♥PJM♥



Estaba en camino a GoldenFive, después de lo sucedido con Kim Namjoon decidí que lo mejor sería no regresar a la casa de Jungkook, aun no comprendía porque vivía con el, pero no tenía más opción que preguntarle de alguna forma. No había tanto tráfico por lo que llegué a la empresa en 30 minutos, al llegar me encontré a Ryujin.

—¿Jimin? ¿Que haces aquí? —Frunció su ceño mientras me observaba.

—¿Vengo a trabajar...? —No sabia a que se refería, era lo obvio.

—Tienes una sesión de fotos en Lighthouse Clothes, ¿no revisaste tu correo? —La chica me veía divertida.

—Debo haberlo olvidado... —Murmure. — Gracias por decirme, te veo luego. —Me despedí y sin más regrese a mi auto.

Tuve que conducir hasta Lighthouse Clothes, estaba algo nervioso, tendría que ver al CEO Kim de nuevo y el pensamiento de eso me aterraba, no confiaba para nada en él. Me estacione afuera y entre a la gran empresa.

Había poca gente, se veía muy solitaria, una chica me indicó que el CEO quería verme al momento de entrar, y sentí nauseas al pensar a quien tendría que ver. Subí al ascensor y me dirigí al piso ocho, como me habían indicado.

Encontré la puerta a la que tendría que entrar, y después de tocar tres veces escuche un "Adelante". Kim Namjoon estaba de pie observando la ciudad.

—Jimin, que gusto verte. Siéntate, por favor. —Saludo sin verme.

—Es un placer señor. —Respondí.

—¿Sabes porque estas aquí, Jimin? —Me pregunto.

—Me indicaron que tenia una sesión de fotos.

—Si pero no. Necesitaba hablar contigo... personalmente. —Se dio la vuelta y se sentó enfrente de mi. —Verás, he escuchado muchas buenas cosas sobre ti, y veo que no se equivocan. —Me vio de pies a cabeza antes de caminar hacia mi, inclinándose hacia mi cara. —Eres muy hermoso Jimin. —Su mano se dirigió hacia mi mejilla, acercándome hacia el. —Cada vez que veo tus fotos... no puedo evitar pensarte en una forma... muy sucia, ¿si entiendes lo que quiero decir? —Dejo un beso bastante húmedo en mi mejilla mientras su otra mano se dirigía a su pantalón. —Quiero que trabajes tiempo completo. Aquí, conmigo. —Bajo su cabeza hasta mi cuello, besandolo suavemente.

—Se- Señor, creo que no deber-

—Shh, déjate llevar. —Contestó, me sentía incómodo, sus besos no se sentían como los de Jungkook. Los de Kim en cambio, me daban repulsión, me hacían sentirme sucio y mal conmigo mismo.

—Tengo novio. —Dije desesperado por soltarme de su agarre.

—Eso no me dijo Jungkook. —Su mano llevo la mía hasta su entrepierna, pude sentir su ereccion. —Quiero comerte. —Antes de que sus labios hicieran contacto con los míos me solté de su agarre, aprete su miembro con mi mano mientras me alejaba de él.

—Agradezco su oferta señor, pero si quiere una prostituta, debería de buscar en otro lado. —Salí de la oficina sin dirigirle la mirada a nadie y regrese a GoldenFive tan rápido como pude.

A este punto me sentía asqueado del CEO de LightHouse Clothes.

¿Era así como había firmado con Jungkook?

No quería ni imaginarlo. No podía imaginarlo.

♥SJI♥

—¿Que tengo que hacer que? Carajo, no, no y no.

—Ya te explique, es para que mejores. —Felix me observaba aburrido

—Si Seoji, tus poses son del asco. —Jeongin se cruzó de brazos.

—Vamos, se que te gusta estar conmigo. —Hyunjin se acercó a mi de forma sugerente.

—De todas formas tienes que hacerlo. —Felix salió de la habitación junto con Jeongin.

—¿Listos? —Jackson tenía una sonrisa estúpida y burlona en su rostro mientras aguantaba la risa. Hyunjin y yo asentimos antes de empezar a posar. El rubio me guiaba en las poses necesarias mientras yo trataba de desviar mi atención a la cámara.

—Ahora una juntos. —Dijo Jackson. Maldito Jackson, ojalá se cayera, estaba segura que lo hacía para molestar. Y antes de que pudiera protestar Hyunjin ya estaba a mi lado, su mano se poso en mi cintura mientras con la otra tomaba mi rostro y me acercaba a el.

—Te veo muy tensa. —Comento con una sonrisa.

—En tus sueños. —Respondí, aunque era una mentira, estaba nerviosa. Sentía mariposas en el estómago.

—No te creo ni una sola palabra. —El rubio se acercó a un más hacia mi, mis manos fueron instintivamente a sus hombros tratando de evitar su mirada. —Se que te gusto tanto como tú me gustas a mi. —Su ego era tan alto que todas las mariposas que tenia anteriormente se esfumaron en segundos.

—Escucha Hyunjin, estoy haciendo esto porque me obligaron, no quiero estar cerca de alguien que tiene un ego tan alto para no poder admitir sus sentimientos sin ser correspondido. —Le lance un beso antes de irme por la puerta para cambiarme. Al salir de los vestidores tome mis cosas lista para irme pero un agarre en mi brazo me lo impidió.

—Seoji, ¡espera! —Hyunjin estaba frente a mi con su respiración agitada. —Perdón por lo de hace rato, déjame recompensarte, por favor.

—No es necesario. —Intenté irme pero su fuerza era mucho más grande que la mía.

—Déjame llevarte a almorzar al menos, ¿si? —Odiaba sus ojos, se veían tan convincentes que acepte. Salimos del edificio y nos dirigimos a un pequeño lugar a unas pocas calles de la empresa.

Una mesera nos atendió y terminamos ordenando Bibimbap y Kimbap. El rubio se comporto como todo un caballero, trataba de charlar levemente y uno o dos chistes me hicieron reír. Era un encanto.

—¿Ahora me perdonas? - Ambos estábamos de regreso en Goldrush.

—Mmm... Lo pensaré. —Impulsivamente deje un beso en su mejilla, al separarme pude notar su rostro sonrojado y sonreí suavemente antes de irme. Somi estaba esperándome en la sala que habíamos acordado.

—¿Lista? - Asentí antes de seguirla, teníamos una última sesión de fotos ya que el edificio estaría en mantenimiento el resto de la noche. La sesión fue perfecta, revisamos las fotos y entramos al baño antes de que todos se fueran. Caminamos hacia las escaleras de emergencia y empezamos a bajar hasta llegar al sótano.

—Espera. —Somi tomó mi brazo mientras nos escondíamos en un pasillo, se escucharon voces del otro lado. Voces muy conocidas.

Ya te dije que no las tengo Christopher. ¿Ese era Minho? 

¿Y donde mierda están entonces? Te dije que las cuidarás y no dejaras que nadie entrara.

Si no me crees pregúntale a Changbin.

Bien, y cuando afirme que es tu culpa, tendrás que hacerte cargo.

La rubia y yo corrimos hacia una habitación algo alejada para evitar toparnos con ambos chicos.

—Eso estuvo cerca... —Dije.

—Seoji... ¿Que es esto? —Me acerque a Somi, en su manos habían unos documentos de diferentes autos con algunos números, demasiados ceros.

—¿Son falsos? —Pregunté.

—Eso creo... pero no estoy segura, debí tomar el curso que Jieun tomo.

—Bien, llévatelos, hay que decirle a los chicos. —Somi asintió antes de que ambas saliéramos del sótano, al momento de salir todo iba perfecto. Pero ninguna de las dos contaba con ser vistas.

Mucho menos por Jeongin.

♥AH♥

—¿Cuando regresaras a Inglaterra? —Jieun era muy persistente.

—Creo que en 2 semanas, tengo que estar segura de que estarán bien. —Dije.

—Soy mayor que tu, malcriada. —Jieun me sonreía orgullosa.

—Pero soy más alta que tu, unnie. —Sonreí burlescamente.

—¡Ya cállate Aleksios! —Jieun hizo un puchero mientras yo reía, hasta que algo me detuvo, Jimin estaba pálido en la entrada del edificio, y se veía preocupado. Me acerque cuidadosamente para no asustarlo.

—Jimin, ¿estas bien? —El rubio se sobresalto al escucharme y en menos de que pudiera parpadear ya se había abalanzado sobre mi.

—Lex, gracias a Dios estas aquí. —Su voz se quebró y podía sentir sus manos temblar en mis hombros.

—¿Que paso? —Pregunte con cautela, no quería empeorar la situación.

—Vamos a un lugar privado. —Jieun y yo lo seguimos hasta una pequeña habitación vacía.

♥Narr.♥

—¡¿Que hizo que?!

—Jieun, cálmate.

—¡¿Como mierda quieres que me calme?! ¡¿Porque carajos estas tan calmada?! ¡¿Acaso no te importa?! —Aleksios apretó la mandíbula fuertemente junto con sus puños, aveces la sacaban de quicio.

—Cierra la puta boca. ¿En serio crees que no me interesa? —Jieun se acercó hasta ella, peligrosamente cerca.

—Creo que no te importa un carajo si violan a Jimin o no. —Jieun le susurro.

—Chicas, cálmense, creo que están exagerando.

—¡¿Exagerando?! —Preguntaron ambas al mismo tiempo, Jimin les dio una mirada indicando que debían dejar de pelear.

—No hables sobre cosas que no sepas Lee, que no grite como loca no quiere decir que no me importa. —Aleksios tomó sus cosas y empezó a caminar hasta la puerta. —No te preocupes Jimin, no te va a volver a tocar. —Sin decir nada más se fue, dejando a Jieun y Jimin solos.

—¿Quieres comer algo? —Le pregunto Jieun, tratando de subir el animo del chico. Jimin asintió y ambos fueron hasta la cafetería.

♥AH♥

—Oye Lex, ¿no iras a comer? —Nayeon estaba a mi lado terminando de guardar sus cosas, su sesión acababa de terminar.

—Mmmm no lo se, no tengo apetito.

—Si sabes que tienes que comer, ¿no? —Levanto una ceja de manera amenazante. —Vamos, comerás conmigo. —Tomo mi mano y antes de que pudiera protestar ya estábamos en el ascensor en camino hacia la cafetería.

Nayeon se ocupo de entretenerme mientras comíamos, diciendo todos los rumores que habían y me explico todo sobre la situación del embarazo de la chica de recepción.

—Y por eso es que Kevin la engaño. —Terminó de explicar.

—Pues la verdad se lo merecía, Mel es muy... como lo digo... ¿difícil de complacer? No lo se, pero para saltar de una relación a otra no creo que sea una persona fácil de entender. —Termine de opinar.

—Verdad que si, sabía que lo entenderías Lexi. —Ambas reímos levemente antes de ser interrumpidas.

—Oh, hola Yeji. —Nayeon sonrió mientras agitaba su mano.

—Im, necesito hablar con Aleksios. Te la robare un rato, vamos. —No espero mi respuesta y empezó a caminar hacia la puerta de la cafetería.

—Bueno, te veo luego. —Me despedí de Nayeon rápidamente antes de seguir a la pelirroja.

—Ten, esto es tuyo. —Mi chaqueta se encontraba en sus manos.

—Uhmm, no, no, no, estoy segura que la necesitas más que yo. —Intenté devolvérsela.

—No la quiero. —Se dio la vuelta dejando la chaqueta en mis manos y desapareció por el pasillo. 

Se veía molesta, lo cual no entendía, estábamos bien. Trate de ignorar el tema y volver al trabajo, aun tenia que hacer algunas cosas, y en estos momentos tenia que ir a Lighthouse Clothes, casi todos en el edificio de GoldenFive se habían ido, así que no habría problema si me iba y regresaba por mis cosas. Tuve que conducir hasta estacionarme 2 calles antes de llegar al edificio, casi todas las luces estaban apagadas y solamente habían tres autos en el edificio, Jimin mencionó que al parecer le gustaban los autos lujosos, ya que su oficina tenia demasiadas cosas valiosas. Así que cuando vi el Ferrari de último modelo supuse que era de él.

Me ocupe del conserje que estaba en el estacionamiento junto con el policía que cuidaba la entrada y después de dejarlos en un pequeño armario encerrados empecé a destruir el carro, con un pequeño martillo destruí todas las ventanas y la parte trasera, pinte con aerosol todo lo que podía y deje una pequeña nota con un bonito mensaje. "Si vuelves a tocar a Jimin, el próximo serás tu Kim Namjoon" Después de eso me fui, tenía que volver a GoldenFive por mis cosas. Subí hasta la oficina y después de tomar mis cosas regrese al ascensor, encontrándome con Jungkook.

—Mi día iba tan bien... —Murmuró el chico de cabello azabache.

—Huele a animal muerto. —Respondí. El chico apretó sus puños mientras se intentaba oler dimuladamente, era gracioso. Cuando las puertas del ascensor se abrieron empecé a caminar hasta mi auto, pero Jungkook no quería eso.

—Oye, espera un momento. —Decidí ignorarlo, no necesitaba escucharlo. Aun así sus gritos no cesaron del todo. —Te estoy hablando maldita americana. —Su mano hizo contacto con mi hombro, obligándome a verlo.

—Ni siguiera puedes distinguir acentos, ¿tan estúpido eres? —Empezaba a preocuparme, quizás necesitaba necesitaba un médico.

—Cállate, o haré que te arrepientas. Dime, ¿que mierda eres de Jimin? —Eso si me tomó desprevenida.

—¿Que? —¿Estaba bromeando este idiota acaso?

—Te dije que quiero saber que eres de Jimin, ¿solían salir? ¿Amigos con beneficios? —Empezó a apretar mis hombros entre sus manos.

—Uno, quita tus sucias manos de encima. Dos, no y si fuera así, no te incumbe. Tres, ¿porqué carajos piensas eso? —Termine de decir, empujándolo ligeramente.

—Tengo todo el derecho de saberlo.

—Escucha, no tengo tiempo para esto. —Intenté irme, pero de nuevo, Jungkook me detuvo.

—Te dije que no. Tú te vas cuando yo te deje ir. —Me empujó hasta un auto y me presiono contra el fuertemente.

—Te vas a arrepentir de eso. —Quizás no debí hacer eso, pero no pude contenerme, mi puño impacto contra su ojo derecho haciéndolo retroceder. Jungkook tocó su rostro levemente mientras recuperaba el aliento, y pude notar la sorpresa y enojo que se asomó a sus ojos.

—Ya me tienes harto. —Se abalanzó sobre mi tratando de golpearme, su puño impacto en mi estomago y caímos al suelo mientras ambos seguíamos golpeandonos con el sobre mi.

Intento asfixiarme al momento en que golpeó mi abdomen, no tuvo éxito cuando golpee su muslo, haciéndolo caer a un lado de mi.

—¡¿Como mierda es que aguantas tanto?! —Jungkook estaba furioso, intenta poner sus manos alrededor de mi cuello de nuevo, mientras estaba distraído aproveche la oportunidad y golpee su mandíbula fuertemente, el impacto hizo que el chico perdiera la respiración y se olvidara de mi.

—Por favor, nada detiene a los Mikaelson. —Me di la vuelta para irme, estaba cerca de llegar a mi auto, pero el maldito me detuvo.

—¡Voy a matarte! —Sentí algo golpear el lado izquierdo de mi cara, mucho más duro que sus puños y seguido de eso su puño volvió a impactar contra mi cara, esta vez tuvo éxito y sus manos se colocaron en mi cuello.

Me canse, golpee su estomago con mi rodilla y me coloque sobre mi, presione sus piernas con las mías mientras lo empezaba a golpear repetidas veces.

—¡¿Que mierda esta pasando aquí?! —Detuve mis movimientos al escuchar a mi jefa y me separe de Jungkook antes de voltear a ver a Yeji.

No estaba sola. Lia, Ryujin, Chaeryeong y Yuna estaban con ella.