Capítulo 3
Durante el resto de la semana Sucrette ha estado averiguando quien era Jade, consiguió sus redes sociales y ya podía decir con certeza que él había fallecido pero antes de darle la noticia quería tener un reporte completo de su vida para saber que es lo que le impide seguir adelante, ya que, ella estaba segura que ni siquiera él mismo sabía; otra cosa importante que ha ocurrido es que desde la propuesta, todo el colegio anda alborotado pero más unido que nunca. La directora había aceptado con la condición de que los alumnos organizaran los espacios en dónde las actividades se realizarán.
Ella se había inscrito al club de teatro(la cuál es líder) y el de debate. Le había preguntado a Peggy porque era la única que trabajaba en el periódico escolar y si no quería a una nueva integrante pero la chica le dijo que prefiere trabajar sola.
Todo el mundo la conocía, lo que hizo que Ámber estuviera muy furiosa.
Era viernes, nuestra heroína estaba entrando a la escuela y con la primera que se encontró fue con Kim:
-¡Oye, tía! ¡Gracias por los clubes! ¡La escuela es mucho más interesante gracias a eso!
-¡De nada!
-¿Segura que no quieres entrar a esgrima o artes marciales?
-Oh me encantaría pero mi horario es algo ajustado...- y con ajustado se refiere a que tiene responsabilidades mágicas que atender- ¡Pero alguno de estos días me encantaría observarlos y tal vez hacer varios duelos!
-Oh ¿Has practicado artes marciales y esgrima antes?- estaba sorprendida
-Me enseñaron desde pequeña...Es una especie de tradición familiar...
-¡Asombroso! ¡Definitivamente uno de estos días me tienes que mostrar lo que tienes!
-¡Claro! Mira...Tengo que ir al jardín un momento, luego hablamos ¿Vale?
-Te la pasas mucho por ahí ¿Acaso estás stalkeando a alguien? Déjame adivinar.... Es Ken, el de lentes ¿Verdad?- le guiñó el ojo.
-¡No! No es nada de eso, tengo un asunto pendiente con uno de los miembros...
-¡Oh vamos! ¡Di la verdad! ¡A ti te gusta!- tenía una sonrisa pícara
-Este... ¡Tengo que irme!- salió corriendo de ahí
-¡Te pusiste rojita!- gritó Kim riéndose
Llegó el jardín, dónde el peliverde la esperaba:
-¿Entonces? ¿Por fin me vas a dar la información que prometiste?
-Te la daré hoy al final de clases... O más bien cuando lleguemos a mi casa...
-¿De qué hablas? Si alguien me ve, van a gritar.
-Por eso mi querido amigo te pondrás esto.
-¿Un colgante con una amatista?
-Un colgante con una amatista al cual le agregué magia, esto hará que tus poderes se estabilicen, así tendrás control y podrás volverte invisible cuando lo desees.
-Interesante...¿Cuál es el plan?
-Al final de las clases vendré aquí e iremos juntos a casa, una vez ahí te mostrare pruebas de que eres un fantasma y te presentaré un análisis hecho por mí, de tu vida y el porque no puedes ir a la luz.- se quedó pensando un poco
-¡Me parece bien!
-Ok, nos vemos luego entonces- ella se despidió con la mano
-¡Suerte en las clases!
-¡Gracias!- el joven fantasma sostuvo la gema y desapareció de la vista de cualquiera.
La chica fue al pasillo donde estaba Ken más decaído de lo usual, por más que ella le pregunte que es lo que pasa ¡Él se niega a contestar!
-Hola Ken ¿Cómo va todo?
-Umm... Yo... Sólo vine a despedirme...- esas palabras la congelaron por un instante
-¿A qué te refieres?
-Mi padre dijo que era una deshonra que unas señoritas le roben dinero a un hombre...- "¡Rayos, diantres y centellas!" pensó, su padre lo había descubierto ¡Claro que lo había descubierto! ¡Ken no es bueno mintiendo!
- ¿Y a dónde vas...?- ¿No podía ser tan malo? ¿Cierto? Podrían seguir hablando ¿Verdad?
-A la escuela militar, lo que significa que no tendré celular y no podré salir a visitarte.- la sangre de la chica se heló- Por eso en estos días he estado tan callado ¡Estaba furioso con mi padre! ¡¿Cómo podía hacerme esto?! ¡Y también estaba triste! ¡Todo esto era mi culpa por ser un inútil!
-No eres inútil...- a ella le dolía que dijera eso
-¡Sí lo soy! Por eso... Iré a la escuela militar y cambiaré para poder protegerte ¡Así que no te preocupes! ¡Yo volveré! ¡Te lo prometo!- Sucrette lo abrazó
-No digas que harás esto por mí... Haz esto por ti, tú si tienes valor. Por favor no te conviertas en otra persona, toma esta experiencia para ser una mejor versión de ti mismo.-se soltaron y Ken comenzó a llorar.
-¡Por esto es que quiero hacer esto por ti! Eres tan increíble...Haces tantas cosas buenas y ayudas a los demás sin pedir nada a cambio ¡Y no le pides a nadie que te defienda cuando estás en problemas!
-Ken ¿Qué te acabo de decir? Hazlo por ti. Y no me pongas en un pedestal, yo no soy perfecta.- el chico se quedó en silencio- Al menos dime que vas a pensar en lo que te he dicho ¿Vale?
-Está bien. Toma.- le dio un oso de peluche- Bueno, adiós.- se fue corriendo, tal vez para que ella no lo viera llorar más.
La chica observó el regalo por unos segundos, suspiró con tristeza y lo guardó en su mochila.
Momentos después se cruzó con la rubia malcriada:
-¡Oh mira! ¡Qué sola estás! ¡Debes estar muy triste porque tu novio se fue por tu culpa!
-¡No se fue por mi culpa! ¡Se fue por la tuya! ¡Le robaste el dinero y...!
-Aaaww ¡Pobrecita! ¿Vas a llorar?- se fue a carcajadas
"Okay, después de arreglar las cosas con Jade, voy a asegurarme de que Ámber las pague..."
-¡Oye Sucrette!- reconoció la voz de Peggy- ¡Mira el periódico de hoy!- era realmente increíble, no sabía como la reportera conseguía el tiempo para poder hacer todo esto sola. Había escrito todos los acontecimientos de la semana: Nath y Castiel teniendo su pelea por el pinche justificante, la creación de los nuevos clubes, la extraña sombra (dónde Peggy promete a los lectores que llegará al fondo de todo) e incluso ¿El hecho que Kentin se fuera?
-¡Esto es asombroso Peggy!- le dio una gran sonrisa, no iba a dejar que sus bajos ánimos le impidan reconocer el gran trabajo de la chica con pecas
-¡Gracias! ¡Trabajé muy duro!
-Por cierto ¿Cómo supiste que Ken se iría?
-¡A veces espío la sala de profesores para obtener información!- dijo con una traviesa sonrisa- Por cierto ¿Tú y él eran novios?
-No, sólo somos amigos de la infancia
-Mmm...Ya veo...Bueno, nos vemos luego ¡Tengo un caso paranormal que desenmascarar!
La protagonista decidió caminar hacia al patio pero un ladrido llamó su atención, se volteó y vio a un perro:
-¿Qué haces aquí pequeño?- se fue acercando lentamente- Ven aquí...- y cuando estuvo a punto de atraparlo salió corriendo, sintió una mala vibra atrás de ella, cuando se giró vio a la directora, despelucada, sosteniendo unos papeles con tal fuerza que parecía que los iba a romper.
-¡¿DÓNDE ESTÁ KIKI?! ¡¡¡USTED!!! ¡¿POR QUÉ NO LO DETUVO?!- no le gustaban para nada los gritos, pero no podía alterarse, tenía que mantenerse calmada.
-Yo lo intenté...
-¡VAYA A BUSCARLO AHORA MISMO Y SI NO LO ENCUENTRA...! ¡A DETENCIÓN!- se fue rabiosa
"¡No es justo! Primero Ken se va, luego Ámber se burla y ahora... ¡La vieja esta me quiere castigar por algo sin sentido!"
-Sucrette ¿Algo pasó? Escuché a la directora gritar- Nathaniel parecía algo preocupado
-Al parecer la directora trajo a su perro y como no lo sabe controlar, se escapó y como yo no lo pude atrapar tengo que conseguirlo o me mandan a la horca- ella también le quería decir lo que su hermana le hizo a Ken pero sabía que no le iba a creer, a lo largo de la semana a intentado convencerlo para que tenga una conversación seria con ella para que cambie su comportamiento pero nada...Pero ya sabía lo que debía hacer, iba a tener pruebas de que la bruja era muy mala.
-Ah sí, muchas veces la directora trae a Kiki al instituto y siempre pasa lo mismo
-¡Este instituto tiene menos sentido cada día que paso aquí!-suspiró- Bueno, veré que hago con mi vida, hasta luego.
Fue al patio para encontrarse a Castiel pero se tropezó con una chica de cabello blanco y ojos dorados:
-¡Mira por dónde caminas!- ella dio un salto para atrás estuvo apunto de proteger su cabeza con las manos ya que la hermosa chica había alzado mucho la voz.
-¡Lo siento! ¡Lo siento!- dijo rápidamente, después se dio cuenta que no había razón para tener miedo, así que se recompuso- Ahem, quiero decir... Perdón no miraba por dónde iba...- la chica parecía preocupada ante la reacción de Sucrette "Por favor no preguntes nada..." fue lo único que pudo pensar
-No te preocupes, mi nombre es Rosalya ¿Y tú eres?
-Soy Sucrette.
-Oh, Lysandro me ha hablado de ti,- sonrió- ahora estoy algo ocupada pero más tarde hablamos ¿Ok?
-Okay...- se dirigió a dónde estaba el pelirrojo- ¡Castiel rápido! ¡Golpéame con mucha fuerza en la cabeza! ¡No estoy teniendo nada de suerte hoy! ¡Mejor lo intento mañana!
-¡Oye, oye! ¿Qué te pasa?
-Este día esta comenzando muy mal, es mejor que este inconsciente y lo vuelva intentar mañana....- dijo dramáticamente
-¿Lo dices por lo del gafotas? ¡Sabes perfectamente que estará mejor en la escuela militar!
-Lo sé, pero es mi amigo de la infancia... Lo voy a extrañar...
-¡Eres demasiado exagerada!
-¡No seas malo! ¡Eso no es lo único que ha pasado! La rubia imbécil se burló, la directora quiere que busque a su chucho y hace un rato me tropecé con Rosalya ¡Y fui un completo desastre dando una primera impresión!
-Vale, vale, cálmate...Te voy a ayudar. Voy a ir a mi casa y buscaré unas galletas de perro.
-¿Tienes perro en tu casa?- su cara se iluminó, a ella le encantaban los animales
-Sí pero no es como el de la directora, es un Beauceron llamado Demonio.
-¡Cool! Bueno ¡Ve a buscar esas galletas rápido para atraer a Kiki!
Decidió ir a su taquilla para dejar su bolso pero el universo la odiaba el día de hoy, llegó a su taquilla y vio una escritura con marcador que decía: "¡Vete con tu novio, estúpida! ¡Nadie te quiere en esta escuela!" No era necesario ser un genio para saber que esto lo había hecho Ámber:
-Esto, si que es caer bajo...
-¡¿QUÉ HACE USTED AQUÍ?!- le gritó la directora y ella estuvo a punto de patearle a quién fuera que estuviera atrás de ella, por suerte su cerebro reconoció la voz de la señora antes de hacer una estupidez.
-Pues...Dejando mis cosas en mi casillero...
-¡DEBERÍA ESTAR BUSCANDO A KIKI!- estos gritos la estaban poniendo de los nervios
-Y eso he estado haciendo pero decidí que sería más fácil si dejara mi mochila en mi taquilla para estar más ligera.- le puso mala cara pero al menos bajo su tono
-¡Está bien! ¡Pero consiga a Kiki rápido! Y después de hacerlo limpie su taquilla
-¡Pero yo no lo hice!
-¡NO ME IMPORTA!- se fue y ella inhaló y exhaló profundamente, tenía que mantener la calma y no descontrolarse...
-¡Jajajaja!- escuchó a Ámber y sus amigas a lo lejos
Colocó su bolso dentro de la taquilla, la cerró y le sacó una foto al hermoso mensaje que le dejaron, dejó salir un suspiro de cansancio ¿Tal vez si inhalaba con la suficiente fuerza podría dejarse inconsciente solita?
-¡¿La directora y esas tres chicas te tratan así?!- dirigió su mirada hacia la voz, era Rosalya, tenía una cara de pena y preocupación
-A ver... Déjame detener tu teoría justo ahí. No soy una chica tímida que huyó de su instituto porque la acosaban y ahora está viviendo la misma pesadilla.
-¿Entonces por qué no te defendiste?- su voz tenía firmeza
-Porque tengo un plan y para que este sea perfecto es preferible que me quede callada hoy...
-Espero que sepas lo que haces...
-¡No te preocupes! He lidiado con cosas peores,- Rosalya alzó su ceja "¡Rayos! Tal vez no debí decir eso..."- umm... Este...Hablemos luego ¡Necesito atrapar a Kiki!
-Claro...
Nathaniel le aconsejó que buscara las cosas de Kiki para amarrarlo con su correa mientras lo atraía con su juguete pero no funciono, incluso el chucho la amenazó con morderle. Fue al patio a ver si Castiel había llegado:
-¡Castiel! ¡Mi salvador! ¡Muchas gracias por traer las galletas!- ella estuvo a punto de agarrar las galletas pero él las alejó
-Espera un momento...- dijo sonriendo- Son veinticinco dólares
-¿Queeeeeeeeeeé? ¡¿Me vas a cobrar?!- el rostro de la chica estaba lleno de desesperación.
-¡Es broma! ¡Es broma!- hizo una pausa- ¡Qué exagerada eres! ¡No hay que ponerse a llorar por algo así!- se asustó y se tocó la mejilla
-¡Pero que dices! ¡No estoy llorando!
-Parecía que ibas a hacerlo con la cara que pusiste,- le dio el paquete- anda, rápido, atrapa al chucho ese.
-Vale ¡Pero no vuelvas asustarme así!- él simplemente rodó los ojos
Atrajo a Kiki con las galletas, lo amarró con la correa y se lo dio a la señora Shermansky:
-¡Kiki! ¡Estaba tan preocupada por ti!- empezó a hablarle con voz de bebé- ¿Por qué sigues aquí? ¿No tienes una taquilla que limpiar?- y volvió a ser la amargada de antes
-Directora, me gustaría que tomara el tiempo de leer lo que el vándalo escribió en mi taquilla antes de mandarme a hacer eso...
-Estoy ocupada, limpia el vandalismo ¡Y ya!
Le pidió a Nathaniel productos de limpieza y fue a limpiar su taquilla
-¡Qué patética!- exclamó Li
-¿No tienen nada mejor que hacer con su vida?- les preguntó
-Nos gusta verte en tu lugar- dijo Ámber
"Quisiera tanto golpearle en la nariz..." Unos chillidos se escucharon bajo las escaleras
-¡Venganza! ¡Venganza!- Cinco sombras se acercaban a una gran velocidad, las brujas salieron corriendo gritando de miedo y estas se acercaron a Sucrette- ¿Venganza?
-Lo siento, pero yo me dedico a hacer justicia no venganza. Háganse un favor y dejen de hacer lo que hacen, todo lo malo que hagan se les devolverá...- las sombras se quedaron calladas- ¿Les puedo ayudar de alguna forma? ¿A qué vuelvan a ser ustedes mismos?- los espectros no entendían como Sucrette podía tener tanta paciencia y perseverancia, ella sacó su libreta- Vamos denme algo que les pueda ayudar- cada una de las entidades susurró algo a su oído- ¡Muy bien! ¡Gracias por asustar a las brujas de todas maneras!
-Hasta luego...- dijeron en un susurro antes de desvanecerse
El resto del día se desarrolló sin más desastres, incluso sus ánimos subieron un poco al pasar el rato con sus nuevos amigos que la consolaron.
Ya había acabado el día era hora de ir a casa, fue hasta el jardín pero no vio a nadie:
-¡Jade!- se asomó por los arbustos- ¿Dónde estás?
-¡BUUUU!- sintió dos manos agarrando sus hombros y su primera reacción fue intentar golpear al espíritu en su estómago, por suerte el sostuvo la amatista y se hizo intangible- ¡Oye!
-¡Jade!- se quejó la chica y este se empezó a reír- Qué bien que tenías el amuleto o si no...Te habría dado un buen golpe...
-¡Sí claro!
-No perdamos el tiempo, vuélvete invisible y sígueme.-al llegar a la puerta de su casa, Sucrette observó sus alrededores- ¡Ya puedes aparecer!- susurró, al entrar anuncio su llegada- ¡Mamá! ¡Papá! ¡Llegué con un amigo!
-Bienvenida a casa hija- dijo sonriente su madre- ¡Qué chico tan guapo has traído!- al exclamar esto se escuchó a alguien cayéndose en el pasillo de las habitaciones y seguidamente el sonido de alguien corriendo
-¿Chico? ¿Qué chico? ¿Por qué no nos hablaste de algún chico?- dijo el padre rápidamente y Lucía dejó salir una risilla
-Papá tienes un problema de sobreprotección.
-¡Claro que no! Sólo estoy curioso de la razón por la cual no has hablado de él...
-El es Jade, es un espíritu,- Felipe se alivio- ahora si me disculpas voy a ayudarlo...-al llegar a la habitación, Sucrette encendió su laptop
-¿No le hablas a tus padres sobre los "fantasmas" que ayudas?
-Si ellos me preguntan, les cuento con todo el gusto, pero normalmente tratamos de tener conversaciones que no tengan que ver con espíritus porque comúnmente esas historias incluyen que salgamos heridos y... Creo que ya has notado lo sobreprotector que es mi padre...
-Oh...Me sorprende que él te deje hacer esto...
-No es como si tuviera opción. Toda persona mágica tiene que tener un entrenamiento para poder defenderse contra los espectros corrompidos.
-Entonces ¿No tienen opción?
-En cuanto al entrenamiento, no, no la tenemos sin embargo es por nuestro bien, si alguien llega a corromper a alguien mágico... El mundo estará en problemas pero no te preocupes, todo ser con magia tiene la opción de dedicarse a lo que le de la gana.
-¿Y tú que quieres hacer?
-La verdad es que me gusta ayudar a almas en pena y luchar contra la corrupción pero no como trabajo de tiempo completo, tengo muchos planes para el futuro...¡Pero concentrémonos en tu caso!- le mostró la pantalla llena de capturas de redes sociales que lamentaban la muerte de Jade, este se estremeció
-¡Existen muchos Jade en el mundo! ¡Es posible que no sea yo!
-Jade lee los nombres y reconocerás a varias personas de tu familia...- él se quedó leyendo las capturas
-¡No puede ser! Yo...Yo...- lágrimas empezaron a salir de sus ojos
-Siento mucho que tengas que recibir esta noticia tan dura, por favor siéntate.- sin embargo él se quedó levantado, tapando sus ojos
-Soy demasiado joven...- ella se levantó
-Lo sé... La vida no es justa ¿Necesitas un momento a solas?
-Necesito...Pensar... Pero no sé por cuanto tiempo...
-Lo entiendo, ten cuidado- lo acompañó hasta la puerta y se despidieron
-¿Tan rápido se fue?- preguntó su madre
-Necesita tiempo para asimilar la información
-Sí...Debe ser muy chocante para ellos...¡Bueno! ¡No dejes que sus historias te depriman! Tienes que preocuparte también de tus propios problemas ¡Cómo la tarea!
-¿En serio mamá? ¿Me estás diciendo eso en estos momentos?
-No quiero que tu tiempo sea absorbido por personas muertas, tal vez suene cruel pero no quiero que en esta etapa tan difícil de tu vida bajes tu rendimiento...
-No te preocupes eso no pasará, es más voy a hacer la tarea, es muy poca, así que mejor hacerla temprano que tarde ¿No?
-¡Esa es mi niña! ¡Te prepararé unas galletas!- esto la emocionó
Al sacar los libros y cuadernos de su mochila vio el peluche que le había regalado Ken, el cual colocó en su cómoda.
Terminó la tarea en menos de una hora, así que comenzó a investigar cómo podría ayudar a las cinco sombras, había descubierto que estas eran hijos de un hombre rico al que asesinaron, así que juraron vengarse, lo cual no resultó muy bien porque terminaron muertos, al ver sus fotos por internet pudo asumir que apenas sus espíritus dejaron su cuerpo se transformaron en las sombras que son el día de hoy...Esto va a ser algo complicado...
Decidió hacer una pausa y empezar su plan para desenmascarar a Ámber,tomo el cargador de su celular y fue al cuarto dónde se hacen pociones, sacó su caldero y cuaderno y empezó a juntar un montón de ingredientes a fuego alto, cuando el líquido comenzó a hervir bajó el fuego, agregó polvo de hadas y volvió a mezclar, apagó el fuego y colocó un zafiro azul, el cuál absorbió todo el agua y comenzó a brillar con intensidad:
-Ahora tengo que dejarlo reposar unos treinta minutos ¿No?- revisó su cuaderno- Sip- empezó a examinar su cuaderno y los ingredientes que estaban a su alrededor, aún no tenía claro como haría el siguiente paso
-¿Sucrette estás aquí?
-¡Sí mamá!- ella entró
-¿Qué estás haciendo?
-Justicia, puedes dejar las galletas aquí al lado mio- dijo sin dirigirle la mirada, estaba demasiado concentrada observando su libreta, pensando en las maneras posibles de ejecutar el siguiente objeto para realizar su plan.
-¿Qué te acabo de decir hace un rato?-la joven le sacó a su cargador la parte que se conecta con los enchufes
-¡Ya hice toda mi tarea! Además esto no es un problema de un espíritu.- dijo jalando ambos extremos del cable dos veces
-Entonces ¿Qué es?- su madre colocó sus manos en su cintura
-Una chica del instituto ha hecho muchas cosas malas, voy a hacer que admita lo que hizo ¡Y tendré una grabación de eso!
-Este...¿No basta una grabadora?
-¡No! ¡De esta manera ella no sospechará nada! Además es una gran oportunidad para empezar este proyecto.
-¿No sabes si va a funcionar?- alzó una ceja
-Tengo todo un fin de semana para averiguar como hacer que funcione.
Domingo, una de la mañana:
-Uno, dos, tres, probando...- dijo con el zafiro en la mano, apretó su mano y la gema repitió lo que dijo- Muy bien, ahora vamos a ver si puedes hacer el resto- tomó el extremo del cargador en dónde se conecta su celular y lo acercó a la joya, esta comenzó a brillar y abrió una abertura para que el cable entrara- ¡Sí, sí,sí!- había entrado- ¡Excelente!- conectó el otro extremo del cable a su laptop y comprobó que existiera la grabación, esta funcionara, se pudiera guardar en la computadora y volvió a comprobar que funcionará en la versión guardada de la computadora. Todo estaba perfecto- ¡Eureka!- susurró con alegría
Colocó la gema en un collar de plata, guardó todo lo que necesitaba para el día siguiente y se fue a la cama. El despertador sonó horas después, se apresuró para llegar rápido al instituto:
-A ver tengo todos los libros, tengo la laptop, el cargador... ¡Oh! ¡Mi cartuchera!- dijo colocando su estuche que estaba en su cómoda a su mochila- Mochila: Listo. Presentación:- se miró al espejo- Listo. Collar:Listo- se colocó su bolso y antes de salir del cuarto le dio una palmadita en la cabeza al oso de peluche.
Ya estaba en el pasillo principal en dónde vio a Nathaniel abrumado:
-Hola Nathaniel ¿Qué sucede?
-Verás alguien robó la llave de sala de profesores y un documento muy importante desapareció de ahí y como yo tenía la llave...
-Estás metido en un gran lío.- Sucrette ya se imaginó los gritos que la directora le dio al pobre
-Así es...-tenía la cabeza baja
-¿Qué documento desapareció?- algo le decía que esto sólo podía cometerlo una persona...
-N-no puedo decírtelo...Es confidencial...
-A ver, después de ser un alumno ejemplar y ser delegado principal por un tiempo, algo desaparece y la vieja loca no te cree. Peggy de seguro hizo que la voz corriera, si te pones a interrogar nadie querrá responderte pero si yo averiguo que carajos pasa tal vez tenga una oportunidad y no puedo hacer eso sin saber la gravedad de la situación.
-Está bien...Lo que robaron fueron los próximos exámenes...- Ámber, sí, definitivamente Ámber.
-Voy a ver que averiguo...- no pudo evitar sonreír al pensar en el castigo que le pondrán a la rubia.
Caminó por los alrededores para descubrir a la sospechosa. Se encontró con Melody lamentándose por la situación, Castiel, Iris y Violeta no sabían dónde estaba, Lysandro ni siquiera se había enterado, Kim estaba molesta porque Peggy ya estaba creando rumores sin ni siquiera saber lo que en verdad pasaba...Después de un tiempo por fin encontró a la chica con sus dos amigas:
-Ámber, quisiera preguntarte algo ¿Qué te pasa? Primero le robas el dinero a Ken, luego rayas mi taquilla y ahora unos exámenes desaparecen, lo cual, a juzgar tus anteriores decisiones parece obra tuya.
-¿Y qué?- dijo con una sonrisa malévola
-¿Cómo que "¿Y qué?"? ¡Te estoy preguntando porque haces esto!
-¿No es obvio?- empezó a jugar con su cabello
-Créeme, no tengo idea- de verdad no sabía como esta chica había sobrevivido en un mundo como este.
-Soy la reina de este instituto, yo hago lo que me de la gana, no tenía ganas de comer la basura de la cafetería, así que le robamos al debilucho de Ken, mandé a Li que escribiera eso en tu taquilla porque estás empezando a creerte alguien importante ¡Tenía que recordarte cual era tu sitio! ¡Aunque parece que no ha funcionado! y robé los exámenes porque me vendría bien que adelanten la fecha de estos.- "Sólo espera Ámber, te borraré esa sonrisa de victoria"
-¡No te saldrás con la tuya!- sus dos manos estaban en puño
-¿Y qué vas a hacer? ¿Decirle a la directora? Vengo de una familia rica puedo comprarla fácilmente,- Sucrette rodó los ojos ¡¿Era necesario decirle a alguien que consideras tu enemiga eso?! Ella también venía de una familia importante y no lo andaba restregando por la cara de las personas ¡¿Qué intenta?! ¡Encima que eso no tiene nada que ver! ¡La justicia les llega a todos por igual!- además ¿Para qué te vas a molestar? La directora ha demostrado que no te quiere.
Simplemente se fue mientras el trío se reía e hizo todo el proceso para pasar la grabación de la piedra preciosa a su computadora y de su computadora a su celular,le envió la grabación a Nathaniel por whatsaap y ahora estaba en la oficina de la directora :
-¿Sucrette? ¿Qué haces aquí?- preguntó Melody que estaba en la entrada
- Necesito hablar con la señora Shermansky.
-Esta ocupada...
-Es urgente, ya sé quién robó los exámenes.
-¡¿Qué?! ¡¿Cómo?!- estaba sorprendida
-Después te explico los detalles...
Melody abrió la puerta y dio la información, la señora tuvo la misma reacción que la chica de los ojos azules:
-¿Usted?- dijo alzando la ceja
-Así es, yo.- su tono era serio
-¿Cómo se enteró que lo robado fueron los exámenes? Espera un momento, no respondas, fue Peggy ¿Cierto?- soltó un suspiro- Espero que tengas pruebas.
-Las tengo ¿Recuerda el vandalismo en mi taquilla el cual decía que nadie me quería en esta escuela? Oh espera...Ni siquiera se tomo el tiempo de leer lo que decía, puesto a que no le importaba, bueno esa misma persona planeo esto ¡Y eso no es todo! ¡También le robó el dinero a Ken! Ya sabe el chico que se fue a la escuela militar...Bueno sin más demoras, le voy a mostrar las pruebas.- empezó a reproducir la conversación con Ámber, hubo un gran silencio- Le mandé la grabación a Nathaniel, si la quiera pídale que se la mande. Espero que lo que haya dicho Ámber sobre usted no sea cierto, ya que si ella y sus amigas no reciben el castigo adecuado, voy a denunciarlo, ya que, es un crimen que una institución no se ocupe de esta clase de cosas...- en el rostro de la directora había miedo- Espero que hable con los padres de las chicas porque este comportamiento no parece reciente y también que le devuelvan el dinero a Kentin. Bueno, me retiro.
Después de decir todo eso se sentía muy aliviada y feliz. Momentos después...
-Ámber, Li y Charlotte vayan al despacho de la directora- una gran sonrisa se dibujo en su rostro
-Algo me dice que tu hiciste esto...- comento Castiel
-¡Jejeje!
-¡Ten cuidado! Ámber de seguro querrá empezar una guerra contigo...- Violeta estaba preocupada
-Ya lo sé, pero no puedo dejar que ella se salga con la suya. Si ella ataca, yo simplemente me defenderé
-¡Eso Sucrette! ¡Derroquemos el reino de la barbie!- exclamó Kim
¡Aquí les tengo el capítulo! ¡No olviden comentar sus opiniones y teorías locas de lo que pasará después!
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