Yandere! ASL x Reader
Ace, Sabo & Luffy
Su Diosa
Sabo, Luffy y Ace miraron fijamente a la hermosa chica que se mantenía dormida suavemente en la cama mientras balbuceaba algunas incoherencias, incluso con su cabello desordenado se veía maravillosa con esas mejillas sonrojadas levemente y la forma en que se movían sus regordetes labios era encantador.
Mmmm.... No esperaban el momento en que ella sería absolutamente de ellos, estaban cansados de manipularla ya que los hacía sentirles culpables, ¿Pero alguien podría culparlos? Desde que ella de alguna manera u otra se las arregló para verter mierda sobre el gobierno mundial, desenterrar lo absurdo que era dejar que incluso en esa época siguieran existiendo esclavos, la estupidez de los Tenryuubitos, masacres documentadas y finamente redactadas sobre los procesos de eliminación de ciudades enteras, ¡Y sobre todo el hecho de que haya dejado que uno de los mafiosos más importantes de la ciudad saliera a salvo junto con su pandilla fue un hito histórico! Era necesario que fuera absolutamente de ellos para que la protegieran de todo y todos, ¡Incluso quizás podrían ponerse chips de rastro en su ropa si fuera necesario! Siempre y cuando ella aceptara, claro.
Tal vez Leila realmente disfrutaba meterse en problemas... o tal vez solo metía sus narices en donde no le incumbía, enserio, ¿Cómo podría ella evitarlo? ¡Era parte de su trabajo! ¡Parte de su trabajo! Si ser terriblemente ser chismosa era tu pasión, ¿Qué tal transformarte en un informante? Ella era básicamente la espía perfecta, sus pasos eran silenciosos como los de un gato, muy suaves y cautelosos, ¡No emitían ni un solo sonido! Su agilidad y flexibilidad eran anormales que ella se podría poner así misma en una pequeña caja incluso con su altura de 1,70 y sus pechos, ¿Qué decir de su velocidad? ¡Un monstruo! Si, era como si hubiera nacido para ser una informante muy capaz, por lo que se metía en terribles líos una vez que la información era entregada.
¡Pero no era su culpa! ¿Cómo podría ser su culpa que después de entregar sus informes quisieran traicionarla y matarla? ¡Solo porque sabía mucho la iban a eliminar! Ella nunca usó esta información a su placer porque podría hacer arder el mundo y ella entendía lo valiosa que era su información, ¡Incluso si intentaran manipularla ella no diría ni pio! Excepto a tres personas, Luffy, Sabo y Ace, ¿Cómo podría ocultarles algo? ¡Prácticamente se conocían desde que tenían pañales! Más de una década de amistad era muy resistente e irrompible, en especial con los lazos de ellos los cuales eran demasiado protectores los uno de los otros.
Vamos, ellos podrían decir perfectamente si ella le ocultaba algo o si le pasaba la más mínima cosa. Si había algo que Leila valoraba más que nada era la lealtad, ella sabía lo complicado que era conseguir algo como la lealtad, ya sean a sus amigos e incluso familia cualquiera podía traicionarte si se sintieran amenazados o les conviniera de alguna manera, aún más en su línea de trabajo en donde la traición abundaba casi tanto como tanta sangre derrama en el pavimiento de las calles por las que caminaba.
Sabía que podía confiar en ellos, ¡Porque prácticamente ellos eran la definición de la lealtad! Bueno, quizás fueran un poco más sobreprotectores con ella, pero Laila lo entendía incluso si se sentía levemente indignada de que la trataran como una delicada flor en un jardín especialmente creado para ella... ¡No era su culpa que sus amigos fueran unos monstruos! Dios santo, ese trio de idiotas tenían fuerzas muy poderosas ya sea individualmente o grupalmente, ¿Y qué pasa con esa loca red de conexiones que poseen? Es muy difícil moverse sin pisar a algún amigo de sus hermanos.
Bueno, Leila entendía la presión por parte de Ace y Luffy, ¿Saben lo estresante que fue ver "morir" a Sabo cuando eran niños por un dragón celestial? ¡Se deprimieron mucho por eso! Y después con la casi ejecución pública de Ace, que, si no fuera porque la mujer logró mover algunos hilos en secreto, contactar algunas conexiones, chantajear a algunos piratas, sobornar a algunos infantes de marina y el cuerpo policiaco y algunos tratos turbios, revelando información que desprestigia a la organización del gobierno mundial, ¡Toda la mafia de Barblablanca no existiría ahora! Salieron ese ese infierno juntos y vivos, algunos con heridas más grabes que otros, algunos incluso agonizando, pero todos salieron con vida.
Obviamente el gobierno mundial no se quedó cruzado de brazos y por algún boca floja se enteraron de que ella era la mejor informante de todo el país, llegando a tal punto en que no quedaba rival para ella y rápidamente pusieron la corona en su cabeza y su vida en el anonimato desapareció como la arena entre sus dedos, ¡Dejándola con una horrorizante recompensa por su cabeza!
Cosa que obviamente, horrorizó a los hermanos y los hizo entrenar como locos para volverse monstruosamente fuertes y poder protegerla de todo el mundo que se le iba a venir encima de ahora en adelante.
Ellos lo sabían, era precisamente por ese motivo que jamás la dejarían ir completamente libre.
Porque su querida Laila no merecía toda esa mierda.
Laila merecía que el mundo se arrodillara ante ella.
Porque su Diosa necesitaba ser venerada y tratada como tal, como una diosa.
Sí, ella era su diosa, de ellos tres y se negaban a compartirla con nadie más que ellos, porque bueno, ¿Eran familia, no? La familia siempre se cuida entre ellos, se protegen y aman.
Laila sería la madre de sus hijos, ella era la única que se merecía el cariño, respeto y cuidado de esos hombres tan peligrosos que destruirían el mundo si así ella se los pidiese.
¿Por qué la amaban?
Ella los conocía mejor que nadie, era como si tuvieran una especie de magia telepática para entenderlos a la percepción, la forma deliciosa en que cocinaba -pero extremadamente en muy raras ocasiones, solo en casos especiales como los cumpleaños de ellos o algo que ella pensara que realmente valía la pena, porque de lo contrario que cocinara alguien más-, lo inteligente y astuta que era, como captaba sus indirectas e incluso esas referencias que nadie entendía.
Oh dios, ¿Por qué su risa era tan hermosa? Era un ángel, uno caído del cielo solo para ellos.
Incluso si a veces ponía una sonrisa o cara de comemierda, aún seguía viéndose deslumbrante.
La alegría, su emoción, un ángel tan puro para ellos, ¿Qué importa si sus manos estaban algo manchadas? Para ellos seguía siendo perfecta.
Oh.... Y esos ojos algo rasgados que a pesar de destellar coquetería mostraban curiosidad y algo de ingenuidad, un cabello corto suave -porque según ella le felicitaba mucho el trabajar con el cabello corto que tener una mata de pelo larga, incluso hacía mucho más fácil ponerse pelucas si era necesario-, su figura con curvas bien puestas, no demasiado delgada y tampoco gorda, era más el tipo medio que rara mujer tenía ya que la mayoría tenía una cintura de avispa exagerada, donde se mostraban los huesos de sus costillas y su columna, realmente desagradable.
Oh... y que hablar de sus caderas, esas piernas largas, su perfecto trasero, esos delicados pies pálidos, sus manos delgadas, pequeñas y suaves, sus hombros redondos y algo sonrojadas, las tentadoras clavículas, su pecho regordete....
Dios, cuanto querían devorarla y no dejar que ningún trozo de su tersa y suave piel quedara sin marcar, querían contaminarla y corromperla, doblegarla a su voluntad.
Porque sabían que ella no los odiaría, nunca los podría odiar y ellos lo sabían perfectamente.
Ella jamás juzgó ni criticó sus acciones, ni siquiera sus procedencias y eso era algo que debían recalcar, ¿Quién querría al hijo del diablo, el pequeño mocoso del infame rey de la mafia? ¿Quién demonios querría al hijo de un noble -hijo de un rey- que permitía que la esclavitud siguiera sucediendo y que abriera las puertas a un demonio disfrazado de noble -un Tenryuubito por si no quedó claro- ¿Y quién demonios querría al hijo del criminal actual más buscado del mundo, puesto en todas las listas negras del mundo; el líder del ejército revolucionario y el nieto de un héroe para la -corrompida- justicia?.
Oh dios, ellos eran monstruos, seres con sangre sucia, con sangre y procedencia maldita.
Dos herederos de la voluntad del D.
Un noble de procedencia corrupta.
Y una niña nacida de una mujer que dirigía una floristería y un padre que trabajaba de panadero, ¿Cómo podrían ser más inofensiva su procedencia?
Era un ángel entre bestias rabiosas, pero a ella no le importaba.
Porque también había tenido una desgracia, ellos lo sabían, ¿Por qué a su preciosa Leila solo la conocían ellos y un número limitado de personas? Fácil, ella siempre se ocultó de todos y todos, negó la existencia del mundo encerrándose en una burbuja intentando mantenerse alejado de las crueles garras del mundo.
¿Quién podría culparla? Su madre su violada y asesinada delante de sus ojos mientras ella solo podía esconderse detrás del espacio casi inexistente de una pared vacía a través de un pequeño agujero del tamaño de la mitad de un dedo meñique, ¿Y después qué? Apenas llegó su padre del trabajo vio la terrible escena y trató de tomar justicia, mató a un hombre, pero entre tres lo asesinaron.
Entre el nauseabundo olor a sangre metálico, el sabor amargo y acido de su bilis subiendo por su garganta y quemando todo en su interior, las lágrimas que caían sin cesar y sus ojos bien abiertos como grandes platos, se quedó ahí encerrada durante cuatro días hasta que un grupo de hombres vino a la casa, el rojo inundó su visión y luego la pared en la que estaba escondida fue rota, dejándola al descubierto de tristes ojos negros.
"Lo siento niña, sin querer te viste envuelta en cosas que no te involucraban y tu familia pagó el precio" habló el pelirrojo y la abrazó suavemente contra su pecho "Me haré cargo, no te preocupes, te cuidaré bien" habló suavemente y torpemente ella se aferró al hombre para luego de un año finalmente conocer a Luffy, el cual le presentó a Ace y Sabo.
—¿Chicos? —murmuró adormilada la chica mientras se frotaba los ojos.
—¡Leila! —gritó Luffy y se lanzó a la chica derribándola contra la cama y quitándole el aliento.
—¡Luffy no mates a la pobre Leila! ¡La estas dejando sin aire! —regañó Ace apartando a su hermanito el cual tenía sus extremidades envueltas a su alrededor.
—Buenos días Leila —habló suavemente Sabo acercándose a la chica y sentándose en el otro borde de la cama de la chica y tocó suavemente el muslo cubierto por la sabana de la chica la cual le sonrió algo atontada.
—Ah~ mis mañanas con ustedes son tan animadas —habló entre risas la chica mirando como Luffy tenía su rostro entre sus pechos mientras que Ace la abrazaba por un costado y Sabo le sonreía suavemente, o al menos hasta que lo estrelló en su abrazo.
—¡Ah-¡—jadeó Sabo envuelto en el abrazo demoledor de la chica.
—¡Vamos! ¡Mueran engendros del mal! ¡Los asfixiaré con mi amor aplastante en forma de abrazos!
Los chicos rieron y trataron de alejarse de la chica la cual no aflojó su agarre, sino que los apretó más y los obligó de alguna manera u otra a tumbarlos en la cama a su lado y sobre ella mientras reía atronadoramente fuerte.
Si, que buenos días despertar con esos tres tarados.
¿Cómo no amarlos? Ellos eran la luz de su existencia, ¡La cual se volvió extremadamente brillante cuando supo que Sabo seguía vivo! Porque cuando él vio su foto en un cartel de recompensa recuperó su memoria perdida y con sus conexiones logró encontrarlos para anunciarles que seguía vivo y su situación actual.
Obviamente todos empezaron a llorar melodramáticamente y no se separaron en todo un día, era como chicles pegados el pobre rubio que también los había extrañado un montón.
Leila ya ni se extrañaba con lo extremadamente cariñosos que eran ellos, incluso si sus amigas le sugerían que eso no era exactamente normal, ¡Ellos siempre tenían que tener una mano encima de ella! Su cintura, caderas, sus manos, cuello, hombros, brazos ¡Incluso tocar sus muslos! Vivi, Nami, Robin y Koala sabían que esas no eran las actitudes de alguien que solo eran amigos, en especial porque se dieron cuenta rápidamente que, mientras Leila seguía en su burbuja, ellos se aprovechaban para manipularla en algunas ocasiones muy específicas, junto con la posesividad y la sensación de peligrosidad cuando estaban a su alrededor, como si tres bestias feroces estuvieran marcando su territorio.
Quizás por eso los respetivos compañeros masculinos de los equipos de los tres hombres se mantuvieran alejados, ¡Incluso Sanji, por el amor de dios! No solo por la loca posesividad en los Ojos ardientes de Ace o la amenaza de los ojos de Sabo, ¡Sino que incluso Luffy, su capitán -jefe-, endurecía sus rasgos, oscurecía sus ojos puros a unos turbulentos y peligrosos y emanaba esa loca sensación de sangre! Dios, eran bestias si se acercaban a Leila por más de la cuenta.
Incluso personajes infames no se acercarían fácilmente a Leila, amantes del sadismo y la entretención como Law sabía bien que por mucho que amara provocar disputas y conflictos entre los demás, jugar con las mentes y manipular, se comportaba perfecta y puramente profesional cuando la mujer estaba cerca, él quizás había sido uno de los que más rápidamente intuyó que esos tres estaban locamente obsesionados con la mujer, lo reconoció en su lenguaje corporal, el comportamiento, las pequeñas frases que decían, los gestos que hacían y la forma en la que la miraban.
Ciertamente estaban locos y matarían a cualquiera que hiciera algo a su querida chica, eso lo comprobó cuando envió a un espía desechable a que monitoreara la condición de ellos confirmando sus sospechas y que poco tiempo después supiera que aquel informante estaba muerto y recibiera una carta de amenaza por parte de los hermanos mayores, explicando que no le dirían nada a Luffy o Laila porque ellos confiaban en él.
¿Y saben qué? Incluso un matón sin cerebro aparente y extremadamente impulsivo como Kid respetaba a la mujer, él podría ser un idiota, pero era un idiota con buenos sentidos y una aguda percepción del peligro sediento de sangre, no por nada su banda era la más sanguinaria en respecto a matanzas, ¿Verdad? Hay que tener un ojo agudo para esas personas que parecen inocentes, pero en realidad debajo de sus pies existía un largo sendero de sangre, ciertamente ellos eran ese tipo de personas, los tipos más peligrosos.
¿Acaso no sería peligroso un niño de aspecto inocente que trajera un cuchillo y te rebanara el cuello mientras duermes porque le apetecía?
Ellos tres eran peligrosos precisamente por su obsesión.
Y como si el destino se burlara de Law y Kid, cuando la chica -Laila- salió lastimada y quedó inconsciente en una disputa mientras escapaban de una marea de marines, algo pareció romperse en la cabeza de los tres hombres.
Fueron escalofriantes y dejaron que las espaldas de tantos enemigos como aliados quedara fría.
Con voz firme, pero suave Luffy le ordenó a Zoro que la cargara y cuidara mientras él se encargaba del resto. Al principio Zoro iba a protestar que él no podía hacer eso solo, que su capitán no debería ser impulsivo, pero como un experto veterano en los negocios turbios y las matanzas, Roronoa supo de inmediato que su capitán y hermanos no estaban de borna, por lo que aceptó rápidamente y alejó a sus aliados callando cualquier protesta de ellos.
Fue una masacre.
El feroz fuego rezumbó por el lugar estallando agresivamente uniendo el cielo y la tierra, los gritos ensordecedores de las personas quemándose vivas resonó el lugar mientras el pútrido y asqueroso olor de carne quemada inundó el área. Bajo sus rostros horrorizados, los mafiosos miraron como los rostros de sus enemigos se derretían, ampollas, quemaduras y sangre se entremezcló para finalmente mostrar un pulcro hueso blanco que finalmente empezó a volverse negó y derretirse bajo el intenso calor de las llamas.
Ace fue macabramente espeluznante con esa sonrisa surcando su rostro mientras los gritos de los enemigos rezumbaban en sus oídos.
El sonido de huesos triturándose, el suelo agrietándose y gritos de dolor agonizante fueron descubiertos cuando Luffy literalmente aplastó a todos sus enemigos, convirtiéndolos en una desagradable mezcla de carne y huesos molidos en el suelo trizado, claramente al horror visible en los rostros de los hombres que empezaron a gritar por piedad mientras veían a todos sus amigos morir por culpa de esos hombres que destellaban la locura de sus ojos.
¿Quién diría que ese niño inocente y tonto podía ser tan cruel? No le importó el llamado de auxilio mientras aplastaba todo a su paso abriéndose camino entre la multitud, masacrando todo a su paso mientras, ignorando los llantos, ruegos, las disculpas y el terror de la situación.
Fue un monstruo destructivo, los Mugiwara podrían afirmar que jamás habían visto a tal Luffy y simplemente no lo reconocían, ¿Dónde se fue su sonrisa? ¿Qué pasaba con esa expresión, sus ojos y esa aura? ¿Qué demonios sucedía? ¿Quién era ese hombre que masacró a tantos?
Miedo.
Quizás el más aterrador fue Sabo, que a diferencia de su excitado, exaltado y furiosamente loca ira de su hermano Ace o la furia silenciosa de Luffy, él mantenía la calma con una expresión suave y serena mientras ríos se sangre pintaban sus ropa, sus pies caminaban suavemente por la sangre derramada de sus enemigos resonando rítmicamente, mientras tarareaba suavemente como si caminara por un sendero de rosas en un día soleado, admirando con fascinación en su rostro neutral y relajado mientras admiraba el sangriento paisaje a su alrededor.
Era como si realmente disfrutara de este escenario cautico envuelto en llamas y desesperación, el ejercito que alguna vez los persiguió con el anhelo de atraparlos, seguros de si mismo había sido aniquilado solo por tres personas.
Oh, si creían que esto era ridículo, ¿No sería aún más ridículo que el gobierno hubiera mandado una Buster Call solo para la pandilla de Mugiwara, dos revolucionarios, un comandante de la pandilla de Barbablanca, la pandilla "Hearth" y la pandilla de Kid?
Pues sí, exactamente eso había sucedido, el gobierno mundial con dos huevos enormes llamó a una reunión y decidieron que esa conveniente y poderosa alianza debería terminar bajo una Buster Call para eliminar a los problemas de raíz, evitando así una tragedia a futuro.
¿Pero quién podría adivinar el resultado de ahora? Los hermanos tres hermanos, porque lastimaron a su chica, masacraron a todos.
Ace hizo una gruesa, espesa y ardiente barrera de fuego para que no pudieran retroceder y quedaron atrapados entre los tres hermanos que miraban sádicamente a todos los marines que se atrevieron a participar en esa misión, sin importarles si eran buenos o malos, si tenían amigos, familias o hijos simplemente los mataron a todos.
Y cubiertos de sangre, al asegurarse uno por uno de que todos estaban muertos, sonrieron suavemente de forma relajada y volvieron a sus normales yo, como si la masacre que hicieron nunca hubiera sucedido y la sangre no estuviera empapando sus rostros.
—Luffy, no toques a Laila, la mancharás de sangre —habló suavemente Sabo cuando tocó la mejilla de la chica.
—¡Pero no es justo! Es tan linda... hay que sanarla, no me gustan sus heridas —Luffy actuó como normalmente lo haría al principio, haciendo un puchero, pero a mitad se detuvo con los ojos perdido mirando las heridas de la chica.
—¿Deberíamos haberlos matado de una forma más cruel? —preguntó algo molesto Ace y se acercó al rostro inconsciente de la chica y miró tristemente su frente magullada y el labio roto.
—Si... estoy de acuerdo —asintió Luffy convencido.
—Pero ya están todos muertos, no queda nadie —habló Sabo negando suavemente—. Ya déjenlo, no creo ella estaría muy feliz de que hiciéramos esta masacre. Ace, quema las pruebas.
—Eso ya lo sé —habló algo molesto—. ¡Qué molestos son! ¿Por qué nunca dejan tranquila a nuestra Diosa? Ah, debimos decirle que no a esta misión, ¡Pero se veía tan emocionada! —habló Ace.
—Pero ya la dejamos un mes encerrada, no creo que hubiera seguido haciéndonos caso por mucho tiempo más si seguíamos manipulándola para que se quedara en casa —habló despreocupadamente mirando como Sabo cargaba a Leila en sus brazos.
—Eso es cierto, por mucho que Leila ame estar en casa y acurrucada en su cama con sus peluches, a ella le gusta ver las cosas desde las alturas y observar el mundo desde lo alto, por algo es una informante y espía, ¿No? —habló Ace.
—¿Y si conseguimos un apartamento alto con vista a la ciudad? Entonces no habría problema en que ella se quedara dentro de casa para siempre, ¿No? Siempre con nosotros —opinó Sabo inteligentemente.
—¡Es cierto! ¡Si conseguimos un lugar bonito que lo tenga todo ella no se alejaría jamás de nosotros! —exclamó emocionado Luffy.
—¡Y no tendrá que conocer personas nuevas o interactuar con extraños! —habló emocionado Ace.
—Y ya no saldría a esas peligrosas misiones en la cual siempre quieren traicionarla —agregó Sabo.
Koala, la banda de Luffy, la de Law y la de Kid observaron en silencio la interacción de los tres hermanos mientras hablaban despreocupadamente sobre como mantener cautiva a Leila en un "paraíso" junto con como convencerla o manipularla para que se quedara en su pequeño paraíso artificial para siempre, a su lado, siendo solo de ellos.
En ellos solo había
locura y obsesión.
Ugh... Siento que pudo haber sido mejor y que quedó algo caca, pero estaba con sueño y aburrida, este oneshort sin duda alguna me entretuvo, pero no sé si será de vuestro gusto
Aparte de que no estoy de buen humor ahora porque mi hermano mayor siempre me quiere quitar mi comida y esta vez me negué a aceptar sus caprichos y él empezó a ponerme como la mala, como si fuera mi maldito deber darle de toda mi jodida comida cuando él ya está grande como para hacerlo solito ¿Qué estamos diciendo? Él ya está bastante grandesito como para hacer esos pucheros y tener esa clase de comportamiento de niñito mimado, ¡Por dios, tiene como 32 años y yo soy más de once años menor! ¡Madura maldito imbécil! ¡¿Porqué siempre debes de ser tan jodidamente codicioso y ambicioso como para desear las cosas de alguien más?! ¡Yo cosino cuando no quieres comer malditos garbanzos, porotos o lentejas después de tres días comiendo lo mismo! ¡Gracias a mi eres capaz de comer huevos porque los dan en mi caja de alimentos! ¡Te di mis malditos cuadernos cuando los necesitaste haciendo que ahora yo ni tenga cuadernos! ¡Te di todas las minas de mis portaminas! ¡Incluso a veces te doy chocolate cuando tengo la regla y no me da la maldita wea que me hace desmayarme! ¿¡¿Porque mierda me llama egoista cuando yo le comparto todo?! ¡Le dejo quedarse en Mi pieza, Mi cama y ocupar Mi espacio! ¡¿Soy tan egoísta solo por no querer darte de mi maldita comida cada vez que jodidamente te apetezca?! ¡¿Y qué mierda pasa con tu actitud de irte a quejarte con nuestro papá?! ¿Cuántos tienes, 7? ¡Mierda! ¡Tan molesto! Yo solo deseo mi espacio e incluso eso lo violas, ¿Porque no me puedes dar mi privacidad y dejar de molestarme por alguna vez en tu vida? ¿Por qué según tú no tengo la opción de negarme cuando no quiero? ¿Por que soy yo quién tiene que ser la culpable y sentirse miserable? ¡Madita sea yo soy la sensible no tú! ¡Tú no tienes ataques de ansiedad, ni miedo constante, tampoco sientes que tu mundo se derrumba ni tienes depresión y al menos tus amigos te llaman para jugar o saludar, yo ni eso tengo, ni tampoco la libertd de salir cuando se me plazca como tú ni poder trabajar en algo para tener mi propio dinero y tomar mis propias decisiones.
Agh, me desahogue aquí, perdón. Espero sinceramente que lo hayan disfrutado
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