—No entiendo esta serie.

—Ni yo.

—Pensé que ya la habías mirado.

—No Yoon, pero me la recomendaron aunque la verdad no me gusta.—Yoongi se acurruco mejor en su pecho, ambos estaban acostados en el sofá de la sala del menor pasando la tarde juntos.

—Netflix necesita mejores series.

—¡Oh! Ya sé, veamos una película.

El menor tomo el control cambiando la extraña serie que pusieron por una película, la cual fue recomendación que recibió de su amigo Minho, la película se llamaba "Alex Strange Love"

A mitad de película Yoongi se aburrió mientras Jimin suspiraba encantado con la escena del baile.

—Que hermoso.

—Pues...

—Es hermoso dije.—Yoongi puso los ojos en blanco sonriendo con diversión.

—Creo que hay mejores maneras de disfrutar nuestro fin de semana.

—¿Como cuál?—preguntó el menor acariciando los cabellos del mayor.

Yoongi se apoyó en sus manos para alzarse sobre el cuerpo del menor, se acercó al rostro de este para comenzar a besarlo de forma lenta sacándole un suspiro. Dirigió una de sus manos a la camiseta del menor para comenzar a desabrocharla lentamente y poder acariciar la suave piel de su novio.

Jimin fue directo al pantalón del mayor para desabrocharlo, Yoongi metió su lengua dentro de la boca del menor sacándole un jadeo por la sorpresa, se alejó un poco de este para comenzar a dejar pequeños besos húmedos en su cuello.

—Mmm Yoon.—gimió el menor.

Yoongi se tomó un momento para apreciar el cuerpo del menor, Jimin deslizó una de sus manos por su torso de forma provocativa mordiéndose el labio inferior, miro a Yoongi con deseo quien lo miraba fascinado: Jimin lo volvía completamente loco.

—¡Jimin, ayúdame con...!

La burbuja en la que estaban desapareció de su alrededor, su madre entró abriendo la puerta estrepitosamente causando que Jimin empujara a Yoongi quien cayó de trasero en el suelo.

Ambos miraron con miedo a la madre del menor quien tenía la cara roja sintiendo una enorme pena, y ni hablar de los chicos que estaban completamente avergonzados que los había pillado.

—Yo... necesito que me ayuden con las bolsas del mandado.

Yoongi se levantó de inmediato.—Yo la ayudó.

La señora Park lo miro de arriba hacia abajo y luego volteó la cara, Yoongi se examinó y notó su pantalón desabrochado, enseguida lo arregló y salió para traer las bolsas del mandado.

Después de llevar todo a la cocina estaban sumidos en un silencio incómodo, Jimin se había ido a esconder a su cuarto cuando su mamá y Yoongi fueron por el resto de las bolsas.

—Yo... lo siento.—hizo una pequeña reverencia hacia la señora Park.

—Se que ustedes son jóvenes y...—carraspeó su garganta.—Algún día iba a pasar, una madre desea que sus hijos siempre sean los pequeños bebés que traen al mundo pero... bueno la verdad me hubiera gustado no mirarlos.

—Si, yo lo lamento fue... fuimos... debemos tener más cuidado.

—Solo traten de buscarse lugares más privados.—comentó un poco incómoda.—Y recuerden protegerse, ¿Tienen condones?

—Yo.. ah... nosotros.—Yoongi se sintió un tonto por tartamudear.—Si pero... Jimin no se puede...—no se animaba a mirarla a los ojos.—No puede embarazarse.

—Igual no está demás, le compraré unos a Jimin después.

—Si yo... voy arriba.

Sin esperar respuesta camino con prisa alejándose de su suegra, se sentía tan apenado por la impresión que se había llevado y le causó gracia pensar que si su mamá hubiera visto aquello seguro se escondería de ella por lo menos 2 semanas.

Jimin se encontraba debajo de sus cobijas escondiéndose en ellas, sus mejillas seguían sonrojadas y creía que su madre se llevaría un trauma de por vida por sus calenturas.

—Cariño.—lo llamó Yoongi pero no respondió, al contrario se aferró más a las cobijas.—Vamos amor, eso no te protegerá para siempre.

Siguió sin responderle a Yoongi por lo que este se acostó a su lado y se metió dentro de las cobijas con él, ambos se miraron a los ojos pero Jimin apartó rápido la mirada.

—Minnie, amor, pequeño, bebé.

—Tu eres mi bebé.—protesto Jimin a lo que Yoongi sonrió.

—Lo sé.

—No podré mirar a mi mamá durante meses.

—Pudo ser peor.

—¿Tú crees?

—Pues estábamos empezando apenas, pudo llegar cuando yo te estuviera...

—¡Ya entendí! Basta es humillante, mi mamá pensará que soy un pervertido.

—Es que debes de controlarte más Jimin.

—¡Fue tu idea!

—Eres demasiado hermoso como para que no me afecte, es tu culpa.

—¡Yoongi! ¡Mamá seguramente me dará otra charla!

—Amm de echo te comprara condones para que los usemos.

—¡¿Se los pediste?!

—Claro que no, ella me pregunto si nos cuidábamos le dije que no porque no es como que me fueras a dar un bebé y se ofreció a regalártelos.

—Qué horror, ahora sabrá que soy un muerdealmohadas.

—¿Y? Tienes el mejor rol.

—Si piensas eso entonces yo debería ser el que esté arriba a la próxima.

—Jimin, estar arriba es un trabajo difícil y es un sacrificio que estoy dispuesto a aceptar.—llevo una mano a su pecho fingiendo dramatismo.

—Tonto.—Jimin sonrió.

—Dame un besito.

—No.

—¿Por qué?

—Qué vergüenza que mi mamá nos vuelva a sorprender.

—Pues estamos debajo de tus sábanas, ¿Que podríamos estar haciendo en esta posición?—Jimin quito las cobijas que tenían encima de inmediato causando que Yoongi soltara una sonora carcajada.

Jimin le enseño la lengua de manera infantil y Yoongi no pudo evitar enamorarse un poco más.

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Jimin estaba sumamente nervioso, el tan esperado día por fin había llegado y sentía que no estaba listo, a pesar de todas las tardes estudiando, de qué había mejorado considerablemente en matemáticas y de que sabía que había aprendido demasiadas cosas sentía que cuando estuviera frente a ese papel todo se iría a la basura.

—Todo saldrá bien Jimin, nos preparamos bien para este día.

—¿Y si lo arruino? ¿Y si no me gradúo?—los ojitos del menor se cristalizaron.—No quiero reprobar.

Yoongi sujeto sus mejillas besando estas sonoramente.—Confió en ti, así como tú también vas a confiar en ti mismo. Vamos a entrar en unos minutos y aprobaremos ese examen.

—¿En serio lo crees?

—Claro que sí, iremos a comer después de esto para festejar que al fin nos graduamos y pasaremos a la universidad. Como lo planeamos.

Jimin sonrió.—Tu saldrás unos años antes que yo pero conseguirás un trabajo, mientras yo termino mis estudios, luego compraremos una casita para nosotros y tal vez después formemos una familia o adoptemos un perro, pero lo más importante es que estaremos juntos estudiando en la Real Academia de Busan ¿Verdad?—Yoongi forzó una sonrisa que salió bastante natural.

—Si amo, todo será como lo planeamos.

Luego de mimar un poco a Jimin y darle pequeños besos, el timbre sonó y caminaron tomados de la mano hasta que cada uno entró al salón correspondiente. Yoongi susurró un: "Lo harás bien" antes de perderse de la vista de Jimin.

Y Jimin se sintió más que listo, sin saber que ese día iba a cambiar sus vidas considerablemente.

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