— ¡Apúrate, el vuelo está por llegar!

Apresuró su mejor amigo mediante el teléfono por quinta vez, así que algo impaciente le respondió:

— ¡Dije que ya voy! —gruñó entre dientes—. ¿Por qué tu amigo debió tomar el vuelo de noche? Quiero dormir... —murmuró.

Dejó el celular sobre su cama sin importarle que seguía en llamada, sólo seguía buscando aquel pequeño cuaderno donde escribía todos sus versos de canciones. No obstante, se detuvo frente al espejo al tener un pequeño recuerdo.

— ¿El espejo no estaba roto...? —tocó el dicho al recordar claramente unas grietas en él pero ahora no había nada.

— ¡Hola!

De repente Seungmin apareció en el espejo, provocando que Jisung soltara un grito y diera un brinco asustado. El chico del espejo rió en voz alta por aquella reacción.

— ¿Qué demonios...? —musitó mientras veía el espejo, frotando sus ojos varias veces para comprobar que no era un sueño.

— Me presento, Soy Kim Seung— ¡ESPERA, NO ROMPAS EL ESPEJO, MALDITA SEA. CONCEDO DESEOS! —gritó al ver que el mayor tenía intenciones de golpear el espejo con una lámpara.

— ¿Deseos...? —bajó la lámpara y lentamente la puso sobre su escritorio.

— Joder, ¿Era necesario reaccionar así otra vez? —negó con su cabeza—. Necesitas terapia chico. ¡Y por eso estoy aquí! Ahora déjame terminar. —cambio su expresión a una más seria—. Me presento, soy Kim Seungmin y soy tu ángel, concedere los deseos que me pidas ya que mi objetivo es tu felicidad. —sonrió ampliamente.

— ... Que miedo, no quiero un ángel, largo de mi espejo. —frunció su ceño.

—inhaló y exhaló—. ¡No te estoy preguntando, estúpido!

Jisung dio un pequeño brinco ante el tono alto y molesto, tal vez impaciente, que ese chico utilizó.

— ¿Por qué me llamas estúpido, idiota? —se quejó molesto—. ¡Tú eres el que apareció en mi espejo sin mi permiso! ¿Es una broma de Chan? ¡Le he dicho que no haga bromas que involucren a niños tontos!

— ¡¿Acabas de llamarme niño tonto, estúpido?! ¡Te demostraré quién es el niño tonto, maldita ardilla!

— Es un sueño... —cambió de idea inmediatamente y comenzó a pasearse de un lado a otro—. Es un sueño, es un sueño, es un sueño...

— ¡Han Jisung!

Logró oír a través de su celular, por lo cual se acercó a éste sin apartar la mirada del espejo ya que seguía muy confundido respecto a ese chico.

— Sí, ya estoy saliendo, perdona... —le respondió a Chris sin apartar su mirada de dónde yacía.

— La libreta está debajo de tu cama. —dijo Seungmin y sonrió dulcemente.

Han se agachó lentamente hasta revisar debajo de su cama y comprobar que la libreta esté allí, cuando la vio la tomó entre sus manos y volvió a mirar al chico en su espejo. Todo eso era tan confuso pero no tenía tiempo para pensar si estaba drogado o no, Chan lo estaba esperando desesperado.

— Tú y yo hablaremos luego, pequeño ángel malcriado. —le dijo a Seungmin antes de salir de su habitación.

Bajó las escaleras rápidamente y salió de su casa, visualizando a su mejor amigo afuera esperando en el auto junto a sus hermanas y padres; No pudo evitar sonreír. Por otra parte, tras verlo desaparecer por la puerta, se alejó del espejo y se sentó en el suelo, cruzando sus brazos y frunciendo su ceño.

— No sé cómo lo soportaste, Felix... —murmuró—. Es grosero y maleducado.

— Te acostumbrarás después. —respondió manteniendo una sonrisa dulce en sus labios—. ¡Me voy! ~

Luego de decir eso atravesó otro espejo que él creó y que le llevó hasta la salida del avión, todos los pasajeros habían bajado por lo que no había nadie cerca, ni siquiera las azafatas o empleados. Respiró profundamente, pudo sentir el aire del mundo real recorrer sus pulmones, y no sólo eso; Pudo sentir la calidez de los rayos del sol que traspasaba por una enorme ventana a su izquierda.

— Puedes hacerlo...

Exhaló y sujetó las dos maletas que tenía a sus costados antes de arrastrarlas al empezar a caminar a la salida. Y aunque ya quería llegar, sus ojos estaban perdidos en todo su alrededor, la gente, los letreros, los colores. Se había acostumbrado tanto a la oscuridad que estar en un lugar tan brilloso le parecía fascinante; Además, podía oír a la gente hablar, reír, podía tocar las cosas.

— Oh, lo siento...

Se disculpó al chocar con un señor más alto que él, pronto se dio cuenta que no sólo era un señor, eran varios y parecían hacer una especie de guardia en el aeropuerto, a su vez había muchos adolescentes, tanto chicas como chicos esperar detrás de unas vallas de seguridad.

— ¿Qué sucede? —murmuró para si mismo y se puso de puntillas para alcanzar a ver qué era lo que estaba pasando.

Los gritos se hicieron presentes cuando un chico de cabello negro y largo caminó por todo el pasillo despejado, traía gafas oscuras y a su alrededor había más guardaespaldas; Sin embargo, le importó el chico en general, no pudo evitar sorprenderse.

— Hyunjin...

El pelinegro se detuvo y bajó un poco sus lentes oscuros, ahí fue donde Hyunjin y Felix hicieron contacto visual. Pero sólo el menor de ellos pudo reconocer al otro. El mayor le guiñó un ojo y siguió caminando, siendo perseguido por sus fans y sus guardaespaldas hasta que toda esa zona quedó libre.

— Así que eres famoso... Wow, espero que estés feliz, realmente lo espero. —talló sus ojos para evitar las lágrimas e inhaló profundamente—. Gracias, Dios...

Jeongin quien admiraba todo desde su oficina, sólo se limitó a sonreír luego de desaparecer aquel espejo sobre su escritorio. Aunque aún se sentía muy adolorido, parte de su dolor se había calmado luego de darle otra vida a su enamorado; Donde esperaba encontrarlo para enamorarlo de nuevo.

Felix continuó caminando, cada paso que daba su corazón latía más rápido y no podía controlarlos. Sus manos comenzaron a sudar sin querer, por lo que apretó su agarre a las maletas que llevaba aún consigo.

Mientras tanto, Jisung y Chan corrían por todo el aeropuerto, empujando a varias personas sin querer. El mayor de ambos iba adelante, yendo cada vez más rápido; Han por detrás intentaba seguirle el paso a la vez que respiraba agitadamente.

— ¡Espera...! Maldita sea, no es como si tu amigo fuera a irse. —se quejó Jisung intentando tomar el brazo del rubio.

— Necesito verlo ya. —respondió sin detenerse.

— ¡Dices que te importa como un hermano pero yo no estaría tan desesperado si fuera mi hermano! —Chan se detuvo y gracias a eso Jisung chocó con su espalda, soltando un quejido—. ¡Ah! ¿Qué te sucede?

— Mencionaste a tu hermano... Hace años no lo mencionas... —se giró lentamente e hizo contacto visual con su mejor amigo—. Creí que... Seguías culpandote por ello.

Jisung suspiró.

"¡Pero no es tu culpa! ¡Sabes que no es culpa! Así que Jisung, por favor no te culpes..."
Pudo oír un eco en su mente.

— No fue mi culpa. —sonrió de forma leve y miró a través de la ventana a su derecha, admirando las estrellas, sintiéndose tranquilo de inmediato sin entender porqué—. Sé que no fue mi culpa... Así que no debería culparme.

— Me alegra... Me alegra que al fin lo entiendas. —también sonrió la sentirse tranquilo luego de escucharlo—. ¡Ahora busquemos a Felix!

— ¡Sí, señor! ¡Busquemos a nuestro ángel! —dijo sin querer, sorprendiéndose después.

— ¿Nuestro ángel...? —el rubio frunció su ceño confundido.

— Sólo salió. —dijo inmediatamente, tampoco él mismo entendía—. Busquemoslo, anda. —le sonrió antes de comenzar a caminar rápidamente.

Felix se detuvo en las escaleras, abajo se encontraban demasiadas personas esperando por la gente que recientemente había bajado del avión, pero no lograba visualizar ni a Jisung ni a Chan; Y aun cuando no quería admitirlo, no pudo evitar sentirse tranquilo.

— Ha pasado tiempo... Siento que moriré. —murmuró mientras bajaba las escaleras lentamente intentando hacer de su bajada una bajada eterna—. ¿Qué diré? ¿Cómo reaccionaré?

— Yo digo que dejes fluir todo.

El rubio soltó un grito que llamó la atención de las personas que caminaban cerca de él, así que avergonzado bajó su mirada y continuó caminando más rápido sin siquiera mirar al frente.

— Ya veo cómo se sentía Changbin hyung y Jisung cuando aparecía de la nada en el espejo, ¡Avísame, Seungmin! —refunfuñó agitando su cabeza.

— Cálmate, Lix. Todo va a estar muy bien... —soltó una pequeña sonrisa hablándole desde un espejo que sólo él (Felix) podía ver.

— Voy a llorar, lo haré de verdad, me siento muy —de repente chocó con alguien, y ya que iba muy rápido cayó al suelo al igual que la otra persona—. ¡Ah... Lo siento!

Se apoyó gracias a sus maletas y miró su propia ropa para comprobar que no hubiera suciedad en ella, cuando lo comprobó, volvió a alzar su vista, el espejo había desaparecido y sólo tenía a un chico frente a él, mirándolo con una amplia sonrisa.

— Felix.

Sus latidos se volvieron más rápidos pero sus manos dejaron de sudar, y aquellas ganas de llorar desaparecieron; Se sentía en paz, se sentía tranquilo y feliz, tanto que sólo quería abrazar al mayor frente a él.

— Jisung... —murmuró.

Quería sentirse mal ya que, se dio cuenta que ese sentimiento de angustia y miedo era por temor a encontrarse a su mejor amigo primero, antes que a Han. Creía que estaba mal eso, pero en realidad se sentía tan bien.

— ¡Eres Felix, el mejor amigo de Chan! —extendió su mano—. Y yo soy—

La mirada del rubio fue hasta ésta última mencionada, ¿Enserio podía tomarla? Se cuestionó en la mente un par de veces. Esta vez, sólo quería llorar de felicidad y tranquilidad, finalmente ahí lo tenía, con él.

— Han Jisung... Por supuesto que te conozco. —le interrumpió Felix.

Estrechó su mano con el mayor y las mantuvo unidas, mientras mantenía una sonrisa en su rostro que el castaño correspondió de la misma manera, sonriendose el uno para el otro. Todo a su alrededor desapareció de su vista, sólo podía enfocarse en Jisung y en la calidez que le transmitía a su corazón.

Verlo ahí, por fin de frente le hacía querer gritar con todas sus fuerzas al universo entero que lo amaba y que nadie iba a cambiar eso. Pronto los recuerdos de los momentos que paso con Jisung le llegaron a su memoria, haciéndole sentir nostálgico por todo lo que habían pasado.

Gracias a Jisung tuvo citas, gracias a Jisung pudo ver las luces iluminar el río Han y pudo ver las estrellas, gracias a Jisung pudo apreciar del mar y de una lluvia de estrellas, gracias a Jisung pudo sentir por primera vez el amanecer; Y gracias a él pudo volver a amar.

— ¡Felix!

Escuchó a Chan llamarlo a lo lejos, pero eso no le importó, todo de él seguía enfocado en Han Jisung.

Fin.

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스트레이키즈
De verdad no quería subirlo, lo tenía listo desde hace días pero no quería subirlo, y aún lo estoy dudando mucho. No sé porqué me duele mucho soltar esta historia, quizás sea precisamente por el final. Perdonen si tuve algún error ortográfico o en la redacción, si es así pueden decirme y lo editare.

Les quiero agradecer por absolutamente todo el apoyo que no sólo le han dado a la historia, sino también a mí. Todas sus leídas, sus votos, sus comentarios, de verdad muchísimas gracias a todos, todas y todes, yo no estaría aquí sin la ayuda de ustedes y realmente estoy muy feliz de todo lo que he podido lograr con su ayuda.
Espero les haya gustado la historia y espero verlos en mis próximos libros.

Por cierto, en uno de los capítulos dije que le daría un saludo a quien tuviera la teoría más acertada, y por ello ahora le estoy dedicando el capítulo final. Aunque estoy segura de que me hackeo la cuenta PORQUE SIEMPRE ACERTABA, QUE MIEDO.

En fin, muchísimas gracias por todo y espero les haya gustado la historia, esto fue todo de mi parte. Hasta luego.♡

©CB97ONEB