca de Chanyeol para apretarla. —Creo que deberé dar a luz… Cómo humano, —susurra con miedo. 

—Pero son tres cachorros, ¿Estás seguro de que no puedes cambiar? —Sigue secando su piel. 

—Dejame seguir intentando, —responde agitado mientras cierra los ojos.

Baekhyun hunde sus uñas en la manta de la cama mientras llama a su parte animal hasta que poco a poco comenzó a transformarse. Fue más doloroso de lo normal ya que podía sentir claramente como su piel se desgarraba y sus huesos cambiaban de posición. 

Chanyeol se sentía bastante impotente al escuchar los quejidos de dolor de su pareja sabiendo que no podía hacer nada para ayudarle, simplemente estar ahí para él. 

Pequeñas gotas de agua empezaron a caer hasta que sin que se den cuenta, una tormenta había caído sobre el pueblo.

El parto estaba durando bastante tiempo y Baekhyun aún no daba a luz lo que preocupaba a Chanyeol quien no se apartó ni un segundo del lado de su omega, él también estaba en su forma de lobo, a su lado.

Baekhyun emitía pequeños quejidos lastimeros y luego Chanyeol se acercó más cuando escucho el primer sonido de cachorro, el primer bebé había salido y de inmediato Baekhyun empezó a limpiarlo con su lengua; luego fue el siguiente hasta el tercero, eran dos lobos grises como él y uno castaño como su madre. 

Con cuidado Chanyeol puso mantas nuevas y limpias debajo de su esposo y sus cachorros quienes ahora estaban lactando ávidamente. Recuerdos dolorosos vinieron a su mente, imágenes de sus pequeños sin vida hicieron doler su corazón, pero ver a sus lobitos tan vivos le trajeron de vuelta a la felicidad. Nunca olvidaría a sus pequeños y esperaba algún día, cuando fuera su momento, verlos en el más allá. 

Baekhyun se sentía cansado, estaba contento de que sus pequeños hayan nacido sanos y normales. No iba a mentir, le había dado miedo que sus bebés pudieran haber nacido diferentes porque el alfa lo embarazo estando en ese estado. Sin embargo, al ver y oler a los pequeños, veía que eran como cualquier otro cachorrito.

Esa noche Chanyeol durmió en la alfombra de la habitación ya que temía lastimar a sus hijos, aunque en realidad por la emoción y felicidad de ver a sus cachorros casi no pudo cerrar los ojos. En cambio Baekhyun durmió como una piedra.

Al día siguiente Jongdae entro con cuidado a la habitación de sus padres ya que el sonido de quejidos le llamo la atención y sonrío intensamente al ver a sus padres y hermanos convertidos en lobos, pero dormidos. 

Jongdae se acercó con cuidado para subirse a la cama y tomar en las manos a uno de los cachorros para luego abrazarlo con cuidado. Era tan pequeño, de hecho era el más pequeño de la camada. Después de un momento se bajó para convertirse en lobo y decidió acurrucarse en el pecho de su papá quien inconscientemente puso una pata encima de él para atraerlo hacia si mismo abrazándolo. Jongdae era realmente feliz con su familia.

Fin~

Bueno, hemos llegado al final de esta historia. Muchas gracias a todas las personitas que me acompañaron con votos, vistas y comentarios ya que me motivaron a seguir escribiendo.

Quizás como en Imperfecto, pueda subir unos extras. Ustedes deciden.

Si quieren que hable de algún tema que piensan que faltó en la historia pueden decirme y haré un extra sobre eso.

Ahora sí quieren leer otra historia mía, está en emisión Redención para que le den también mucho cariño.