🥀 Capitulo 22.
Días antes
Corrí por el parque y Mew me atrapó, tirándome al pasto y haciéndome rodar.
-No puedes definitivamente hacer declaraciones como esas y salir corriendo. — me dijo.
Me reí, tratando de apartarlo de encima.
-Quítate, nos ven.
Me miró y pasó su mano por mi mejilla.
-Me vuelves loco, ¿es que no te das cuenta?
-Y tú a mí.-contesté en voz baja y le besé en la mejilla.
-¿No que nos estaban viendo? -habló con tono burlón, levantándose y ayudándome a hacerlo también.
Caminamos de regreso a casa, como siempre él me dejaba unas cuadras antes para evitarnos algunos problemas.
Estaba hastiado de mentir a mamá, pero ella no me dejaba otra opción.
[•••]
Regresé solo a casa porque Mew se había quedado tres horas en suspensión castigado; puntos malos de salir con un "bad boy", qué se le va a hacer.
Me encontré con la madre de Mew comprando verduras y con varias bolsas cargando. Supongo que tenía que ayudarla ¿no?, era mi suegra después de todo.
-Señora Suppasit-la llamé, y ella me miró con una sonrisa.
-Gulf. ¿Regresas a casa?
Asentí.
--Déjeme ayudarla -tomé algunas bolsas a pesar de su renuencia- Vamos, no es como que tenga muchas cosas que hacer.
La acompañé hasta su casa; ella miró dentro y me dejó pasar.
-Tengo que revisar que no esté sucio– sonrió planamente. ¿No quieres un café o algo?
-No es necesario. —dije, rascando mi mejilla sin saber qué hacer.
-Vamos, sin pena, después de todo eres el novio de mi hijo -la miré sorprendido, porque no sabía que él le había contado– Mew me cuenta todo -sonrió- además habla mucho de ti, mucho antes de que fueran algo, siempre lo hizo, él te adora.
Me sonrojó levemente y me senté en una silla esperando el café que estaba preparándome.
Platicamos un rato de Mew, de su infancia; me mostró algunas fotos y reímos.
Al rato Mew apareció en la puerta y me miró, su rostro se frunció rápidamente.
-¿Qué haces aquí?-preguntó molesto– ¿por qué está aquí mamá?
-Yo... -ella respondió nerviosa-lo encontré mientras compraba y me ayudó a cargar las cosas; ya se iba, Mew
No, no me iba, pero preferí no decir nada.
Mew me tomó del brazo apretándome con fuerza, me quejé por el dolor, pero no me soltó.
-Maldición, tienes que salir de aquí. — siseó.
Me hizo caminar hasta la puerta y abrió, luego vimos a su padre saliendo de su auto, aparentemente algo borracho, él no nos vio y Mew me hizo entrar de nuevo.
-Si pregunta di que aún no llego —le dijo a su madre y me siguió jaloneando hasta una habitación.
Entramos, y parecía que era la suya, no me dio tiempo de observarla aunque quise, porque nos metió a un armario, a ambos.
Su respiración era agitada, la mía también, tenía su mano cubriendo mi boca con fuerza y no podía respirar.
Se oían ruidos en la sala, muchos, los podía oír porque la casa de Mew era de un solo piso; la sala y cocina quedaban bastante cerca de la habitación.
Después de un rato, esos ruidos se volvieron fuertes, las pequeñas voces se volvieron lamentos y gritos que me hicieron abrazarme a mí mismo. El cuerpo de Mew temblaba detrás de mí, mi espalda estaba pegada a su pecho y podía sentir cómo este subía y bajaba.
Cubrí mis oídos para no oír, no quería hacerlo.
Tuve mucho miedo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro