
↪Capítulo 18
Jungkook entró al instituto tratando de esconderse con su mochila, había esperado que el timbre de entrada sonara para poder él hacerlo entre toda la multitud de chicos y chicas y así no encontrarse con Taehyung.
Aún estaba avergonzado por lo del día anterior, ni siquiera le contestaba los mensajes ni las llamadas. Había querido tirar todo por la borda cuando Taehyung le dijo que lo extrañaba, pero se aguantó cuando seguido a ese mensaje leyó otro que decía que estaba bien si querían comer ramen sin hacer nada malo.
Porqué un Jeon Jungkook avergonzado era como tratar con una piedra.
—¿Qué estás haciendo, amor?— escuchó a Sehun y de inmediato se enderezó poniendo cara de fuchi.
—Ahora qué quieres.— contestó de mala gana sintiendo al mayor abrazarlo por la espalda, como lo hacía Taehyung siempre. —No me estés tocando así con tus sucias manos de fuck boy.
—¿Por qué no llegas a hacerme caso?— lo ignoró. —¿Acaso estás saliendo con alguien?
—A ti.— se zafó de su agarre. —No te importa si salgo con alguien, y no, para tu estúpida suerte no salgo con nadie.
Oh iba a contestar pero el carraspeo de alguien detrás suyo lo interrumpió. Tanto Jungkook como Sehun voltearon a sus espaldas encontrando al maestro Kim, quien recién llegaba.
Jungkook se mordió el labio inferior e inconscientemente apretó la mano de Oh contra la suya, y eso no pasó desapercibido por Taehyung quien frunció el verlo. Quitó la mano de inmediato.
—Ya pasa la hora de entrada y ustedes siguen afuera.— comenzó el mayor. —¿Acaso quieren saltarse clases?
—¡No!— Jungkook se sonrojó y volteo de inmediato a la pared a lado suyo.
—Maestro, mi novio y yo solo hablábamos. ¿Verdad cariño?— Jungkook viró los ojos pero aún así no contestó. —¿Lo ve?
Taehyung suspiró tragándose los celos.
—Ya veo, vayan a clases si no quieren reporte.— finalizó y se dirigió a su primera clase.
Jungkook bufo estresado y antes de que Sehun volviera a hablar salió corriendo a su salón.
- M a e s t r o -
—Cinco de Diciembre.— comenzó Taehyung con la atenta mirada de sus alumnos en la clase de Jungkook, quien aún lo ignoraba y ni se dignaba a voltear a verlo.
El moreno relamió sus labios viendo que su pequeño novio comenzó a rayar su libreta con garabatos. O fingía, o de verdad lo estaba ignorando. Aún así siguió su clase.
—Tropas chinas entran en la capital de Corea del Norte, Pyongyang, al mismo tiempo que las fuerzas de las Naciones Unidas son hostigadas constantemente hacia Corea del Sur, tras haber mantenido la ciudad bajo su control desde el pasado diecinueve de octubre en que fue capturada; pero el veintiséis de noviembre, una potente ofensiva china cerró la línea de retirada al noreste de Corea a las tropas de la ONU, por lo que el presidente estadounidense Harry S. Truman, ante el temor a una guerra abierta con China y la Unión Soviética, abandona su objetivo de reunificar por las armas Corea, retomando a cambio su objetivo original de detener la "agresión comunista" en dicho país.
Volvió su mirada a Jungkook pero ahora el menor tecleaba algo en su celular.
—Joven Jungkook.— el nombrado levantó la vista, dándose cuenta que todos lo estaban viendo. —Me puede decir qué fue lo que acabo de explicar.
Jeon se relamió los labios.
—¿Yo?
—¿Hay otro Jungkook en esta clase?— un chico sentado en la esquina de los asientos al fondo levantó el brazo. —Otro Jeon Jungkook.— el chico bajó su brazo porque él era Lee Jungkook.
—Pues...— Taehyung elevó una de sus cejas esperando respuesta. —Yo no estaba poniendo atención.
El maestro suspiró, cerró su libro de un fuerte golpe que resonó en todo el salón y se dirigió a su escritorio.
—Si no le interesa la clase se puede retirar, tengo alumnos que si quieren estudiar y no pierden su tiempo en venir aquí.
Y siguió con la clase.
Después de un rato el timbre para salir al descanso llamó la atención de todos los alumnos, todos salían hacia la cafetería y otros hacia el patio.
Pero Jungkook y sus amigos no eran la excepción de ir a la cafetería. Las cosas habían estado tensas en el salón y lo único que Jeon quería era tomarse ese jugo de naranja sospechoso que no tenía etiqueta, pero que le gustaba.
—Oye qué ocurre contigo y el maestro. Te juro que podía ver la tensión en el salón.— Jimin, como el buen chismoso que es, preguntó.
Jungkook se encogió de hombros.
—No es mi proble-
La puerta de la oficina de Taehyung se abrió, y el moreno de inmediato lo jaló adentro cerrando la puerta con seguro y dejando a Jimin y Yoongi solos en el pasillo.
—Qué mierda...— murmuró el menor de los dos después de estar acorralado entre la pared y Taehyung. Esperó de esas escenas clichés que se veían en los dramas pero el moreno solo se separó y se sentó en una de las sillas frente a su escritorio.
—Siéntate.— ordenó pero Jungkook no le hizo caso.
—No quiero.
El mayor viró los ojos irritado.
—Bien, niño. Dime a ti qué mierdas te ocurre.
—A mí no me ocurre nada.— se cruzó de brazos y se recargo en una de las paredes. Segundos después vio a Taehyung levantarse de su asiento y también cruzarse de brazos.
Relamió sus labios lentamente cuando los músculos de su maestro se marcaron en la camisa negra.
—No te ocurre nada... entonces por qué ayer no contestaste ni mis mensajes, ni mis llamadas. ¿Por qué ayer después del descanso te desapareciste, y por qué hoy en la mañana estaba muy campante con Oh diciéndole que no tienes novio?
Jungkook rió sarcástico.
—¿Celoso?
—Sí.
—¿Qué querías que hiciera, que le dijera que estoy en una relación con mi maestro? ¿Quieres que le cuente a todo mundo que salgo todos los fines de semana y me besuqueo con mi maestro de historia?
—¡No, pero por lo menos esperaba no ser negado! ¡y mucho menos rechazado!.
Jeon abrió un poco más sus ojos cuando Taehyung le levantó la voz, pero solo un poco, aún así se sintió indignado.
—¡¿Entonces querías que después de darte una propuesta de sexo siguiera cómo nada?!, ¡lo siento pero yo si tengo vergüenza!
—¡¿Y yo qué culpa tengo?!
—¡Yo también no tengo la culpa, Jimin fue quien me dijo que te lo dijera!
Los dos entre-cerraron los ojos, se sintieron como en batalla de esos de video juegos antiguos.
—Entonces qué sugieres.— continuó el mayor más calmado.
—Pues la decisión más madura que voy a tomar en mi vida.
—¿Estás seguro, Jeon Jungkook?— el nombrado asintió. —Muy bien... entonces estamos de acuerdo con este tema.
—Si...
—Jimin tuvo la culpa de nuestra discusión.— dijeron los dos al mismo tiempo y de inmediato se abrazaron.
—No volvamos a pelear.— habló Jungkook después de sentir a Taehyung besarle la frente.
—No lo haremos.
Y vaya que no, increíblemente no lo harían.
Primera pelea xkmdkd
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