7
Su madre había preparado una pequeña cena para festejar que su hija había dada por concluida su etapa de universitaria. Los acompañaban Jennie, Lisa, su pequeña hija Lia, por supuesto su madre y su novia Seulgi, quien también festejaba. Después de la pelea con sus padres no volvió a casa, ahora estaba viviendo junto con Jisoo y su madre. Se llevaban muy bien, la señora Seohyun amaba a Seulgi, le parecía una muy buena mujer para su hija, así que no hubo ningún problema para que Seulgi viviera con ellas.
- Ahora vuelvo necesito contestar esta llamada. - Informó Jisoo saliendo de ahí
- Hola Jisoo ¿cómo estás? - Preguntó Rosé quien había marcado
- Muy bien Rosé ¿se te ofrece algo? - Preguntó
- Necesito que vengas
- Rosé yo se que firme un contrato donde dice que no importa lo que esté haciendo tengo que ir contigo, pero por esta ocasión no puedo ir. - Dijo un poco nerviosa de su respuesta. - Espero que me entiendas
- ¿Que es eso tan importante que estás haciendo? - Preguntó curiosa
- Estoy en una cena con mi familia, no puedo dejarlos, por favor Rosé
- No quiero que estemos juntas, te prometo no quitarte mucho tiempo, será rápido, uno de mis hombres ya va por ti, te espero. - Colgó la llamada
⚠️🔥
Con cuidado de que no la vieran, salió por la puerta trasera de la casa. De verdad espera que sea rápido, pues no tenía una excusa para explicar su ausencia.
Minutos más tarde, llegó a la casa de Rosé. Ella estaba en el jardín esperando. Bajó de la camioneta y fue hacia ella.
- Ya estoy aquí ¿qué es lo que quieres? - Preguntó
- Se que hoy fue tu graduación, felicidades. - Le dijo
- Muchas gracias. - Agradeció
- Te tengo un regalo. - De su bolso tomó unas llaves. - Este es mi regalo. - Dijo apuntando a un auto nuevo y de lujo. - Espero que te guste
- ¿Qué? ¿De verdad? - Estaba sorprendida. - No, es que yo no puedo aceptar algo así
- No desprecies mi regalo, lo hago para que tengas más comodidad al venir aquí y obviamente para tus asuntos personales. - Le entregó las llaves. - Echa un vistazo
Jisoo caminó hacia aquel auto, abrió la puerta y entró. Rosé también hizo lo mismo sentándose a su lado.
- ¿Te gusta?
- Por supuesto que sí, es muy lindo. - Seguía mirando el interior del auto. - Muchas gracias de verdad
- Espero que te sirva. - Dijo tomando su rostro. - Y nuevamente felicidades por tu graduación
- Me encantas. - Acortó la distancia entre sus rostros y la besó ferozmente. - Eres perfecta
- Tu lo eres también. - Siguió con aquel beso. Le encantan sus labios, se ha vuelto adicta a ellos
Jisoo reclinó el asiento del auto para que así Rosé se pusiera a horcajadas sobre ella y comenzó a moverse lentamente para provocarla.
- Tienes que irte ¿no? - Preguntó Rosé
- No, no quiero irme, no hasta hacerte mía en este auto. - Rosé sonrió ante su respuesta
Siguieron besándose, tocándose, todo era tan maravilloso. Jisoo alzó el vestido de la rubia y comenzó a tocar su parte más íntima.
- Estas muy mojada. - Seguía tocando
- Eso es lo que tu me provocas. - Dijo jadeando ante sus toques. - Mierda lo haces tan bien, me encanta. - Mientras Jisoo la tocaba, Rosé aprovechó y desabrochó sus pantalones, los bajó un poco al igual que sus boxers. - Tu también estás más que lista para mí
- Ya no aguanto más, necesito sentirte ya. - Bajó sus bragas
- Te quiero dentro de mi ya, hazlo. - Ordenó
Jisoo fue guiando su miembro hacia su entrada lentamente entrando por completo en ella. Rosé comenzó a moverse a un ritmo lento, disfrutando de aquel momento.
- Te sientes tan bien. - Susurró en su oído. - Muévete un poco más rápido
- Sabes que yo mando aquí. - Seguía con sus movimientos lentos. - No me digas que hacer
- Se que te encanta que yo te de órdenes. - Tomó sus caderas para guiar el ritmo. - Así que hazlo maldita sea. - Rosé obedeció ante sus peticiones y se movió más rápido. - Eso es, así me gusta. - Seguía moviéndose frenéticamente y a un ritmo más rápido, las dos estaban tan excitadas que solo bastaron un par de embestidas para que juntas llegaran
- ¡Mierda eres genial! - Dijo Rosé besando sus labios
- Me quedaría más tiempo, estar contigo en tu cama, entre mis brazos. - Susurró en su oído. - Pero me tengo que ir, perdón
- No te preocupes lo entiendo. - Ambas comenzaron a recolocar su ropa
- No puedo llegar a mi casa con este auto, así que mañana paso por el
- Me parece perfecto, podríamos salir y pasear un poco por la ciudad
- Seria magnífico
- Antes de que te vayas déjame decirte que ya deposite a tu cuenta tu pago del primer mes, haz hecho muy bien tu trabajo, así que he decidido aumentar tu sueldo el doble
- Muchas gracias. - Sonrió. - Ahora sí podré comenzar con el tratamiento de mi madre
- Nos vemos mañana Jisoo
Más tarde
- Ya llegué. - Informó entrando a su casa
- Mi amor ¿dónde estabas? - Preguntó Seulgi
- Perdón por desaparecer así nada más, pero recibí la noticia de que ya me habían depositado mi primer pago y quise ir y comprar un par de cosas para festejar
- Me da mucho gusto. - Dijo su madre
- A mi también. - Dijo acercándose a ella. - Ahora si podremos iniciar con el tratamiento
- Muchas gracias hija, no sabes cuanto lo aprecio, te quiero
Semanas después
- Creo que ya me hacia falta salir y despejarme un poco del trabajo. - Dijo Rosé sentándose a un lado de Jisoo
- También a mi ya me hacia falta un día así. - Las dos disfrutaban de un día en el parque mientras degustaban un helado juntas
- ¿Nunca haces esto con tu novia? - Preguntó Rosé
- A veces. - Respondió
- ¿La amas?
- Sí, la quiero mucho, aunque últimamente hemos tenido un par de discusiones, pero nada grave
- ¿Cómo está tu madre? - Preguntó la rubia
- Bien hemos comenzado con el tratamiento, espero muy pronto ver a mi madre nuevamente de pie. - Dijo entusiasmada
- Espero lo mismo
- Ayer me quedé pensando en ti. - Confesó la peli negra
- ¿De verdad? ¿Piensas en mi?
- A veces. - Respondió. - El punto es que imaginé lo difícil que fue para ti y para tu hermano quedarse sin sus padres. Agradezco que mi madre aun esté conmigo
- No te miento, fue difícil, de hecho aún lo sigue siendo, pero tenía que seguir avanzando
- También pensé en lo que pudo haber pasado entre tú ese hombre, el tal Chanyeol
- ¿Quieres saberlo? - Preguntó
- Sí, solo si quieres hacerlo
- Esta bien te lo diré. - Suspiró. - Yo estaba profundamente enamorada de él. - Confesó. - Pero cuando sucedió lo de la traición de su familia a la mía ya no pude hacerlo, solo lo odiaba, no hizo nada para ayudarme ni a mi ni a mi hermano y me lastimó de muchas maneras
- ¿Te hizo daño? ¿Te lastimó tanto para odiarlo así?
- Creí que me amaba, pero solo me utilizó, utilizó mi cuerpo, a mi familia, solo me lastimó. - Por primera vez Jisoo la había visto tan débil y sensible, que tenía tantas ganas de decirle que todo estaba bien mientras la abrazaba. - Creo que ya debería irme, necesito atender otros asuntos Jisoo
- Esta bien, nos vemos después
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro