Narra JungKook:

Desperté poco a poco. Me encontraba demasiado desconcertado. Me levanté y analizando mi alrededor, pero caí en cuenta de que estaba en el mismo lugar.

No había nadie, pero tenía una intravenosa en mi brazo izquierdo y al lado tenía una máquina que registraba mi pulso.

Me fijé en un señor que rondaba los 35 años con traje de doctor, había ingresado recientemente.

-Me informaron que despertaste. ¿Cómo te sientes?

-¿Y a usted le importa?- me comenzaba a sentir completamente impotente por estar en esta situación.

-Necesito saber cómo te sientes para ayudarte, Jungkook.- me dijo sin verme.

Suspiré. ¿En verdad tenía que resignarme a esto?

-Me siento aturdido. Mi cabeza me duele y quiero seguir durmiendo.- sobé mi ojo derecho con una de mis manos.

-¿Sigues cansado? Creí que ya tendrías suficiente al dormir tres días seguidos.

-¡¿Tres días?!- me sorprendí ante sus palabras.

-Sí, no los sentiste, ¿verdad?- rio. Le respondí con el mismo gesto pero sin muchas ganas.

-Toma.- me tendió dos pastillas junto a un vaso de agua.- son para tus síntomas.

Las sujeté y me las tomé sin problemas.

-Me puede decir... ¿Qué me está pasando?- era una de las cosas que más me preocupaban junto a Tae.

El hombre que me acompañaba suspiró.

-No tengo prohibido darte información sobre tu estado de salud. Pero ni siquiera yo sé qué te pasa exactamente.- dijo viendo unos papeles.

-Espere... Entonces ¿para qué me están medicando?

-Experimentos. Desde que entraste a este lugar eres un experimento, Jungkook.

Me quedé sin habla. Por un demonio ¿de qué está hablando?

-Eres el único que sigue vivo después de que su sangre rechazara las sustancias.

-Sustancias ¿para qué?- cuestioné.

-Ya te respondí mucho, Jungkook.- al instante me inyectó en mi brazo derecho.

-¿Por qué tantas agujas?

-Ay, eres tan curioso.- chasqueo la lengua.- es para que sigas vivo, ¿sí? Y mejor salgo de una vez antes de soltar información de más.- al terminar de hablar salió del lugar.

-Eso confirma que tengo altas probabilidades de morir, ¿no?- hablé para mí mismo.- sea como sea, eso es lo último que haré en estos momentos.- di una sonrisa tan rota, que cualquiera que me viera sentiría lástima.

-Al fin despertaste, ¿quieres comer?- entró una señora que no tenía rasgos coreanos junto a una bandeja.

-Oh, sí. Tengo mucha hambre.- respondí tratando de ser amable con las personas de allí.

-Toma.- me puso la bandeja en mis piernas y al ver la comida lo primero que hice fue comer rápidamente.

-Con cuidado, chico, que te ahogas.- sonrió la mujer viéndome atentamente.

Al escucharla, comí con más moderación.

-Bien, dejas justo aquí la bandeja que después volveré para recogerla.

-Gracias.- dije brevemente viendo cómo ella se iba.

Al terminar, hice lo que me indicó y miré todas las máquinas del lugar.

-Esa ya la vi. Esa no. Creo que esa sí la conozco.- traté de jugar a identificarlos.

Me di cuenta de que, en ese momento ya me encontraba algo mejor. Entonces ¿sigo estando en peligro de muerte?

Hice un puchero mientras buscaba el control del televisor que estaba frente a mí. Cuando lo encontré, encendí el medio y al buscar un canal me di cuenta de que ninguno funcionaba.

-De qué sirve un televisor sin canales.- hice una mueca, bajé de la camilla e intenté arreglarlo. Al conocer tanto sobre tecnología, lo logré.

-Genial.- solté victorioso mientras pulsaba un canal al azar.

-"Y la conocida banda BTS anuncia la desaparición de dos de sus integrantes, Kim Taehyung y Jeon Jungkook. El fandom Army y los familiares de los idols están devastados con la noticia. Deseamos que suceda lo mejor."

Me había quedado en shock. Estaba tan adormecido gracias a lo mal que me encontraba que le había restado importancia a todo lo que podría pasar ahora.

Estoy SECUESTRADO y TaeHyung también. Dejamos a nuestras familias, a la banda, a las Armys, a nuestros amigos y sobre todo, a nuestra paz.

-¿¡Qué rayos crees que haces!?- entró un hombre con un traje diferente a los demás que había visto. Se me acercó y me golpeó en una de mis mejillas haciéndome voltear la cabeza por el impacto. Sentí el ardor poco después.

-Por algo los televisores están sin señal. No tienes derecho a saber lo que está pasando fuera de este lugar, ¿¡oíste!?-  apagó la pantalla, y me volvió a golpear en el rostro.- ¿¡oíste!?

-Sí, lo oí.-en todo ese tiempo no levanté mi cabeza.

-Jeon JungKook, ¿no? Creí que ya estabas muerto.- dio una sonrisa que se me hizo realmente psicópata.

Me comenzó a doler la cabeza nuevamente. Pero permanecí en silencio.

-Hey, JungKook, ya sabes con quién te estás metiendo. Ten cuidado.- y al fin, salió.

Me recosté lentamente en la camilla y al pensar en todo lo que estaba pasando se me cristalizaron los ojos instantáneamente.

-Por favor... que ya llegue el día en el que salga de aquí.- sequé mis pocas lágrimas y volví a dormir. ¿Qué va? El tiempo corre cuando duermes, y eso era lo que necesitaba que sucediera.

Narra JiMin:

-Sigo no muy convencido de que sea lo mejor habérselo dicho a la prensa.- dije con una mueca.

-¿Y qué quieres que les digamos a las Army's cuando noten sus ausencias?- me respondió YoonGi.

-Tienes razón.- suspiré.

-Aparte, de esa manera dejaremos de dar tours hasta... encontrarlos de alguna manera.- continuó Jin.

-Sí, no podemos seguir haciendo shows con este peso encima.- dijo Suga.

-Tenemos que hablar esto con nuestras fans ¿hoy un live?-habló Hoseok.

-No nos queda de otra.- respondió Namjoon.- ni siquiera sabemos nada de ellos hasta ahora, excepto por la pulsera que no ayudó de mucho.

-Por un demonio...- sobé mi rostro con mis manos dando una respiración entrecortada.

-No vale perdernos en la desesperación. Tenemos que ser fuertes. A ellos no les gustaría vernos como estamos ahora.- comentó NamJoon.- tenemos que mantener la cordura por ellos y ayudarlos a volver. Así que sea como sea los vamos a encontrar.

-¿Y... si encontramos sólo sus cuerpos?- no podía evitar pensar en lo peor.

NamJoon hyung mantuvo silencio por algunos segundos.

-Entonces los habremos encontrado.- respondió sin más.

Todos volvimos a nuestras habitaciones para planear qué diremos en el directo de hoy en la noche, ya que teníamos más probabilidades de quedarnos sin palabras a otra cosa.