Ya era de noche, el templo de tauro estaba repleto de luces y música. Ya no me apetece ir. Sin embargo quiero ver como actúa Milo. Creo que sigo obsesionado con él por más enojado que haya estado. Guardo ese odio hacia él por haberme golpeado y el cariño que aún trato de dejar atrás.

Se oye los pasos de alguien, pronto una voz se escucha tras la puerta de mi habitación.
Sus pasos se oyen más cercanos y fuertes.

-¡Camus!.-llaman tocando la puerta.

-¿Quien es?.-Digo algo distante de la realidad.

-Soy yo, shura, ¿puedo pasar?

-Adelante.

-Oh amigo, estás de puta madre.

¿¡Que acaba de decirme!?

-¿¡Que!?

-No! No te enojes.-agitó sus manos.- En España eso se dice a algo que nos llama la atención en algo bueno. No lo tomes para mal. Perdón, debería medir mi vocabulario contigo.

-No importa, entiendo.  Mi bebé me tiene atento a todo, y créeme que me mareo a cada rato. Al final no podré distinguir si la tierra tiene un temblor o seré yo con otro mareo.

-Ah, es normal en un embarazo. ¿Qué crees que sea? Pronto se te notará el vientre más de lo normal. 

-No estoy seguro. Pero una vez mi bebé esté más grande iré a hacerme un ultrasonido. Estoy emocionado.

-Bien, espero sea una niña.

-No digas eso. Mi bebé también puede oír. Si es niño o niña no importa en absoluto, será mi compañía. Todo el cariño será dirigido a él o ella.

-Que sentimental te has puesto.-sonrió, pronto esa sonrisa se desvaneció.-¿Estás seguro de que quieres asistir a la fiesta? Digo. Allí estará ya sabes quien. Y no quisiera verte decaído.

-Lo se. Pero..no tengo que estar encerrado todo el tiempo en mi templo. Quiero salir y divertirme. Quiero cambiar. Ser diferente a como me ven los demás. Ser yo.

-Amigo, de todo corazón te digo que lo pienses mejor.- se acercó apoyando uno de sus manos sobre mi hombro.-No estoy convencido de que ya lo hayas superado. Tomaste más responsabilidad pero es dudoso en tu estado emocional.

-Dejemos el tema. El y yo no somos más allá que compañeros de la orden dorada. A todo esto,
¿irás con esas pantuflas?

-Eh? Cuáles pantufl...
Rayos, olvidé ponerme los zapatos. Es el apuro.

-Estás muy despistado. En qué piensas?

-En ti.

-No te preocupes, yo estoy bien. ¡Voy a ser mamá! Joven pero seré capaz de asumir la responsabilidad total de un hijo.

-Si..Debe ser maravilloso.
Aunque me refería a otra cosa..
¿Nos vamos?

-Por supuesto. ¿Que le regalarán a Afrodita? Es su cumpleaños.

-No tengo idea. Que le darás tú, yo le estoy regalando un conjunto de ropa. Como estaban a descuento en Rodorio aproveché.

-Yo le hice un regalo a mano. Ayer en la tarde tuve los ánimos suficientes para hacerlo y..en realidad no pude conseguir papel de regalo.

-No es problema, pasamos por mi templo y mientras me coloco los zapatos tu envuelves el regalo.
Yo tengo unos papeles que sobraron de mi anterior cumpleaños. Sabes que es mi costumbre coleccionar todo lo que me dan o encuentro por ahí en las tiendas.

-Bien. Te lo agradezco.
Me sorprende que Afrodita decida hacer su cumpleaños en casa de aldebarán.

-Es obvio. Aldebarán es el encargado de los platillos y el licor. Afrodita no es tonto, sabe que cuando termine la fiesta todo quedará en desorden y él no quiere tomarse el gusto de limpiar.

Cierto, un muy buen punto.

Bajando por las escaleras hasta llegar al templo de Capricornio se sintió el cosmos de Saga de Géminis. Quien esperaba apoyado en un pilar de la casa,cuando se percató de nuestra presencia se acercó y sonriendo dijo.

-Shurita, tu que eres uno de los más fieles a Athena, será que podrías prestarme unos cuantos vasos de vidrio?

-¿para que?

-para tomar sopa de frijoles.-dijo sarcástico.-Obviamente hacen faltan más vasos y copas para servir el licor en la fiesta. Será lo mejor, habrán demasiados invitados.

-Bien.-dijo dudoso.-te doy las llaves de la cocina pero con una advertencia.

-¿Cual?.-exclamó emocionado.

-Llegas a romper un sólo vaso o copa y te cobro junto con los intereses. Y sabes que las copas no son nada baratas.

-¡ejem! Claro que voy a tener en cuenta eso. Confía en mí. En realidad yo era el encargado de llevar los vasos y copas, pero cuando estaba saliendo tropecé, entonces se me rompieron todos.-Hizo una mueca de tristeza.

Shura le extendió unas llaves que traía en el bolsillo tracero de su pantalón sin decirle nada más. Saga inmediatamente corrió templos arriba.

.................

-Buenas noches a todos los invitados e invitadas!-exclamo Docko de libra sonriente sobre una tarima algo alta.-Esta noche se celebra el cumpleaños de uno de nuestros compañeros!

-¡¿Cuantos años cumple?!.-gritó un muchacho del fondo del salón curioso.

- Lo siento Amigo. Ni yo lo sé, sólo soy el presentador aquí como voluntario.-respondió riendo en una carcajada, obviamente mentía.-¡Pronto nuestro cumpleañero llegará a la fiesta! ¡Así que hasta el momento disfruten de los platillos y las bebidas!

...............

-Camus, estás bebiendo demasiado, para por favor, en tu estado debes cuidarte.-dijo Shura preocupado.

- No. Esto no es nada. Apenas voy tres botellitas de vino. Además necesito beber. Vi a Milo al otro lado del salón. Está con una amazona, y no entiendo porqué se deja arrimar de esa manera. ¡Lo está manoseando y él no hace nada!

-Vámonos de una vez. No le prestes atención. Necesitas descansar..
Te hará daño.

-Noo!
Espera,no me jalonees del brazo que no soy un muñeco.

-Has tomado demasiado. ¡Todos aquí están demasiado ebrios!

-Para,;quiero decirle algo a ese maldito Escorpión.

-¡Camus no! ¡Nos vamos ahora mismo!

-¿Y por que?
Es temprano aún y la música está bastante de acuerdo con el clima.
Esa amazona no sé quien será pero para mí que se lo quiere llevar. Y después a la semana siguiente le dirá que está embarazada y me lo querrá robar. Yo soy el único que puede darle un hijo.
¡Aunque él no lo acepte!

-Vámonos..te lo ruego.

-¡Hey! ESCORPIÓN!!

-Y tu que quieres Camus?! Estoy ocupado. No molestes.

-Vengo a decirte algo..
¿Te acuerdas los golpes que me diste? Pues pegas como una mujer..!
Fíjate que ni me dolieron tanto como tus palabras de desprecio.
Pero en esto que no estás conmigo no estarás con nadie más. No podrías sentirte bien después de haberme golpeado. Y te anticipo que esto no es por odio, esto es por lo que te debía.

-Que cos..!?

-Detente! ¡¡Camus!! ¡¿Porqué le pegaste?!

-¡No me pares shura! Me debe muchos más. Tengo que desquitarme!

-¡Estás mal! ¡En tu estado tú y tu beb..!

-¡No hables sobre eso Imbécil!-gritó el Escorpión adelantándose con un derechaso certero que tumbó al suelo al pelinegro.

-¡Milo inútil!¡ A mi mejor amigo no tienes porqué tocarlo! ¡¡Es más importante que tu propia vida para mí!!

-¡Se que me extrañas Camus! ¡Me lo dicen tus ojos! No parabas de mirarme en toda la fiesta!

-Te miraba por que la bebida me difuminó la mirada, estaba tratando de enfocar un bulto horrible al otro lado del salón. ¡Y como se movía no podía dejar de pensar que cosa era! ¡¿Para qué querría verte?!

-Porque aún me amas, fui el primero y talvez sea el último! Nadie se va a fijar en tí..-exclamó lanzando un golpe en mi rostro. Pero me defendí pegándole un rodillazo en el abdomen. Me siento demasiado ligero y aproveché esa ventaja. Él cayó al suelo de lado y Afrodita apareció echo una furia.

-¡¿Porqué demonios quieren arruinar mi fiesta?! ¡Les pido que se retiren!
Camus, tu te vienes conmigo!
Mu por favor, eres uno de los que aún se mantienen sobrios, ¿puedes traer a Shura? Creo que se desmayó al igual que Milo.

-Por supuesto. Es seguro que mañana nadie se acordará lo que paso. Y quedarán en la duda de porqué están con moretones.

-Ya se las arreglarán.
¡Nada de esto al patriarca!
Y si quieren sigan con la fiesta que ya me dió sueño y quiero descansar!.
¡Pero no se olviden de mis regalos!

Afrodita prácticamente me arrastró hasta mi templo y me hechó un vaso de agua en el rostro. Sabía muy bien lo que hacía en comparación a lo que había bebido.
Me sentía tan bien al haberlo golpeado que, quiero volver a hacerlo.

..........

-Milo! Levantate!

-A..aioria..que pasó? Me duele el estómago. Acaso me caí?

-No, hace rato te tiraron al suelo de un sólo golpe. Tomaste mucho a comparación de la anterior ves. No te acordarás nada una vez te duermas y despiertes.

-quien me golpeó?!

-No te puedo decir..

-sabes que debes decírmelo, no puedes mentirme.

-Ah! está bien. Fue Camus.

-Llévame con él!

-Me niego. Es de madrugada y..

-Si no me llevas yo iré! ¡No pienso rogarte! Me las tiene que pagar.

-Tu eres quien le debes mucho más. Lo lastimaste. ¡¡No seas terco!!

-¡¡No importa!! Necesito cobrármelas con él. Ese hijo que lleva dentro no es mío. Me traicionó. Y ahora que recuerdo..donde se fue la chica que estaba a mi lado?

-Apenas y te dieron el primer golpe se fue con sus demás amigas. Estaban que se doblaban los pies por los tacones y la ebriedad que traían encima.

-No aguantan nada. Suéltame, voy donde Camus.

-No armes un escándalo.

-No creo ser tan capás de eso.

-Lo eres. Y si el patriarca se entera nos regañará peor que la última vez, verle hecho una furia no es nada lindo. Algunos son muy jóvenes para andar bebiendo y el castigo por beber ya es muy severo.

-No me importa lo que haga o la forma en que me castigue.-Gritó furioso empujando al león, después, sus pasos fueron inestables, caendose cada que se tropezaba con sus propios zapatos.