El olor acerbo del carbón inundó todo el espacio, el agua y el vapor mantenía a Marc consiente del lugar donde estaba.

La sangre se empezó a mezclar con la trasparencia del enorme claro que tenía como bañera, su lobo estaba a punto de tomar control sobre él y Marc se veía sin opciones.

Agarró la tenacilla de la pequeña chimenea al lado del agua comprobando que estuviera lo suficientemente caliente y viva en fuego.

Tomando una pequeña toalla para hacer presión en su boca acercó el acero a su herida.

Contuvo el grito de dolor de su garganta cuando el ardor del calor contra su lesión en la costilla se sintió por todas sus venas. Presionó por un momento más antes de lanzar el acero de nuevo al fuego.

Por ahora sería suficiente con eso para cerrar la herida y detener el sangrado.

El verdadero problema era el calor en su cuerpo que se extendía con cada segundo, ni siquiera la frescura del agua podía apaciguar el ardor en su piel. Sentía sus dientes picar para morder algo y sus feromonas se elevaron con el deseo de dominación.

El alfa se puso alerta al identificar una presencia entrando a sus recámaras.

Frenkie tragó saliva y sintió la garganta secarse, su ritmo cardiaco comenzó a acelerarse. Oh dios, no podía creer cómo había actuado anoche. ¿Era realmente él? Se sentía como si hubiese sido una persona diferente.

Apenas cerró la puerta el olor fuerte de Marc lo inundó, marcando cada centímetro de ese espacio como su dominio.

Escucho unas palabras de Ronald detrás de la puerta y vio la sombra de los pasos retirarse. Había visto a muchos heridos, los hombres de Marc eran realmente leales a él para incluso ocultar sus heridas y preocuparse por su amir primero.

Debió ser un ataque sorpresa.

Esperaba que la herida de Marc no fuera tan grande, sus habilidades médicas no eran las mejores y lidiar con un alfa gama en su estado de celo no es una actividad deseada para nadie.

Dando un suspiro pesado empezó a estudiar el lugar.

Era grande, un poco más que el suyo, no era tan colorido como sus alas; sin embargo, tenía detalles preciosos en el techo y las paredes, el muro frente a él tenía un ventanal enorme que daba al patio principal de la mansión, en ambos lados había libros que llenaban las grandes paredes.

Al igual que su cuarto, también tenía una fuente de jade, pero en vez de dar a una ala principal llena de su propia vegetación se extendía una escalera de mármol al lado de un piano blanco.

¿Qué clase de habitación tenía dos pisos?

Puso sus sentidos a tope y su omega disfrutó del olor del alfa por todo el lugar, la esencia aumentó aún más mientras subía las escaleras con precaución.

La escalera dio a otro espacio grande donde también había estantes de libros, había puertas a la izquierda que intuyo daban a un armario.

En el centro había una enorme cama con sedas verdes y en el extremo también había un ventanal.

No estaba el alfa ahí, así que Frenkie dirigió su atención en una puerta más grande al otro extremo de la habitación.

Soltó feromonas en son de apaciguamiento y abrió la puerta con lentitud.

Mostrándose frente a él estaba un pequeño espacio de agua igual al de sus recámaras.

Frenkie dio un respingo nervioso cuando el olor fuerte de calor se impactó rápidamente en su rostro como una cachetada. Alzó su cabeza con duda para identificar la figura en la niebla del agua caliente.

Extendido en el extremo del espacio acuífero estaba Marc observándolo con todo el peso de su mirada.

Su cabello húmedo y las gotas bajando por su cuerpo desnudo hicieron que Frenkie olvidara por un momento su razón para estar ahí. Recuperando el aliento, inclinó su cabeza un poco y avanzó lentamente.

—V-vine a ver tu herida —susurra el castaño tratando de mantener sus piernas firmes. El olor a celo de un gama era más fuerte de lo que pensaba y su omega también iba con cuidado en cada paso.

Aunque fuera su pareja, su unión no era tan arraigada. Era de conocimiento común que el único que podía soportar el celo de un alfa gama era, por supuesto, otro omega gama.

Frenkie se sintió con buena señal cuando Marc no lo atacó apenas dio un paso en su habitación, hubiese sido un destino diferente para Ronald u otro de los hombres del turco si entraban. Incluso siendo ellos, Marc apenas los reconocería y posiblemente los vería como otros alfas intentando atacar su territorio.

Cuando estuvo al lado del alfa se agachó con lentitud para no verlo desde arriba, lo cual también podría considerarse como una señal de rebeldía contra él.

Frenkie quitó sus zapatos y dio un jadeo asustado cuando el alfa le gruñó ligeramente mientras metía sus piernas en el agua. Era una advertencia para no acercarse demasiado.

Su omega ronroneo para apaciguar la tensión y demostrar que no estaba aquí para dañar. Incluso siendo un omega, un alfa se sentía atacado si se encontraba herido y en estado de un celo agresivo.

—Solo veré el estado de tu herida; después de eso, si lo deseas, me iré —habla Frenkie mientras extiende su mano lentamente, Marc observa sus movimientos en todo momento.—¿Puedo?

Pregunta Frenkie mientras se inclina un poco más sobre el agua para poder ver mejor la herida. Marc no dice nada y Frenkie lo toma como una aceptación silenciosa.

Su sorpresa es grande cuando Marc se gira hacia él y se acerca para que el castaño pueda ver mejor la lesión. Frenkie parpadea por un momento para recobrar el sentido y dirige su atención en la costilla del lado derecho del alfa.

Frunce su ceño cuando ve la piel cicatrizada y sin rastros de sangrado, los gama tenían mejor regeneración en heridas, pero aun así era prácticamente imposible que se cerrara sin ninguna saturación.

Acerca su mano aún más y toca la lesión cuidadosamente, siente la respiración de Marc tensarse, pero no hace nada que indique peligro para Frenkie.

El castaño voltea a un lado donde se encontraba una pequeña chimenea con fuego que aumentaba el vapor en la habitación, la realización lo lleno cuando vió la tenacilla sobre el fuego .

Marc se había cerrado la herida a sí mismo con fuego.

Era algo extremo y poco ortodoxo, pero Frenkie no pudo evitar el calor de complacencia que lo inundó cuando su omega sentía una vez más que había hecho una buena elección en su alfa.

No midió sus pensamientos cuando su mano se movió gradualmente hacia su pecho, el estar expuesto a feromonas gama y que fueran del alfa con el que tenía una unión ponía a la consciencia de Frenkie desbaratarse poco a poco.

Vio los trazos perfectos de los tatuajes en el alfa y se sintió curioso al recordar vagamente el símbolo en el pecho del alfa. La respiración del castaño titubeó cuando fue consiente del movimiento de respiración en el alfa, sintiendo la dureza del pectoral de Marc su mano pareció cobrar vida cuando bajo a su abdomen.

Sintió aún más pesada la mirada de Marc sobre él.

Cuando bajo un poco más e introdujo su mano en el agua un fuerte agarre en su mano lo detuvo.

Se hizo consiente de su error y maldijo con creces al libido en aumento de su omega, haber suprimido las sensaciones por querer estar con su alfa como todo omega unido había sido difícil en los últimos días. Su omega no pudo controlarse al ver a Marc mostrándose tan...demostrativo.

Un gruñido inundó el espacio y Frenkie alzó su cabeza dubitativamente, la siempre imperturbable frialdad de Marc que demostraba en su rostro tenía un vestigio de falta de control.

Parecía un vaso lleno a punto de derramar todo su contenido y control.

El agarre en su muñeca se afianzó y provocó un dolor por todo su brazo, se había precipitado demasiado.

Cuando el ceño de Marc se frunce aún más Frenkie no vió más opción que arrancar la tela que cubría su mordida e inclinar su cuello para que el alfa tuviera una vista clara de ella.

El goteo del agua y el sonido del fuego fue todo lo que se escuchó por un momento.

Había mostrado la marca como un signo de pertenencia, mostrándole a Marc que era su omega.

Frenkie no tuvo segundos pensamientos cuando fue arrastrado precipitadamente al agua y apenas recobró el aliento cuando fue empujado sin cuidado a la orilla del espacio.

Sus labios fueron tomados agresivamente por Marc, no dio tiempo de decir nada cuando el alfa aprovechó un jadeo de sorpresa para dominar su boca con su lengua, la fuerza en sus besos marcaba quien tenía el control ahí.

El agarre en su cintura era casi peligroso y estaba seguro que dejaría marcas al siguiente día.

Frenkie trató de mantener la razón, si dejaba que su omega tomara el control y se dejara llevar por el celo del alfa se verían envueltos en una exuberante amatividad.

Cuando sintió la dureza de Marc presionando contra sus piernas se sintió temblar y no pudo evitar rodear al alfa con sus brazos, dejándose llevar un poco por el dominio del turco que su omega parecía disfrutar con deleite.

Marc rodeó con sus manos la curva de sus glúteos, provocando un gemido bajo en Frenkie.

Sus dientes casi chocaban por el salvajismo del beso y el castaño empezó a dudar si enserio estaba conteniéndose y manteniendo el control de su cuerpo.

Cuando Marc dio un apretón fuerte a su trasero sintió sus extremidades temblar y a su propio fluido correr para lubricar ese lugar.

No pudo aguantar más y bajo su mano al miembro de Marc rodeándolo tímidamente con deseo, su mano se sentía pequeña al tamaño del alfa, quien dio un jadeo ante el toque y detuvo su beso por un segundo, Frenkie aprovechó para tratar de tomar una respiración correctamente.
La cual se vio interrumpida cuando fue volteado sin previo aviso y arrinconado con más fuerza sobre los azulejos de la bañera.

Marc pego su pecho a su espalda, acariciando con más parsimonia su cuerpo. Frenkie se preguntó qué es lo que estaba haciendo, pero no quería arriesgarse a voltear y comprobar por sí mismo.

El toque suave pronto se vio perturbado cuando Marc rompió las telas de su ropa sin miramientos. Frenkie dio un jadeo en queja cuando hizo lo mismo con su ropa interior sin ningún cuidado.

Su cuerpo fue presionado con más fuerza y Marc se inclinó ligeramente para acercar su rostro a la curvatura de su cuello, donde estaba su mordida.

Sus manos volvieron a tener un toque gentil y recorrió el pecho de Frenkie con devoción, rodeándolo y abrazándolo por detrás.

—¿Marc?—pregunta con duda Frenkie, no muy seguro de las acciones del alfa.

Escucha un suspiró pesado atrás suyo y el omega se pregunta si Marc recuperó la consciencia por un momento.

Cuando el turco se acerca más a su cuello, Frenkie se da cuenta que está perfumándolo con su olor, marcándolo para que cada alfa que se acercara al castaño mantenga su distancia.

Frenkie se siente aliviado, el lobo de Marc lo ha reconocido como su pareja; sin embargo, eso solo daba a dos opciones.

Que Marc fuera menos agresivo a con él y su instinto o en otro caso, que al reconocer que Frenkie era su pareja no se controlara en lo más mínimo.

Frenkie esperaba que fuera más posible la primera opción.

—Eres mío.

Las palabras que rebotaron sobre su nuca y cerca de su oído lo desequilibraron por completo. Frenkie trató de girar para ver el rostro de Marc, pero este no lo dejó, manteniéndolo firme en sus brazos.

Era posible que el alfa se encontrara en un estado poco consiente e influyera en dar tan hosca declaración. Aún si no era Marc en su totalidad, así es como veía su alfa a Frenkie.

El castaño sintió su respiración temblar cuando Marc besó la mordida con cariño.

—¡Ah!—gimió con sorpresa cuando sintió dos dígitos entrar en él sin consideración mientras el alfa seguía mordiendo y besando sus hombros y espaldas con deleite.

Los dedos gruesos y largos del turco no tuvieron ninguna piedad con él y se movieron expertamente dentro de él, Frenkie mordió sus labios fuertemente para encerrar los gimoteos de su boca; pero Marc lo detuvo y agarró su barbilla con su otra mano para girar su cabeza y volver a besarlo fervientemente.

Dio un grito fuerte cuando sintió un tercer dígito ingresarse dulcemente por su entrada, pudo sentir la curva de una sonrisa de Marc sobre sus labios.

—Si no te preparo no estarás listo para mi —gruñó Marc mientras mordía los labios de Frenkie, quien apenas podía soportar la sensación placentera de los movimientos expertos de Marc en su interior.

Cuando la mano de Marc se trasladó a su miembro erecto dando movimientos de arriba hacia abajo, el omega se sintió desfallecer por la doble estimulación.—No e-espera, me vendré.

Las palabras de Frenkie fueron como una señal para el alfa, Frenkie sintió un vacío vergonzoso cuando el turco detuvo sus movimientos y retiró sus dedos.

Él omega volteó ligeramente atrás suyo para ver al alfa posicionarse en su entrada, se sintió en un momento de pánico al realizarse del tamaño que Marc tenía.

¿Era así de grande? Estaba seguro que había crecido desde la última vez, o tal vez a su omega en celo no le importo en lo más mínimo la primera vez que estuvieron juntos.

—Creo que necesito más tiempo, no pue...¡Ugh!—su oración fue ahogada cuando Marc se clavó con una estocada en él. Frenkie apretó fuertemente su agarre sobre la orilla frente a él, casi podía sentir palpitar el miembro de Marc dentro de él.

El alfa no le dio tiempo para asimilar nada y empezó un vaivén lento y certero, dando con precisión en ese punto dulce.

Sus gemidos se volvieron imposibles de contener cuando Marc agarró fuertemente sus caderas, elevándolo para tener un mejor acceso a su entrada.

Su torso se apretó incómodamente sobre la pared de azulejos, y su cuerpo permaneció incómodamente sobre esta debido a las demandantes y exigentes penetraciones del alfa, quien mantenía violentos movimientos que no parecían tener un límite para parar.

Frenkie muerde su labio fuertemente, nunca pensó que sería tan sensible de un momento a otro. Su vista se nubla, y evita pestañar para no derramar lágrimas traicioneras, causadas por la sensación tan placentera que sentía.

Marc tras él gruñe, haciéndolo consciente del sonido vergonzoso en la habitación. Escucha el chapoteo atrás suyo, el vergonzoso sonido de sus glúteos humedecidos siendo abofeteados por la cadera de Marc, quien parece aumentar sus demandantes embestidas con cada gimoteo que sale de los labios de Frenkie.

—A-Marc, ¡ah!¡es demasiado, no puedo aguantarlo!—gimotea mientras pone una mano sobre el pecho de Marc en un intento de ir más lento. El alfa agarra su brazo con fuerza y lo usa para incrementar sus embestidas.

—Lo soportarás hasta que te llene, lo soltaré adentro hasta que se desborde, a tal punto que tú agujero no podrá retenerlo y tengas a mi cachorro dentro de ti —jadea el alfa mientras agarra el cabello de Frenkie, inclinándolo sin fuerza para mostrar su cuello lo máximo posible.

El castaño suelta un grito ahogado cuando el alfa afianza su boca sobre sus glándulas, uniéndolos una vez más.

Siente el nudo de Marc hincharse dentro de él y apenas puede respirar por toda la amatividad desbordante que siente.

El alfa se viene con un gruñido fuerte dentro de él y Frenkie se viene al mismo tiempo. Puede sentir la unión de sus cuerpos fuertemente dentro de él.

Los dos jadean recuperando el aliento y Frenkie agradece que el agua se lleve todo el sudor entre sus cuerpos. Mientras el nudo baja, Marc lo abraza fuertemente, susurrándole frases de posesividad en su oído a las que Frenkie apenas puede dar cuenta debido al lío en su cabeza.

Después de dos minutos largos, Marc se retira de él y Frenkie no encuentra soporte en sus piernas, el alfa lo sostiene y lo levanta entre sus brazos, saliendo de la bañera para llevarlos al cuarto de Marc.

El omega está seguro de encontrarse muy lejos de terminar la noche.

Quizz, a ver si se acuerdan, la respuesta ya la he dado en caps anteriores.

¿A qué huelen las feromonas de Marc?