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Capitulo 4: ¿Mala suerte?

Han visto el meme de arriba? Bien téngalo en cuenta.

(...)

Se removió sobre las sábanas, estaba súper incómodo, la cama era dura y las cobijas algo rasposas. Le dolía la cabeza, la garganta y el cuerpo.

¿Le habían atropellado acaso?

Izuku abrió los ojos lentamente ajustándose a la luz de la habitación, se removió para quedar de lado y suspiró, se fijó en una cabellera al frente suya y se alarmó.

—¿¡P-pero qué..!?- se sentó de golpe en la cama y al momento se arrepintió, pues le dió un fuerte mareo y dolor de cabeza.

—¿Podrías dejar de joder?- Izuku sintió como su cuerpo se volvía de piedra, al frente suyo, le estaba mirando un alfa de cabellos rubio con el ceño fruncido, lo peor, el menor no tenía camisa.

El Omega se echó hacia atrás asustado y terminó por caerse de la cama con todo y mantas. Dejó escapar un quejido de dolor y Katsuki solo rodó los ojos fastidiado.

Izuku trató de pararse, pero se dió cuenta de que no tenía ropa, o casi, solo tenía su camisa y su ropa interior.

"Oh no..."

Se enrrolló más en las sábanas, asustado, y con su mente trabajando a más de mil kilómetros por segundo. Era algo simple la verdad, anoche estaba bebiendo, se despertó con dolor en el cuerpo, medio desnudo, y en una cama con uno de sus estudiantes de la universidad, que también estaba medio desnudo.

"Iré a la cárcel..."

Chilló internamente, ¡Se había acostado con uno de sus alumnos, por todos lo dioses!, Eso infringe muchas leyes, le quitarían sus diplomas de maestro y lo mandarían a un cuarto oscuro lleno de criminales, estaba jodido.

—Oye tú, ¿Podrías dejar de hacerte ideas?, Podría oler tu miedo y angustia a kilómetros.- Izuku alzó la vista incrédulo, Katsuki solo se rascaba un brazo mientras bostezaba.

—P-pero nosotros, ¿Nosotros no...?- el pecoso preguntó con la voz temblorosa, una parte suya estaba aliviada, la otra no muy contenta.

—¿Que?, Claro que no, ¿Me veo de ese tipo de personas que se aprovechan de otras mientras están borrachas?- preguntó el rubio, y el pecoso solo le miró un momento antes de desviar su vista a otro lado.— mejor no digas nada.

Katsuki se levantó de la cama para estirar su cuerpo, Izuku pudo ver que tenía los pantalones puestos, solo no la camisa, miró como los músculos del alfa se contraían ante sus movimientos y de repente sintió su boca aún más seca.

—Veo que si hicieron el favor de lavar la ropa.- murmuró el rubio caminando hacia la puerta de la habitación, en la parte de abajo había una ropa doblada.

—¿Lavar la ropa?- preguntó el pecoso sin entender nada, el rubio solo le miró fastidiado de nuevo, sin embargo, podía notar diversión y malicia en su rostro.

—Si alguien no me hubiera vomitado anoche, ni hubiera vomitado sus propios pantalones, creo que no estaríamos en ésta situación, ni le hubiera pagado extra al servicio del motel para que lavaran la ropa.- el rubio habló mientras tomaba las cosas y volvía, le dió sus pantalones y se colocó la camisa.— si, nada de esto hubiera pasado si no tuvieras un pésimo aguante de alcohol, Deku Sensei.

Izuku agachó la cabeza, avergonzado hasta los huesos, y jurandose que nunca más en su vida iba a volver a tomar, mejor dicho, nunca volvería a salir con Nemuri, fue alguien descuidada y le dejó solo cuando fue al baño.

De verdad hubiera sido mejor irse a su hogar y dormirse hasta tarde con sus cosas de ermitaño. Suspiró decaído, miró como una pastilla de aspirina caía al frente suyo, una buena cura para la resaca.

—Me debes una Deku sensei.- el rubio dijo mientras tomaba sus cosas de la mesita que estaba al lado de la cama y caminó hasta la puerta de la habitación.— por cierto, me gustan sus bragas de encaje rosa pastel, son bonitas.

El rubio salió de la habitación, dejando al Omega aún sentado en el suelo, y enrrollado en la sábana. Izuku sentía que su cabeza iba a estallar en algún momento, estaba doliendo a millón, además, tenía hasta sus orejas rojas.

Recopilando lo que le habían dicho, al parecer se emborrachó bastante, vomitó a su estudiante, quien lo trajo a un hotel o motel, esperaba que fuera lo primero. Le quitó la ropa sucia y la mandó a lavar, le dió aspirinas y, había visto si ropa interior.

"Tierra trágame por favor".

¿Como le vería la cara cuando estuviesen en clase?, ¿Que era eso de Deku?, Además, ¿Ahora le debía una, y como se la iba cobrar?, ¿Puntos extras?

—¡Ay, mi cabeza!- Izuku se llevó las manos a su frente y se masajeó un poco, tomó la aspirina que le había dado el rubio y fue al baño para tomársela con agua de la llave.

Aún estaba envuelto en la manta, después cuando volvió la dejó caer para poder ponerse los pantalones, al tratar de hacerlo se quejó por los dolores de su cuerpo.

Eso lo confundía, su cuerpo dolía, pero no exactamente dónde debería, bueno, era un virgen, y si lo hubiese hecho le dolieran sus partes bajas, además, no había ningún rastro de olor a sexo en el aire.

Entonces, ¿Por qué el cuerpo le dolía como si un camión le hubiera pasado sobre el?

No lo sabía, terminó de arreglarse y salió de la habitación caminando un poco mareado, cuando estuvo afuera buscó un taxi y pasó directamente a su hogar, después pensaría en como morir de vergüenza.

En ese momento solo quería meterse en su suave cama y dormir, estaba muy cansado, mayugado, y el mundo aún le daba vueltas, si, dormiría hasta hartarse y después se autodespreciaría por todo lo que había pasado y lo que había hecho borracho.

(...)

Katsuki no entendía como era que siempre terminaba aceptando salir con los estúpidos de sus, auto-nominados, amigos.

El organizador de esa noche de "diversión", había sido Sero, y solo consistía en beber y hablar de cosas sin importancia y estúpidas hasta caer rendido.

Lo gracioso era que Katsuki tenía buen aguante a la cerveza, y no le gustaba beber mucho tampoco,  solo se bebió un par y dejó de hacerlo por esa noche, mientras veía como Sero hacia competencia con Mina y Denki se sentaba en las piernas de Kirishima y se lo comía a besos.

Decidió que ya había tenido suficiente, los dejó a ellos solo en ese sitio, el bar tenía como cuartos especiales que se reservaban a grupos que querían beber con tranquilidad.

En la parte principal del bar estaban las mesas y la barra, salió de allí molesto, de verdad se preguntaba que hacía con personas así, deberían estar en sus casas estudiando o algo. Katsuki no era un bebedor, tampoco era un fiestero, normalmente salía a ellas obligado por sus compañeros.

Cuando iba a salir por completo del bar miró a una cabellera verde conocida, se quedó un momento asombrado y confundido cuando vió a su, 'maestro sustituto de literatura', beberse un tarro de cerveza en segundos, casi pareció que se la había tomado en solo dos tragos.

—¿Sensei?- el rubio preguntó y vió como el rostro triste del omega volteaba en su dirección, le dolió un poco esa mirada.

—¿B-Bakugou, verdad?, ¿Que haces en éste lugar?- el pecoso se volteó hacia el barman un momento y pidió otra cerveza antes de volver hacia el.— ¿Quieres un trago?

El pecoso, quien obviamente ya no tenía sobriedad, le preguntó mientras tomaba la otra cerveza que le habían traído y tomaba de ella, cuando la acabó dió un suspiro de alivio, sus labios estaban rojos por el frío del licor, como una fresa.

—Yo le preguntaría eso mismo a usted, ¿Que está haciendo aquí, está solo?- Katsuki preguntó mirando a los lados, pudo notar un par de miradas sobre el pecoso, pero éste no se daba cuenta.

Sabía que su maestro era una adulto, pero también era un Omega, por su aroma y expresión, aparentemente estaba medio triste, y estaba solo y borracho en un bar. No era una buena combinación para él estár allí de esa forma.

—Mi acompañante se fue y me dejó aquí solo, pero no importa, no es como si fuese algo nuevo para mí.- el pecoso le respondió dando otro trago a su cerveza.

Katsuki solo suspiró, buscó en sus bolsillos dinero y miró al pecoso con una ceja alzada.

—¿Cuantas cervezas te haz tomado?- preguntó y se acercó al barman, Izuku lo miró y después miró al tarro entre sus manos.

—Dos, tres, ¿Tres y media?- respondió en una pregunta, Katsuki lo miró entre horrorizado y asombrado.

—¿¡Estas borracho solo con tres cervezas?!- bien, era una situación crítica, el Omega parecía que ni siquiera podría caminar solo, y eso solo habían sido tres cervezas, no querría saber que le pasaría si se tomaba más de cinco.— venga, vámonos a tu casa o un motel, yo que sé, solo salgamos de aquí.

Katsuki pagó por las cervezas y ayudó al pecoso a bajarse del banco en el que estaba sentado. El omega solo se rió entre dientes, el rubio podía sentir el aliento a cerveza pegando en su rostro.

—¿Eres mi papá?- preguntó y el rubio solo suspiró mientras lo llevaba hacía afuera del bar.— ¿Ya te habían dicho que eres muy wapo?, Eres un alfa de mi tipo.~

El pecoso le pasó unos dedos por su rostro y le miraba con una sonrisa cansada, Katsuki solo trató de ignorarlo, debía llevarlo a un sitio en donde pueda dormir.

—Kat-su-ki~, es un nombre difícil. ¿Puedo llamarte Kacchan?, Es más corto y bonito.- el rubio sintió como el pecoso pasaba sus brazos alrededor de su cuello,  se sonrojó ante esa acción, pero no dijo nada.— ¿A donde me llevas Kacchan?

—A un motel, hay uno cerca por aquí.- era lo más seguro que podía hacer en ese momento, llevarlo a una habitación y dejarlo dormido allí, con suerte no se acordaría de nada al otro día y podría solo imaginar que se fue a dormir solo.

—¿Me quieres hacer un cachorro?- la pregunta del Omega le hizo detenerse de golpe, casi se caía al tropezarse con sus pies.— eso no, aún soy muy joven para un cachorro, si quieres, cuando tenga casi treinta si puedes hacerme un cachorro, yo estaría feliz de Kacchan me lo hiciera.

Katsuki tuvo que contar hasta diez, no, hasta cien, no sabía cómo era que le estaban pasando esas cosas, ¿Sería una prueba divina?, Si la pasaba ¿Podría de verdad hacerle un cachorro en un futuro?

Tenía muchas preguntas y pocas respuesta, decidió ignorar las preguntas del Omega y a los poco minutos llegó al motel, dió gracias a todos los dioses que le hubieran escuchado, al fin podría descansar.

¡Bleeeee!

Debía ser una maldita broma.

...

—¡Déjame quitarte los malditos pantalones!- el rubio exclamó muy enojado, tenía más de diez minutos tratando de quitarle la prenda sucia de vómito al Omega, pero éste no se dejaba.

—¡No!, Te he dicho que no puedes hacerme un cachorro ahora, estoy muy joven.- el pecoso agarraba el orillo de sus pantalones y encogía sus rodillas.

—¡Ya estoy harto!- Katsuki sintió su última gota de paciencia derramarse, acostó un poco brusco al Omega sobre la cama e hizo que sus piernas fuesen estiradas.

En cuestión de segundos le quitó los pantalones al pecoso, quien solo chilló y se encogió al sentirse desnudo. El rubio suspiró, al fin había podido quitar la mortal prenda de ese Omega problemático.

Su camisa había sufrido el mismo destino que los pantalones del Omega, sucios con vómito, pidió al servicio que hicieran el favor de lavar los, le costó siento adicional pero no tuvo más remedio.

Ahora no podía irse, no tenía camisa y ni que fuera loco saldría así con el frío de la noche.

Se volvió hacia la cama, el Omega parecía una estrella de más extendido sobre la cama, bien dormido, su cuerpo medio arropado con una manta.

—¿Por qué a mí?- se lamentó mientras trataba de mover al Omega a un lado de la cama, parecía una roca, al final terminó por empujarlo un poco brusco, aunque se arrepintió al instante cuando escuchó un fuerte golpe en el suelo.— puta madre.

Al otro día, cuando al fin había llegado a su hogar, estaba en el pasillo de quitarse los zapatos cuando se dió un golpe en la cara.

¿De verdad le había dicho que tenía bonitas bragas?

(...)

Akdkadkajd yo me iba cagando de la risa mientras escribía ésto xDxD 🤣💅

Bien ahora sí, me iré con el otro fic haber si lo actualizo, espero que les haya gustado.

Zaorycast. ✨✨

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